No lograría salir de todo el enredo, sin dudarlo no lo haría.

En específicamente el momento actual en el que estaba Gulf se había cuestionado seriamente su razonamiento lógico, pero sinceramente ahora pensaba que en efecto era un completo e irreversible idiota y lo que descubrió lo confirmaba.

Había amanecido en el hotel junto con Suppasit ósea en la misma habitación, pero no en la misma cama obviamente, se había despertado sumamente temprano y como la noche anterior se había duchado no lo considero esencial en esos momentos.

Se había arreglado para salir aprovechando que Mew estaba dormido porque si ponemos en contexto lo que había vivido lo primero es que fue drogado, está casado con un desconocido quien lo había llevado a quien sabe dónde en donde corría riesgo de ser secuestrado y violado.

El doncel no tenía bases para creerle a Mew, no le había mostrado documentos que demostraran legalidad en su supuesto matrimonio o al menos documentos que él pudiera comprobar también había algo que no podía pasar desapercibido, ¿Qué interés tenía Suppasit en su familia o en el cómo persona?

Con lo poco que Gulf había visto estaba más que consiente de que Mew era un hombre con mucho dinero y seguramente con influencia así que tenía dos opciones que le resultaban convincentes una de ellas era que estuviera diciendo la verdad acerca de cómo sucedieron las coas y la segunda era que le mintiera.

De ser la primera podía decir que era algo absurdo, pero podría ser verdad porque cosas más absurdas y sin sentido había visto. Si era la segunda solo tendría que averiguar ¿Por qué? Para decir una mentira siempre había un motivo algo que no quieres que se sepa.

De ser una mentira debía de investigar el motivo y poner en balanza lo que sabía, Mew se había casado con él, sabía de su anterior casi matrimonio además también estaba muy informado que no era por amor si no por negocios eso le indicaba que Suppasit lo había investigado ya sea antes o después de que ambos se casaran.

Gulf tenía preguntas, demasiadas, pero mientras más ahondaba el asunto más confundido se quedaba, en la clase alta era frecuente que sucedieran matrimonios sin amor que generalmente se daban por tratos empresariales o por simples influencias.

También podría ser el caso de que un hombre se enamorará y realizará todo para tener el objeto de su afecto, en esos casos solían suceder dos acontecimientos que era que surgiera el amor o simplemente orillarlo a pasar una vida atados.

Si no podías hacer que una persona te amara si contabas con recursos podías orillarla a casarse contigo ya sea por amor o por algún otro interés y él estaba más que seguro de que ninguna persona renunciaría a algo que pudiera tener por voluntad autoinfringida los únicos que renuncian a lo que desean es porque no pueden retenerlos.

Así que si era una mentira debía de saber qué interés podría tener Suppasit en él o su familia y eso planeaba descubrir hablando con su padre, pero como había dicho anteriormente había sido estúpido.

En su afán de pensar en conspiraciones por parte de Suppasit no previo la situación de que sus padres ya supieran sobre al parecer su desfachatez o al menos eso había dicho su madre.

Cuando ingreso a la casa que Antonello le había cedido como regalo de bodas sabía que encontraría a su familia en ese lugar al menos a sus padres y en efecto así fue, pero la bienvenida que encontró no se la había esperado.

Su madre lo había abofeteado por la gran desfachatez que había cometido al irse con su amante y su padre lo insulto de la peor forma, pero lo que no había esperado ver era a su jodido hermano bajando las escaleras como todo un maldito modelo, no cuando se suponía que debía de estar clavado a la maldita cama de un hospital esperando a que hades se lo llevara al inframundo en donde dentro de poco el mismo lo mandaría.

—No se supone que tu alma debía de estar pululando en el maldito hospital —su hermano se tambaleó en las escaleras ante su presencia y sinceramente deseo que cayera de ellas.

Cuando noto como su madre se mordía el labio y su padre desviaba su mirada se dio cuenta de que esos malnacidos le habían mentido y su mente empezó a unir piezas, pero solo logro que le doliera la cabeza así que rápidamente actuó por lo que no se quedaría con dudas.

Gulf se dirigió hacia la habitación que su padre había tomado como oficina en esa casa, sabía que encontraría lo que buscaba ahí por el simple hecho de que los negocios se cerrarían después de la boda lo que le indicaba que seguramente los papeles estarían ahí con ellos.

Gulf no dijo nada solo se dirigió al lugar y cuando estuvo dentro cerró la puerta con seguro escuchando los gritos de su padre los cuales claramente ignoro porque tenía algo más importante que hacer que prestarle atención a sus berridos fuera de tono.

Diez o quizás quince minutos después la supuesta oficina estaba toda destruida, pero lo importante era que Gulf había encontrado lo que deseaba, los documentos eran claros su padre no estaba en quiebra o al borde de ella como le había hecho creer.

En los documentos que encontró eran para un negocio que se llevaría en conjunto con Antonello, era un trato que involucraba mucho dinero y el riesgo de pérdida era bajo, pero la cantidad invertida era exuberante y quien tendría mayores pérdidas seria Antonello.

Según lo que leía era muy fácil la inversión y se realizaría solo si Antonello tenía una garantía por parte de su padre y claro esa garantía era él, su padre lo ofreció en matrimonio para tranquilizar a Antonello también debía de decir que en quiebra no estaba porque los documentos mostraban la solvencia que tenía que tener para llevar a cabo una inversión de tal inmensidad.

Su padre era un cerdo capitalista sin dudarlo incluso para conseguir más dinero había sido capaz de venderlo y toda su maldita familia estaba en ello, su madre con sus lágrimas de cocodrilo, su hermano había fingido su accidente arrastrando a su mujer e hijos en una actuación que merecía algún premio.

El enojo del doncel era muy grande sabía que su familia era ambiciosa, pero no llego a entender a que extremos. Salió de la habitación lo suficientemente enojado como para tirarle los papeles en la cara a su padre.

—Maldito ser despreciable —fue todo lo que le dijo para salir con pasos apresurados hacia donde su hermano estaba al cual tomo de su camisa para iniciar a subir las escaleras.

—Gulf no es como piensas —el doncel se detuvo para ver de manera abrumadora a su hermano —Claro que es como pienso malditos desgraciados, tú más que ellos —el hombre no dijo nada al saber que de cierta manera su hermanito tenía razón, pero cuando el enojo se le pasara todo sería como antes.

—No deberías quejarte cuando te escapaste con quien sabe que personas —ahora lo haría con menos remordimiento.

Para cuando los padres de aquellos hermanos llegaron era muy tarde para detener cualquier situación porque simplemente vieron como su hijo mayor rodaba por las escaleras y su hijo menor estaba muy por arriba de ellos viéndolos con superioridad como todo un villano.

— ¡Nooo! —la madre de ambos hermanos fue quien corrió hacia su hijo quien luego de rodar todas las escaleras estaba inconsciente a pie de esta y Gulf estaba por arriba de ellos viéndose como todo un villano digno de película.

— ¡Eres un maldito monstruo! ¡¿Cómo pudiste lastimar a tu hermano?! —La sonrisa siniestra que les regalo el doncel los dejo casi en shock — ¿Qué? Él me lastimo primero, mintiéndome, en realidad todos lo hicieron solo que mi hermano pago por todo —Gulf bajo las escaleras con gracia y la cabeza en alto.

El doncel dejó a sus padres sin saber qué hacer con su hijo medio muerto y con el otro que según ellos sería prófugo, algo no tan alejado de la realidad ciertamente.

Gulf no se quedaría en Italia cuando claramente ese lugar solo le traía malos recuerdos así que se iría a Tailandia en donde residía su mejor amigo y editor y donde tenía ciertos asuntitos monetarios.

Gulf tomo camino hasta la embajada en donde realizo el trámite más rápido que cualquier otra cosa para salir del país, su pasaporte quien sabe a dónde había terminado, pero él no se quedaría para buscarlo.

La familia de Gulf estaba establecida en Italia claramente, sin embargo pasaban largas temporadas en Tailandia porque aunque tenían mezcla entre las dos nacionalidades, los abuelos en específico vivían en Bangkok junto con su mejor amigo.

Los trámites se realizaron rápidamente cuando el doncel ejerció cierta influencia además tampoco tuvo que realizar el vuelo hasta Tailandia en un avión comercial por supuesto que no, con solo una llamada a sus abuelos ellos rápidamente enviaron uno privado para que lo transportara.

Sus abuelos no habían asistido a la boda por el simple hecho de que no estaban de acuerdo, toda la familia había afirmado que había sido amor a primera vista y que estaban tan enamorados que no podían esperar para casarse sin embargo nada les fue creído.

Esas habían sido las palabras de su abuela y lo había cumplido no participaron en nada relacionado con la boda o intentaron asistir. Sus abuelos mantenían el ideal de que el matrimonio debía de ser solo por amor aunque pareciera anticuado era su creencia.

Gulf estaba consciente de que sus abuelos tenían razones para pensar de esa manera y tenían maneras de reforzarlo, un ejemplo el matrimonio de sus padres. Sus padres se casaron a temprana edad por acuerdos de negocios, pero estos dos no fueron presionados ellos se casaron por avariciosos.

Gulf sabía que en sus primeros años sus padres tuvieron más amantes que casanova y se quedaba corto, obviamente no se habían divorciado y en lugar de buscar estabilidad mental en personas que se las podían dar decidieron formar una familia por eso al doncel no le extrañaba que tanto el cómo su hermano no fueran los más normales.

Cuando el doncel estuvo en suelo tailandés no se dirigió a la casa de sus abuelos sino que a la casa de Mild porque no quería darle explicaciones a sus abuelos tampoco quería el interrogatorio que le esperaba así que solo lo retraso.

— ¿Qué haces aquí? ¿No deberías estar con el trasero congelado en el polo norte? —cuestiono Mild con asombro del cual salió rápidamente cuando Gulf se abrió paso en el departamento.

—Tengo una familia de mierda, un marido desconocido, un ex prometido quizás furioso ah y me duele la cabeza —el de cabello negro mejor se ahorró todas las preguntas y solo le ofreció a su amigo algún medicamento que le sirviera y que no estuviera vencido, lo había comprobado.

Cuando Gulf se sintió mejor lo que conllevo a un recipiente con dos litros de helado mezclados con algunos dulces le hablo acerca de todo a su mejor amigo quien lo escucho con atención algo demasiado raro en él y claro que así fue hasta que las carcajadas de Mild no dejaban de sonar en el departamento.

— ¡Deja de reírte! ¡Estoy sufriendo! —bien se dice que si es tu amigo se reirá de ti y tus desgracias ¿Verdad? —Sigue sufriendo yo vivo tu emoción desde el otro extremo —los ojos cristalizados de Mild por tanto reírse le causaban conflictos a Gulf acerca de si sacárselos o esperaba a que de tanto reír muriera ahogado.

—Me calmo, pero debes de aceptar que viéndolo de otra manera es gracioso, digno para un libro malo de romance —viéndolo de esa manera si tenía razón en cierto punto era gracioso no como decía Mild, pero tenía su encanto —Deberías de escribir tu próximo libro basándote en tu terrible experiencia te aseguro que sería un best seller garantizado agregándole el drama familiar por supuesto —Gulf le dio una de sus miradas causando que Mild levantara ambas manos en rendición diciendo un era una simple bromita.

—Esto es serio Mild no se nada de mi marido uhh hasta decirlo así suena feíto —Mild mantuvo siempre el pensamiento de que Gulf era un riquillo dramático y ahora lo confirmaba — ¿Cómo se llama? —le cuestiono Mild.

—Mew Suppasit —el pelinegro tomo su celular para primeramente buscar el nombre en internet, detallito que Gulf había pasado por alto —Siempre haces drama antes de pensar lógicamente —lo que encontró Mild nunca lo hubiera esperado.

—Mew Suppasit magnate petrolero con diversas perforadoras en lugares de gran interés petrolero, hermano de un empresario con millones además de un exitoso abogado con bufete internacional y de un político italiano con padres adinerados te sacaste la lotería queridísimo amigo —no dudo en arrebatarle el dispositivo en donde verdaderamente aparecía toda la información, pero no había ninguna fotografía — ¿Seguramente estás leyendo la información de otro Mew Suppasit? —sin dudarlo lo habían dejado caer de pequeño.

Mild se acercó al doncel sin arrebatarse el celular solo busco imágenes hasta que Gulf afirmo que si era él y sinceramente Mild estaba seguro de que algunos demonios tenían en buena estima al doncel porque diablos el hombre estaba buenísimo era como un orgasmo andante para mujeres y donceles, atractivo, soltero bueno ex soltero, millonario y sobre todo una sensualidad que te obligaba a abrir las piernas.

—Es cinco años mayor que yo, prácticamente es un anciano a comparación de mis otros novios —ignorar la estupidez era algo que Mild había perfeccionado gracias a las barbaridades que Gulf solía decir y hacer aunque lo acompañara en la mayoría —Uhh si salió de las tumbas de Tutankamón incluso ha de tener un virus mortal y antiguo como él —el sarcasmo había impregno cada palabra además Gulf detecto un toque de veneno, propio de su amigo.

Los siguientes días Gulf estuvo recluido en el departamento de Mild pensando lo que debería de hacer porque tenía problemas y muy grandes los cuales realmente eran el motivo para que no saliera de las cuatro paredes bueno más de cuatro realmente de lo que Mild llamaba su hogar.

No tenía idea de cómo lidiar con la prensa y los comentarios en todas las redes en donde se le mencionaban. La noticia de que el gran magnate Mew Suppasit había salido del mercado de los solteros fue una gran noticia, tendencia en todas las redes, pero como era de esperarse con la prensa investigaron y sinceramente Gulf pensó que si los detectives tuvieran esos ánimos o habilidades muchos criminales estuvieran detenidos.

Habían descubierto el matrimonio que por cierto era más legal que su acta de nacimiento, habían dado con él sin embargo ese no fue el problema, lo que realmente lo fue era el cómo lo retrataron. Un heredero egocéntrico traidor e interesado los medios se dieron un banquete con sus pobres huesos.

Lo retrataron como el típico riquillo doncel que no trabajaba y que nunca lo había hecho algo que lo molesto porque el sí trabajaba algunas cuantas horas, pero lo hacía, lo tildaron de traidor porque se iba a casar con Antonello y termino con Suppasit y de ahí surgió lo de interesado al creer que cambio de novio por la cantidad de dinero que tenían en sus cuentas.

En el hospital en donde su hermano estaban había mucha prensa tratando de sonsacar una entrevista, de Antonello no se sabía su paradero, la casa de sus abuelos era como un hormiguero de tantos periodistas que incluso su abuela estaba considerando desheredarlo no se lo habían comunicado, pero la conocía y con Suppasit con él las cosas fueron más complicadas. No estaba seguro si fue por demasiado acoso o quien sabía de los motivos, pero salió a una conferencia de prensa en donde en efecto su flamante marido salió a defenderlo con la misma historia de amor que le había comentado.

<<Nos conocimos hace mucho tiempo, nos enamoramos y tuvimos una relación con la cual sus padres no estaban de acuerdo por eso se mantuvo todo muy privado. Tuvimos una separación muy problemática y dolorosa en donde se efectuó el compromiso del cual todos hablan.

No pude soportar perderlo y verlo casarse con otro hombre sin que tuviera la oportunidad de hablar con él, al final nuestro sentimiento seguía intacto solo que en circunstancias desfavorables para ambos. Me disculpo públicamente con Antonello Vítale por el daño que mi esposo y yo pudimos causarle y sinceramente espero que encuentre un amor tan grande como para cometer locuras como nosotros lo hemos hecho >>

Esa era la parte que Gulf se encontraba hasta en la sopa que comía, la respuesta del público ante tal declaración había sido épicamente positiva tildando a Mew como un romántico empedernido y el mejor hombre de la generación.

Sin embargo el quedo como el peor doncel del siglo para todos judas era más leal que él, Mew Suppasit había quedado como un hombre enamorado buscando su felicidad sin embargo el quedo como un doncel fácil e indeciso además de manipulable sin personalidad propia, intelecto, sentido común o inteligencia emocional, en pocas palabras Mew Suppasit era el héroe y él la paria de la cual se enamoró.

El timbre sonó, pero Gulf no le prestó atención además Mild abriría, en su mente solo estaba Mew hipócrita Suppasit no creía que hubiera actuado con razones puras porque no era un santo que estaría buscando su bienestar cuando lo dejo así de la nada y sin que supiera en donde estaría.

Ahora tenía que buscar una manera para limpiar su nombre, pero no encontraba ninguna y tampoco es como si pudiera enviar demandas a todos por dar su venenosa opinión acerca de su relación.

Estaba tan concentrado en despotricar y victimizarse que no noto como Mild ingreso con otro hombre a la cocina, tampoco como llevaba cinco minutos hablándole para que saliera de sus más profundos pensamientos hasta que sintió como su cabello fue jalado con brusquedad.

— ¡Maldición Mild! ¡¿Qué carajos te pasa?! —el mencionado solo sonrió nerviosamente y dirigió la mirada al hombre frente a ellos.

— ¿Qué hace la momia virulenta en la cocina?

Creado: 15/02/2023

Publicado: 25/03/2023