Jasmine:

--Ya estoy lista. -Le dije.

<<Qué nervios>> Pensé.

No sé si tomarme ésta salida con Lucas cómo una...¿cita?.

Sentí cuando llamaron a la puerta, y sé que es él, mi patito Lucas. No dudé ni un segundo y abrí la puerta. No voy a permitir que mis nervios me jueguen una mala pasada, seguiré sintiendo cosas por el chico que está delante de mí, pero que difícil se me hace mirarlo a los ojos, y recordar su frío piercing cada vez que me rozaba los labios.

--Estás...hermosa. -Llevo un vestido vintage con girasoles y unas converses de color amarillo.

--Oye tu también estás guapo, pero Lucas, ¿acaso se murió alguien?.

--¿Por qué eres tan pesada?, que lleve una camisa negra, no significa que haya muerto alguien.

--Pues te informo que estás hablando con una persona amante a la moda y, esa camisa no te queda bien con ese jean blanco. -Le dije con cara de asco.

--Y entonces, ¿qué me recomienda esta hermosa diseñadora?. -Me dijo tocándome la puntita de la nariz.

--Creo que ya tengo la solución a este horrible problema. -Me miró con cara de interrogante.

Subí las enormes escaleras y entré en mi habitación, fui al armario y comencé a buscar una camisa, la camisa que me obsequió aquella noche, la noche en que nos conocimos, al final estuve buscando la camisa por 5 minutos y como dice el dicho, "Si es un perro, me muerde." Encontré la camisa doblada en el cajón de mi ropa para dormir.

--La encontré. -Le grité bajando las escaleras.

--Espero que la camisa sea de mi talla.

--Creo que será tu favorita. -Dije desdoblando la camisa en frente de sus ojos.

--¡¿Aún tienes la camisa?!. -Me dijo sorprendido.

--Es el regalo de una persona muy especial para mí. -Le dije. No puedo decirle que desde la noche en que me la obsequió me la pongo para dormir.

--Bueno, pues dile a esa personita que me ha salvado la vida.

--Se lo diré. -Le dije brindándole una sonrisa.

--¿Nunca te han dicho que te ves hermosa, con esas arruguitas que te salen en los ojos cada vez que te ríes?.

--Y yo, ¿nunca te he dicho que siempre me estás diciendo cosas que nunca me han dicho?.

--¿Gracias?. -Me dijo.

Lucas comenzó a desabotonarse la camisa, y ¡Madre mía!, ¡Qué pecho!, ¡Qué abdomen!.

--¿Por qué te sonrojas?.

--¿Yo?, yo no me he sonrojado ni nada. -Le dije con una risita de nervios.

--Creí que te sonrojastes al ver mi pecho desnudo.

--¡No que va!. -Le dije dándole una golpecito en su pecho. ¡Dios mío!, está duro como una roca.

--Bueno yo creo que era ayer cuando te tenías que haber sonrojado, me refiero a cuando estábamos juntos en el agua por la noche. -Me iba diciendo a mi alrededor. --Cuando nuestros cuerpos se juntaron por primera vez, cuando llevaste tus brazos alrededor de mi cuello provocando que sintiera todo tu encanto de mujer. -Me dijo señalando mis bubis. --Junto a mi pecho.

Siento como nuevamente mis mejillas se sonrojan al recordar la escena que me acaba de decir Lucas.

--Ahm...recuerda que íbamos a llevar a Cookie a dar un paseo.

--Sí, claro. -Me dijo con una risita.

Cogí la hermosa correa rosa de Cookie, cogí mis llaves.

--Tomatito. -Me susurró Lucas al oído provocándome unos escalofríos tremendos, mientras cerraba la puerta.

--¿Qué es eso de "Tomatito"?

--Eso te lo dije porque te sonrojastes 2 veces en menos de 5 minutos.

--Está horrible ese apodo. -Le dije.

--Ya lo sé.

--¿Pero no me llamabas Chica Barbie?. Ese apodo me gustaba.

--Nadie ha dicho que no te seguiré diciendo así. Tomatito.

--Odioso.

--Odiosa.

--Pesado.

--Pesada.

--Pecho como roca.

--Infantil.

--Me encanta que me digan así.

--Lo sé. Tienes que saber que estoy conociéndote en silencio.

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Holiii hermosuras, espero que estén disfrutando leyendo (si es así házmelo saber votando, compartiendo o comentando) tanto como yo estoy disfrutando cada vez que escribo cada palabra o cada frase.
Espero que a tod@s les esté yendo bien en sus vidas 😊, recuerden que si no fuera por ustedes yo no estaría aquí publicando cada capítulo. L@s amo mucho 🏖️✨🌸💕😊