Bien, aquí vamos.

Primera clase de baile con León.

Sería difícil. Y aún más porque tengo dos pies izquierdos. Y no teníamos coreografía. No sabíamos que íbamos a hacer.

- ¿Y bien? - le pregunte a León que estaba frente a mí observándome. Llevaba puesto un pantalón de chandal negro y musculosa blanca. Tal y como lo había visto la noche de su borrachera. Sólo que con los colores diferentes. Ya no estaba borracho. Y me observaba con detenimiento. Ponía mis nervios de punta.

- Estoy pensando - su mirada me recorrió de pies a cabeza. Cuando su vista llego de nuevo a mi rostro me miró directo a los ojos - En que te ves increíble con esa ropa. Ahora lo puedo decir libremente.

Mordí mi labio inferior. Mi corazón apretaba bajo mi pecho. Sentí un calor empezar a subir por mis mejillas. Suponía que estaban rojas. Y al parecer León lo noto porque la comisura de sus labios se elevó formando una sonrisa.

Disfruta de mi vergüenza. Disfrutaba verme sonrojada. Maldito.

¿Que tenía de especial en como estaba vestida? Estaba igual que siempre cuando bailaba. Llevaba puestas unas mallas deportivas negras que llegaban hasta mis pantorrillas. Un top negro y encima de este, una musculosa de color rosa. ¿Qué tenía de especial? ¡Alguien dígame!

¿¡Y qué quería decir con eso de "Ahora lo puedo decir libremente"!?

Tranquilas, León siempre ha sido un caballero, ha sido atento, nunca se ha sobrepasado conmigo o ha mostrado intenciones de querer algo más. Ni si quiera a mostrado intenciones de querer algo. Amistad, solo eso había.

Habíamos entrado en un tipo de silencio. No incómodo pero si intenso. Él se aclaro la garganta - ¿Alguna idea de lo que podamos hacer? - negué con la cabeza aún en shock - Bien, entonces veamos que se me ocurre - dijo con una sonrisa.

La música era lenta por lo que íbamos a bailar tipo balada. Es bueno y malo, ya no sé.

- Podemos hacer el típico vals en círculos ¿Qué opinas? - me preguntó. Asentí con la cabeza. - Tengo una idea. Cuando empiece tu voz puedes extender tu mano hacía mi.. Ya sabes, por lo de "Take my hand" - canto el inició de la canción.

Un par de horas después y ya teníamos parte de una coreografía. Si estaba bien o no, ahora no nos importaba.

- Vamos una última vez Violetta - se acercó a la grabadora y puso play. La música de piano tocada por León empezó a llenar el salón de baile.

Take my hand.

Extendí mi mano hacia León y él con una sonrisa la tomó.

Take a breathe.

León suspiró.

Pull me close and take one step.

Jaló de mi mano para acercarme a su cuerpo y dio un paso.

Keep your eyes locked on mine and let the music be your guide.

León clavo sus ojos en los míos. Puso una mano en mi espalda baja. Yo coloqué mi mano libre en su hombro.

Want you promise me.

Se escucho la voz de León cantando esa parte. Movió un pie hacia adelante marcando que empezaríamos con los pasos. Uno adelante, uno atrás mientras que León me jalaba hacia él y marcaba un circulo en el centro del salón. Íbamos prácticamente girando pero sin marearnos.

De un momento a otro, León me levanto y yo tuve que doblar mi pierna derecha hacia la izquierda haciendo que estás se tocarán. Me bajó y siguió con el vals. Mismos pasos y en círculos.

Sin verlo venir, porque no estaba dentro de la coreografía, León hizo que girara sobre mis talones. Perdí un poco el equilibrio pero logré componerme. Volvió a cargarme y por inercia hice lo mismo con mis piernas. León estaba improvisando.

Bajó un poco el ritmo de sus pasos. Puso sus dos manos en mi espalda baja, se impulso hacía a mí y presiono un poco sus manos en mi espalda indicándome que me hiciera hacia atrás. Cuando estuve lo suficientemente inclinada, León movió su cuerpo y mí cuerpo de manera que hicimos un semicírculo, una pequeña rotación. Paro con el baile. Se inclinó aún más cerca de mi rostro.

- De verdad me agradas, no tienes idea de cuanto - su aliento choco contra mi rostro haciendo que cerrará los ojos disfrutando de su cercanía.

(...)

- ¿¡Estás idiota o que!? - me grito Camila desesperada

- No ves lo que es más que claro Violetta - dijo Franchesca notablemente más calmada que Camila

Estábamos las tres en mi habitación. Habían venido al salir del Studio porque bueno, nos hacía falta un tiempo de amigas. Con todo lo del proyecto no daba tiempo para más. Siempre eran ensayos y más ensayos.

- ¡Es que de verdad no puedo creer que no te des cuenta! ¡Que desesperación contigo, mujer! - me grito Cami y después vi venir directo hacía a mí el cojín que arrojó.

- Auch

Desde que nos pusimos al día con nuestras vidas y les conté todo lo que estaba pasando entre León y yo, empezaron a sermonearme y gritarme.

- Te lo mereces - Camila se cruzó de brazos enfadada

- ¿Qué? ¿Por qué? ¿Por no creer algo que es ilógico?

- Está vez estoy de acuerdo con Cami. No eres más ciega que el que no quiere ver ¿Si va a así el refrán verdad? - pregunto Fran - Bueno, como sea. Entendiste.

- De verdad Violetta, todos se han dado cuenta, menos tú. ¡Fede me lo dijo! - abrí los ojos como platos, sorprendida - Bueno, él también lo cree. León aún no le confiesa lo que siente por ti pero él lo sabe

- ¿Y eso que? No garantiza nada

- Violetta, Fede es su mejor amigo, lo conoce mejor que nadie y sabe cuando alguien le gusta con sólo verlo

- Yo simplemente no le puedo gustar a León

- ¿Y por qué no? - terció Fran - Él ya no tiene novia ni nada que lo ligué a otra chica ¿Acaso lo haz visto con alguien más? ¿Aunque sea platicar? No verdad.

- Si es así conmigo es sólo por el proyecto, solo compromiso por el trabajo, nada más

- ¿En verdad no te dice nada "te ves increíble con esa ropa"? O ¿me agradas mucho? - Cami trato de imitar la voz de León. Negué con la cabeza - ¿No? ¿Nada? - volví a negar - Dios eres terca y testaruda - Se levanto de mi pequeño sillón donde estaba sentada segundos antes - Yo que pensaba que la más difícil de las tres era yo y mírate. Eres imposible.

- Violetta, deberías pensarlo, analizar todo lo que pasa entre ustedes - interfirió Fran. La voz de la razón. - Date cuenta de todas las actitudes y atenciones que ha tenido contigo. No lo conozco mucho pero sé que no es un mujeriego que intenta traer locas a todas - le di una mirada de "en serio" - bueno, las trae a todas locas pero no con intención. Es un buen chico y serio. No se anda por las ramas. Tal vez intenta darte un mensaje Vilu, son sus códigos

- Rt Fran - dijo Cami - Los hombres siempre tienden a tener códigos. Malditos hombres y sus códigos exasperantes. ¿No pueden decirlo y ya? - su comentario me hizo reír - De verdad deberías hacerle caso a Franchesca

- Solo piénsalo ¿Está bien? - asentí con la cabeza.

Después de despedirse estuve analizando las palabras de Fran.

¿Podría ser cierto? ¿Será que le gusto a León? ¿Y si no? ¿Si solo es así conmigo por lástima? Definitivamente no puedo descifrar a los hombres.

¿Yo, Violetta Castillo, una equis, gustarle al chico más popular e increíblemente guapo del Studio?

Nah. Eso es algo imposible. Es un sueño.

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Hola hola! ¿Cómo están todas por acá?

Les traje este capítulo un tanto especial por que lo escribí sin pensarlo. Tuve tiempo libre en el colegio y me puse a indagar en mi imaginación a ver que salía y ¡Boom! Apareció este capítulo.

OJO: Es especial por ser entre semana, lo que indica que el fin de semana SÍ habrá capítulo. Uno muy interesante. Ya lo estoy imaginando.

La verdad es que ya estoy muy ansiosa por lo que se viene ¿Ustedes?

Gracias por haber contestado a la pregunta del cap. Anterior, me hizo feliz que contestarán. Próximamente vendrán más por el simple hecho de que quiero conocerlas ;)

Pido disculpas si la parte del baile Leonetta no se entendió.

¿Que creen? ¿Están de acuerdo con Fran y Cami? O ¿Quieren darle un golpe a Violetta?

Ya saben, ¡mil gracias por leer la historia y hasta el próximo capítulo!