Capítulo XVIII
Hello there! Hoy dije, oh no he actualizado esta historia, voy por ella, cuando veo este capítulo allí, sin publicar de hace bastante. Please si ven que no actualizo una historia, recuerdenme xD se me olvida que dejo escritos los capis jajaja
Anakin había tenido que mover cielo y tierra, y pedir también la ayuda de Obi- Wan, pero finalmente habían logrado conseguir que Rex fuera trasladado fuera del área de guerra. Luego de eso, sería seguro que él lograría llegar a salvo a Coruscant.
Cuando Rex se enteró que sería trasladado fuera del área de guerra no podía dejar de agradecerle al general, pero por otra parte no podía dejar de sentirse decepcionado de si mismo. No había hecho mayor contribución en la guerra. Había pensado que podría hacerlo.
Había pensado que podría hacer la diferencia, que su ayuda significaría algo. Y sin embargo se dio cuenta que un solo hombre no podría hacer la diferencia.
Debería haberse dado cuenta de eso, ninguno de los hombres que estaba allí, querían realmente estar allí, todos tenían familia, todos tenían personas que los esperaban en casa, esposas, hijos, madres, algunas de esas personas nunca volverían a ver a sus seres queridos.
Él había dejado todo con un sueño idealista de hacer la diferencia, y se había dado cuenta que en la guerra solo la decisión correcta de personas poderosas podían lograr la diferencia.
Lamentablemente aquellas personas poderosas no estaban sufriendo, no estaban muriendo en la guerra, y solo por eso se permitían el lujo de demorarse en firmar un simple acuerdo. Porque ellos no estaban sufriendo lo que las personas sufrían por amor a una patria que no valía su sacrificio.
Anakin llegó a la habitación de Rex sabiendo que la despedida tendría que ser rápida.
Rex se dio cuenta que ahora eran más amigos que nunca, y dejarlo solo en la guerra le dolía.
- Estaré bien Rex, extrañaré tener alguien que se ría de mi- dijo Anakin sonriendo- Pero estaré bien, nos veremos pronto- dijo aunque ambos sabían que eso no era totalmente seguro.
- Claro que si- dijo Rex sonriéndole intentando sentarse en la camilla y Anakin lo ayudó.
- Es curioso, mucho tiempo fui terapeuta y ayudaba a las personas a acomodarse así, les decía que era fácil que se acostumbrarían.
- ¿Qué dices ahora?- preguntó Anakin divertido con su analogía.
- Los llamaré a cada uno y les pediré perdón por mentirles así, esto es el infierno- dijo Rex y Anakin sonrió.
- Cuídate Rex, cuida de Ahsoka, de Satine, de Padme- dijo Anakin y Rex sonrió.
- Lo haré- dijo Rex aunque sabía que en su estado probablemente el cuidado sería él.
Anakin lo llevó hasta donde sería trasladado y se despidió de él.
- Gracias general, por salvarme la vida- dijo Rex sabiendo que si Anakin no se hubiera arriesgado a buscarlo en medio de un bombardeo el habría muerto destrozado entre los escombros del antiguo cuartel. Ningún general habría hecho eso y Anakin lo había hecho.
- Para eso son los amigos ¿No Rex?- preguntó Anakin y Rex sonrió.
Anakin tomó la etiqueta de su nombre de su chaqueta, que decía Skywalker y se la dio a Rex, quería que se la llevara a Padme, como un recordatorio de que él volvería, costara lo que costara.
- Le llevaré esto, lo juro general- dijo Rex y Anakin asintió.
Obi- Wan, Trilla y Cal Kestis también se despidieron de Rex, Rex felicitó a Cal y Trilla por ahora ser pareja, y luego lo subieron al helicóptero donde sería trasladado fuera del campo de guerra.
Anakin y Obi- Wan más tarde estaban formando sus pelotones, también tendrían que despedirse, y tal vez jamás volverían a verse.
- Eres mi hermano Anakin, sé que volveremos a casa- dijo Obi- Wan y Anakin lo abrazó.
- Volveremos, tengo fe de que si- dijo Anakin mirando a Obi- Wan cuando se separaron de aquel abrazo fraternal.
Anakin se llevó a su pelotón hacia el extremo oriente, uno de los más hostiles, esta vez no iría como médico, sino como general, pues necesitaban sus estrategias de forma activa en el campo de batalla. Eso era lo que preocupaba a Obi- Wan, como médico estaba más resguardado, pero como general, tenía que estar de forma activa en la batalla, correría peligro todos los días, podría morir en cualquier segundo.
Él a ser parte del cuerpo terrestre, era quién más peligro corría, sabía que Anakin jamás le habría dicho a Rex eso, porque Rex era honesto y se lo habría contado a Padme, y Padme habría sufrido cada día pensando que ahora su esposo estaba en más peligro que nunca.
Anakin se fue y Obi- Wan volvió con Trilla y Cal a donde estaba su escuadrón. Ellos eran parte del cuerpo aéreo, y junto a Anakin habían conseguido que Trilla y Cal no fueran parte del cuerpo activo de batalla, sino que desempeñaran un papel meramente médico, pues correrían gran peligro en la batalla al no tener experiencia.
Obi- Wan sabía que no podían seguir arriesgando gente indiscriminadamente en una guerra que parecía nunca tener final.
Aún así Obi- Wan vio llegar a nuevos voluntarios, cada uno con menos experiencia en la guerra que el otro. Probablemente más de la mitad de ellos morirían, para eso los llevaban, para morir, todos lo sabían. Era probable que alguno de ellos intentara ser un héroe y era probable que lo lograra, pero eso era bastante poco probable. En una guerra los voluntarios nunca llegaban al final, solo los militares entrenados lo hacían, porque eran entrenados para sobrevivir en la adversidad.
Los voluntarios en cambio tenían toda la humanidad que en la guerra era mandatorio no tener. Ellos tendían a no abandonara un compañero que no tenía posibilidades de sobrevivir, los voluntarios se quedaban con ese compañero por honor, y terminaban muriendo antes. Los voluntarios eran propensos a desobedecer ordenes, a entrar en pánico, a bloquearse, Obi- Wan esperaba que esos niños sobrevivieran, pero sabía que era poco probable.
Como también era poco probable que él volviera a ver a su familia.
Solo pudo pensar en Satine y su hija, y Anakin mientras subía al vehículo que lo llevaría a él y su escuadrón al frente de batalla pensaba en Padme y en sus dos hermosos gemelos.
La añoranza era lo único que les quedaba. La añoranza de volver a ver a los que amaban.
Rex llegó fuera de la zona de guerra, y supo que cada vez faltaba menos para poder volver a Coruscant, a los brazos de la mujer que amaba. ¿Lo seguiría queriendo ella una vez que viera como volvería? No era el mismo de antes, no era el mismo, no tenía piernas, era solo una carga ahora, pero no se rendiría, se lo había prometido a Anakin que había sido quién había salvado su vida.
No podía rendirse.
En otro lugar, Padme miraba a Shmi que había tenido un mareo y ahora estaba siendo atentida por Padme en su cuarto, mientras los gemelos estaban con Satine afuera visiblemente preocupados.
- Estaré bien hija- dijo Shmi sonriéndole a Padme- Solo fue un mareo, ve a descansar, los niños también están cansados- dijo Shmi
- Claro que sé que estará bien- dijo Padme recostandose a su lado- La leucemia se irá, y esperaremos a Anakin juntas
Shmi la miró sorprendida ¿Ella lo sabía? ¿Cómo?
- Usted estará bien, no la perderé, no perderé a Anakin, todos estaremos bien- dijo Padme que tenía lágrimas en los ojos y Shmi la abrazó.
- No quiero ser una carga para ti- dijo Shmi llorando- Ya estás demasiado cansada- dijo ella.
- Nunca sería una carga, usted es la única figura materna que tengo- dijo Padme y se quedaron allí abrazadas, con la promesa de jamás dejarse solas la una a la otra.
Afuera, Satine hacia dormir a Luke y Leia y a Ayra. Los gemelos le preguntaban si la abuela estaría bien, y Satine les prometía que si, ella estaría bien. Ella tenía que estar bien.
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