Antes de ser llevados a la Arena, tuvieron un momento con sus Mentores.

Haymitch rodeó a Peeta por los hombros, y se lo llevó a una esquina.

—Escucha mi consejo, Peeta — le susurró al oído y Peeta pudo captar el aroma a licor emanar de Haymitch — No entres a la Cornucopia, eso será un baño de sangre. La mayoría del Doce siempre muere en ese momento al intentar obtener una mochila.

—¿Pero y los suministros?

—Morirás antes de siquiera tocar una mochila — dijo Haymitch — Hazme caso y corre lo más lejos.

Peeta asintió con la cabeza, luego miró hacia donde estaban Katniss y Madame Snow. La Primera Dama trenzó el cabello de Katniss, luego la tomó de las manos.

—.. se que pasaron muchos años desde la última vez que pensé en ustedes, Covey — miro al techo, como si estuviera hablando con alguien — Pero guíen a Katniss Sienna. Es una hija de nuestra familia, una niña Covey. Sean sus estrellas en la oscura noche y el faro para su victoria.

Peeta miró a Haymitch que también veía la interacción entre Mentora y tributo.

"Al fin el Distrito Doce tendrá un digno Vencedor" las palabras de su madre resonaron en su cabeza. Peeta era consciente que su madre no se refería a él.

Existían varios factores que colocaban a Katniss en una buena posición. La primera era que Katniss era chica del bosque, por años habían intercambiado sus fructíferas cacerías por cosas, una puntería precisa, la segunda y más importante, tenía como benfectadora a la mismísima Primera Dama de Panem, y por años el Doce tenían buenos patrocinios ( a quienes sobrevivían al baño de sangre)

Madame Snow le dio un beso en la frente a Katniss para luego acercarse a Peeta.

—Buena suerte, Peeta — le sonrió Madame Snow con calidez.

—Gracias, Madame Snow — dijo Peeta.

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El ascensor le daba a Katniss una sensación de encierro.

—Los Vigilantes siempre distribuyen los objetos dependiendo de su valor — dijo Madame Snow a su lado — Justo al borde de la Cornucopia. Es posible que veas un arco ahí.

Katniss rápidamente giró su cabeza y vio a la Primera Dama.

—No vayas por él — ordenó Madame Snow.

—¿Por qué?

—Eso será un baño de sangre, Katniss Sienna — contestó Madame Snow con seriedad — Muchas veces ambos tributos del Doce mueren en ese baño de sangre. Alejate de la Cornucopia, huye a tierras altas, aléjate de los demás. Lo esencial, agua, buscala.

El ascensor se detuvo para luego las puertas ser abiertas. Katniss observó un aerodeslizador esperando. Las dos avanzaron en silencio.

—¿Madame Snow?

—Si, querida.

—Cuando mi padre murió, mi madre se fue — contó Katniss. Si ella moría, su madre nuevamente podría enfermar y no habría nadie que cuidara de Prim además de Gale — Pasaba sus días llorando o viendo a la nada. Si no fuera porque yo intervine, Prim habría muerto de hambre. Si llego a morir...

—No vas a morir, Katniss Sienna.

—Si llego a morir — pidió Katniss —Cuide a Prim. Por favor.

—De acuerdo — asintió con la cabeza — Yo cuidare de Primrose Lilac. Palabra de Covey.

"—Portate bien, Katniss — decía su padre.

—Palabra de Covey — sonrió Katniss a su padre."

—Palabra de Covey — Katniss asintió su cabeza a Madame Snow.

Ella la abrazo fuertemente antes de dejarla ir.

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Finnick saludo a todos, usando su brillante sonrisa. Johanna en una esquina estaba con el ceño fruncido y con una copa de champagne en sus manos.

Como cada año, los Mentores observaban el inicio de los Juegos en su sala privada, presenciando el baño de sangre antes de dirigirse a los patrocinadores.

—Madame Snow — Finnick abrió sus brazos y envolvió a la dulce anciana, ella rió dándole suaves palmadas en su brazo — Cada año luce más encantadora.

—Oh, adulador — negó con la cabeza Madame Snow antes de dirigir su atención a Mags. —Hola querida. Vamos a hablar a una esquina, tengo mucho que contarte.

Mags sonrió y se llevó a Madame Snow a una esquina seguidas por la asistente que siempre la acompañaba.

Finnick se acercó a Johanna y a la mesa de comida.

—Adivina qué información te tengo — sonrió Johanna.

—¿No es útil?

—No, pero se que te gusta saber de todos en el Capitolio — Johanna se acercó a él y susurró — Sé por fuentes muy cercanas que Madame Snow ha estado en el departamento de su hijo soltero porque está molesta con el Presidente Snow.

Finnick abrió los ojos y Johanna asintió con la cabeza.

—¿Y por qué?

—Katniss Everdeen — contestó Johanna.

—¿El tributo del Doce? ¿Qué tiene que ver ella?

—Al parecer es una sobrina nieta o algo de Madame Snow — siguió contando Johanna — Y bueno... no se que pasa, pero mientras le jodan la existencia al presidente, Everdeen tiene mi apoyo.

—¿A quien te cogiste para tener esa información? — preguntó divertido Finnick

—Mantengo en anonimato a mis contactos — Johanna sonrió e inclinó su copa, Finnick también sonrió y chocó copas con Johanna.

Se separaron, Finnick se quedó sentado en un sillón en solitario justo cuando la puerta se abrió dejando pasar a alguien que no era Mentor. Un chico con la piel morena, cabello y cejas oscuras con ojos castaños brillantes. Con el uniforme militar impecable.

Finnick rápidamente lo reconoció como el nieto mayor de la Primera Dama, Crassus Snow.

Madame Snow se separó de Mags y caminó hasta el chico, ella le dio una suave sonrisa. Finnick miró a un lado y vio a Johanna sonreir.

—.. lamento la demora — dijo Crassus Snow mientras guiaba a la Primera Dama hacia un gran sillón.

Como siempre Madame Snow y Mags se sentaron juntas al inicio de los Juegos como todos los años.

—No debiste molestarte en venir — contestó Madame Snow.

—Solo quiero pasar tiempo con mi querida abuela — sonrió Crassus.

Finnick escuchó por la pantalla el conteo regresivo de los Juegos. Todos los presentes en la sala observaron fijamente a las pantallas como los tributos eran posicionados en los pedestales.

Todos miraron a su alrededor, Finnick rápidamente buscó a Morgan, el niño de su Distrito.

5

Finnick observó el contenido de la Cornucopia, como siempre las armas estaban dentro de la estructura, siendo una clara tentación pero a la vez una trampa.

4

Wiress y Beetee se quedaron parados uno al lado del otro, mirando fijamente a la pantalla.

3

Brutus y Enobaria tenían los brazos cruzados, ambos con el ceño fruncido observando a sus tributos.

2

Cashmere y Gloss tenían sus brazos entrelazados con la mirada seria hacia la pantalla.

1

Haymitch tenía una mano colocada sobre el hombro de Madame Snow, mientras ella tenía sus manos juntas sobre sus labios y una mirada de preocupación emanando de sus amables ojos castaños.

Cuando el gong sonó, los veinticuatro tributos bajaron de sus pedestales y corrieron. Finnick observó cómo algunos tomaban lo más que tenían cerca o huían sin nada a los bosques.

El sonido de los gritos y la sangre siendo salpicada era el sonido inaugural de los juegos, como siempre los profesionales eran quienes provocaban ese sangriento inicio. Algunos cañones sonaron a la par que los cuerpos caían al suelo.

El tributo masculino del nueve trató de matar a Katniss Everdeen, quien había cogido una mochila pero pronto cayó al piso por un cuchillo insertado en su espalda. Clove, la chica del Dos sonrió y luego lanzó un segundo cuchillo que se incrustó en la mochila.

Everdeen se puso de pie y salió corriendo en dirección al bosque.

Con la pantalla dividida mostró algunos tributos dentro del bosque y la acción en la Cornucopia.

Madame Snow se puso de pie viendo fijamente a Katniss Everdeen, ella hizo girar su anillo de matrimonio alrededor de su dedo hasta que se escuchó como la argolla dorada caía al piso, pero eso no inmuto a la Primera Dama cuya atención seguía en su tributo.

Finnick vio como Everdeen y la tribu pelirroja del Cinco cocharon en su huida, amables se miraron nerviosas, Everdeen se movió un poco y la pelirroja del Cinco salió corriendo.

En la Cornucopia, Finnick observó como Morgan salía de su escondite con una bolsa pero fue alcanzado por Cato, quien lo mató en el acto.

—Morgan — dijo Finnick al niño de catorce años — Que el mar guíe tu alma a las profundidades del Océano para tu descanso eterno.

El cañón sonó once veces, marcando la muerte de esos tributos. 

N/a: E iniciaron los 74 Juegos del Hambre y el inicio del fin del matrimonio de Lucy Gray y Snow.