¡Fums!
Narrador Omnisciente
La alarma de la castaña sonó, haciéndole gruñir un poco mientras se sentaba y buscaba el despertador en su mueble, ya que aún no abría los ojos
-Maldición, tengo sueño - suspiró Alex, mientras se frotaba un ojo y bostezaba
Se destapó y bajó de la cama, sintiendo el frío suelo en sus pies descalzos
Unos golpes en su puerta le hicieron mirarla
-Buenos días, dormilona - se burló Elena, mientras entraba y cerraba la puerta detrás de ella
-No dormí mucho a noche - comentó Alex, riendo un poco mientras buscaba sus lentes en el mueble de su cama, poniéndoselos
-¿Y cómo hacerlo? Seguro no dejabas de pensar en que pasaste la tarde entera con la chica nueva, Daka creo - dijo Elena, alzando una ceja mientras se cruzaba de brazos, sonriendo de manera burlona
Al instante, el sueño en Alex se escapó, mientras veía a los ojos a Elena
Quien soltó una carcajada al ver a su amiga así
Flashback
La noche anterior
Tocando la puerta un par de veces, Alex entró a la casa
-¡Ya llegué! - dijo Alex, mientras cerraba la puerta detrás de ella
-¡Querida, hasta que apareces! Me asusté demasiado, no sabía a dónde te habías ido - dijo la Señora Steinbrück, llegando con Alex mientras sus manos se encontraban como jarras
-Lo siento mucho, Señora Steinbrück. Hay dos niñas nuevas en la escuela, y estaba con una de ellas mostrándole la ciudad. Se nos fue el tiempo y se fue a su casa - se disculpó Alex, avergonzada mientras se quitaba el gorro
-Al menos llegaste a casa, mi esposo casi va a buscarte. Pero al fin lo mandé a dormir, más vale mañana le saludes antes de que salga de aquí en pijama a buscarte - comentó la señora Steinbrück, riendo mientras negaba con la cabeza
Risa que contagió a Alex
-Está bien, lo haré - dijo Alex
-¿Tienes hambre? Hay comida en el refrigerador si quieres, puedo calentarla - ofreció la mujer, haciendo una seña para señalar la cocina
-No, no. Estoy bien, gracias - sonrió Alex, negando con la cabeza
-Está bien, pero si tienes hambre sólo dime, ¿Sí? - sonrió la mujer
-Lo haré. Buenas noches, Señora Steinbrück - se despidió Alex, haciendo un pequeño gesto
-Buenas noches, querida - sonrió la mujer, mientras veía como la joven pasaba frente a ella, subiendo las escaleras y perdiéndose en el pasillo
-Dios, estos niños - dijo la Señora Steinbrück, negando con la cabeza mientras cerraba con pestillo la puerta, para luego dirigirse a su cuarto, apagando las luces conforme se iba alejando
Alex, sonriendo entró a su cuarto, cerrando la puerta detrás de ella, encendiendo la luz y recargando la espalda en la puerta
-Vaya, hasta que te dignas a aparecer - comentó Elena, quien estaba sentada en la cama de Alex, ya con su pijama puesta
-Lo siento, el tiempo con Daka se me fue volando - se disculpó Alex, mientras dejaba el gorro sobre la mesa junto a su puerta, quitándose la chaqueta también
-¿Te divertiste? - preguntó Elena, alzando una ceja
Alex sonrió de lado, mientras podía sentir como sus mejillas ardían y miraba a Elena a los ojos
-Fue tan ..... Extraño - Alex no encontraba palabras para describirlo
-¿Extraño? ¿En qué aspecto? - Elena se acomodó en la cama, mirando a Alex
-No lo sé. Hablamos sobre diversas cosas, y verla a los ojos era tan ....ella es tan ..... ¿Hipnotizante? - se preguntó Alex, indecisa por encontrar una palabra que pudiera expresar lo que ella sentía en ese momento
Elena sonrió, ladeando la cabeza
-Creo que mejor me lo dices mañana, por ahora intenta dormir, ¿Sí? - dijo Elena, bajando de la cama mientras se dirigía a la puerta
-La verdad no sé si pueda dormir - admitió Alex
Elena rodó los ojos, abriendo la puerta
-Te veo mañana - se despidió Elena, cerrando la puerta detrás de ella
Alex, inmersa en su mundo volvió a sonreír, llevando una mano a su pecho
-Siento que estoy volando - suspiró, mirando al techo mientras pensaba de nuevo en la pelinegra
Su piel blanca, sus mejillas y sus ojos tan oscuros pero hermosos a simple vista
Toda ella era tan ..... Hipnotizante
Sonriendo, Alex se dirigió a su cuaderno en su mochila, mientras sacaba un lápiz también y comenzaba a dibujar
Debía hacerlo una vez, o no podría sacársela de la mente
Dibujaba el contorno de su cabello, el tamaño de sus mejillas, su delicada y larga nariz, su cabello oscuro como podría ser la noche, y su piel tan blanca como podría ser la misma leche o la nieve, brillando bajo la luz de la luna una noche de diciembre. Sus ojos tan pequeños pero tan penetrantes, que un simple contacto visual con ellos te podía hacer sentir el mayor temor, pero para Alex era un temor distinto ; hasta sus labios, pequeños y delgados, pero de alguna forma llamativos y hasta hermosos, curveados en una sonrisa, dejando ver los dientes superiores, y jugando con su imaginación, dibujándole unos pequeños colmillos afilados, como los de un vampiro.
No se dió cuenta de cuánto tiempo pasó, pero parecía media noche, tal vez la una de la madrugada cuando terminó el dibujo, dibujando una sonrisa en los labios de Alex al verlo
Era Daka, había dibujado a Daka
De nuevo, Alex podía sentir su cuerpo entero ardiendo de sólo pensar en aquella chica
-Está mi cuerpo ardiente - murmuró ella, mientras se dirigía a su armario, poniéndose la pijama y luego volviendo a su pequeña mesa de noche, tomando el dibujo y caminando a la cama
-Me pregunto si le gustaría - susurró Alex, bostezando por último, dejando el dibujo de Daka bajo su almohada
Dándose cuenta de lo cansada que estaba, se quitó los lentes, dejándolos en el mueble junto a su cama y apagando la luz
Finalmente, quedándose dormida
Fin del Flashback
-Yo .... - Alex llevó una mano a su nuca, avergonzada
Le habían atrapado
-No te preocupes. Sólo apresúrate para irnos a la escuela, papá ya despertó. Le dije que estabas en casa y se calmó, ya se fue a trabajar - comentó Elena, riendo mientras señalaba con el pulgar la puerta
Sonriendo de lado, Alex asintió y salió de su cama, mientras sacaba el dibujo de debajo de su almohada y lo ponía en su mochila
-Te espero abajo - anunció Elena, mientras salía de la habitación
Alex asintió en respuesta, y luego de escuchar la puerta cerrarse la habitación quedó en un silencio.
Se quedó unos segundos quieta, pero finalmente, Alex se dirigió a su armario y comenzó a buscar algo que ponerse.
Normalmente, estaba medio dormida cuando buscaba su ropa, por lo que a veces tomaba lo primero que tocaba y así se iba a la escuela, sin embargo ; esta vez era diferente.
Abriendo de par en par su armario, Alex comenzó a buscar algún conjunto.
Tardando al menos diez minutos, se decidió por un pantalón color violeta en un tono oscuro, una camisa negra con líneas blancas, botas bajas y su típica chaqueta ; usando claro sus pulseras artesanales, recogiendo su cabello y escondiéndolo en su gorro en la cabeza.
Dándose una última mirada antes de salir de salir, Alex sonrió de lado.
Bajando las escaleras, podía escuchar el sonido de la cocina
-Buenos días, Alex - sonrió la Señora Steinbrück, sonriéndole
-Buenos días, Señora Steinbrück - saludó la castaña, mientras se acercaba al comedor
Poniendo una mano en su hombro como saludo, Alex se sentó junto a Elena
-¿Volverás después de la escuela? - preguntó la Señora Steinbrück a Alex, sirviéndole huevos fritos, tocino y un poco de jugo de manzana
-La verdad no lo sé, tal vez vuelva a salir con la niña de ayer - comentó Alex, encogiéndose de hombros mientras bebía algo de jugo
-Parece buenas amigas - comentó Elena, fingiendo inocencia mientras bebía algo de jugo
Alex casi escupió el suyo al escuchar a Elena, tosiendo un poco mientras cubría su boca con una servilleta
-Dios mío, Alex, querida, ¿Estás bien? - preguntó la Señora Steinbrück preocupada, mientras se acercaba a la mencionada
-Sí, sí. Estoy bien, creo que tomé jugo demasiado rápido - dijo Alex, mientras le sonreía con amabilidad
Para luego patear bajo la mesa a Elena, quien escondía su sonrisa de burla tomando de su propio jugo
-Bueno, como sea. Si vuelves a salir con ella al menos que no sea tan tarde, ¿Sí? Mi esposo y yo nos preocupamos por ti - dijo la Señora Steinbrück, mirando a Alex mientras alzaba una ceja, sonriendo con amabilidad mientras recogía el plato sucio de Elena
-Lo sé, en verdad se los agradezco - sonrió Alex, mirando a la mamá de Elena con cariño
La Señora Steinbrück sonrió en respuesta
-Me iré a lavar los dientes - dijo Elena, mientras se levantaba de la mesa y se alejaba trotando
Alex hizo una seña como gesto y la Señora Steinbrück sólo asintió, mientras se dirigía a la cocina para preparar su propio desayuno
Con Daka
-Camino .... Camino .... Camino .... - susurraba adormilada la pelinegra, mientras la oscuridad de su cama/ataúd la hacían ajena al hecho de que ya había salido el sol
En su sueño
Un camino en el bosque, era de noche y las luciérnagas hacían su aparición de vez en cuando
-Camino .... Camino .... Camino .... - murmuraba la pelinegra, mientras volaba un poco, cerca del suelo, pero sus piernas se encontraban levemente encogidas, por lo que sólo era como flotar
Unos ruidos de ramas crujir cerca de ella le hicieron parar, a la vez que ahora tocaba el suelo y miraba hacia donde se había escuchado el sonido
-¿Quién anda ahí? - preguntó Daka en voz alta
Una pequeña risa fue la respuesta que tuvo
Conociendo aquella risa, Dakaria sonrió en respuesta, mostrando sus colmillos
-¡Te atraparé! - gritó Daka entre risas, mientras comenzaba a volar hacia la persona que había reído
-¡Oh no, que alguien me ayude! - gritó la persona entre risas, mientras comenzaba a correr por el bosque, siendo perseguida por Daka
Quien también reía, extendiendo sus brazos hacia el frente para atrapar a la persona
-¡Te tengo, Alex! - gritó Daka, mientras se dejaba caer sobre la mencionada, cayendo ambas al suelo entre risas
Alex reaccionó con un pequeño grito por el impacto, pero finalmente ambas terminaron riendo entre ellas
Siendo Daka quien estaba sobre Alex, con sus manos a los costados de la cabeza de la castaña, y sus piernas en la cintura de la mencionada
-No es justo, estabas volando - dijo Alex, haciendo un pequeño puchero
El cual Daka besó con ternura
-No te preocupes, cariño. Podemos jugar de nuevo - ofreció Daka, alzando una ceja
-Esta vez yo te perseguiré, pero ¡No vueles! - advirtió Alex, alzando su dedo índice y poniéndolo entre ella y Daka
Quien sonrió, mostrando sus colmillos
-Bien, acepto. - sonrió Daka
-¿Qué si yo gano? - preguntó Alex
-Un beso - sonrió Daka, mientras alzaba levemente sus labios, cerrando los ojos
Alex soltó una pequeña risa, sonrojada
-¿Qué si yo gano? - preguntó Daka, curiosa
Alex extendió su cuello, dejándolo a disposición de Daka
Quien le miró con sorpresa, pero finalmente sonrió emocionada
-No te dejaré atraparme - dijo Daka
En el momento en que iba a alejarse, Alex tiró de la camisa de Daka y al atrajo a ella
Uniendo sus labios en un beso
-Y yo no te dejaré ir - susurró Alex contra sus labios
-Despierta, Daka - dijo Alex, borrando su sonrisa
-¿Qué? - dijo Daka, confundida
-Despierta - dijo Alex, mientras su voz sonaba rara
-¡Despierta! - dijo Alex
Fin del sueño
-¡Despierta! - gritó Silvania de nuevo, intentando despertar a su hermana
-¡No, espera! ¡Alex! - gritó Daka, sentándose de golpe mientras abría los ojos, extendiendo su brazo y su mano, como si intentara tomar algo o detener a alguien
Silvania le miró confundida, alzando una ceja mientras entrecerraba los ojos
-¿"Alex"? ¿No es esa la chica con la que te fuiste ayer de la escuela? - preguntó Silvania confundida, mientras ladeaba la cabeza
Como si Daka hubiera tardado en despertarse por completo, se dió cuenta de lo que había dicho y se avergonzó, mientras bajaba su brazo y pasaba su mano por su rostro, intentando aliviar la sensación de vergüenza que tenía
-Yo ..... No es nada, sí, es ella - dijo Daka, mientras bajaba de su cama, caminando hacia su armario para buscar ropa
Bajo la confusa mirada de Silvania
-Ayer no me dijiste como te fue, estabas un poco ida. No dejabas de sonreír, ¿Te divertiste? - preguntó Silvania, sacándole plática a su hermana mientras ella se dirigía a su propio armario para buscar ropa
Daka se detuvo unos segundos, buscando las palabras correctas
-Fue .... Muy agradable - dijo Daka, sonriendo de lado mientras se encogía de hombros
-Aunque .... Me sentía un poco extraña - admitió Daka, mirando a Silvania mientras fruncía el ceño
-¿Extraña? ¿En qué aspecto? - preguntó Silvania, confundida
-No lo sé, ni siquiera sé de lo que estoy hablando. Fue extraño, porque fue una sensación que nunca antes tuve - dijo Daka, ladeando la cabeza mientras veía a Silvania
-¿Era una sensación buena? - preguntó Silvania
-Fue .... Como sentir que volaba .... Pero en ningún momento lo hice - dijo Daka, alzando una ceja ante lo que ella misma decía
-¿Volar? ¿Enserio? - preguntó Silvania, rodando los ojos
A ella no le gustaba tanto el vuelo como a Daka, por lo que no podía comprender esa sensación
-Fue como ..... La humana más amable que he conocido jamás ; Es muy agradable, atenta a lo que le digo y le gusta hacer sentir a los demás incluidos, es la única humana además de Elena que me agrada - dijo Daka, dejando de lado sus cosas mientras se giraba a ver a su hermana
Quien le miró curiosa
-Sentí algo extraño ayer, en la clase cuando nos presentaron - admitió Daka, caminando hacia Silvania
-¿Qué fue lo que sentiste? - preguntó Silvania, curiosa
-Fue como .... Cuando recuerdas algo y es esa sensación de un clic, en tu cabeza. Pero fue un clic diferente, fue como si al sentir ese clic, algo se moviera dentro de mí - dijo Daka, señalando su propia cabeza mientras hacía señas de confusión
-Fums, ¿Crees que sea bueno? - preguntó Silvania, preocupada
-No lo sé - Dakaria negó con la cabeza
-Podemos preguntarle a Alex si quieres, se ve que se hicieron amigas - sonrió Silvania, extendiendo su brazo hacia su hermana
Quien al escuchar el nombre de la chica, una sonrisa se asomó por sus labios
-¡Sí! - dijo Dakaria
Sorprendiendo un poco a Silvania
-Digo ... Sí, está bien. Hagámoslo, iré a bañarme - dijo Dakaria, mientras tomaba un conjunto de ropa y salía de la habitación, caminando al baño para darse una ducha y vestirse
No quería perder tiempo
Siendo Dakaria la primera en alistarse, salió con prisa y bajó a desayunar
-Buen día - saludó Daka con una sonrisa, sentándose mientras su mamá le servía un plato con tostadas y jugo
-Buen día, Dakaria. ¿Sigues feliz como ayer? - su mamá sonreía mientras se alejaba a la cocina
Pues la noche, anterior, Daka había llegado con una sonrisa de oreja a oreja
Como un vampiro cuando prueba la sangre por primera vez
-Bueno, sí. Me divertí ayer - Daka jugó con sus manos bajo la mesa, mientras se encogía de hombros
-Me alegra, esa niña debió ser muy amable. ¿Cuál era su nombre? - mamá se detuvo un momento a pensar, intentando recordar el nombre de la niña que Daka mencionó la noche anterior
-Alex, su nombre es Alex - exclamó Daka, tomando una de las tostadas y poniéndole algo de carne fría
-Alex, claro. Ese nombre es lindo - comentó la mamá
-Ella es linda - dijo sin pensar Daka, sonriendo mientras bebía de su jugo
Su mamá dejó de picar un pedazo de carne y la miró
-¿Dijiste algo, hija? - preguntó
-No, nada - se apresuró a decir Daka, mordiendo de nuevo el pan mientras una de sus manos jugaba con su pierna
Había hablado sin pensar, gracias a Drácula su mamá no la había escuchado
-Buen día - dijo Silvania, mientras intentaba cubrir su rostro con disimulo, sentándose junto a Dakaria
-Oye, ¿Qué te pasó en el rostro? - preguntó su mamá, mirando a Silvania preocupada mientras notaba tonalidades alarmantes de rojo en su frente, mejillas y nariz
-Son ..... Las saqué de una revista - se excusó la rubia, sonriendo orgullosa por su ingenio mientras tomaba algo de jugo
No convencida, su mamá quiso moverla un poco para verle el rostro
-No - Silvania se removió
-Sólo quiero ... - su mamá quería calmarle
Silvania suspiró un poco
-Es demasiado, debe verse natural - indicó su mamá, volviendo a la cocina
-Así se ve bien - finalizó Silvania
Sonriendo de lado, Daka volvió a pensar en Alex
Ya que al igual que su hermana, ella había salido. Pero a diferencia también de ella, Alex prestó atención y siendo prudente sólo fueron por lugares con poca luz
Fue prudente y se divirtió
-Señoritas - su padre hizo presencia, sonriendo mientras se asomaba por el borde de la puerta
-Hola, cariño - saludó su esposa
-Ulalá - expresó el hombre, mirando a Silvania con algo de sorpresa
-Ah .... Lo sacó de una revista - explicó su esposa, sirviendo más jugo para Daka
-Bueno, eso al menos es un cambio - animó el esposo, sonriendo
-Am .... Papá .... Mamá .... ¿Puedo hacerles una pregunta? - dijo Dakaria, dejando de lado su pan mientras veía a su mamá
Quienes se miraron entre sí, y luego a su hija
-Claro, cariño - sonrió su mamá
-¿Qué ocurre? - preguntó el papá
-Mamá .... ¿Era la única humana en Transilvania? - preguntó Daka
Incluso Silvania le miró confundida por esa pregunta
-No, no lo creo .... Habían humanos, pero mayormente vampiros, ¿Por qué la pregunta? - su papá ladeó la cabeza, mirando a Daka mientras alzaba una ceja
-Bueno .... - Daka metió las manos bajo la mesa, metiéndolas entre sus piernas
-¿Nunca conocieron a un tal Norman Kurtzberg? - preguntó Daka
La mamá le miró con sorpresa, y arreglando un poco su ropa se aclaró la garganta
-¿Dónde escuchaste ese nombre? - preguntó su papá
Dakaria frunció las cejas por la reacción de su mamá
-¿Y su esposa, Emma Kurtzberg? - siguió Daka
Silvania le miraba confundida
¿Y ella en dónde vió esos nombres?
-Bueno ... - su papá duró unos segundos en silencio antes de hablar
-Eran unos amigos nuestros en Transilvania. Pero se fueron a vivir a otro lado y jamás supimos de ellos de nuevo - dijo su mamá
-¿Ellos sabían que papá es vampiro? - preguntó Daka
-Sí, de hecho. Emma era una de las mejores amigas de su mamá, eran unidas. Pero cuando quedó embarazada tuvo que mudarse junto a su esposo, Norman. - dijo su papá, recargándose en una silla mientras tenía la mirada un poco ida
Hace tiempo que no hablaba de el matrimonio Kurtzberg
-¿Por qué no era seguro? - preguntó Daka
-Porque ellos eran mortales, como yo. Eran humanos, y a diferencia de mí ellos no tenían lazos con vampiros como matrimonio si no sólo como simples amigos. Decidieron que lo más seguro para su bebé era que se fueran, pero nunca volvimos a saber de ellos - admitió su mamá, dejando la jarra con jugo en la mesa mientras la otra la dejaba en el hombro de Daka
Quien bajó poco a poco la mirada
El comedor se quedó en un silencio sepulcral, en el cual sólo se escuchaban las respiraciones de los cuatro
-¿Ahora nos dirás dónde escuchaste esos nombres? - preguntó su mamá, mirando a Daka
Quien le miró a los ojos
-Ayer salí con Alex, les conté de ella. Caminamos un rato y me dijo que sus padres vivieron un tiempo en Transilvania, sus padres .... - Daka tragó saliva
-Emma y Norman son los padres de Alex - confesó Daka
Silvania, su mamá y su papá le miraban con sorpresa
-¿Ellos están aquí? - preguntó su mamá, cruzando miradas con su esposo
-Bueno, eso es asombroso. Podremos verlos de nuevo - sonrió su papá, emocionado de ver a sus viejos amigos
Silvania sonrió igual y cruzó miradas con su mamá, quien también sonreía emocionada
-Hay un detalle - Daka le advirtió
-¿Qué clase de detalle? - preguntó su papá, sonriendo
Daka dudó unos segundos en decirlo
-Creo que no me corresponde a mí decirlo, si no a Alex. - Daka se retractó de decirlo
Si bien, eran los amigos de sus padres, eran los padres de Alex
Y había prometido no decir nada, ni a su hermana
-Bueno, invítala después. Y dile que puede traer a sus padres - su mamá le animaba
-Tal vez luego - Dakaria volvió a tomar jugo
Su mamá y su papá cruzaron miradas, confundidos por su reacción
Luego de el desayuno, su padre se fue a dormir y las chicas a terminar de arreglarse, lavándose los dientes y tomando sus mochilas
-Esperen niñas, su tierra de casa. Saben que es vital para ustedes - su mamá les llamó, caminando hacia ellas mientras tenía en sus manos un jarrón de vidrio lleno de tierra
Ambas dejaron sus cosas y Silvania tomó un pequeño puño de tierra, abriendo su collar y poniendo un poco en el relicario, mientras Dakaria se quitaba uno de sus zapatos junto a su calceta, tomando tierra y poniéndola entre sus dedos
Luego, se volvió a poner el calcetín y el zapato
Saliendo de su hogar, caminaban hacia la escuela
-Oye, ¿A dónde fuiste con Alex ayer? - preguntó Silvania
-Bueno .... Fuimos por un helado, le comenté que el sol no me gustaba mucho y me llevó a una heladería donde había un gran árbol y bastante sombra, luego .... - Dakaria no diría nada sobre el cementerio - Caminamos por el parque - finalizó Daka
-¿Eso es todo? Te veías muy alegre como para sólo haber ido por un helado y al parque - Silvania frunció el ceño
-Hablamos sobre diferentes cosas, no sólo comimos helados - Daka se encogió de hombros
Entrecerrando los ojos, Silvania miró al frente de nuevo
-Está bien, entonces - dijo Silvania
Asintiendo, Daka dió por finalizada su plática
Y un rato después llegaron a la escuela
En la cancha, se veían a todos los alumnos jugando antes de entrar a clases
-Mira, allí está Elena - dijo Daka, señalando a la mencionada
Quien se encontraba un poco lejos, dándoles la espalda mientras parecía buscar algo en su mochila
-Supongo que Alex fue al baño - comentó Daka
Y era verdad, pues Alex se encontraba saliendo de los baños mientras iba a ponerse la chaqueta de nuevo
-¡Elena, hola! - saludó Daka
Pero Elena seguía de espaldas
Daka y Silvania cruzaron miradas, un poco confundidas
-Elena - volvió a llamarle Daka
Pero Elena parecía seguir buscando en su mochila
¿Es que no escuchaba?
Cuando Alex se acercaba, sonrió al ver a Daka
Cuando estaba por gritarle para llamar su atención, miró a Kila
-Toma, Missy - dijo Kila, pasándole a Missy una sandía
-¡Oye, Elena! ¡Atrápala! - gritó Missy, y le lanzó la sandía a Elena
-¡Elena! - gritó Alex asustada, mientras esperaba que le escuchara
-Maldición, aún no se los pone - murmuró Alex, dándose cuenta que Elena no reaccionaba
-¡Sclup colmillos! - exclamó Daka, y de nuevo pareció moverse con una rapidez sorprendente, atrapando la sandía un segundo antes de que impactara contra Elena
Los tres bullies le miraban con sorpresa, y Alex suspiró aliviada
-Oye, atrápala Missymouse - dijo Daka, y lanzando la sandía hacia el cielo miró a Missy
La sandía llegó a una altura que se perdió en el cielo
Los tres bullies le miraban con sorpresa de nuevo
¿Cómo es que esa niña era tan rápida y fuerte?
-¡Elena! ¿Estás bien? - preguntó Alex, trotando hasta llegar a ellas
-¿Qué fue eso? - preguntó Elena, confundida
-Una sandía - dijo Silvania
-¿Bala de cañón? - preguntó Elena
Alex tragó saliva
-No, un melón - dijo ahora Daka
Alex le miró confundida
-Ah .... Un cañón - dijo Elena
Alex suspiró, acomodando sus lentes
-¿Qué pasa contigo? Te estás confundiendo. Yo dije sandía - dijo Silvania
-¿Tienes un problema? - preguntó ahora Daka
-¿Yo, un problema? No - Elena se acomodó un poco el cabello, cubriendo parte de sus mejillas
-Sí, algo tienes - dijo Silvania
Alex y Elena cruzaron miradas, nerviosas
-Tal vez está en shock - dijo Silvania, y abriendo su relicario tomó un poco de tierra y quiso acercarla a la nariz de Elena
-¡Alto! ¿Para qué es eso? - preguntó Elena, alejando la mano de Silvania de su nariz
Alex frunció el ceño al ver eso
-Es. .... Eh .... - Silvania no sabía qué decir
-¿Eso ayuda? - preguntó Alex
-Sí .... Es.... Eh .... No importa - al final, Silvania dejó aquél polvo en su relicario y volvió a guardarlo
-Pero, ¿Qué pasa contigo? - preguntó Silvania
Mirando a Alex, Daka notó que no tenía su chaqueta puesta
-Alex - se acercó a ella, tocando su brazo
Alex le miró a los ojos y al instante sonrió de lado, pero al sentir el tacto en su brazo se dió cuenta de que lo tenía descubierto
Con rapidez se puso la chaqueta y se acomodó las mangas
-Tú también tienes algo - dijo Silvania, mirando a Alex
Quien sonrió nerviosa
-Claro que no, no tengo nada - sonrió Alex
-Sí, tienes algo - dijo Silvania de nuevo
-¿Debemos llevarte al doctor? - preguntó Daka, intentando que la atención fuera a Elena
-Para nada - Elena dió un paso atrás
Alex se removió en su lugar, y miró a Daka
Quien le sonrió de lado
Sonriendo igual, Alex miró a Elena
Quien suspiró y le ofreció su mano a Alex
Quien se acercó a ella y la tomó
Ganándose la atención de Daka, quien miró las manos de las chicas con atención y luego a ellas
-Pero sólo ustedes lo sabrán - declaró Elena
-De hecho ..... Daka sabe sobre mí - admitió Alex, mirando a Elena
Quien le miró con sorpresa
Y Silvania miró a su hermana confundida
-¿Qué cosa? - preguntó Silvania, mirando a su hermana
Alex y Elena se miraron entre sí, y sonriendo soltaron sus manos mientras Helena buscaba algo en su mochila
-Este es mi secreto, y quiero que así sea - dijo Elena, mostrando dos pequeños artefactos mientras Daka y Silvania le miraban confundidas
-Salvo los maestros, nadie en la escuela lo sabe. Además de Alex, claro -Elena finalizó, sonriéndole a Alex al terminar
Quien sonrió igual
-¿Es algo para comer? - preguntó Silvania
-Es un auxiliar auditivo. No escucho bien, tuve un accidente de auto. Pero ahora mi olfato es mejor, huelo como un sabueso - explicó Elena, poniéndose esos artefactos en los oídos
-Yo también tuve un accidente .... Pero fue algo distinto - Alex se subió las mangas de la chaqueta, dejando ver las marcas de quemaduras
-¡Fums! - dijo Silvania, sorprendida y preocupada al ver sus marcas
Daka le miró y sonrió de lado, dándole apoyo
Alex sonrió al verla, pero de nuevo el tamborileo en su pecho comenzó a sonar
Por lo que tuvo que desviar la mirada mientras volvía a bajarse las mangas
-Al igual que Elena, sólo los maestros y ella lo saben - explicó Alex
-¿Y por qué es un secreto? - preguntó Daka
Aunque la pregunta iba más para Elena que para Alex
-Sólo porque .... Me da vergüenza - explicó Elena
-No es algo que necesiten saber - agregó Alex
-Esta bien, les doy mi palabra. No lo diremos - sonrió Daka, mirando a Elena y finalmente a Alex
Quien sonrió agradecida
-Gracias - sonrió Alex
-Ahora saben nuestros secretos ...... Ustedes deberían decirnos el suyo - dijo Elena, mirando a Silvania y luego a Daka
Quien tragó saliva
-¿Qué? - preguntó Alex, mirando a Elena
-Si saben un secreto de nosotras, nosotras merecemos saber algo de ellas, ¿No lo crees? - Elena miraba a Alex
Quien le miraba indecisa y luego miró a Daka
Quien se veía preocupada
-El hecho de que no son muy normales es muy evidente - agregó Elena
-Ahm .... - Silvania se veía nerviosa
-Las amigas no tienen secretos - siguió Elena
Alex se mordió la lengua, mientras miraba a Daka a los ojos
Quien tragó saliva, pasando una mano por su nuca mientras la rascaba un poco nerviosa
¿Sería buena idea decirles?
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¡Segundo capítulo listo!
Fue bastante más corto que el primero, pero quería al menos publicar un capítulo más.
Publicaré lo más rápido que pueda, aunque no prometo nada
Les deseo suerte
¡Se despide quien escribe esta historia!
Alex-12
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