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Si Luka tenía que ser honesto, estaba sorprendido por los rápidos cambios que la melodía de Marinette había sufrido en el último mes.

Bien, mentiría al decir que no estaba preparado para algo como eso. Esperaba encontrar picos ansiosos, notas inconexas que subían y bajaban sin ton ni son, como solía ser cuando ella pensaba en Adrien y en tratar de comunicarle sus sentimientos.
Y, bien, había algo como eso en su melodía... pero no era del todo así, ni era lo predominante en ella.

Luka podía decir que la dama de París había pasado por momentos realmente malos, pensamientos y auto-análisis que habían puesto a prueba la parte más profunda de su humanidad. Dolía pensar que pudo haber tenido que pasar por eso ella sola, pero no iba a preguntar al respecto, porque ella lucía como si ya hubiera dejado todo eso atrás.

Ella había caminado directamente a través del fuego, y había salido del otro lado, en pie, caminando derecha, y con la cabeza en alto.

Luka estaba orgulloso más allá de lo que podía decir con palabras.

Entonces, en cambio, creó una nueva canción para ella. Su dulce e increíble musa.

La clase de Juleka fue invitada a su siguiente práctica, junto con algunos miembros del otro salón, como Zoe y Marc. Kagami también encontró tiempo para quedar con ellos, y el propio Adrien estaba ansioso por unirse a la banda en el teclado. Había pasado un tiempo desde que tuvo la oportunidad de escabullirse de su padre y tocar con Kitty Section.
La práctica comenzaba alrededor de las tres de la tarde, por lo que Luka tenía la esperanza de poder mostrarle a Marinette su nueva canción después de eso.

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Adrien estaba emocionado, incluso Plagg podía señalarlo. ¡Incluso Félix, con quien pasó solo algunos minutos durante la mañana, podía decirlo!

Todos sus amigos se estarían reuniendo en el Liberty para una práctica de banda. Eso la incluiría a ella. Marinette. Por supuesto, porque ella era la diseñadora detrás de los atuendos y todo aspecto publicitario de la banda en ascenso.

Adrien estaba emocionado de pasar la tarde en el mismo lugar con ella. Él tocaría con los demás y ella lo escucharía. Adrien sabía que a Marinette le gustaba mucho la música. No solo diseñaba para Jagged, nada menos, sino que había visto más de una vez a Luka ayudarla a sentirse mejor tocando para ella.
Entonces, según el razonamiento de Adrien, él podría ayudarla a sentirse más cómoda con él si a ella le gustaba cómo tocaba.

Y, bien, quizás se dejó llevar un poco por el entusiasmo y llegó algo temprano al barco, pero Anarka lo recibió con ese burbujeante ánimo que la caracterizaba, y Adrien se ofreció a ayudar a Iván en acomodar los instrumentos y micrófonos.

Sus amigos empezaron a llegar poco a poco.
Nino lo saludó cálidamente, junto con Alya. Y era genial sentir que las cosas con Kagami se iban arreglando. Había dolido mucho que ella se alejara cuando él no pudo darle la relación que ella esperaba, pero las cosas habían mejorado. Lento pero seguro.

Casi todo estaba listo cuando ella llegó. Se veía preciosa la pocas veces que podía admirar su cabello suelto, y eso era cada vez más frecuente ahora que tenía esa motoneta rosa que su abuela le había regalado, ya que las coletas no iban bien con su casco.
Zoe viajaba con ella y ambas desmontaron, quitándose los cascos una vez que Marinette aparcó su vehículo. Sacaron un par de cajas de la canasta, dejando en su lugar los cascos.

Adrien notó el logo de la panadería en las cajas. Las dos chicas recién llegadas se movieron hacia una mesa donde ya estaban dispuestos muchos vasos rojos y tazones con refresco y hielo, mientras saludaban de forma generalizada al grupo.
Después de añadir los bocadillos horneados en la mesa. Zoe y Marc guiaron a Marinette a una silla para sentarla, tras pedirle permiso para encargarse de su cabello. Cada uno de ellos empezó a tejer una trenza francesa después de dividir su cabello en dos. Mientras tanto, Alya y Kagami se acercaron para dirigir su atención a una conversación.

La Ladyblogger solo se quedó allí por un minuto, antes de que su atención se dirigiera a otra zona del barco, lo que dejó a las dos chicas de ascendencia asiática para conversar.
Zoe y Marc ataron las trenzas al final con los listones rojos que ella usaba generalmente en sus coletas. Ella agradeció cariñosamente al dúo antes de regresar a su plática, usando gestos de sus manos para acompañar sus palabras, lo que parecía generar una sonrisa en Kagami.

Entonces, Adrien no sabía dónde había estado Luka los últimos veinte minutos, pero apareció, lanzó un saludo y luego hizo una línea recta hacia las dos chicas, saludando amablemente a Kagami mientras tomaba un asiento del lado contrario a ella, junto a Marinette.
Los tres no parecieron tener problemas para conversar juntos, lo cual sorprendió un poco a Adrien, ya que casi nunca había visto a Kagami y Luka interactuar entre sí.

El llamado entusiasta de Rose atrajo rápidamente a toda la banda a sus lugares detrás de los instrumentos y micrófonos.
Iván besó a Mylene en la mejilla antes de dirigirse a la batería. Pero Adrien aún no había podido siquiera acercarse a Marinette.

Sus compañeros de clase empezaron a tomar asiento, agrupándose donde las dos chicas asiáticas se habían sentado. La música llenó el barco. Incluso los transeúntes que paseaban a lo largo de la ribera del Sena se detenían a escucharlos y verlos.

...

La práctica fue genial.

Los espectadores, tanto sus amigos como los parisinos transeúntes, o turistas exploradores los aplaudieron y vitorearon, demostrado su aprobación y elogios.

Algunos de los adolescentes incluso se pusieron de pie en el barco para bailar a su ritmo.

El día todavía estaba claro cuando el sistema de micrófonos fue apagado y recogido, cambiado por una lista de reproducción, cortesía del aspirante a DJ local. Los gemelos Couffaine tomaron sus instrumentos consigo antes de ir y mezclarse con sus amigos.

Adrien escuchó y agradeció educadamente a los elogios que Rose le dio, señalando lo bien que se acoplaba a la banda incluso si no podía practicar regularmente con ellos; así como de otros compañeros y amigos.

Cuando el rubio pudo hacer su camino hasta el último lugar donde había visto a Marinette, la encontró una vez más con Kagami, Luka y Zoe. La rubia neoyorquina estaba diciendo algo que hizo reír tanto a Luka como a Marinette; Kagami sonreía y parecía decir algo complementario a la rubia que los envió a una nueva ronda de risas.

Viendo su oportunidad, Adrien se desvió ligeramente para agarrar un par de bebidas -después de deslizar algo que contenía queso en el bolsillo de su camisa lo más disimuladamente posible- y se volvió hacia el cuarteto... justo a tiempo para ver a Luka susurrando algo a Marinette que los hizo disculparse con las chicas antes de retirarse.
Ni la japonesa ni la neoyorquina parecieron molestas por esto. Kagami solo se encogió de hombros y Zoe le dirigió un guiño disimulado a la que se convirtió en su primera amiga en la ciudad.

El ex-modelo llegó con ellas justo a tiempo para ver a su anhelo de ojos azules desaparecer con Luka en el interior del barco.

Kagami se giró a mirarlo mientras Zoe se despedía, pensando que Adrien venía por Kagami.
Pero la esgrimista lo sabía mejor. Echó un vistazo al chico que sostenía dos vasos de refrescos, luego a sus ojos y la dirección que seguían, finalmente regresó a sus ojos, resoplando.

—Tardaste —le dijo simplemente, tomando el vaso extra de su mano para sí, sin importarle que originalmente no estuviera destinado a ella. La receptora original estaba fuera de su alcance ahora... literal y figurativamente. No que Adrien lo supiera.

Mientras tanto, en su cabeza, Adrien tuvo que repetirse un par de veces, o dos, que Luka y Marinette no estaban saliendo (él mismo la había escuchado decírselo a Alya) especialmente cuando Luka miró de reojo en su dirección con, lo que le pareció, una sonrisa, mientras rodeaba los hombros de Marinette para llevarla dentro del barco.

Ellos. No. Están. Saliendo.

Kagami tuvo que quitarle su vaso de la mano antes de que lo apretara demasiado, inconscientemente.

La japonesa sonrió para sí misma de lado, observando a su antiguo enamorado. Generalmente, prefería el enfoque directo, lo cual significaría decirle a Adrien que sus oportunidades con Marinette estaban bastante cerca del cero absoluto... sin embargo, una voz traviesa en el fondo de su cabeza la hizo preguntarse...

¿Cuánto tiempo tardaría Adrien en darse cuenta de eso por sí mismo?

Extra:

Marinette siguió a Luka dentro del barco, hasta su camarote.
Por supuesto que ella amaba ver cada una de sus prácticas, y era genial cuando podían reunir a todos sus amigos para presenciarlo pero, de vez en cuando, la multitud ruidosa y el alboroto podía empezar a ponerla nerviosa.

Luka era su salvavidas, su apoyo y su lugar seguro. Todo envuelto en un mismo encantador, dulce, comprensivo, sereno y ¿por qué no decirlo? guapo paquete.

Ella nunca podría agradecerle lo suficiente.

—Espérame un segundo —Luka pidió, ofreciéndole su cama con un gesto de la mano izquierda mientras dejaba su guitarra a sus pies con la derecha.

Marinette asintió, tomando asiento, ya bastante familiarizada con el lugar. Se relajó abrazando un almohadón y sintiendo el aroma fluvial y a cedro que predominaba en el lugar, al menos del lado de Luka. El lado de Juleka generalmente olía a su perfume favorito, Midnight poison.

—Aquí —Luka regresó con dos botellas de agua, ofreciéndole una.

Marinette recibió el artículo de su mano, dándole una sonrisa a cambio —Gracias... mon serpant —Luka se congeló en el acto, mirándola en silencio con ojos ensanchados, era un poco adorable, si querían la opinión de Marinette —tú... lo sabes ¿no es verdad?

Luka inhaló despacio, con los labios apenas entreabiertos, creando un sonido seseante —Sí... ¿Cómo es qué...?

—He tenido mucho tiempo para reflexionar y evaluar cosas que sucedieron últimamente —ella respondió con una sonrisa autocrítica —era un poco obvio, en retrospectiva, por qué tuviste que rebobinar el tiempo varias veces contra WishMaker.

Se detuvo para tomar un sorbo de la botella que él le había dado. Luka hizo lo mismo, pero sin apartar sus ojos de ella, preocupado por la dirección de tomaría esa platica.

Esperaba que ella se preocupara porque él supiera la identidad de ambos. No podía negar que descubrir que los héroes locales eran su preciosa musa y Adrien había arañado su pecho de una forma que nunca antes había sentido. Luka había decidido que apoyaría a Marinette en lo que su corazón deseara, pero ahora parecía que todo había dado un giro de 180 grados.
Porque Chat Noir siempre era quien insistía en que él y Ladybug estaban hechos el uno para el otro, y la mayoría de los parisinos lo apoyaba, emparejándolos en cada aspecto de la publicidad que podían... pero Ladybug siempre se había mantenido firme en que ella y Chat no eran ni serían una pareja.

Ahora, eso podría justificarse en que Marinette estaba muy enamorada de Adrien pero... ¿esa seguía siendo la realidad?

—Tu sonido ha cambiado mucho últimamente —Luka logró decir, después de que Marinette se quedara en silencio por un tiempo

Ella tarareó, mirando hacia la ventana, como si su mente estuviera muy lejos de allí —Muchas cosas han tenido que cambiar desde el desastre que fueron Risk y StrikeBack —ella respondió —Perdí la mitad de los miraculous en manos de Shadow Moth- es decir, Monarc —se detuvo y lo miró, antes de levantar una mano empuñada. Cuando la abrió, un familiar brazalete de serpiente reposaba sobre su palma —Voy a necesitar mucha ayuda para volver a equilibrar esta guerra.

Luka no dudó. Tomó el brazalete y lo deslizó en su muñeca. Ver a Sass siempre era agradable. El kwami lo saludó y luego se alejó a un lugar oculto, sabiendo que su portador y su guardiana aún tenían cosas que hablar —No me refiero solo a cambios estratégicos... tu corazón parece haber tomado algunas decisiones también —el músico añadió.

Marinette lo miró a los ojos con una sonrisa más suave —Supongo que sí... —ella se movió para reposar contra su hombro, y Luka lo supo.

Ella había dejado atrás esos sentimientos que tanto habían entorpecido su juicio, sus decisiones, e incluso algunas de sus otras relaciones. Ella estaba viendo más de cerca a su compañero héroe, y al civil bajo la máscara en una misma luz, de lo que podría darse cuenta. Cosa totalmente diferente de lo que pasaba con el rubio con traje de gato.

Bien... si esta era la decisión de Marinette, Luka estaba listo para hacer lo necesario para apoyarla —cuenta conmigo para lo que sea, Marinette.

La ojí-azul se movió para besar su mejilla —gracias, Luka.

Se permitieron unos minutos más en silencio relajante, antes de que el músico le preguntara si deseaba oír su nueva canción.

—Me encantaría...

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Como aclaraciones para este fic, creo que solo hace falta decir que es un semi-AU que deformará parcialmente la quinta temporada, y algunos hechos específicos de la cuarta.
Como ya podemos ver aquí, en esta historia, Gabriel no consiguió todos los miraculous que estaban en el yoyo. Aquí, seguimos la lógica original de la serie, que dicta que el yoyo debió desaparecer cuando Maribug se destransformó y no cuando se volvió a transformar, por lo tanto, Gabriel solo alcanzó a tomar la mitad de los miraculous, y Marinette aún tiene otra mitad.
¿Qué miraculous tiene cada uno? ¡Ah! Eso se sabrá con el pasar del tiempo.