Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo 55


Yoongi gimió y agarró su cabeza que parecía palpitar en un molesto e irritable dolor. Apretó sus ojos con fuerza, y luego, lentamente los forzó a abrirse.

Observó a su alrededor desorientado antes de que recordara todos los sucesos del día anterior.

Con rapidez observó al lado de su cama con temor, pero Jimin no estaba.

Un malestar peor que su resaca se adueñó sobre su pecho, cerniéndose sobre su corazón al despertar sin la somnolienta sonrisa de su omega.

Había hecho algo estúpido. Lo había arruinado otra vez.

—Joder... —pronunció masajeando su sien.

Cuando su teléfono comenzó a vibrar y sonar, una mueca de dolor surcó entre sus labios mientras lo sacaba del bolsillo trasero de su pantalón.

¿Cómo había llegado a la cama?

Observando las llamadas perdidas de Namjoon, frunció el ceño y cortó la llamada entrante.

Inmediatamente volvió a tener una llamada de la misma persona y el alfa sabía, que Namjoon no le iba a dejar en paz hasta que le contestara.

—¿Qué? —pronunció con voz rasposa.

Eso mismo me pregunto yo, ¿vas a venir a trabajar o no? —cuestionó y Yoongi cerró sus ojos.

Aunque quería ir a resolver el caso, no podía sin antes pedir perdón y arreglar las cosas con su pareja, no pensaría en más que Jimin hasta que pudiera arreglarlo.

—No iré —pronunció levantándose de la cama—. Lo arruine otra vez —anunció sabiendo que el contrario entendería a qué se refería.

Namjoon se tomó unos segundos procesando esas palabras para finalmente suspirar.

¿Qué hiciste esta vez? —preguntó.

—Yo... No quiero hablar de ello ahora —respondió, buscando a su pareja por cada habitación del departamento.

Bien, como quieras —resopló—. Pero arregla las cosas antes de que Chanyeol y los demás se enteren —advirtió cortando la llamada.

Volviendo a guardar su celular, Yoongi entró en la habitación de Hoseok y cerró sus ojos al sentir el aroma de su pareja ahí.

"No durmió conmigo" pensó derrotado, era obvio que no lo quería cerca.

Sentándose un momento en la cama, el alfa se esforzó en recordar qué era lo que había pasado luego de emborracharse, su memoria se volvía algo borrosa luego de salir del departamento.

Recordaba haber dado varias vueltas en la calle hasta que finalmente se detuvo en una tienda, compró algunas botellas de alcohol de diferentes marcas para finalmente sentarse frente la puerta del departamento para beber.

Cuando había bebido la última botella... Él... Había entrado finalmente.

Entonces... Jimin lo había ayudado a ir a la cama y...

"No sé si quiero ser padre" la frase golpeó con fuerza su mente provocando un agudo dolor.

La había cagado hasta el fondo, como siempre.

Siendo así no era sorprendente que Jimin no estuviera en el departamento, incluso llevándose a Hoseok y su gata.

Cerrando sus ojos por un momento, Yoongi respiró profundamente y luego comenzó a moverse.

Tenía que hablar con Jimin, tenía que disculparse por la forma en que se había expresado finalmente, porque... Su miedo había sido sincero al enterarse de las nuevas noticias, pero su reaccionar...

Había reaccionado como la mierda con la noticia que a muchos le alegraría. Había abandonado a Jimin cuando este también tenía miedo, aun cuando su omega le había pedido que se quedara y hablara con él.

Estúpidamente había dejado que otra vez su pasado nublara su mente y se cerró.

Jodida mierda. ¿Por qué tenía que ser tan estúpido?

"¿Y si Jimin no me perdona?" se preguntó entrando en su baño.

Observando su reflejo en el espejo, Yoongi negó con su cabeza, no dispuesto a perder lo único que bueno que le había pasado en su vida.

Abriendo el mueble, se tomó unas pastillas para el dolor de cabeza y rápidamente se desnudó para tomar una helada ducha que le terminara de despertar por completo.

Ya vestido, se dirigió a la cocina por un café cargado y algo liviano para comer.

Observó la hora y torció sus labios al contemplar que era más de medio día.

Jimin seguramente había ido a la casa de su hermano, por lo que tendría que ir a verlo antes de que Chanyeol llegara del trabajo. 

Tenía más posibilidades de entrar y hablar con su omega si estaba solo Baekhyun en la casa que estando Chanyeol.

(***)

—Tío Minnie, papá dice que ya es hora de almorzar —aviso Taehyung, observando algo preocupado al omega que seguía en la misma posición desde que había llegado del jardín infantil.

—Le puedes decir a papi que no tengo hambre, ¿por favor? —pidió Jimin intentando regalarle una sonrisa a su sobrino.

—No quisiste tomar desayuno, Hyung... Y ayer tampoco comiste en todo el día —le recordó Hoseok preocupado.

Con el tema de las pruebas y examen de sangre, Jimin solo había bebido agua durante todo el día anterior, demasiado preocupado y ansioso para probar un bocado.

Juntando sus cejas, Taehyung se acercó al mayor y colocó su pequeña mano en la frente de Jimin.

—¿Estás enfermo, Minnie? —preguntó preocupado.

—No TaeTae, solo tengo sueño —mintió cerrando sus ojos.

—Entones... ¿Comida no? —preguntó.

—Tal vez en un rato más —respondió.

—TaeTae —llamó Hoseok—. Puedes decirle a tu padre que Jimin comerá después —pidió acercándose a la cama.

—¿Y tú? —preguntó observándole.

—Yo sí, pero primero quiero hablar con Minnie —pidió.

Observando a su tío algo triste, Taehyung asintió con su cabeza y se inclinó para besar la mejilla de Jimin antes de salir de la habitación.

Cerrando la puerta, Hoseok se sentó al lado del mayor.

—Hyung, por favor... Tienes que comer algo —pidió y colocó suavemente su mano sobre el abdomen del omega—. No puedes dejarle sin comida a él o ella también —susurró.

Jimin negó dándose vuelta—. No puedo comer ahora Hobi, lo vomitaré —aseguró con tristeza—. Solo déjame dormir un poco más y te prometo que comeré algo cuando despierte —pidió.

Hoseok suspiro y asintió con su cabeza con pesar.

—Está bien —respondió acariciando su cabello antes de levantarse y salir de la habitación, cerrando la puerta detrás de él.

—¿No quiere? —preguntó Baekhyun cuando Hoseok volvió solo a la cocina.

—Dijo que después —respondió tomando asiento donde el mayor le había señalado.

—No conseguirá nada no comiendo por un mal de amor —refunfuño Bae.

—¿Mad de amor? —preguntó Taehyung—. ¿Qué es eso? ¿Es algo que comió y le hizo mal? ¿Por eso Minnie hyung etá enfermo?

Baekhyun asintió.

—Es una enfermedad que solo Yoongi puede ayudar a sanar —respondió su padre.

—¿Y dónde está el Hyung ogro? —preguntó—. Él tiene que veir para cuidar de Minnie —exclamó juntando sus cejas enojado.

—Yo también espero que venga —pronunció Hoseok observando su comida.

—Come Hoseok, tu tampoco ganas nada no comiendo por el problema de esos dos —advirtió el omega mayor.

—Lo sé... Pero... —suspiró y observó a la pequeña bebé en su cochecito antes de observar su comida.

—No te preocupes, él vendrá por Jiminnie —aseguró y Hoseok en verdad deseó que fuera así.

Cuando terminaron de comer, la puerta fue tocada casi desesperadamente.

—Te lo dije —le sonrió Baekhyun, dejando los trastes sucios en el lavavajillas—. Yo voy, esperen aquí —advirtió.

Saliendo de la cocina sin esperar respuesta de los dos menores, fue a la entrada y abrió la puerta encontrándose de frente con Min Yoongi.

Cruzando los brazos sobre su pecho le observó con sus ojos entrecerrados.

—Se encerró en la habitación desde que llegó y no ha querido comer nada, solo ha estado llorando en silencio —anunció.

—Es mi culpa —murmuro culpable.

—Lo sé, y será mejor que lo arregles antes de que mi esposo llegue u olvídate de tener otra oportunidad para arreglarlo —advirtió.

Sin decir más palabras, volvió al interior de su casa.

Entrando, los ojos de Yoongi se posaron inmediatamente en la puerta que sabía que estaba su pareja.

—Será mejor que cudes de tío Minnie, él etá enfermo —advirtió Taehyung cuando se encontró con el alfa.

—Vamos Tae, debemos dejarle a solas para que eso suceda —pronunció su padre, apareciendo con un bolso sobre su hombro.

Seguido de él, iba Hoseok empujando el cochecito donde iba la pequeña bebé.

—Tienes hasta que mi marido llegué —volvió a recordar antes de salir de la casa con los tres menores.

Respirando profundamente, Yoongi se dirigió a la habitación donde se encontraba su pareja.

Abriendo la puerta, contempló en la cama la pequeña figura de su omega dándole la espalda.

Con cuidado, volvió a cerrar la puerta y se acercó a la cama, donde se sentó y seguido volvió a recostar abrazando delicadamente el cuerpo de su pareja.

—¿Qué haces aquí? —preguntó Jimin en un murmullo, sin moverse.

—Lo siento, no debí de reaccionar así —pronunció abrazándolo con más fuerza.

—¿Reaccionar cómo? —pregunto cansado—. Tú no reaccionaste Yoongi, y ese fue el problema. Preferiste guardar silencio e irte a beber para después volver todo borracho al departamento. ¿Qué hubiera pasado si hubieses tenido un accidente?

—No bebí en ningún bar, compré y me lo bebí fuera del departamento —reveló pero Jimin no respondió nada—. Lo siento bebé, en serio, por favor perdóname —rogó.

—¿Por qué hacerlo? —preguntó el omega observando fijamente la pared frente a él—. Sé que tu pasado fue duro y aún te atormenta, pero pensé que podrías confiar lo suficiente en mí como para hablar... Pero ayer no fuiste capaz de decirme cómo te sentías al respecto sin que tu cuerpo estuviera lleno de alcohol, ¿realmente confías en mí? Porque sinceramente... Yo no lo veo así y no quiero que estemos juntos si...

—No. —exclamó apretando con fuerza el delicado cuerpo mientras se colocaba de espalda y arrastraba a su pareja sobre él—. Por favor, no digas esas cosas.

—¿Y qué quieres que te diga? —susurró—. ¿Crees que a mí no me duele solo el mencionar la posibilidad de alejarnos? Claro que sí, me quema y destroza pero... Tengo un bebé dentro de mí, Yoongi, y eso es algo que no se puede borrar, yo no lo haré y si me haces escoger...

—¿Pero por qué crees que yo haría algo así? —pregunto exaltado y dolido.

—Tú mismo me dijiste que no sabías si querías ser padre, y cuando te di la noticia reaccionaste como si yo lo hubiese planeado, como si hubiese quedado embarazado porque yo quería —le recordó enojado.

Quería alejarse pero también quería sentir el cuerpo y aroma de su alfa, estaba tan enojado por ello.

—Mierda, tú también sabes que no estoy preparado para ser papá Yoongi, hace solo unos días me metí en problemas por mí actuar y tú tuviste que ir a rescatarme. ¿Cómo se supone que cuidaré de otra vida si soy así? —exclamó volviendo a llorar.

—Lo siento bebé, perdona... Fue una idiotez que siquiera pensara que lo hiciste a propósito —pronunció presionando sus labios contra la cabeza del menor, escuchando con dolor sus sollozos—. Pero eso no significa que quiera que te... Deshagas del bebé... Nuestro cachorro.

—Pero si tú dijiste...

—Lo sé, pero estaba borracho —intentó excusarse.

—Dicen que los borrachos siempre dicen la verdad —pronunció sombrío.

—No te voy a mentir, yo en verdad no sé si puedo ser uno —aceptó—. Solo mírame, cosa corta. Nunca tuve una figura paterna en mi vida, nunca tuve una familia. Abandoné sin pensarlo dos veces a esos niños cuando tuve la oportunidad... ¿Cómo se supone que seré un buen padre? —cuestionó sintiendo un ardor en sus ojos por sus lágrimas retenidas.

—¿Entonces yo qué, Yoongi? Yo soy un completo desastre como adulto, actúo sin pensar, hago de un drama hasta la cosa más mínima, soy terco y no tengo paciencia... ¡Ni siquiera sé cocinar! —exclamó—. ¿Cómo se supone que voy a cuidar una vida más pequeña? Apenas puedo conmigo mismo... Yo tampoco soy material para padre —exhaló de forma temblorosa.

—Pero yo no tengo ese derecho —dijo finalmente, con un tono tan doloroso que logró que Jimin le mirara.

—Por qué tu... —suspirando, le observó con dolor—. Tu pasado no puede siempre manejar e influir en tu futuro, Yoonie... Tú tienes tanto derecho como yo a ser padre, porque ninguno fue culpable de lo que nos sucedió —dijo con una ternura que golpeó el corazón del alfa.

El silencio volvió a invadir la habitación mientras ambos simplemente se abrazaban, tratando de asimilar todo.

—No vuelvas a mencionar el alejarte —pidió el alfa—. Nunca más, por favor... Tú te has vuelto en mi única razón de seguir adelante —confesó.

—No sé qué hacer... Yoonie... Estoy tan aterrado y perdido como tú —murmuró, acurrucándose más en el cuerpo de su pareja.

—Entonces solo tendremos que resolverlo juntos, aprender juntos —pronunció con una profunda respiración, no dispuesto a rendirse y dejar que su pasado mandara sobre su futuro, Jimin tenía razón en ello.

Con algo de fuerza, Jimin apoyó sus manos en el pecho del mayor y se alzó para verle a los ojos bien.

—Pero quiero que me prometas que no te volverás a cerrar cuando suceda algo —pidió—. Realmente odié la sensación que me produjo luego de que me hablaras solo cuando estuviste borracho... Me sentí como si no confiaras en mí.

—No bebé, no es que no confíe en ti —aseguró—. Pero nunca he tenido a alguien a mí lado hasta que llegaste tú, hablar de mis sentimientos son cosas que... Aún me cuesta.

—¿Entonces qué? ¿La próxima vez que te diga algo e intentes escapar para beber alcohol tengo que atraparte y encerrarte en nuestra habitación y obligarte a hablar? —cuestionó arqueando una ceja.

—... No es una mala idea —dijo por fin sacándole una pequeña sonrisa al menor.

—Tonto —pronunció permitiendo que su alfa lo besaría castamente antes de esconderse en su cuello—. ¿Qué vamos a hacer ahora? —preguntó con incertidumbre.

Realmente era un terreno totalmente nuevo para ambos, uno que recién estaban asumiendo.

—Lo que ya dije, aprender a ser padres —respondió—. Ambos estamos aprendiendo toda esta cosa de parejas y hasta el momento vamos bien.

—Al menos tenemos nueve meses antes de que nazca —pronunció Jimin más relajado ahora que habían arreglado las cosas y Yoongi parecía aceptar su bebé.

—Tendremos tiempo para hacernos la idea del nuevo integrante, al menos tenemos a Hoseok de nuestro lado que parece ser más maduro que tú —bromeó.

—Oye —reclamó—. Hobi también es más maduro que tú también —refunfuño.

Y Yoongi rió bajo, volviendo a rodar para estar de lado, con su pareja frente a él.

Observándose el uno al otro, ambos sonrieron y se acercaron para compartir unos besos perezosos y tiernos.

—¿Tienen hambre? —preguntó colocando su mano sobre el plano abdomen de su omega.

Donde una pequeña vida estaba creciendo.

—Quiero dormir un poco primero —pidió acurrucándose más cerca—. Anoche no pude dormir realmente y estando aquí no podía hacerlo si tú estabas lejos.

—Duerme un poco entonces, cuando despiertes comeremos algo porque ahora no puedes saltarte ninguna comida —advirtió cerrando sus ojos, dormir un poco con su pareja le ayudaría con su dolor de cabeza también.

—Me gusta escuchar como ya te comienzas a preocupar por nuestro bebé —susurro Jimin, quedándose dormido.

—Es tuyo y mío, por supuesto que me voy a preocupar de él o ella —pronunció—. Discúlpame otra vez por haber reaccionado tan estúpidamente —pidió.

—Ya duerme Yoonie... Todo pasó y estamos juntos en esto —balbuceo y el alfa sonrió.

Realmente se había ganado la lotería con su pareja.


Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro