Capítulo 26
Manteniendo cierta distancia, recargado en la pared con sus brazos cruzados sobre su pecho, Yoongi no pudo disimular su mueca mientras observaba a su alrededor sintiéndose casi... Atrapado, enjaulado e incómodo.
Aunque no odiaba los hospitales, tampoco es como si estos fueran de su total agrado. Por el ambiente sentía que enfermaban más a uno en vez de mejorarlos.
Y su olor era otro punto, provocaba el deseo de tapar o apretar su nariz solo para no sentir el fuerte aroma de limpieza y medicamentos que rondaba a su alrededor.
Sacudió su cabeza y observó a Jimin conversar con Jin junto a su pareja. Podía sentir la mirada de Namjoon a momentos y sabía que este lo iba a seguir acosando hasta que le diera una respuesta a su pregunta.
Pero sinceramente... No tenía una.
No sabia que hacer, nunca se había encontrado en este tipo se situación. Sabía que Jimin había llegado a él y no podía negar el fuerte deseo, casi primitivo, que tenía por mantener protegido al omega.
¿Quería irse?
No lo sabía a ciencia cierta y esto le estaba provocando un dolor de cabeza.
Por eso siempre había mantenido la distancia con las personas, era mucho más fácil a la hora de tomar decisiones.
Sonrió cuando el menor golpeó el brazo del alfa al percibir que Namjoon no le dejaba de mirar de forma no muy amigable.
Cuando dos personas más llegaron al pequeño grupo, Yoongi pudo reconocerlos como los padres de los hermanos Park. Jimin era bastante similar en contextura con su madre pero tenía algunos rasgos de su padre, al igual que Chanyeol.
Se enderezó bajando sus brazos y su cuerpo tensó cuando Jimin volteó a verlo cuando Jin lo señaló. Sabiendo que el omega iba a estar bien con el otro alfa ahí, Yoongi malditamente escapó como un cobarde al intuir que el menor parecía querer presentarlo a sus padres.
Por supuesto que no.
Salió en lo que parecía ser un largo pasillo que conectaba dos edificios, los grandes ventanales a lo largo y ancho le daba perfecta vista a la ciudad de afuera, el centro de Seúl.
Aprovechando lo vacío que estaba, se sentó en el suelo y observó perdidamente la vista frente a él, hasta que un pequeño cuerpo se sentó a su lado.
—¿No deberías de estar jugando con los otros niños? —pregunto el alfa mirando por el rabillo de su ojo al sobrino de Jimin.
Recordaba que el pequeño había estado jugando con los otros dos cachorros.
Taehyung subió sus piernas y las abrazo recargando su pequeño mentón en ellas.
—No me entiendem —murmuro y Yoongi podía saber que el cachorro estaba haciendo un gran esfuerzo por no llorar al escuchar su tono tembloroso.
—¿Por qué? —preguntó un poco confundido.
Había notado la pequeña distancia que había tenido el cachorro con todos, pero no era como si conociera al cachorro como asegurar algo.
Taehyung apoyó su frente en sus piernas, ocultando su cabeza. El mayor se encogió de hombros, él no iba a insistir y presionarlo tampoco al respecto.
—¿Creed que mis papis me seguirán dando amor? —susurró confundido y muy asustado.
Todo estaba cambiando para este cachorro con la llegada de la nueva integrante a su familia, y eso, le tenía asustado.
—¿Hum? —pronunció Yoongi volteando a verlo.
—Todos están aquí por ella, nadie se acuerda de mí —sollozó—. La van a querer más a ella ahora —alzó su rostro, mostrando sus ojitos llenos de miedo y algo de... Celos.
"Ugh... ¿Qué se supone que debo hacer con un cachorro llorando?" se preguntó el alfa contemplándolo sin saber qué hacer.
Era un tiempo desde que Yoongi se había acercado a un niño, por no decir que Taehyung había sido el primero después de un largo tiempo.
—¡Hasta tú la vas a querer más! —le acusó—. Como Minnie hyung —exclamó asustado.
—¿Por qué la querría más? ¿Has visto siquiera a un bebé? —cuestionó entendiendo que estaba sucediendo con el pequeño infante. El cachorro negó con su cabeza, limpiando sus lágrimas que no dejaban de caer—. Son feos, parecen abuelos de los arrugado que son algunos e incluso otros parecen pequeños aliens —arrugó su nariz.
Taehyung soltó una pequeña risita, siendose un poco mejor mientras tallaba uno de sus ojos con su pequeño puño. Era la primera vez que escuchaba a alguien referirse así de su hermana.
Todos decían que sería linda, una princesa, una gran mujercita y bla, bla, bla...
—Ya deja de llorar, todos te seguirán queriendo aunque el pequeño alíen esté aquí ahora —le aseguró el alfa, revolviéndole el cabello. Al menos ya no estaba llorando—. Ve con los demás, deben de estar preocupados.
—No, se olvidaron de mí cuando papá aviso que mi hermanita ya está aquí —refunfuñó y su labio inferior volvió a temblar como si estuviera a punto de llorar otra vez.
Yoongi admitía para sus adentros que soltó un suspiro de alivio cuando Jimin apareció en el pasillo. Él realmente no sabía cómo consolar a alguien, y menos sabría hacerlo con un cachorro... Ya no recordaba cómo hacerlo realmente.
—Mira —señaló con su cabeza el final del pasillo.
Con su puchero presente, el menor observó y contempló a su tío Minnie correr hacia ellos. Sus rodillas chocaron contra el suelo mientras tomaba el pequeño cuerpo del cachorro.
—Por Dios Taehyung, no te vuelvas a ir sin avisarle a nadie —regaño el omega—. ¿Sabes lo preocupados que nos tenías? Todos estaban buscándote.
—Mentiroso —chillo moviéndose hasta que estuvo libre, entonces fue hacia el lado del alfa y movió los brazos de Yoongi hasta acomodarse detrás de ellos, sentándose en su regazo.
Jimin le observó con el ceño fruncido, el mayor se encogió de hombros, dejando que el cachorro lo usara como escudo por ahora.
—¿Por qué dices eso, bebé? —preguntó con tono suave, sentándose al lado de Min.
—Todos se olvidaron de mí cuando avisaron que llegó el allien —acusó.
—¿Alíen? —preguntó Jimin confundido.
—¿Que? No me digas que no crees que parecen uno —cuestionó Yoongi un poco divertido.
Jimin resoplo, debió de imaginárselo—. Nadie se olvidó de ti Tae, todos comenzamos a buscarte a penas te perdimos de vista.
—El niño cree que nadie lo querrá ahora que el otro bebé llegó —informó el alfa.
—No le digas —refunfuñó Taehyung golpeando el pecho de Yoongi.
—¿Cómo puedes pensar eso Tae? —exclamó Jimin. El cachorro le contempló resentido, con miedo—. Tú siempre serás mi bebé, mí consentido TaeTae, al igual que el de todos.
—¿En serio? —preguntó mirándolo con desconfianza.
Inclinándose Jimin movió los brazos del alfa, tomando a su sobrino entre sus brazos se acomodó él sobre el regazo del alfa y seguido acomodó al cachorro en el suyo.
—Tú eres y siempre serás mí bebé —aseguró besando su cabeza—. Sin importar que tú hermanita ahora esté con nosotros.
—Hey, acaso creen que soy una silla —pronunció Yoongi, siendo ignorado.
—¿No la querrás?
—Claro que sí, pero tú tienes un lugar mucho más grande en mi corazón —le aseguró.
Taehyung luchó por ocultar su infantil sonrisa, pero no pudo.
—Claro que él no te querrá más que a mí —se burló Yoongi rodeando el cuerpo de ambos. Un poco más relajado y... Feliz de que el pequeño ya no estuviera triste.
—No, me quiere más a mí, ya lo dijo —exclamó sonriente, sacándole la lengua.
Y este era el cachorro que ambos mayores conocían, los dos le sonrieron suave.
—¿Taehyung? —llamó Chanyeol, el alivio cruzó por su rostro cuando lo distinguió en los brazos del omega.
—Ve con papá —animó Jimin, colocando sobre sus pies a su sobrino.
Algo indeciso camino lentamente hasta donde su padre, observando de vez en cuando a la pareja sentada aun en el suelo.
—Gracias —susurró el menor observando a su hermano abrazar a su sobrino y seguramente tener la misma conversación que él.
Se sentía un idiota por no haberse dado cuenta de las dudas y miedo que tenía su sobrino.
—¿Por qué? Yo no hice nada, él vino a mí por si solo —restó importancia el mayor.
—Gracias —repitió ignorando lo que había dicho.
Jimin sabía que no había sido algo sin importancia como lo hacía parecer Yoongi, no después de lo que este le había contado y no después de la sutil distancia que había puesto con su sobrino desde aquel día en que se quedaron en la casa de su hermano.
—¿Por qué te alejaste? —preguntó recordando como se había retirado justo cuando sus padres le habían preguntado por él.
—Necesitaba algo de aire —respondió simplemente.
—¿Y no es porque aparecieron mis padres? —señalo sabiendo la respuesta.
—No... —mintió Yoongi. El menor arqueó una ceja.
—Cool, porque Jin se encargó de decirle a mis padres que estaba saliendo contigo y quieren conocerte —sonrió inocente, inclinando su cabeza hacia atrás para observarlo.
—Pero nosotros no... —juntó sus labios.
Uh... ¿Por qué ahora no podía decirlo tan fácilmente como antes?
¿Por qué no podía decir que lo suyo era falso? ¿Que solo fingían?
—Solo son mis papás —aclaro suavemente Jimin, ignorando lo que había callado a mitad de camino—. No te van a morder, puede que te interroguen pero nada comparado a mi hermano y su esposo... Creo —rió cuando el alfa resoplo.
—Por qué no te creo —murmura Min corriendo un morado mechón tras la oreja.
Jimin sonrió sintiendo mariposas en su estómago por ese simple gesto. Estaría mintiendo si dijera que no estaba emocionado por presentarle a Yoongi sus padres, porque lo estaba, y mucho.
Quería que el alfa conociera a sus padres, quería que Yoongi conociera la calidez y felicidad que había en una familia, su familia.
—Vamos, si no dejas que te conozcan aquí, lo más seguro es que nos acosen en el departamento y se lleguen hasta auto invitar a quedarse para hacerlo —mintió ya que sus padres se quedarían en la casa de su hermano con Taehyung hasta que a su cuñado le dieran de alta, pero Yoongi no sabía aquello por lo que servía perfecto como chantaje.
—Bien, pero no esperes que sea todo sonrisas —gruñó levantándose junto al omega.
Por supuesto que no, porque entonces no sería el hombre de quien Jimin se estaba enamorando tan perdidamente.
—Mamá, papá, él es Min Yoongi, mi novio. Yoongi, él es mi papá, Chung-ho y mi mamá, Yang Mi —presentó ansioso Jimin, sin soltar la mano de Min.
—Es bastante guapo —asintió la madre de Jimin, como si ya lo hubiera aprobado mientras seguía observando toda la altura del hombre a su lado.
—Yah, mamá —se quejó el menor, frunciendo el ceño mientras se ubicaba más cerca de Yoongi.
Al mismo tiempo que su padre jalaba del brazo de su madre y la abrazaba celosamente.
—Tengo ojos chicos, y ustedes no pueden negar que el alfa que escogió Minnie es guapo —señalo risueña.
Yoongi ya podía ver de quién heredó la sonrisa Jimin.
—Si pero Yoonie es mío —exclamó Jimin dando media vuelta para abrazar celosamente la cintura del alfa, recargando su cabeza en el hombro.
—Un gusto conocerlos —pronunció Yoongi mientras rodeaba a Jimin con sus brazos, correspondiéndole el abrazo.
—No es un hombre de muchas palabras, ¿cierto? —pregunto esta vez el padre del menor.
El alfa mantuvo sus labios cerrados mientras se encogía de hombros, sin saber que hacer o cómo actuar frente a los padres del menor.
Los nervios que recorrían su interior eran ciertamente desagradables debidos a la magnitud.
—¿Hace cuánto están saliendo? —pregunto la mujer con curiosidad.
—Sus semanas —respondió la pareja al uniso.
—¿Y cuándo pensaban decirme jovencitos? —arqueó una ceja.
—Ugh... ¿Cuando Chanyeol dejara de acosarnos? —respondió Jimin.
—Tiene sentido —asintió el hombre mayor, satisfecho con la respuesta—. Dime, ¿te gusta el fútbol?
—Papá —advirtió Jimin.
—Prefiero el básquetbol o béisbol —respondió honestamente, y algo en él se relajó cuando el padre de Jimin le sonrió con algo de aprecio y orgullo.
—Ya me gusta este chico, no lo sueltes Minnie —comentó el alfa mayor.
—Bien hecho Yoongi, ya te ganaste al suegro —rió Jin tomando en brazos a su hija mientras que su pareja hacía lo mismo con su otro hijo.
La atención de la mayoría se posó en Chanyeol cuando volvió a aparecer con su hijo en brazos.
—¿Qué fue exactamente lo que hice? —le preguntó Yoongi en un susurró al omega.
—Papá odia el fútbol pero es un adicto al béisbol —susurró Jimin—. Pasaste la primera y única prueba de mi padre, él también se la hizo a Namjoon cuando se hizo amigo de mi hermano.
—Baekhyun está en la habitación 23 b en el quinto piso, el doctor revisará a Jennie y luego la llevará a la habitación —anuncio Chanyeol.
—Jennie es un bonito nombre —le susurró Lisa a su padre mientras todos comenzaban a caminar hacia el elevador.
Jimin y Yoongi se hicieron a un lado cuando un hombre con su carrito de limpieza salió del ascensor.
—Lo siento —se disculpó el hombre cuando pasó a llevar a Yoongi.
—No, está bien —le aseguró el alfa mientras le ayudaba a recoger algunas cosas de limpieza.
—Se le queda esto —anuncio Jimin extendiéndole un trapo—. ¿No te pegó fuerte? —preguntó el menor observando a Yoongi.
—No, fue un tope —le aseguró guiándolo a subirse al ascensor junto a los demás que le esperaban.
Cuando llegaron a su destino, todos entraron en la habitación para conocer la llegada de Jennie.
Ese día, mientras Yoongi observaba a las personas en la habitación, por primera vez... Deseo ser parte de algo, de una familia.
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Recuerdo haber leído un comentario de un copito que estaba de cumpleaños hoy, pero no recuerdo en cual historia Jsjsjsjjs Bueno ¡Feliz cumpleaños! <3
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