Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo 22


—¡Noo! ¡No lo hagas! ¡Señor peludito! —gritó Jimin viendo al minino corretear cerca de sus pinturas aún húmedas.

Cuando el omega se acercó a tomar al pequeño animal ya era demasiado tarde, el desastre ya se había creado.

El gato maulló y comenzó a restregar su pequeño cuerpo en las rodillas del pelimorado cuando este se dejó caer y observó su desastre.

—Te dije que tener un gato era complicaciones —soltó el alfa contemplando lo mismo que Jimin.

—Mis pinturas —murmuró con un puchero.

El minino volvió a maullar y Jimin suspiró alzando su mano para acariciar a la pequeña pelusa amarillenta, sus patitas manchada con pintura ensuciaron su pantalón cuando apoyó sus pequeñas patas delanteras en el.

—Ahora tendré que bañarte —le regaño con una pequeña sonrisa al gato, que como si entendiera lo que su dueño dijo, empezó a alejarse dejando la marca de sus patitas en el suelo.

Yoongi contempló desde el sofá como el menor comenzaba a limpiar todo. De un momento a otro el omega se quedó mirando un punto fijo en el suelo y luego salió corriendo.

Extrañado se encogió de hombros ya acostumbrado al singular comportamiento del menor, estaba seguro de que ya no había salvación para él. Volvió a tomar su teléfono celular a la espera de que Namjoon le llamara.

—¡Yoongi! —gritó a todo pulmón Jimin mientras volvía a la sala y se tiraba sobre el alfa logrando que quedara recostado sobre el sofá con el menor encima.

—Joder, ¿por qué gritas? —juntó sus ceja mientras contemplaba la infantil sonrisa de Jimin.

El omega no le respondió, solo le besó con felicidad y pudo admitir, que soltó un suspiro mental cuando en tan solo segundos el alfa le correspondió con gusto.

—Tienes pintura en tu rostro —rió Jimin sentándose a horcajadas sobre el regazo del mayor.

Solo entonces, Yoongi se dio cuenta de las hojas que Jimin tenía en sus manos.

—¿Qué hay con eso? —señaló sentándose, permitiendo que sus manos vagaran hasta la cintura del menor.

—Esto, mi querido alfa, es lo que mi subconsciente me ha estado diciendo y no me había dado cuenta hasta ahora, pensé que podrían ser solo líneas sin sentido, pero no —sonríe orgulloso, robándole otro beso al mayor antes de levantarse y sentarse en el suelo.

Sorprendido, Yoongi contempló aún confundido a Jimin juntar sus hojas hasta que no quedó ninguna.

Observando el resultado final, Jimin ya no estaba tan emocionado como desde un principio, por el contrario, algo apenado observó a Yoongi mientras se levantaba.

—Lo siento, pensé que iba a ser algo más grande —rascó su frente observando el dibujo.

Pero el alfa no dijo nada, solo se levantó y contempló el dibujo de una detallada mano con el tatuaje de una mariposa.

Observo al omega que hacía muecas e inclinaba su cabeza de un lado a otro, enfurruñado por el resultado de su descubrimiento. El menor realmente había esperado algo más... ¿Impactante? ¿Sorprendente?

Pero esto le servía a Yoongi, posiblemente el psicópata ese tenía ese tatuaje en la mano y por ello Jimin lo dibujó con tanto detalle.

Tomó su teléfono móvil y capturó una fotografía para enviársela a Namjoon, pidiendo que colocaran más atención a las personas que tuvieran el tatuaje de una mariposa.

—Creo que podría tener una quemadura en su mano —anuncio Jimin observando fijamente su dibujo.

—¿Por qué lo crees? —preguntó interesado.

—Porque... —señala las hojas en el suelo—. Por alguna razón, siento que si lo llegara a pintar, bajo la mariposa haría la piel un poco más rugosa y con un color más oscuro y aquello solo significa que había una quemadura —explicó sin verlo.

—¿De qué color pintarías la mariposa? —el omega juntó sus cejas.

—Uhm... ¿Azul? Diferente... Diferentes matices de azul y... Negro...

—¿Y el resto de su piel? La que no está quemada —pregunto mientras le escribía a Namjoon lo que Jimin había añadido—. ¿Recuerdas? ¿Era pálida o morena? —presionó.

Frunció el ceño cuando no recibió respuesta y dejo de ver el mensaje de Namjoon para observar a Jimin. Maldijo al presenciar la sangre deslizarse por la nariz del menor mientras este veía casi perdido el dibujo en el suelo.

Apresurado fue hasta él e inclinó su cabeza hacia atrás mientras lo dirigía al baño.

—Detente por hoy, no intentes recordar —advirtió entrando en el baño de la habitación del pelimorado.

—Peroo... Era la primera vez que se podría decir que estaba recordando algo —refunfuño bajando su cabeza sobre el lavamanos.

La blanca baldosa rápidamente se manchó con sangre. El alfa inmediatamente afirmó el tambaleante cuerpo del menor, rodeando su cintura con su brazo.

—Estoy un poco mareado...

Yoongi le observó confundido y luego recordó lo que le sucedía si veía mucha sangre.

—Cierra tus ojos, no veas la sangre —ordenó y le complació cuando sin dudar ni un segundo el omega obedeció.

Dio el agua de la llave e inclinó un poco más adelante el pequeño cuerpo delgado, mojando su mano limpió la sangre en su boca y luego le enderezó volviendo a inclinar su cabeza hacia atrás.

Sin soltarlo de la cintura tomó una toalla pequeña y le remojo uno de sus costados, volvió a limpiar la nariz.

—Vamos, recuéstate en tu cama por un momento —pronunció guiándolo en todo momento—. ¿Aún estás mareado?

—Depende, ¿seguirás siendo dulce conmigo si digo que no? —pregunto con burla y luego sonrió.

—Dulce es lo que te voy a hacer si no me contestas bien —le gruñó presionando suavemente la porción blanda de la nariz.

Jimin suspiro y lentamente abrió sus ojos para volverlos a cerrar.

—Aún sigo algo mareado —murmuró.

Yoongi le contempló en silencio, limpiando suavemente con la toalla húmeda la sangre restante y hasta, las manchas de pintura en su rostro.

Lentamente alejó su mano de la nariz y esperó.

—¿Ya estoy bien? —preguntó el menor abriendo sus ojos.

—Así parece ser —asintió observándolo fijamente, a la espera de que el sangrado nasal volviera.

Pero eso no pasó y sus ojos se trasladaron a los rellenos labios del menor. Inclinándose mordió suavemente el superior antes de juntar sus labios.

Jimin jadeó e inmediatamente subió sus manos al cuello del alfa, enredando sus dedos en el cabello.

—No contestes... —pidió cuando el teléfono de Yoongi comenzó a sonar desde la sala donde lo había olvidado.

—Debe de ser Namjoon —recordó alejándose con pesar, mordió suavemente el mentón del omega y se alejó retirándose de la habitación.

Suspirando Jimin se sentó lentamente en la cama y esperó, cuando la sangre no comenzó a bajar de su nariz se levantó y siguió al alfa a la sala de estar.

Frunció el ceño al verlo conversando en su cocina, preparándose un sándwich.

—¿Me hiciste uno? —pregunto en un susurro, él también tenía hambre.

—Está bien, adiós —cortó la llamada quitando el teléfono que había estado afirmando entre su hombro y cabeza—. ¿Por qué lo haría? —contestó dándole un mordisco a su sándwich.

—Porque soy lindo —con sus dedos índices apuntó cada una de sus mejillas con un tierno mohín mientras inclinaba ligeramente su cuerpo a la derecha.

—Respuesta incorrecta, y te ves horrible —mintió sin problemas, admitiendo interiormente que el menor si era tierno cuando quería.

Sonrió al ver la mirada ofendida de Jimin, pero lo ocultó dándole otro mordisco a su sándwich. Si admitía la verdad, solo le elevaría el ego al pequeño y caprichoso omega, más alto de lo que ya lo tenía.

—Entonces hazlo como el deber de todo novio —refunfuñó cruzando sus brazos sobre su pecho.

El alfa masticó lentamente, observando fijamente al pelimorado, una duda un tanto incómoda surgió en su mente.

—Si sabes que lo nuestro —señala a ambos— es solo sexo sin compromiso, ¿no?

Auch, eso si dolió.

Jimin hizo un puchero, el idiota no tenía porque recordarle ese detalle tan innecesario y doloroso.

Y tan dulce que había estado siendo hace unos minutos atrás. Aquello solo le recordaba que tenía que esforzarse por enamorarlo.

—Claro que lo sé —bufó ocultando tal vez un poquito de resentimiento ante su recordatorio—. Por qué querría salir con un ogro que no es capaz de decirme algo lindo, merezco a un alfa que sea digno de mí. Tampoco eres tan apuesto —mintió.

—Repítelo hasta que te lo creas —se burló Yoongi, riendo sueltamente.

Ocultando el alivio y dolor que sintió con la respuesta del omega.

—Ripitili histi qui ti li criis —repitió infantilmente.

—Y según tú no eres un mocoso —Jimin gruñó y fue directo al refrigerador para encontrar que no había nada—. Mm si, se me olvidó decirte que no hay nada más.

Jimin volteó a verlo arqueando una ceja, observó la mitad del sándwich e inmediatamente se lanzó contra el alfa por el. Lastima que Yoongi era más rápido y fuerte.

—Dámelo, no seas egoísta Hyung —refunfuño estirando su brazo en busca de la mitad del sándwich en poder del contrario.

El muy maldito estaba sacando provecho de su altura y tenía la comida en alto, logrando que Jimin diera saltos para intentar atraparlo.

—Te doy un beso si me lo das —propuso.

Yoongi le observó y sin problema alguno lo besó sacudiendo su pequeño mundo, se alejó con una sonrisa arrogante y mordió su sándwich sin darle.

Frustrado por el engaño, Jimin decidió usar psicología inversa.

—Está bien, no lo quiero —gruño llenando de aire sus mejillas mientras apoyaba todo el peso de su cuerpo en su pierna derecha.

—Pues yo sí —respondió comiéndoselo en dos grandes mordidas.

—Ojalá y te ahogues por egoísta y tacaño —chillo con indignación, saliendo hecho una furia de la cocina para diversión de Yoongi, quien sí se ahogó después de todo.

Cuando Jimin volvió a la cocina con un cambio de ropa limpio, alzó una ceja al ver el rostro algo rojo del alfa mientras tomaba agua.

—A eso se le llama karma —se burló risueño, teniendo una apariencia angelical a pesar de ser en verdad un demonio.

Llenó de agua la fuente para su pequeña mascota y la otra con comida.

—Coincidencia —resopló por fin respirando bien—. ¿Vas a salir?

—Síp, tenemos que reponer la despensa y pagar el departamento —respondió observando a su gatito comer, después le limpiaría la pintura de sus patitas.

—¿Y tienes dinero? Porque recuerdo cómo te quejabas ayer de que no te pagaban hasta la próxima semana —señaló contemplando lo bien que le quedaba el cambio de ropa.

—Lo sé —suspira—. Por eso hice una llamada, y antes de ir al supermercado tenemos que pasar a un sitio —anunció tomando sus llaves y billetera.

No tomó su casco ya que sería mejor tomar un taxi, no se podía traer las comprar en la motocicleta del alfa después de todo.

—¿Qué? ¿Eres millonario y no me lo habías dicho? —preguntó siguiéndolo.

—No, pero soy un artista —le recordó esperándolo afuera.

—¿Y...?

Jimin sonrió con arrogancia—. Ya veras, solo procura tener tu boca cerrada.

Yoongi observó desconfiado como el pequeño omega se dirigía al ascensor.

—¿Una galería de arte? —preguntó bajándose del taxi junto al omega.

—Bueno, qué parte de que soy un artista no escuchaste —sonrió tomando la mano del alfa.

—En la que pensé que eras horrible y lo tenías como un hobby —mintió siguiendo al menor.

—Te tragaras tus propias palabras —aseguró Jimin con confianza, entrando en el edificio.

—¿Buscas a alguien? —pronunció Yoongi imitando a Jimin al observar a su alrededor.

—¡Jimin-ah! —gritó una voz femenina, acercándose a paso apresurado con dos hombres a sus espaldas.

La mujer usaba una falda entubada color crema y una blusa negra, una chaqueta estaba sobre sus hombros. Los dos hombres que le seguían usaban traje negro, dándose a entender que podrían ser guardias.

—Ella es mi representante y dueña de este esta galería —susurro Jimin antes de sonreír a la mujer—. Hola Shin-Hye.

—Dime Noona hermoso —corrigió cerrándole un ojo coqueta—. Ese color de cabello te queda precioso —halago tomando un mechón de cabello.

Yoongi arqueó una ceja y soltó la mano de Jimin para rodear su cintura, y le hizo retroceder un paso. No estaba muy contento con la cercanía de la alfa con Jimin, incluso su lobo tenía deseos de gruñir.

—Shin-Hye noona, él es Min Yoongi, mi alfa —presentó el pelimorado, recargándose en el cuerpo del castaño.

Al menos ahora sabía que Yoongi tendría celos si alguien le coqueteaba, aplastando su estúpidas palabras anteriores sobre "solo sexo" porque si así fuera, no debería de sentirlos.

—Esa es tu forma de rechazarme —dramatizó la mujer con un puchero. Jimin rió negando con su cabeza—. Bueno, no me daré por vencida —advirtió observando altiva a Yoongi.

Sí, definitivamente a Min no le gustaba aquella mujer que amenazaba con quitarle lo suyo.

"¿Lo mío?" repitió algo sorprendido.

—Un día pondré mi marca en tu hermoso cuello Jimin —aseguró la mujer alertando a Yoongi.

—Solo siéntate y espera, porque no lo dejaré nunca —gruñó el mayor sin contenerse.

Solo en pensar aquella posibilidad le enfureció. Jimin sonrió y tiró del rostro del alfa para besarlo castamente, emocionado.

—Soy tuyo alfa tonto —susurró y deseó que Yoongi entendiera la verdad de sus palabras.

—Ya lo veremos —pronuncio Shin-Hye observando a Jimin.

—No lo dejaré, él es mi especial —aseguró el omega, ignorando la mirada del mayor.

Shin-Hye se encogió de hombros y suspiró.

—Bien, retrocederé... Por ahora —sonríe—. Ahora hermoso, ¿cuál de todas tus pinturas quieres vender? Tengo ofertas por cada una y con una llamada está listo —pronunció con seguridad—. Dime, Yoongi... ¿Cuáles crees que son las pinturas de Jiminnie?

—Obviamente son todas —respondió con seguridad, sorprendiendo al menor.

—Okey, que sepas eso no significa nada —advirtió comenzando a caminar, sabiendo que los demás le seguirían.

—No me gusta —dijo Yoongi a Jimin, realmente no le importaba si los demás escuchaban.

—Es algo especial —respondió en un susurro—. ¿Cómo sabías que todas las pinte yo?

—Soy un observador —respondió encogiéndose de hombros, atrayendo más al omega cuando la mujer volteó a verles.

Definitivamente no le gustaba esa tal Shin-Hye. Y los celos que sentía no tenían nada que ver en ello, ni siquiera tenía celos en primer lugar, solo que...

Ella no le agradaba y listo.



_____________________________________

Ciertooo 

Feliz cumpleaños a cierto copito, como regalo te dedicare este cap! 

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro