Despues de ti: parte segunda
Amado amigo:
Embarga mi memoria con la intensidad de un rayo y la brevedad de un relámpago tu imagen agonizante aquel fatídico domingo en el que al final nos dejamos ir. Quisiera decir que el recordar el gesto que dibujo tu rostro me llena paz o poder describirlo siquiera con una palabra distinta a miedo... pero tu mas que nadie sabes que no es así. Lamento el no haber estado allí para verte partir y guiarte con mi voz por el camino hacia la luz pero viéndolo de otra forma veo que fue mejor asi porque de seguro de haber estado también me hubiera ido yo contigo tal como lo desee al llegar a casa y verte inerte en el patio.
Eras tu, seguías siendo tu... solo que ya no estabas. No contuve las ganas de tocarte para comprobar asi con mis temblorosos dedos que estabas tieso como la muerte, te había perdido y aunque me dolía la realidad desee con todas mis fuerzas que todo eso solo fuera un sueño. Me desgarrè en llanto y deje que las lagrimas me ahogaran pese a los intentos de quienes intentaban hacerme volver en mi.... y jamás volví.
Hoy recuerdo con el mismo sabor a azufre como transcurrían lentos los días de tu enfermedad, y aún sufro, recuerdo haberte visto envejecer en cuestión de días lo que no habías hecho en años; recuerdo verte sufrir y haber clamado al cielo sumergida al máximo en dolor que me llevarán a mi pero que a ti, pequeño dueño mio, te dejara vivir aunque fueran unos siglos mas y me entregue a la pena haciendo promesas desesperadas al cielo de todo lo que podría hacer, destinar mi vida entera a hacer el bien incluso, solo si me dejaban compartir el espacio en esta tierra contigo tan siquiera por unos instantes mas.
Doki se que no sería grato para ti escuchar mis penurias pues recuerdo que aun enfermo usabas tus ultimas fuerzas para tratar de animarme, perdóname donde sea que estés, perdona pero no puedo evitar sufrirte y que me duelas como me dueles. Intento no recordar cuando te llevaron para siempre, no sin antes prometer darte una digna sepultura; aun no comprendo porque no me dejaron ir o el porque nadie todavia a querido decirme en donde te tienen. Quizá ellos temen que vaya por ti o que te sufra mas, solo quieren que te olvide pero ¿Podría acaso yo hacer eso algún día? En verdad te digo que jamás podría: jamás.
Se que algún día volverás a mi y juró no dejarte ir ni aunque la vida amenasace con separarnos de nuevo... porque si no vuelvo a verte en vida ten por seguro que nos veremos en el seno de la muerte.
Hasta luego.......
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro