Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Serendipia



– Keith, ya no soy un niño pequeño–murmuró el castaño cerrando la puerta de la habitación con la llave.

–Puedo verlo... sé que solo han pasado dos meses, pero, ¿es posible cambiar tanto en tan poco tiempo?–preguntó el chico observando los movimientos del menor mientras se aproximaba.

–Solo he crecido unos pocos centímetros–dijo sonriendo Luka mientas se quitaba los zapatos sin desatarlos primero.

–También te cambió la espalda, es más ancha...–murmuró el mayor deslizando su mano sobre ella por encima de la camiseta– y tu voz, es más grave.

–Pues tú estás igual que siempre–exclamó el chico agarrándole la mano que seguía moviéndose por su espalda y empujándole sutilmente hacia el centro de la cama–Todo este tiempo... ¿me has echado de menos?–le preguntó el castaño acariciándole la mejilla con su nariz y respirando su olor.

–Mucho– murmuró Keith acostándose por completo sobre el colchón y permitiendo que el menor se acomodara sobre él– ¿Tú me has extrañado? ¿No me habrás sustituido por alguna universitaria, verdad?–bromeó el chico apoyando una de sus manos sobre la cara del pequeño.

–No he tenido tiempo para eso, no tuve tiempo para nada, creo que este es el primer momento que voy a poder descansar después de estos dos meses de exámenes, viajes y problemas familiares... –se quejó Luka suspirando y dejándose caer sobre el cuerpo de su novio.

– ¿Descansar? No cuentes con ello–exclamó el mayor de los dos poniendo a Luka bajo él y agarrándole la cara para obligarlo a mirarle a los ojos. Keith observó cada uno de sus rasgos con cuidado antes de deslizar su mano a su cuello y sus labios a su boca.

Luka con más rapidez de lo usual se desprendió de su camiseta y obligó al rubio a hacer lo mismo, antes de volver a unirse sobre la pequeña cama individual.

–Dos meses Keith, creo que no me has entendido cuando dije que quería descansar...–murmuró el pequeño mirando al rubio como si fuera su próxima presa.

– ¿Entonces, qué quisiste decir?– le preguntó el chico comenzando a notar como su pulso aceleraba. Luka como única respuesta lo volvió a dejar debajo y le comenzó a desatar el cinturón con rapidez. EL rubio sorprendido sintió por primera vez en bastante tiempo un pequeño indicio de vergüenza por el entusiasmo del menor. Desde que estaba con Luka nunca había intentado hacer algo como eso, y mucho menos había tomado la iniciativa de una manera tan impulsiva como lo estaba haciendo en ese momento. El mayor de ambos estiró su brazo para intentar tranquilizarlo un poco, pero cuando este le dirigió una mirada como la que tenía no pudo hacer otra cosa que tragar con dificultad y volver a recostarse en la cama con los ojos cerrados. Sentía que su cara estaba a una temperatura excesivamente alta y se negaba por completo a que el pequeño Strauss le observará de cerca en ese momento.

Los pantalones del rubio fueron eliminados con agilidad y pronto notó una sensación excesivamente placentera que le hizo involuntariamente volver a extender la mano hacia el cabello del menor.

Ya ninguno de los dos estaba recostado sobre la cama, sino que Keith estaba sentado en uno de sus bordes y el castaño estaba de rodillas sobre la alfombra de la habitación.

Luka nunca había estado tan concentrado en una acción como en ese preciso momento, llevaba tanto tiempo sin el rubio que hasta sus propios límites habían llegado a su fin.

No sabía si había sido por los exámenes finales, los juzgados respectivos a la custodia de su hermana o los diversos viajes que había tenido que hacer para establecerse en su nuevo piso, pero llevaba semanas necesitando descargarse de una manera como esa. Llevaba días teniendo tipos de sueños referentes a Keith de mil distintas formas y nunca podía acabarlos como era debido, por lo que ahora había condensado todos sus impulsos en un solo momento. Quería hacer sentir a Keith tan bien como él quería ser complacido después. Necesitaba expresarle todo lo que quería que le hiciera ese día, y su primer impulso había sido aquel. Nunca había reaccionado así, de hecho nunca en su vida había hecho algo así con Keith a pesar de haber estado ya casi tres años con él, nunca se había atrevido a hacerlo, aunque el rubio tampoco le había insistido nunca en ello porque por lo general Luka siempre se dejaba hacer y al rubio eso le era suficiente.

Pero ahora, Luka estaba muy seguro de que el mayor no querría que se detuviera. Su lengua rozaba cada parte de su piel y notaba como el rubio se estremecía de vez en cuando, también notaba como su mano le apretaba con mayor fuerza cuando hacía algo que le gustaba, así que lo repetía de nuevo, y en cuanto se sintió preparado cubrió por completo aquella parte de Keith que cada vez aumentaba su tamaño.

Un suspiro surgió de la boca del menor y un pequeño ruido procedente de su garganta, Keith lo apartó considerando que ya había sido suficiente y lo colocó sobre la cama deshaciéndose de sus últimas prendas de ropa aún colocadas en su sitio.

La cara de Luka estaba roja y su pecho subía y bajaba tan rápido como su respiración iba en ese momento, Keith sin pensárselo un momento deslizó su mano al trasero del menor preparando con cuidado al chico para poder empezar cuanto antes la diversión. El castaño suspiró encorvándose un poco sobre la cama, sus puño estaban cerrados con fuerza agarrando las sábanas y Keith comenzaba a impacientarse al tener esas vistas.

–Suficiente...–murmuró el pequeño Strauss asiendo uno de sus brazos y colocando cada una de sus piernas a uno de los lados del mayor. Keith sin esperar otra palabra de sus labios acabó de unirse del todo al castaño y comenzó a moverse con rapidez desde un inició. Luka sin poder reprimirlo soltó excesivos sonidos que probablemente se pudieran escuchar a través de las puertas de su habitación, pero ni a Keith le preocupo que sus compañeros del campus les escucharan ni el pequeño se dio cuenta de ese insignificante detalle.

–Más rápido–murmuró el menor mordiéndose el labio inferior. Las manos de Keith estaban cada una agarrándole una pierna y aprentándoselas de vez en cuando, estaban comenzando a sudar ambos.

Luka quería durar, pero al mismo tiempo no podía controlarse, solo quería que Keith acelerara el ritmo y no cesase sus movimientos nunca.

Por otra parte, Keith deseaba ir poco a poco, permanecer dentro de Luka el máximo tiempo posible, pero la situación no le permitía tranquilizarse, y lo único que era capaz de hacer era ir cada vez más rápido.

–Luka, date la vuelta...–exclamó el rubio separándose un momento, el pequeño no se hizo de rogar y siguió las órdenes del mayor girándose por completo y recostando la parte superior de su cuerpo sobre el colchón.

Keith a pesar de querer continuar, se dio el lujo de quedarse observando un momento la posición del castaño y aprovechar para meterse un poco con él.

– ¡Keith!–gritó el pequeño avergonzado– ¿Qué estás haciendo?–preguntó en un susurro intentando mantener la calma. No iba a expresarlo en alto, pero su cuerpo estaba pidiendo a gritos que el rubio continuara.

–Morder–respondió el chico sonriendo mientras apoyaba su rostro contra el trasero del menor– ¿No puedo?–preguntó sonriendo de lado. Keith sólo quería tocarlo, por todas partes, morderle, lamerle, besarle, todo, quería a Luka totalmente para él.

–No es que no puedas...–murmuró el castaño sin levantar la cara de la cama– pero...

–Pero, ¿Qué?– exclamó su compañero sonriendo y separándose de nuevo de él– ¿Quieres que continúe?– le preguntó el mayor deslizando una mano por su espalda y aproximando su cara a la de Luka. El pequeño, quien tenía la cara ardiendo, simplemente le miró a los ojos y asintió como suplicando.

–Si me lo pides así, no tengo otra opción, ¿verdad?–murmuró el mayor besándole de la forma más sensual que pudo mientras le sostenía la cara con su mano libre. Con la otra se dedicó a buscar la entrepierna del pequeño, quien sorprendido por el repentino contacto no pudo evitar suspirar en la boca del mayor. Luka se preparó para dejarle más fácil el acceso, pero Keith en seguida se lo impidió– Quieto... no te muevas de esta posición–exclamó el mayor sin detener el movimiento de su mano. El pequeño simplemente le hizo caso y extendió su brazo para hacer lo mismo con el rubio, pero este también lo impidió volviendo a colocarse en su posición anterior detrás de Luka, esta vez preparado para continuar donde lo habían dejado.

Keith colocó de nuevo sus manos sobre las piernas de Luka y con cuidado se las separó para permitirse el paso mejor. En cuanto comenzó a moverse de nuevo Luka tuvo que apoyar su rostro sobre la almohada para no gritar más alto de lo que debería, acto seguido deslizó su propia mano sobre su vientre y comenzó a moverla sobre la zona que había dejado desatendida el mayor. Sin embargo, Keith, que se dio cuenta de ese detalle, pronto colocó una de sus manos sobre la de Luka y continuó por él lo poco que le faltaba.

El ruido no fue evitado y el mayor no se detuvo hasta haber acabado, así que o no había nadie en las habitaciones contiguas o decidieron no interrumpirlos, por lo que en cuanto el mayor se recostó al lado del castaño en la pequeña cama no pudo reprimir una carcajada pensando en las burlas de sus amigos y compañeros en cuanto saliera de allí junto a Luka, el pequeño sonrió también, pero en breves cerró los ojos y se quedó dormido sobre la almohada, al fin podría descansar como era debido.

---------------------------------------------


Hace mucho que escribí esto y nunca llegué a publicarlo, supongo que en parte por vergüenza, pero mi mentalidad ha cambiado bastante de 14 a 19 años (y mi terrible ortografía) así que decidí dejarlo por aquí para reavivar la sensación de publicar algo en wattpad jajajaj

Se supone que esto sería un pequeño adelanto de la segunda parte que nunca llegué a escribir, quién sabe si algún día me decida a ello aún, aunque para mí fuera un hobbie y nunca llegara a planear los capítulos con antelación le tengo mucho cariño a mis primeros personajes, y estoy segura de que disfrutaría escribiendo más tonterías sobre ellos...

De todas formas, espero que os haya gustado, porque es todo aquello que me saltaba con la rayita de cambio de escena que tanto odiabais!

¡Gracias a todos por haberos leído un paso!

P.D.: para quién no lo sepa, serendipia es igual a una casualidad muy inesperada, es una de mis palabras favoritas y me pareció un buen título jajaja

---------------------------------

Mensaje del 2020 → Pues al final esa segunda parte sí que se ha empezado a escribir! Si a alguien le interesa qué pasó con todos esos personajes que no se mencionaron y quiere saber cómo les va a ir a nuestros protas en la universidad... os invito a leeros "UN PASO ATRÁS".


Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro