-Malcon...

-No hables.-le dije apoyándome sobre su frente y volviéndolo a besar.

-Pero... estamos en medio de la calle.

-¿y eso que mas da?-le pregunte sonriendo.

-La gente...

- ¿Te da miedo que te digan algo por ser lo que eres?

-Si, Malcon ¿por qué crees que no se lo había contado a nadie hasta ahora? Y tú, que yo sepa, piensas igual.

-Lo sé... Pero me estoy dando cuenta de que ocultarlo solo me hace mal ¿no te sientes mal teniendo que ocultarte de la gente?

-Sí, pero no es tan fácil.

-Hay que intentarlo... Yo no veo la diferencia entre una relación homosexual y una hetero.

-Tú no, pero mucha gente sí, de ahí que exista la discriminación.

- A esos homofóbicos de mierda les pueden dar por culo, nunca mejor dicho.-le dije sin rodeos.-¿Desde cuando te gusto?-le pregunté.

-Desde que te conocí diría yo, en el despacho del director...-dijo dejando entrever una pequeña sonrisa.-en cuanto entraste por la puerta refunfuñando y te sentaste a mi lado. Mi primer pensamiento fue: "madre mía, qué chico tan guapo".

-Pues a mí me paso lo mismo, en cuanto empezamos a hablar solo podía pensar en que quería a ese pelirrojo en mi cama... bueno, y eso fue hace cinco años... Llevamos cinco años perdidos por culpa de esa forma de pensar retrógrada. Y no pienso perder ni un segundo más por esas personas.-afirmé.-Además, quiero recuperar el tiempo perdido.-dije mientras le volvía a besar, esta vez durante un periodo de tiempo mas largo.

Dereck no dijo nada más desde aquello, le cogí de la mano y comenzamos a caminar hacia mi casa.

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-¡Buenos días!-saludo Keith alegre entrando en la cocina. Yo le seguía por detrás.

-Alguien se ha despertado de buen humor.-saludo Steve desde la mesa.-¿qué tal la noche?-preguntó con una sonrisita. Yo aparté la mirada avergonzado y no dije nada, solo me senté como pude.

-Si... ¿Qué tal?-preguntó esta vez mi hermana, que estaba poniendo un par de tostadas más en la mesa.

-Podría haber estado mejor...-dijo el rubio mirándome burlón, yo le dediqué una mirada asesina.

-Si, definitivamente podría.-me queje con la voz ligeramente ronca.

-¿Qué le ha pasado a tu voz Luck?-me preguntó Cristy.

-Nada, será que tengo algo de gripe.-me inventé carraspeando.

-Si, seguro que es eso.-rió Steve por lo bajo dedicándome una mirada cómplice. Yo desvie la mirada rápidamente.

-Por cierto, Luka...-me llamó Cristy.-¿Podrías ir a buscar mi móvil a mi habitación? Es que se me olvidó arriba-¿Qué? ¿Acaso estaba loca? Me había costado hasta salir de la cama. ¿Cómo pretendía que subiera las escaleras?

-¿Por qué no vas tu?-le pregunté con aparente tranquilidad.

-Venga... os hice el desayuno... -dijo poniendo cara de cachorrito.

-Es que da me pereza...-utilicé de excusa.

-¡No seas vago! No te cuesta nada... ¿o si?-pregunto mirándome curiosa y comenzando a enarcar una ceja con cierta curiosidad.

-N-no... Nada ¿por qué me iba a costar algo?-reí nervioso.

-Pues ve.-me dijo cruzándose de brazos. Keith y Steve me miraban curiosos.

Me apoyé en la mesa con los brazos e intenté levantarme con normalidad, tenía un punzante dolor en la zona y no pude evitar poner una mueca.

Salí rápidamente de la cocina para evitar que me vieran, no sabría que hacer para explicarlo.

Cuando ya estaba fuera de su visión pestañeé dejando que se deslizaran un par de lágrimas y un quejido, en el momento no  había sido tan  malo, pero ahora comenzaba a sentir molestias por todo el cuerpo, keith había tenido cuidado al principio, pero a medida que avanzabamos dejaba de preocuparse por los detalles y a pesar de comprenderlo no podía dejar de lado el resentimiento. ¿cómo es que había cedido con tanta facilidad? ¿a caso era masoquista?

Apreté los puños con fuerza y me limipié las lagrimas impaciente con la camisa, maldito keith.

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-¿Se puede saber que haces?-le preguntó Steve a Cristy denotando algo de enfado.

-Solo quería comprobarlo... -se quejo ella.

-Está mas claro que el agua, solo le falto echarse a llorar aquí mismo.

-Vale, vale, perdón, pero no es culpa mía... Es culpa de él.-dijo la castaña señalándome.

-¿Mía? Es decir, si es mi culpa, pero también de Luka.-protesté.- es un trabajo de dos ¿sabes?

Cristy se revolvió el pelo histérica.

-Voy a comprarle algo al chaval...-dijo Steve. -la próxima vez algo msá de cuidado... -me susurró al oído riendo.- que casi no podía ni andar.  Me recordó a mi prima la primera vez que montó a caballo.

-Lo tendré en cuenta... -le respondí en el mismo tono evitando reir.

-Oh, y también controlar el volumen...

-Eso lo tiene que controlar él...

-Chicos, dejad de susurrar y haced algo... -nos regaño Cristy. -Steve ve a por lo que quiera que sirva para eso... Y tú.-me dijo señalándome.-mételo en la cama.

Steve y yo comenzamos a reírnos.

-¡No me refería a eso!-gritó escandalizada.

-Es culpa tuya por decir esas cosas.-rió Steve.

-Venga.-dije yo.

-Por cierto... Tengo que hablar contigo.-me dijo Cristy.

-¿Me vas a volver a pegar una bofetada?-pregunté dando un paso atrás.

-Debería... Pero no.

-¿Por qué?-me quejé yo.-¡No cuenta hacerlo llorar si es de placer!-dije sin pensar.

-¡Keith! ¡Deja de decir esas cosas, que es mi hermano!

¡Además, yo no dije que pudieras acostarte con él!

-Empezó el, qué conste.-respondí infantilmente.

-Eso lo dudo bastante.-dijo Steve incrédulo.

-En realidad, es verdad.-dijo Luka entrando por la puerta y sorprendiéndonos. Estaba sonrrojado.-Al parecer ya estáis enterados todos... -dijo mirando sobre todo a su hermana.-¿Ya lo sabías?

-Me lo dijiste cuando estabas borracho...

-¿Dije algo mas?-pregunto algo asustado.

-Unas cuantas cosas.-exclamó ella sonriendo- pero creo que  mejor me las guardo.-sonrió la castaña.

De pronto se hizo un silencio algo incómodo.

-Bueno, yo voy a eso...-dijo Steve saliendo por la puerta de la cocina.-y tú me acompañas.-continuo mientras le agarraba de la mano a Cristy.

-¿Pero quieres que los deje solos en casa?-exclamó.

-Si es por lo que pueda pasar... dudo mucho que Luck este en condiciones.-rió el castaño.

-¡Steve!-grito Luka. Él salió riendo de casa y empujando a Cristy tras de él.

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No es posible... Otra vez a solas con Keith.

-En fin princesita, vamos a la cama.-rió el rubio.

-¡¿Qué?!-exclamé. Keith sonrió de lado.

-No a eso, como dijo Steve, no estás en condiciones.-sonrió burlón.

-¿Y de quien es la culpa?-me queje.-¡Yo ya dije que no quería ir...-de pronto me calle avergonzado.

-¿Debajo?-rió el rubio. Yo mire hacia otro lado.

-Tranquilo, con la práctica seguro que deja de doler...-sonrió.-además, si quieres ir arriba, primero tendrás que aprender. ¿A que si señorito desvirgado?

-¿Pero qué dices?-exclamé sonrrojandome violentamente.-Además ¿tú con cuantos lo has hecho?-le pregunté bajando la voz. Él me miro de reojo sonriendo.

-¿Sinceramente?-yo asentí.- uno.

-¿uno?-repetí sorprendido.-pero si me dijiste que no eras virgen.

-No lo era.-dijo.-porque la perdí con una chica.-aclaró. Yo lo mire atónito.

-P-pero...

-Soy gay, pero antes de tenerlo claro... Tuve curiosidad.-dijo riendo.

-Ya veo...

-Así que siéntete alagado,eres el primer chico.-me dijo. Yo me sonroje mas,si eso era posible.-Bueno,se acabo la charla,tengo que llevarte a la habitación,ordenes de la jefa.-dijo antes de cogerme como una princesa y subir las escaleras.

-¿Pero qué haces?-exclamé apartándolo.

-¿Prefieres subir andando?-dijo parando en seco y mirándome sarcástico. Yo deje de protestar y él me siguió subiendo sonriendo burlón.

Ya en mi habitación me quede dormido... Y recordé cosas de la noche anterior.

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-¡No quiero!-me queje por décima vez.

-Luka,no me jodas... -exclamo keith frustrado.

-Que no,no pienso ir debajo.

-Pues yo no quiero que vallas encima.

-¡Pues te quedas con el calentón!-le grite.

-¿En serio? Crees que vas a poder aguantarlo.-me pregunto burlón mirando mi entrepierna.

-Pues claro.-dije yo altanero.

-Eso ya lo veremos.-dijo el sonriendo y con una mirada traviesa.

Comenzó a besarme y acariciarme el abdomen,como hacia un par de minutos,pero esta vez bajo mas de la cuenta...

-Keith... ¿Q-que estas haciendo?-pregunte entrecortadamente.

-Creo que eso es obvio.-dijo bajándome el calzoncillo por completo y acercando su boca...

-N-No -exclamé cundo note su lengua sobre mi erección.

-¿Que pasa enano? ¿no era que podías aguantar?-me reto el rubio. Yo me mordí él labio evitando que saliera de mi boca ningún sonido.

-¡Jodeer!-grite arqueando la espalda.-Idiota Keith... ¡Hazlo de una puta vez!

-Vaya,la tensión sexual te pone muy mal hablado.-se río el dándome la vuelta.-He ganado.-me susurro al oído antes de comenzar a...

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-¡Luukaa!-me gritaron al oído. Yo desperté sobresaltado.

-¿Que?-le pregunte somnoliento.

-Steve te trajo algo...para el dolor.-dijo dejándome una pastilla sobre la mesita de noche y saliendo de mi habitación.-Por cierto.-dijo asomándose por la abertura.-Creo que deberías arreglar la tienda de campaña de tus pantalones.-rió saliendo por completo.

Yo no le entendí al principio,pero luego vi el problema.

-¡Mierda Keith!

-¡El amor duele!-exclamó a lo lejos el rubio riéndose.

-¡Mentira,lo que duele es el sexo!