{Narrador}

Los jóvenes se encontraban caminado en pares, con Subaru y Satela (Emilia) al frente y Modal junto a Kazuto atrás de ellos. Cada dupla en su conversación propia las cuales de cuando en cuando cuzandolas mientras seguían caminando por el mercado.

"Oye wey, no te parece extraño como actúa ella? Ni se preguntó de los cuerpos y encima no parece ella, incluso Subaru se extraña de eso" Santiago se acercó a su amigo, estaba bastante extrañado de la actitud de Emilia y algo le olía mal.

"Mmmm... puede tener algo que ver con nuestras maldiciones?" Fue lo único que se le pudo ocurrir a César.
"¿A qué te refieres?" Cuestionó de inmediato el argentino.

"Si llegamos aquí seguramente fue por la loca de ya-sabes-quien así que de ley tenemos una maldición"

Santiago se quedó callado un momento, lo que su amigo decía realmente tenía sentido y bastante, aunque realmente no tenía muchas ganas de morir para ver si tenía el mismo poder de Subaru.

Se detuvieron un momento al escuchar un llanto, una pequeña niña de unos 6 años claramente extraviada.
Mientras que Subaru y Satela (Emilia) discutían que hacer y Santiago se ponía nervioso, era bastante inteligente pero no tenía una puta idea de que hacer con niños en casos así.

"Hey pequeña, mira, mira" César se había arrodillado a la altura de la pequeña, se había quitado el sombrero y la mochila comenzando a buscar algo y sacando una modeda de unos diez pesos. La pequeña se quedó viendo el objeto deteniendo un poco sus sollosos.

"Esto es una moneda de diez pesos, es muy rara y valiosa... y... se fue!" El estaba moviendo la moneda entre sus manos y de la nada la hizo desparecer a la vista de todos, dejando algo impresionados a sus acompañantes y aún más a la pequeña.

"Me pregunto dónde puede estar" Dijo mientras buscaba con la mirada la moneda, puso su mano en la cabeza de la pequeña acariciándola y después pasando levemente sus dedos por la oreja de la niña y haciendo aparecer la moneda en sus propios dedos "¡Aquí está!" El y la pequeña se rieron un poco ante eso.

Era algo sorprendente, César tenía una cara no demásiado amistosa o simplemente neutral pero esta parte de el con esa delicadeza hacia los niños pequeños era algo un poco sorprendente.

El le puso su sombrero a la niña y la tomó en brazos, ella abrazó su cuello y le señaló una dirección, el comenzó a caminar sin más así que los demás no tuvieron otra que seguirlo. Subaru un poco celoso porque quería ser el quien mostrara el truco de magia con su moneda de 10 yenes.

"(Así que de alguna forma nos convenció de ayudar a buscar a los padres de esta niña)" Aunque realmente Santiago y Subaru ya sabían la importancia de ayudar a la niña realmente estaban sorprendidos de que el los haya convencido así de fácil.

Caminando otro rato encontraron a la madre de la niña, César le dejó una flor de origami y después se marcharon a seguir buscando la medalla de Emilia.

[Horas después]

"Solo hemos dado vueltas sin sentido todo el día" Subaru se recargó en un barandal junto a Emilia, viendo cómo el sol apenas tenía intensiones de bajar.

De la nada, César se sobresaltó viendo en dirección a los barrios bajos de Lugunica, se paró sobre el barandal donde se recargaba Subaru y saltó sin más a un tejado comenzando a correr y hacer parkour por los edificios con bastante agilidad y velocidad.

"¡¿Qué mierda?!" Los chicos se sobre saltaron viendo a su amigo correr por los tejados como una especie de Peter Parker o algo así.
"Un momento... Satela, ¿Qué hay por ese lado de la ciudad?" Santiago miró a la chica mientras acomodaba para repetir la acción de su amigo.

"Son... los barrios bajos si no mal recuerdo..." Ella estaba algo confundida por la pregunta mientras el chico se paraba en el barandal.

"Es lo más lógico, si algo es robado lo más seguro es que termine en los barrios bajos o algo así" Tras eso el también salió corriendo por los tejados, dejando a los otros pensando en ello, para que segundos después ellos los intentaran seguir por las escaleras.

[...]

Durante la carrera, César y Santiago se terminaron separando sin darse cuenta, provocando que el último tuviera un choque accidental con alguien minutos después.

Cuando se recuperó más o menos del impacto, se dió cuenta de que estaba sobre una chica en una pose medio cliché, ella igualmente estaba en una posición similar, sonrojada y confundida cómo su contrario.
Aunque no lo mostraste, también algo intimidada por el tamaño del chico con respecto al suyo, al menos para ella era comparable al de cierto viejo que conocía.

El se incorporó lentamente, ayudando a la chica a levantarse y sacudirse el polvo, ella normalmente tendría su cuchillo fuera, sin embargo, el chico no le daba mala espina pese a ser enorme.

"¿Estás bien niña? No deberías correr por los tejados así" El le dió un un pequeño regaño mientras la miraba, la parecer solo tenía un pequeño raspón en el brazo.

"¡¿A quién llamas niña gorila?! ¡Tengo 15 ya!" Ella reclamó algo enojada, realmente le molestaba que la llamaran así

"¡¿A quién llamas gorila pequeña pitufo?! ¡Tengo 15 también no jodas!" El respondió de igual forma, no lo habían llamado gorila antes pero igual se sentía ofendido.

[Rato después]
[Centro de Lugunica, barrios bajos]
[4:59pm]

César había llegado antes a los barrios bajos, estaba algo asombrado de la situación real de la zona a comparación de como fue mostrado en el manga y anime.

"Me pregunto si soy el primero en llegar.... hey viejo, sabes cómo llegar al bar del viejo Rom?" El se encontró con una persona caminando por ahí, el sujeto solo río.

"Así que la enana te robó algo, ja, camina derecho y en el puente a la izquierda" El solo siguió de largo sin más.

César emprendió camino, deteniéndose en aquel puente por un momento, viendo que comenzaba a atardecer levemente. Una vista bastante agradable sin duda alguna.
Siguió caminando lentamente, era extrañamente tranquilizante ver este paisaje otra vez mientras comenzaba a atardecer.

"Creo que... esta ves lo haré bien... debo hacerlo, no voy a fracasar una quinta vez" El caminaba, con las manos en los bolsillos ya pensando en cómo matar o mínimo sobrevivir lo suficiente contra Elsa ya que Reinheard lo había perseguido un poco porque le tiró una moneda en la cabeza al correr en los tejados, una parte de su plan.

Llegó a la puerta, a esperar, si tenía suerte, las cosas irían mejor que la otra vez.

[1]
"¡Cuidado!" Intentó llamar a su amigo, más fue inútil, ella le había abierto el abdomen igual que al anciano Rom y a Felt.

Subaru le dio un golpe a la despiadada mujer para proteger a la albina, logrando el objetivo pero siendo esta la última acción de su vida pues igualmente sus entrañas salieron de su vientre por el filo negro de la cazadora.

El sufrió el mismo destino, siendo además pateado por la asesina mientras esta gritaba y gemia para su propio y retorcido deleite.
El cerró primero sus ojos. Murió primero.
[1]

Solo se sentó en la puerta a esperar, sacando de su mochila un chicle (goma de mascar) y le echó un vistazo a su teléfono nuevamente. "Sin señal" eso no cambiaba desde su llegada aquí. Aunque su rostro era neutral y mostraba que estaba relajado, realmente no dejaba de pensar en su familia desde que abrió los ojos en ese mundo por primera vez. Algo un poco raro para el mismo.

Lo último que sabrían sus familiares y amigos de el era que salió con su amigo argentino a darle un tour, unos días antes de su gran premiación por aquel fanfiction de [Tate no Yuusha].

No estaba seguro, pero probablemente Subaru y Santiago estuvieran en las mismas. Cómo fuera, para el seguir la historia de este mundo lo debería distraer lo suficiente como para sobrevivir y seguir adelante desde Zero en esta nueva Resurrección.

"Así que aquí estabas boludo" Santiago de hizo presente acompañado de la ladrona miniatura.

"No lo sé, no tiene ojos de muerto y no estoy segura de como se ve un desquiciado pedo-ninin o lo que sea que hayas dicho" Ella habló sin reparos haciendo que el chico junto a ella sintiera un terror puro al ver la cara del chico sentado en los escalones.

"So funny you motherfucker, eh? I'm not the guy ho wants to fuck a fucking 800 hundred years loli-fox-wife-waifu-mother. Cómo sea, al parecer encontraste a la enana" El solo lo amenazó con la mirada y un insulto en inglés. Cosa que Felt no entendió un carajo pero si fue a reclamarle lo de enana, o eso quiso pero la mirada de César era cómo ver a Jin Sung-Woo (Solo Leveling) encabronado al máximo así que no hizo nada fuera de sacarle la lengua.

{Traducción: Muy gracioso tu hijo de perra, eh? Yo no soy el que se quiere cojer a una loli/zorro/madre/waifu/esposa de 800 años}

"El es el otro tipo que te dije que no tiene un céntimo pero tiene algo para negociar que vale más de 20 monedas santas mínimo, tiene varias cosas en esa mochila" El señaló a su compañero, César sacó un peculiar lápiz a la vista de la chica rubia, lo puso en sus labios y un momento después un humo blanco por su boca.

Aunque después se estaba ahogando por hacer esa pendejada con un cigarro electrónico (o más concretamente un inhalador ya que no tenía tabaco) al estilo Jhotaro o algo así.

Poco después, Felt dió el toque secreto en la puerta y una voz vieja se escuchó de la nada, dijeron la contraseña y el gigante de cejas raras abrió la puerta {No me acuerdo cómo chutas era y son las 3:50am, no voy a buscar el momento en el cap, porque estoy escribiendo estoy y viendo DanMachi en Netflix al mismo tiempo}

"Mira viejo, ellos dos dicen que tienen cosas que valen muchas monedas de plata, una de esas 'teri', 'meti' o como se diga" Ella entró como si nada, Rom solo les dio un vistazo y cerró la puerta dejando su porra junto a la barra y comenzando a servir leche rebajada para Felt.

"Bien, dicen que tienen algo para negociar y que es bueno, pero deben saber que tengo un cliente y deberán darme más que el si quieren la medalla aunque realmente no me importa quién se la quede" Tomó un sorbo a su leche, y después lamiendo la que había dejado un bigote de leche en su rostro

"Para comenzar, una maravilla de tierras lejanas, hecha por maestros artesanos expertos y de enorme talento, algo que prácticamente nadie puede replicar sin años de perfeccionamiento y agudeza mental para no perderse en su elaboración misma" César comenzó a fanfarronear, el sabía bien como endulzar las cosas y (en palabras de su madre) era capaz de venderle chiles a Hernes.
{Marca Mexicana de chiles enlatados}

Después de eso sacó de la mochila, con un efecto de drama, un complejo y enigmático... puntero lacer de buena calidad, el cual no perdió tiempo en mostrar, girando el lente para dar varias figuras y dejar a todos asombrados. Santiago sabía un poco de eso, pero no había visto el lacer que su colega guardaba en la mochila. Y aún más se preguntaba que tantas cosas cabían ahí y por qué las cargaba para comenzar.

El viejo Rom lo tomó entre sus dedos con cuidado de no romper el misterioso aparato mágico. Claro que antes de dejarle a César advertir algo se terminó apuntando el lacer en el ojo mientras seguía en modo "fiesta intensa" lo cual de suerte no le provocó una epilepsia al viejo.

Cuando eso pasó, el dió su opinión "Si estos chicos tienen cosas así probablemente tengan una fortuna, solo este cachivache vale unas 20 monedas santas mínimo"

Felt sonrió. "¡Entonces podré cobrar mucho más!" clamaba alegre mientras volvía a beber leche.

En ello César se acercó a Rom, algo discreto mientras Santiago tomaba una soda que guardaba en esos bolsillos al parecer infinitos (cómo su propia mochila). "Oye viejo, eres algo de la enana? Me refiero a que,
venir aquí justamente a hacer un trato no parece solo de amistad o trabajo"

El anciano de piel oscura se rascó un poco la cien mientras veía que el alto (Santiago obviamente) se entendía bastante bien con Felt. "Mmmm, creo que soy algo cómo su abuelo, aquí los débiles deben buscar a fuertes que los ayuden a sobrevivir, así que la ayudo como intermedio en las pláticas con los clientes"

El mexicano asintió mientras recordaba las veces que lo había visto morir y al tiempo se preguntaba si es que su amigo y Subaru ya habían repetido algunas veces este mismo día. "Ya veo, se ve que es astuta, hacer tratos sola y en cualquier lugar prácticamente es un suicidio para alguien como ella teniéndote aquí cualquiera se lo piensa dos veces"

Rom asintió y calló lo que iba a decir cuándo escuchó la puerta ser golpeada por alguien usando un toqueteo particular.

{Santiago}

En ese momento se me pusieron los nervios de punta, esa loca de tetas al aire sha me había sacado el relleno (y no como quisiera) y mierda. Da más puto miedo en persona, joder, está buena pero también jodidamente loca.

Mierda.... la primera vez que me mató ni siquiera la pude ver, solo la escuché riéndose de mi mientras mis intestinos se salían de mi cuerpo, nada agradable de ninguna manera.
Aunque... sería "épico" decir que así morí la primera vez....

[1]
Caminaba con Felt directo al bar del viejo Rom, ella me contaba algunas azañas de sus robos o cosas así. Quise lucirme con una especie de "habilidad de ver el futuro" mala idea al parecer.

"Sabes? Creo que cuando lleguemos llegarán 3 personas más, uno de ellos es mi amigo y ya verás que podremos comprar la insignia porque tú clienta solo tiene 20 monedas San....." Llevé mi mano a mi pecho por un enorme dolor repentino.

Felt me tomó de los hombros preocupada, no se que fue lo que me estaba diciendo, se que estaba alterada pero todo era borroso, creo que caí al suelo, no sentía nada.

"Tu... me perteneces... no dirás nada... tus labios son míos... no debes decir nada... d-a-r-l-i-n-g" eso venía de una voz femenina jodidamente aterradora y familiar.

Todo fue negro hasta que abrí los ojos nuevamente.

"¡¿Y tú quien eres gorila?!" Felt estaba bajo mío, sonrojada hasta parecer un tomate.... Este era mi "checkpoint" {así suena mejor}
[1]

Cómo sea, para mala suerte, era la puta loca quien llegó, y para aún más mala suerte, Subaru llegó junto a Emilia para complicar aún más las cosas.

"Ara ara, tengo competencia al parecer" Ella se sentó relaminendo sus labios y observandonos bastante mientras se sentaba en una silla.

En la mesa la tensión se cortaba con un cuchillo, César y yo sentados juntos, frente a nosotros Elsa, a la izquierda Subaru con Emilia y a la derecha Felt con Rom detrás (este tenía en mano su maza por si acaso)

"Bien, estos chicos también quieren comprar la medalla" Emilia de inmediato le lanzó una mirada asesina (no sé cómo pude calmarla) Felt siguió. "Ellos dicen que no tienen ni donde caer muertos pero tienen cosas que valen bastante, así que depende quien ofrezca más valor, aunque realmente no me importa quién se la quede al final" Ella terminó con una sonrisa confiada, realmente me idiotizó bastante al parecer porque César me pellizcó el brazo en forma burlona.

{Santiago: antes de que llamen a la ONU, deben saber que tenemos la misma edad, 15}

"Ara ara tengo un par de lindos jovencitos como competencia, solo espero que mi cliente haya enviado lo suficiente" Por el tono no pudimos evitar sonrojarnos pero igualmente nos estábamos cagando de miedo igualmente por el tono de voz.

Sacó una bolsa y regó en la mesa unas monedas plateadas que acomodó en pilas de cinco. Veinte monedas santas exactamente.

Aquí era donde tenía que entrar si o si el idiota de César o estábamos jodidos.
Por suerte así fue (mierda, por fin algo bueno).

Para comenzar sacó una navaja mariposa, después un inhalador, una bolsa (bastante grande) con hojas verdes que guardó de inmediato algo nervioso, papás fritas y las cervezas que compramos, claro que con todo eso aún se veía bastante bien llena la mochila.

"¡¿Cómo cabe todo eso en una sola mochila mediana?! ¡Incluso sigue llena!" Todos nos sorprendimos al ver la cantidad absurda de cosas que cargaba el tipo en su mochila, capaz sacaba más cosas cómo nana mágica o algo así para después ponerse a cantar y bajar con un paraguas.

"Pues, solo la pluma de luces del chico vale mínimo unas 20 monedas santas y sabiendo que tiene más cosas seguramente carga consigo arriba de 100 monedas santas fácilmente. La victoria es suya" Rom estaba impresionado y aún más cuando notó que yo y Subaru teníamos cosas parecidas.

"Ara ara supongo que perdí, en todo caso es culpa de mi cliente no mandar más monedas" Tomó un sorbo a la leche y se levantó.

César y yo nos pusimos en guardia, no pasaría mucho antes de que comenzará a atacarnos.... solo debíamos aguantar 20 min más hasta que Reinheard llegara aquí.

Se retiró un poco antes de atacar sin pestañear, claro que, nosotros ya conocíamos la jugada y actuamos rápidamente, volteando la mesa y saltando hacia atrás para evitar el corte de la loca. Subaru por su parte se tiró a un lado abrazando a Emilia y logrando salvarla también, aunque el se llevó un corte en la mejilla.

"Ara ara, lograron evitar eso son muchachitos muy hábiles.... me pregunto que hermoso color tendrán sus intestinos" Me puse en guardia y César (mierda que se me dificulta llamarlo así) me lanzó un cuchillo militar que saco de la mochila mientras el tomaba la navaja mariposa y otro cuchillo.

"Lo siento tetas al aire, pero me gustan mis entrañas adentro de mi cuerpo así que no será fácil" Mierda! Me ganó la primera frase genial la puta madre.

"Concha de tu hermana Modal, vos salís casual o siempre vas equipado a lo Rambo mano?" {Santiago}

"Eh, ¿Eso importa realmente ahora?" {César}

"Toushe" {Subaru y Santiago}

Ella cargó a por mi amigo primero, el de suerte logró esquivar el ataque gracias a Rom quien atacó con su maza sin miramientos, yo fui a por la loca también, rechazando uno de sus ataques por la suerte.

"Ara ara, jovencitos que tienen la destreza para soportar mis ataques... ah... también un gigante, jamás le he abierto las entrañas a uno tan musculoso...." Ella al parecer le exitaba eso.

Por otro lado yo me estaba cagando de dolor, creo que el golpe me lastimó el tendón en la muñeca y los dedos, también tenía una leve rajada en el brazo. Esta tipa es más peligrosa de lo que recordé.

Mientras yo pensaba, César se batía en duelo de cuchillos con Elsa, teniendo una notable desventaja en el aspecto físico, en palabras de la princesa de la espada, 'carece de técnica y habilidad' aunque pude ver qué eso se equilibraba por los anormales reflejos del tipo este y su habilidad de dislocar huesos.

Aunque pasó algo raro de repente. El comenzó a igualar a la loca y yo al parecer también, cuando corría en busca de un punto ciego o me lanzaba a atacar... todo comenzaba a ser lento a excepción de ella y César. Cómo si estuvieramos adapandonos al combate de alguna forma.

La pelea continúo un rato más, yo ya estaba sudando bastante y a César le faltaba el aliento, no duraríamos demásiado, Rom ya había recibido un golpe en el cuello y Subaru estaba medio inconciente por una parada así que Emilia tuvo que convocar a Puck. Por suerte no estaba tan pasada su hora de servicio.

"Rom-chi! Rom-chi!" Felt chillaba junto a mi, escondidos detrás de la barra.
"Escucha, de los dos yo soy el más viejo y contando a mi amigo sigues siendo la menor así que cuando te de la señal tienes que salir corriendo"

Ella quiso refutar pero un carambano de Puck pasó volando cerca y la asustó.

"Bien, pero debes prometer que no dejaras morir al viejo Rom... es una promesa de meñique" Ella se quitó un guante para ofrecerme su meñique, era algo infantil pero si no lo hacía estábamos jodidos y muertos de nueva cuenta.

Juntamos los meñiques y ella nos hizo una pequeña cortada con un vidrio de por ahí, una especie de marca del acuerdo, se puso el guante y se alistó.

"¡La 1314 Modal! ¡Ya!" Grité lo suficientemente alto para llamar la atención de todos, corrí hacia el y me ayudó a lanzarme con un mortal hacia atrás, así pude lanzarle un vidrio a Elsa el cual se clavó un poco más arriba de su rodilla.

Con eso Felt salió corriendo a toda velocidad por la puerta trasera, podíamos oírla fuerte y claro pidiendo ayuda aún.

"Ara ara, no creerán que la dejaré huir tan fácil, verdad?" {Elsa}

"Cerra el orto ya! Te juro que si vuelves a decir el puto 'ara ara' de mierda otra vez te voy a sacar yo las tripas japuta!" {César}

Me sorprendi de escucharlo hablar así antes de tirarle una maldita mesa a Elsa en la cara. De más está decir que ella lo esquivó pero no se salvó de la patada que Subaru le acomodó en las costillas.

Solo había que resistir algo más y listo, a la mansión con Ram y Beatrice.

Seguimos el ritmo lo más posible, cubriendo a Emilia para que sanara la herida de Rom pues Modal le había hecho un torniquete o algo así improvisado para evitar que el anciano conociera al brazo o ojo de Hajime Nagumo.

En un momento, perdí mi defensa, simplemente no podía más con el dolor en la mano y en el cuerpo, me había salvado de muchos cortes letales, pero aún así me había dado en menor medida. Ya me estaba comenzando a marear por perder sangre y no reaccioné bien.

"Es hora de ver el hermoso color de tus entrañas" Sacó ambas hojas y cargó contra mi, otra muerte segura o eso pensé hasta sentir un golpe que me envió a volar. Me estrellé contra una mesa deshecha y me encajé pequeños fragmentos en el cuerpo.

Pero César no corrió con tanta suerte, el fue quien me salvó golpeandome con la maza de Rom, usó esta misma arma para bloquear los impactos, fueron tantos y tan rápido que solo faltó un "ora ora ora" o "muda muda muda" ya que es villana. El se llevó una oleada de cortes al parecer. Estaba por recibir el golpe final cuando.....

{Inserte pelea Reinheard vs Elsa porque sha van 3861 palabras y son las 4am}
{P.D: esto es del día siguiente a la anterior nota}

"No mames Reinhard, se supone que era un golpe no misil de prana" Dije mientras ayudaba al de mochila infinita a levantarse después de reverendo golpe que había recibido por una viga.

"Je... creo que se me pasó la mano" Respondió avergonzado mientras de fondo se escuchaba la conversación de Subaru y Emilia.

"Emilia, solo llámame Emilia" Ella al fin soltó la verdad de su nombre para Subaru así que decidí hacer lo mismo.

"Soy Santiago, Kazuto solo es mi apodo pero llámenme como quieran"

"Yo soy César, solo me dicen Mod o Modal algunos así que llámenme como les guste más"

Ambos nos presentamos pero algo no marchaba bien, la chamarra de Subaru se abrió al igual que mi ropa y la de César ya tenía unos segundos abierta, el prácticamente explotó en sangre como si fuera personaje de Kill la Kill o algo así. Realmente no supe nada más porque me desmayé creo, todo se volvió negro.

{4044 palabras en total}

{Extra: Contador de muertes de hoy
César: 4
Subaru: 3
Santiago: 2}

{Fin del cap}