Hoy no puedo escribir algo alegre o inteligente,

Solo puedo escribir conclusiones del de los días anteriores.

Mientras más pienso, más me desespero;

Mientras quiero que el tiempo pase, menos pasa.

Cuando dejo que mis dedos piensen, junto con mi puño,

Cuando dejo fluir mis ansiosas manos;

¿Quién sabrá las incoherencias escritas?

Quien lo verá solo como letras sobre el papel.

¿Por qué pensamientos titubeantes?

¿Porque me siento solo si estoy con gente a los lados?

Solo sé que los arboles han sido más sabios que yo;

Han vivido miles de años, con fuentes propias de agua.

Los mares mismos se limpian,

Los mares mismos, no paran de recibir vida y muertos;

Los mares no dejan de sonar, sus canciones.

Los mares no dejan su flameante oleaje.

Los pájaros mismos caminan mientras pueden volar;

¿Porque yo no dormir, aunque pueda caminar?

¿Que habrá más allá del infinito?

Cuanto espacio abarca el universo.

Preguntas intrigadoras insolentes,

Preguntas y nada más que eso;

No lo necesito saber,

Pero me intriga saberlo.

Este es el escrito de todo, pero a la vez no explica nada.

Todo lo que escribo es porque mis manos vuelan abrumadas;

No necesito reconocimientos,

Por mis manos tristes.

Cansado me encuentro,

Fatigado por que la saliva se me ha secado,

No puedo despegar mi boca mientras mis manos hablan,

Mi garganta ya no puede más con la comezón.

¿Cuál es mi objetivo de todo esto?

Me he preguntado en silencio,

¿Será solo esperar mi muerte?

Cansado me duermo, con éstas dudas en el pecho.