Capítulo Quince
¿Quién lo diría?
Después de que todos pasarán a su habitación por orden, Jaehyun fue el que se apresuró en decir que se quedará con Kim toda la noche. No aceptó un no por respuesta y condujo para su casa a bañarse y cambiarse su ropa húmeda, y preparó un bolso lleno de distintas cosas, volvió a dirigirse hacia el hospital.
Cabe destacar que antes de salir del hospital se encontró a lo lejos a Jungwoo marchándose en un lujoso auto negro, al cual no pudo descifrar al conductor. Le pareció un tanto sospechoso pero no es momento de preocuparse por otras personas.
También ya se había despedido de sus padres, quienes solo mandaron saludos para Doyoung prometiendo que la próxima vez lo conocerán. Johnny casi celebró por haber podido proteger su billetera.
Ahora de regreso, camina hacia la habitación de Doyoung y abre la puerta, encontrando al susodicho medio sentado hablando con Taeyong, quien también pasará la noche y Yuta lo acompañará, su habitación queda en otro pasillo.
—Pensé que tardarías más —comentó Do mirando con sorpresa al recién bañado Jaehyun. Vistiendo unos Jeans azules y un suéter beige. Su cabello aún húmedo pero bien peinado con solo unos pocos mechones cayendo de su frente. Es tonto pensar que se ve aún más atractivo que antes, con su radiante sonrisa dirigida hacia el Profesor y no ha nadie más.
El corazón de Doyoung latió fuerte y un extraño calor sintió en su abdomen, las tan llamadas mariposas en el estómago.
—Me apresuré, no quería que te quedaras solo —contestó mientras camina al sofá y deja el bolso.
—No está solo, está conmigo —intervino Taeyong —Puedes confiar en mi para cuidar de él, JaeJae.
—Es más confiable que yo cuide de los dos —opinó, se aproximó a ambos Omegas y se sentó al borde de la cama, teniendo a su lado las piernas de Doyoung cubiertas con las sábanas.
No duraron mucho tiempo hablando ya que los dos heridos se sienten bastante cansados. Yuta llegó para llevarse a Taeyong, despidiéndose amigable ante Jaehyun agradecido con él, en cambio Jae se sintió algo incómodo, esbozando una sonrisa a medias ve a la pareja marcharse de la habitación.
—¿Te está cayendo bien Yuta-ssi? —cuestionó Doyoung logrando sacarlo de su trance, se gira a verlo y tardó en responder, algo que le supo un mal sabor en la boca.
—¿Por qué me caería bien? —contestó un tanto sarcástico. Se dirigió al sofá y saca una manta del bolso que trajo —No puedo negar que es decente, porque lo es. Parece amable y no es totalmente feo pero aún así, no puedo dejar a Tae-Hyung en sus manos.
—¿Por qué?
—Si ya sabes la respuesta, ¿para qué preguntas? —soltó de pronto en tono frío —Vamos a dormir, se nota que estás cansado.
Doyoung no respondió y se ocultó con las sábanas dándole la espalda al Alfa con una opresión en su corazón. Tiene razón, ¿por qué preguntó si ya sabe la respuesta? ¿Tanto anhelaba escuchar algo más que un "Amo a Tae"?
Jaehyun apagó la luz y echándole un último vistazo al pelinegro se recostó en el sofá. Lo malo es que al ser muy alto, su cuerpo sobrepasa el tamaño del mueble, tuvo que dormir al costado con las piernas flexionadas.
Con sus ojos solo siendo oscuridad, cerró sus párpados esperando paciente que su mente se deje llevar por la inconsciencia ya que consciente, se encuentra abrumado con extraños sentimientos que no entiende sobre si mismo. Su mente es un caos, como si un terremoto estuviera sucediendo, los edificios cayendo, las calles llenándose de grandes grietas que terminan por destruirlo todo, las personas gritando una tras otras con innumerables sollozos.
Así de abatida se encuentra su mente.
Pero aún cuando perdió la noción, ni dormido logró descansar, ya que seguía escuchando los gritos, uno tras otro. Tantos llantos que lo aturden.
Jaehyun se tapa los oídos con sus brazos y tambalea en su caminar, el piso sigue temblando y ve en frente de sus ojos como los edificios a su alrededor siguen destruyéndose. Volviéndose una lluvia de paredes y ladrillos que caen a su alrededor.
Intenta correr, pero solo logra dar lentos pasos con su cuerpo balanceándose de un lado a otro, inestable.
Su ojos rojos con lágrimas descendiendo en contra de su voluntad. Se siente asfixiante, tan angustiante que se jala sus propios cabellos y cae arrodillado contra el suelo. No lo entiende pero aún así, sólo desea salir de ahí.
Ve una sombra a unos metros de si, un cuerpo varado y oscuro al cual no puede reconocer el rostro.
—P-Por favor... —extendió su mano al aire con esperanza, creyendo que de verdad aquel sujeto lo salvaría, lo sacaría de su propio infierno y destrucción —¡P-Por favor!
Y con ese grito, Jaehyun logró abrir los ojos de forma abrupta, viéndose a sí mismo recostado en el sofá del cuarto, sigue en el hospital, no en la calle ni con un terremoto sacudiendo su mundo.
Se sentó y pasó sus temblorosas manos por su rostro, notando sus húmedas mejillas. ¿Por qué lloró? ¿Qué le está pasando?
Su cabeza duele como los mil demonios, tanto que siente como palpita. Se levantó tambaleante y entre la oscuridad de la habitación caminó hasta el baño, prendió las luces y cerró la puerta detrás de si.
Se detuvo enfrente del lavado con el espejo que deja ver su lamentable reflejo. Abrió el grifo y tomando una cantidad de agua con ambas palmas, se moja el rostro varias veces intentando recobrar su propia cordura. Se frota sus mojados párpados y cuando por fin abre los ojos para mirarse a sí mismo en el espejo, ve un cuerpo detrás de suyo.
Un hombre con capucha, vestido completamente de negro con sangre manchando sus prendas y sus brillantes ojos mirándolo sin despegar su vista de él.
Se sobresalto y giro sobre su hombro para verificar si de verdad hay alguien pero... No había nadie.
Vuelve su vista al espejo y tampoco ve nada. Frota sus ojos y de nuevo se mira en el reflejo.
«Maldita sea, debo de estar tan cansado» Se sobo la frente estresado. Como doctor auto-medicándose para él fue obvio que debe de ser un pequeño estrés debido al susto que pasó. Imaginando a un hombre de negro con sangre hace referencia a esos criminales.
Apagó las luces y volvió al sofá para recostarse boca arriba sin importarle que parte de sus piernas queden colgando, pasó sus brazos debajo de su cabeza y suspiró una vez supo que tal vez, le sería difícil dormir en esa noche.
¿Por qué con Doyoung suceden y siento cosas que nunca había sentido?
Al día siguiente, les dieron de alta a ambos Omegas. Mientras Yuta se llevó al pelirosa, Jaehyun ayudó a Doyoung a montarse con cuidado a su auto.
Guardando su bolso y las medicinas que le recetó el doctor al herido en los asientos de atrás, se sentó en el piloto y arrancó.
—Hyung, deme la contraseña de su casa —le dijo Jae una vez empezó a conducir.
—¿Para? ¿Sabes que aún tengo todos mis dedos para presionar los botones?
—Si pero usted esta herido y en parte me siendo culpable. Si hubiera estado ahí vigilandolos de lejos, no estarías así.
—No es tu culpa, todos somos unos adultos y tomamos nuestras propias decisiones, si quisimos ir sin Alfas fue nuestro problema.
—Lo sé... Pero aun así, no puedo dejarte ir a tu casa.
—¿Y dónde se supone que dormiré, eh?
—En mi departamento, te llevaré ahí para que puedas curarte con calma sin necesidad de hacer trabajos, lo haré todo por ti.
Doyoung negó de inmediato —No es solo tu departamento, viven tres Alfas. ¿Me harás vivir con ustedes?
—Nosotros somos inofensivos, lo sabes.
—Lo sé pero aún así... —se ruborizo. Claro que no quiere ni debe dormir bajo el mismo techo que ese tonto.
—Johnny es muy amable y divertido, te hará reír. Kun es serio, tal vez tengas varias cosas en común siendo ambos rectos y maduros. Te agradarán mis amigos —desviando su vista de la calle, la posa en Doyoung mirándolo a los ojos —Te prometo que ellos no te lastimaran.
—Si, lo sé pero... ¡Mira al frente mientras conduces, no a mi! —exclamó de pronto.
Jung se ríe mientras le hace caso. Mirando al frente no borra su divertida sonrisa del rostro.
—Te cuidaré.
—Pero aún así no debes de hacerlo... —Kim juguetea tímido con sus dedos en su regazo, apenado y algo sonrojado.
—Si quieres llámalo como mi paga por toda tu ayuda con Taeyong-hyung, ¿si? Te debo mucho.
«No me debes tu amabilidad, me debes tu fidelidad y promesa de amor como mi Alma Gemela»
Cuando llegaron al Edificio, Jae estacionó su auto en el estacionamiento y aún cuando no es necesario ayudó a Doyoung a caminar, algo que el Omega le reclamó, puesto a que sus piernas están bien, sólo es su hombro.
Subieron en el ascensor al octavo piso y Jae le abrió la puerta a su casa.
Cuando Doyoung entró, el fuerte aroma de Alfas mezclados le golpeó tan abruptamente como si le hubiesen dado una cachetada. Campo Silvestre y Café, Hierva Buena y Chocolate. Todo huele a eso y 0% de algún olor ajeno.
—¿Ustedes no tienen amigos? —cuestionó Doyoung después de quitarse los zapatos y caminar. Viendo a su derecha el comedor y la cocina y del lado izquierdo un gran espacio que da a la sala.
—¿Me estás ofendiendo? —una tercera voz sorprendió al Omega. Es Johnny quien viene saliendo del pasillo que da a las habitaciones. Se acercó a ambos egresados.
—No, solo pregunto porque aquí solo me llegan sus aromas como si nunca invitaran a nadie a la casa —respondió, tratando de sonar respetuoso aunque indirectamente los haya llamado antisociales.
—Bueno, de por sí prefiero reunirme en casa de Sehun, no se si te acordarás de él ya que aquí no hay espacio. Además, Kun es como un viejo cascarrabias que ahuyenta a las personas. Y Jaehyun... Bueno, él es él —fue diciendo el americano mientras camina al sofá y se tira en el para tomar el control remoto.
—¿Y eso que significa, eh? ¿Me estas insultando? —cuestionó Jae entre dientes, un tanto ofendido.
—¿Viejo Cascarrabias? —ahora es el chino quien llegó desde el pasillo, arquea una ceja irónico, dirigiéndose hacia el americano. Mira a Doyoung y le da una pequeña reverencia —Buenos días, Doyoung-ssi.
—Buenos días. Puedes llamarme Doyoung, tenemos la misma edad —también le saludo respetuosamente.
—¿Y por qué él puede llamarte por tu nombre y yo no? —se quejo cual niño, Jae, molesto.
—Nuestros cumpleaños son a un mes de diferencia, tu cumples siete meses más tarde que yo. Además, si hablamos subjetivamente, estás adelantado un año —y es cierto, este año todos van para los veintiséis años mientras Jaehyun cumplirá los veinticinco, exceptuando a Johnny.
—¿Y qué tienes en tu defensa, chico Valentín? —se burlo John desde su posición.
Él solo bufo como respuesta.
—¿Y por qué trajiste a un herido a la casa si es mejor que este descansando en la suya? —cuestionó Kun.
—Doyoung-Hyung no puede hacer mucho esfuerzo, tiene que cambiarse los vendajes y pasar alcohol a sus heridas todos los días. Soy el único que puede ayudarlo, vivirá aquí hasta que se cure.
—¿Una boca más que alimentar? Sabes que tenerlo traerá más gastos de luz, agua y comida. Yo no voy a hacer caridad por nadie.
—¿Y para qué ahorras tanto dinero, maldito tacaño? —exclamó el americano. —A lo mucho estará dos semanas y está claro que no comerá ni gastará tanta agua como nosotros. ¿Cómo puedes ser tan insensible?
—Y-Yo puedo pagar lo mío —apresuró a decir Kim avergonzado. Qian lo hizo sentir como si fuese un gran peso que aguantar y realmente no quiere sentirse como uno para nadie.
—No, yo pagaré por él —rectificó Jae con el ceño fruncido —Si eso es lo que te preocupas, tranquilo, no sacaré ni un maldito billete de tus bolsillos.
—Bien —asintió serio y les da la espalda para dirigirse a la cocina.
Jaehyun lo mira y niega con su rostro —No lo puedo creer, ¿así de tacaño te crío tu familia? —aunque fue un murmuro, todos lo escucharon.
—¿Cuál familia? ¡Sus padres nunca le prestaron atención, por eso él es así de bastardo! —intervino Johnny furioso.
El Chino se gira sobre sus talones, molesto con lo que le dijo el más alto. —¿Acaso te crees con el derecho de hablar sobre mi familia, hijo de un golpeador?
Tal vez Kun, no debió de haber mencionado aquello porque aunque Johnny superó esas duras épocas que le tocó vivir, recordar al hombre que alguna vez admiró y llamó "papá" no le hace ningún bien.
¿Está bien el comportamiento de Kun?
¿Cómo se lo tomará Johnny?
Con Doyoung en aquel departamento con tres Alfas, ¿Qué es lo peor que podría pasar?
En este capítulo tenía previsto anexar dos nuevos personajes pero me salió tan largo que lo tuve que dividir en dos. El próximo cap está prácticamente listo, ¿quieren que lo publique hoy o pueden esperar?
No olviden votar y
comentar si les gustó❤️
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro