Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo Nueve



No sabe como es que terminó accediendo a acompañar a Jaehyun a la estúpida "reunión" para nada casual, la cual claramente tendrá razones ocultas.

Sinceramente, Doyoung si le gustaría volver a ver a Taeyong y estar en contacto con él. A pesar de que estuvieran en diferentes años y diferente "Estatus" en la Secundaria, eso no impidió que formarán una amistad.

En más de una ocasión, Lee se desahogo con él. Quejándose de toda la presión social que recibe por ser "atractivo", Doyoung sabe que fue difícil para su mayor, sabe que no siempre la pasó bien, que la adulación y el amor que todos sienten por él solo por ser lindo, le afectaba en aquel tiempo. Siempre creyó que Jaehyun era como los demás, bueno, tal vez si un poco o al menos al principio pero actualmente, parece que de verdad ama al pelirosa. Más que su físico, parece ver dentro de él. Y todo eso, le causa mucho miedo.

Quiere irse, quiere tirar todo por la borda. Aún no entiende o más bien no quiere entender por qué fue tan estúpido para darle ayer su número a Jung y aceptar ir a la estúpida reunión. Quiere apoyarlo, no quiere fallarle pero ¿aún si en el trayecto es él quien queda herido?

Podrá sonar cruel pero se alegro muchísimo cuando se entero que en estos casi diez años, Taeyong nunca miró con otros ojos a Jaehyun y es que es obvio, el pelirosa es muy difícil de enamorar, su apariencia delicada y rosa confunde. Doyoung sabe que Tae es mucho más que fresas y rosas ¿Jung también lo sabrá?

Esperaba que no, porque si de verdad lo conoce y lo ama como "dice amarlo" estará gravemente en problemas.

—Señora Luna, ¿por qué me dio a un Alfa tan retrasado? —cuestionó mientras veía el cielo, con anhelo y tristeza.

Hace nueve años se fue porque su Omega no soporto la tristeza, Jaehyun le había lastimado de verdad, hasta el punto de dejarle una cicatriz de por vida. En ese tiempo, era un tonto adolescente que intento ser amable pero en cambio recibió migajas de parte de su propia "Alma Gemela". Cayó en una gran depresión, de la cual aún no sabe como superó o en realidad, nunca lo hizo, si no, aprendió a vivir con esa cesante punzada atacandolo todos los días y recordándole la patética pareja que le había tocado.

A los dieciséis, Doyoung pensó que el problema era él, ahora con sus veinticinco se dio cuenta de que no es así, el problema es Jaehyun.

—¿Luna? Si aún son las tres de la tarde —llegó el tan mencionado galán, mirando divertido al maestro.

—No es nada —contestó inflando sus mejillas de la vergüenza, intenta no mirar al Alfa pero es imposible, se ve malditamente hermoso. ¿Cómo Jaehyun le hacía para verse así de bello? ¿Por qué es médico y no actor?

Sus castaños cabellos perfectamente peinados cayendo en su frente de forma alineada. Viste unos jeans que se apegan bien a sus piernas altas, esbeltas y ejercitadas. Una camisa blanca más un saco beige entre causal y elegante.

—¿Quieres que me quite la camisa? —la pregunta del Alfa descolocó al Omega, él cual se ruborizo.

—¿Q-Qué? ¿De qué hablas?

—Solo digo, tus ojos parecían querer ver a través de mi ropa, ¿no? Dime, ¿eres capaz de negarlo? —mueve de arriba a abajo sus cejas de forma juguetona, con una sonrisa orgullosa y pícara.

—Si sabes que eres atractivo, ¿por qué no eres al menos un poco más modesto con ello? —cuestionó con molestia, no siendo capaz de sostenerle la mirada al más alto.

—Yo soy humilde —contestó con seguridad, de pronto poniéndose serio.

—Si claro —se burló. Con todo ese temperamento ¿en serio es capaz de llamarse "humilde"? — Será solo con Taeyong-Hyung delante. ¿Él acaso conoce todas tus facetas? Respóndeme.

—Si, Tae-hyung me conoce —pareció un poco inseguro al responder y ahora es él quien evita la mirada del Omega.

«Mientes, es obvio que mientes. Hasta tu maldito aroma te delata» Pensó con los dientes apretados más decidió no proseguir.

—Vamos de una vez, ¿dónde es la cafetería?

—Ven, por aquí.

Juntos se disponen a caminar con el Alfa siendo el que comanda el camino.  Mientras caminan, pasaron cerca de un gran Teatro, en el cual hay varias personas entregando avisos para una futura audición. Doyoung se dio cuenta cuando una chica se acercó a ellos, pero más específicamente por su hermoso acompañante que por él y los detuvo extendiendo el aviso.

—Disculpe, pero eres muy atractivo, ¿no has pensado en ser actor?

Jaehyun soltó una melodiosa risa, gustoso por el gusto de la chica por él. —Gracias, pero en realidad no, soy médico.

—Al menos piénselo —dicho esto le dejo el aviso y luego se fue, sin darle ninguno a Doyoung, al menos por cortesía.

—Que tonta, no te dio uno —la sonrisa de Jung desapareció al instante, mostrándose repentinamente enojado.

—Igual no me interesa, no me gusta la actuación —apresuró a decir rápido, no entendiendo por qué de pronto siente el olor de café agrio.

—Aún así, ella te faltó el respeto —murmuró receloso. Mientras caminan el basurero quedó cerca de ellos y Jae botó el anuncio.

—¿No te gustaría probar?

—Voy a ser médico, Hyung no actor. Seré atractivo pero no tengo el talento —se encogió de hombros desinteresado.

—Me acuerdo que eras modelo infantil de pequeño, incluso actuaste en todas las obras de la escuela, siempre como protagonista y creo que apareciste en uno o dos dramas de pequeño, ¿cierto? ¿Por qué no seguiste? Te hubiera ido muy bien —de pronto Doyoung recordó aquello y lo dijo en voz alta.

Aquel es un pasado que Jung desea olvidar y desterrar. Apretó los puños y dejó todas las palabras que quería sacar acumulándose en su garganta.

—Yo... No me gusta eso —dijo entre dientes.

—Veías muchos kdramas, te gustaban bastante. Creo haberte escuchado más de una vez decir que serías actor, realmente creí que te convertirías en uno.

—¿Un actor? —bufo irónico —No, no me gustan. Son gente problemática con muchos problemas y escándalos. No me gusta la fama y ya no veo dramas como antes, Hyung.

—¿En serio? —lo miró sorprendido.

—No tengo tiempo, debo sentar cabeza, estudiar y madurar, ¿sabes?

—¿Seguro que eres una persona madura?

—¿Qué intentas decir?

—¿Por qué de pronto te pusiste tan a la defensiva? —lo reto sin miedo.

Ambos mirándose a los ojos, con chispas destellando. Ahí, Kim se dio cuenta que estaba entrando a terreno prohibido y desconocido.

—Sólo decía, porque realmente recuerdo que te gustaban los dramas. Siento si te molestó —apresuró a decir fingiendo pena, era mejor parar antes de irse a peores. Aún así, le da curiosidad saber ¿Qué pasó con Jaehyun en todos estos años?

Jung negó a los segundos con una sonrisa relajada. —Está bien, las personas cambian.

—Si...

Juntos llegaron a una cafetería y entraron, Taeyong y Yuta, ambos se encontraban esperándolos en una mesa. Los ojos del pelirosa se iluminaron al ver al Omega pelinegro, se levantó de su asiento y corrió hacia su viejo amigo.

—¡Dons! —exclamó con emoción y abrazo al más alto.

Doyoung se sorprendió al principio pero cuando sintió la calidez emanar de su mayor, sonrió y correspondió el abrazo.

Hyung, lo extrañe.

—Mentiroso, si me hubieses extrañado me habrías contactado antes —se quejó con un tierno puchero en sus labios. Alejándose del menor lo mira de arriba a abajo —¿Y tus lentes?

—Me hice el láser.

—Vamos a sentarnos y hablar, por cierto, hola, Taeyong-hyung y... Yuta-ssi —saludo nuestro protagonista, intentando sonar lo más cómodo posible.

Doyoung lo mira de reojo y huele la incomodidad.


«Tonto, ¿será por esto que querías traerme?» Pensó receloso.


Los cuatro se sientan, con Taeyong presentando su pareja al nuevo egresado.

—Él es Yuta Nakamoto, trabaja en pediatría infantil en el hospital al cual estoy haciendo una pasantía.

—Un placer.

—Igual, Taeyong me ha hablado mucho de ustedes —señaló incluso a Jung, con una amable sonrisa —Espero que puedan seguir cuidándolo.

—Soy un simple profesor, el que me cuidara más es él —bromeo Do.

—Debes de ser el hombre más suertudo del mundo, tienes tres doctores en tu mesa —esta vez agregó Jae con humor.

—Tae-hyung ¿qué pasó con este que de repente quiso ser Doctor? Sus notas en biología estaban peores que las de matemática —al decir aquello recibió un pellizco en su pierna de parte de Jaehyun, él solo sonrió malévolo e intenta quitar la mano ajena con disimulo, ambos forcejeando debajo de la mesa.

—¿En serio?

—Si, se destacaba en Literatura y Deportes por ejemplo. En primer año se desmayó cuando trajeron el corazón de un cerdo para señalar sus partes. Gritó como una típica chica en apuros, corrió por todo el salón y chocó contra pared, casi creímos que se rompió la nariz —fue explicando tal relato entre risas, causando también de parte de la pareja.

—Yoonoh, ¿en serio? ¿Por qué nunca me contaste esto? —cuestionó Tae al menor intentando aguantar la risa.

El castaño tenso su mandíbula y se contuvo en no mirar con odio al profesor, suspiro y esbozo la más falsa de sus sonrisas. —Si, bueno. Me da vergüenza.

—Jaehyun en sus primeros años era una nenita, muy sensible, por eso todos pensaban que sería Omega —concluyó, mirando con burla al castaño, el cual lo amenaza con su mirar de que se callara.

—Oh si, escuche ese cuento de parte de John-Hyung —recordó Tae.

—¿En serio? —el Japonés se sorprendió. —Eres muy alto y hasta más atlético que yo, si me lo preguntaras, a primera vista te ves como un Alfa.

—Jaehyun es un poco más sensible de lo usual en un Alfa —aseguró Doyoung.

El pelirosa frunció el ceño y negó —No tanto, tal vez lo era antes pero en los últimos años, Jae es como un verdadero Alfa.

«¿Verdadero Alfa?» Quiso bufar y reírse a carcajadas pero se contuvo para que no le miraran raro. Solo lleva una semana en la que volvió a ver a Jaehyun y puede asegurar con su propia vida que más sensible, dramático y egocéntrico que el Alfa no hay.

—Pero si es muy consciente y amable, no es tan territorial como muchos Alfas —concluyó.

—Bueno, tal vez si, llevo diez años afuera —asumió, no intentando avergonzar más al Alfa. —Por un momento pensaba que morirías sin pareja, me alegro de que hayas conseguido a alguien especial. Sr. Nakamoto, cuidelo con su vida, Hyung es muy especial.

—Lo sé —sonrió y Tae se ruborizo.

—Me cuida muy bien, tranquilo —apresuró a decir.

Jaehyun toma su té helado y bebe un gran sorbo tensando su mano casi aplastando el vaso. Odia como la parejita se mira con esos tiernos ojitos de "enamorados".

El tiempo pasó y su charla fueron de cosas triviales. Odio a Yuta porque se ve amable, maduro y un Alfa pacífico sin parecer posesivo ni celoso. «¡Rayos! En personalidad aún no le veo ningún punto malo» bufo internamente analizando al japonés. Es la primera relación de Taeyong con veintiséis años, claro que el pelirosa iba ser muy meticuloso al elegir a su pareja. Ahí, Jaehyun supo que, le costará pero podrá lograrlo, lo hará.

Taeyong y Yuta deben de terminar, así sea por los peores métodos posibles.

Dos horas pasaron, gustosos hablando hasta que es hora de que la pareja se vaya y siga con su cita a parte.

—Un placer haberte visto, Dodo —sonrió amable el pelirosa después de haber intercambiado números con el pelinegro —Estaremos en contacto, lo prometo.

—Gracias por todo, también estoy feliz de verte —le contestó.

Ambos se dieron un abrazo. Luego Tae se dirigió al Alfa castaño y también lo rodeo con sus brazos. Jaehyun correspondió feliz.

—Gracias por traerlo, Jae —dijo una vez se separó y se posicionó al lado de su pareja. —Nos vemos otro día entonces.

—Adiós, es un placer haberlos visto —ahora es Yuta quien hablo amable.

Se despidieron y cada dúo se fue por su lado.

Doyoung se encarga de mirar el rostro pensativo de Jaehyun, dándose cuenta que parece haber ido a otra galaxia.

—Hey, ¿sigues aquí? —cuestionó agitando sus manos enfrente de los ojos del más alto.

—¿Ah? Si, si. Solo pensaba

—En maneras de conquistar a Tae-Hyung aún cuando él tiene pareja, ¿no? —cuestionó obvio y arqueo una ceja.

—¿Cómo supiste? —rió avergonzado mientras se rasca la nuca.

—Eres muy obvio, ¿sabes?

—Y hablando almamente y por decisiones de la Diosa Luna, Yuta-ssi no es su pareja, si no yo —se tocó el pecho.

Doyoung puso los ojos en blanco —Si tu dices...

—No es si yo digo, es algo que esta destinado a ser, Hyung —insistió, poniéndose delante de su mayor deteniendo su caminar.

—Jaehyun, ya sé que quieres seguir creyendo que Tae-hyung es tu predestinado. Bien por ti, pero no me metas en tu embrollo. Estoy muy feliz y agradecido de que me lo hayas traído de nuevo a mi vida pero no voy a ser tu espía ni tu mensajero —dijo con seriedad, mirando a los ojos del Alfa sin temor.

Lo ayudaría con gusto si fuera su amigo pero no, es su predestinado. No será tan tonto en hacer otra vez una cosa así, no sufrirá cual pendejo como años atrás.

No desea volver a derramar lágrimas por ese idiota sin cerebro. Sólo...

—Tu dijiste que me ayudarías, hyung~~ —bajo las cejas cual cachorrito e intenta tomar las manos más pequeñas pero el profesor huye de su tacto y retrocede con una opresión en su pecho.

—No es no, Jaehyun —dijo sintiendo como la voz se le rompe en el acto. Trago el nudo de su garganta e ignoró la súplica de su tonto Omega sensible.

Jung quiso decir algo, quiso insistir más pero se calló, entendió y asintió. —Está bien —ya no sonríe ni parece emocionado. —Vamos, te acompañaré a casa.

—No es necesario, yo puedo ir solo —negó, rodea el cuerpo más alto y sigue caminando sin mirar a nadie.

Jaehyun no queriendo dejar ir al mayor de esta forma, lo persigue.

—Déjame acompañarte.

—No, Jaehyun.

—La semana pasada encontraron tres Omegas muertos, ¿has visto las noticias? Dijeron específicamente "no dejar a los Omegas solos por las calles".

Doyoung bufa y se detuvo para señalar a su alrededor —Estamos a plena luz del día, no es la noche aún, hay mucha gente y no es peligroso.

—Pero...

—Solo hasta la esquina de la próxima cuadra y ya.

—¿Eso esta cerca de tu casa?

—Tu decides si quieres acompañarme —dejando con la palabra en la boca al Alfa volvió a caminar.

—Está bien, está bien. Hasta la esquina —sonrió a medias. «Algo es algo» pensó.

De ahí a la esquina, no hablaron. El Médico se dio cuenta que el mayor no parece estar de humor, su rostro inexpresivo sin pizca de felicidad. ¿Volvió a ofenderlo? Se rascó la nuca con frustración pensando en lo que pudo haber dicho.

—Lo siento —soltó una vez se detuvieron hasta su límite.

—No te disculpes, deja de hacerlo, no es necesario —negó Do harto. Jaehyun acostumbra a cagarla de forma inconsciente y aún así se disculpa. Eso demostró su alma noble y amable.

—Es que no sé, siento que sigo haciendo las cosas mal con usted. Si lo ofendo dígame de verdad en qué parte fue para saber, por favor —sus ojitos tristes y culpables colaron en el corazón de Do.

—No me has ofendido, simplemente rechacé un favor tuyo, nada más —intentó restarle importancia.

—Pero...

—Cambiando de tema, ¿por qué Taeyong-hyung se refirió a ti como Yoonoh? ¿Desde cuándo te haces llamar así? —preguntó. En parte queriendo cambiar de conversación y por otra parte, aquello lo dejo sumamente curioso. Toda su vida siempre ha sido Jung Jaehyun, incluso en su identificación aparece.

—Ah... Eso —vacilo un poco. —Si, bueno... Yo, solo me gusta que me llamen Yoonoh de vez en cuando.

Doyoung sintió algo extraño en el aroma de Jaehyun. Una mezcla entre dolor y prohibido, algo desterrado y olvidado. Una hoja marchita, vieja y pudrienta encerrada dentro de alguna caja fuerte, si, esa es la sensación que da.

Usualmente, el Alfa demuestra lo que siente con sus feromonas al aire libre en donde cualquiera lo puede oler pero este extraño olor, esta muy dentro de sí, que solo él como su Alma Gemela lo puede captar.

Es triste. Siente tristeza por algo que no entiende.

Mira con confusión la tranquila sonrisa que esboza el Alfa, tan lindo y tierno. ¿Por qué se ve tan tranquilo si algo le está quemando con su pregunta? ¿Por qué "Yoonoh"?

—Jaehyun, ¿estás bien? —cuestionó entre el abrumador silencio.

La gente pasa a su alrededor pero eso no parece afectarlos, perdidos en su burbuja personal, mirándose a los ojos mientras sus corazones gritan tantas cosas que desean pronunciar con sus propios labios.

La pregunta descolocó al Alfa, ya que sabe que no es la típica de "¿Cómo estás?" "Bien y tu". Doyoung le estaba preguntando de verdad y aquello solo logró aterrarlo. Por alguna razón, es la primera vez en su vida que siente que es como un vaso transparente, en donde todo su interior puede ser visto ante el Maestro. Inseguro, indefenso y desnudo.

Es raro y no sabe si le gusta o disgusta.

Lo único que está consciente es que es algo que nadie debería de saber. Es algo con lo que vive todos los malditos de su vida olvidando, desterrando para poder vivir, para poder seguir creyendo en su propia felicidad.

No se dio cuenta cuando las lágrimas hicieron un camino por sus sonrojadas mejillas. Su labio inferior tiembla en romper la sonrisa que tanto le cuesta mantener. ¿Por qué no puede seguir sonriendo ante Doyoung? Hace años le hicieron la misma pregunta varias veces y nunca reaccionó así.

Kim sintió un pesar grandísimo arrasar su corazón, como si un enorme camión hubiera aplastado su pecho una y otra vez. Levanta su brazo y deja que la palma de su mano repose en la mejilla del más alto para secarle sus lágrimas.

Sabe que algo anda mal, ver esos hermosos ojos cristalinos y rojos suplicando que todo acabe.

—No —contestó al fin en un hilo de voz.


Jaehyun no está bien y Doyoung quiere entender qué pasó mientras no estuvo porque claramente hay mucho más que no ha dicho ese tonto Alfa. Algo que tuvo que ver con la razón por la que su vida se rompió.












¿Qué creen que le está sucediendo de verdad a Jaehyun?
¿Su "amor" por Taeyong se debe a algo más?
¿Doyoung podrá descubrir qué sucede?

Dato:

En mi fic, como se habrán dado cuenta, a veces las emociones ocultas los predestinados logran reconocerlas. Así como Winwin y Kun, o Doyoung con Jaehyun. Tienen una conexión especial e íntima de forma emocional.

También en los primeros capítulos cuando Doyoung "calmo" los instintos agresivos de Jaehyun la primera vez que conoció a Yuta, sólo entre predestinados pueden hacer eso.
Lo explico por si acaso.








No olviden votar y
comentar si les gusto ❤️





Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro