Hwang HyunJin sabía que estaba mal. Dejar que Félix tomara el control estaba mal. Pero se sentía realmente bien.

—Fé-Félix, bebé. —Insistió el alfa con la respiración entrecortada al sentir la lengua de su omega bajar por su barbilla hasta llegar a la manzana, en donde mordió levemente sacando un grueso gemido al rubio.

—Oh, Hyung~ —Félix comenzó a restregar su hombría contra la de su novio, haciendo que HyunJin expulsara gemido dignos de él.

—Félix, n-no. Debe... Mgh~ —Félix movió sus caderas en círculos en busca de que HyunJin poseyera su cuerpo —. Vamos, bebé. Levántate ahora y prometo que te- ¡Ah! —El pecoso con una sonrisa juguetona en los labios posó sus manos en el creciente bulto del alfa.

—Solo un poquito~ —Comenzó a dar saltitos haciendo sudar aún más al mayor —. Prometo que seré un buen niño si me das lo que quiero~

El australiano sonrió cuando HyunJin detuvo sus movimientos posicionando sus grandes y pálidas manos en sus bien trabajados muslos. HyunJin intentaba recuperar el aliento con la boca abierta y ojos cerrados.
El omega bajó hasta rozar sus rosados labios con los de su alfa y este al sentirlos tan cerca solo pudo tomar entre sus dientes el labio inferior de Félix, haciéndolo reír mientras él lamía suavemente la superficie rosada.
Félix se acercó más hasta atrapar entre sus labios el superior de HyunJin, comenzando así un movimiento lento, casi relajante.

—¿Por qué siempre te dejo ganar? —Preguntó el mayor subiendo sus manos a lo largo de los muslos del peligris.

—Porque eres bueno, Hyung~

HyunJin sonrió y llevó su mano derecha a la nuca de Félix, acercándolo más hasta sentir su pecho haciendo presión sobre el suyo. El alfa flexionó sus rodillas empujando con ellas el trasero de Félix con el fin de sentirlo cerca de su entrepierna. El peligris soltó un suspiro y se levantó. Tomó los bordes de su camisa y la levantó para sacarse la prenda azul, Hwang se enderezó y besó el pecho de Félix haciendo presión por detrás de su cintura. Bajó hasta los pezones erectos de su omega y pasó su lengua sobre el derecho del pecoso. Bajó sus manos hasta sentir el resorte de la ropa interior del menor.

HyunJin sonrió y Félix gimió.

—¿Vas a hacérmelo? —Preguntó con una sonrisa de lado mordiendo su labio inferior al terminar la frase, que a los oídos de HyunJin era más erótica que inocente.

—Por supuesto. No puedes dejarme así otra vez. —Dijo recordando el día en el que festejaban su primer mes juntos.

HyunJin levantó a Félix y lo colocó de espaldas sobre el colchón firme del alfa. Las mejillas sonrojadas del australiano y su respiración errática lo delataban. Hwang llevó sus delgadas manos al botón de los pantalones negros de Félix y lo desabrochó, nuevamente besó al omega y este levantó sus caderas para que el contrario lograra sacar sus pantalones de un jalón. HyunJin dejó a su novio en ropa interior y la penetrante mirada del alfa hacia sentir a Félix cada vez más y más húmedo de su fina cavidad.

—Ah... ah~ —Se quejó el más bajo —Necesito tus manos, Hwang.

El rubio no tardó en sacar la ropa interior de su pareja para después posicionarse entre sus piernas.

—¿Listo? —Sonrió y miró a Félix, su pecho subía y bajaba rápidamente esperando que HyunJin decidiera de una vez hacerlo suyo —Uh... Bebé, ¿Siempre lubricas así? —Dijo llevando su dedo índice a la entrada del omega, haciendo que diera un respingo.

—N-No... Solo ¡Mgh~! —Félix cerró los ojos al sentir su entrada ser profanada lentamente por el delgado y fino dedo de HyunJin —Solo ha pasado tiempo desde... La última vez~ ¡Sí-Sí! —Gritó al sentir cómo un segundo dedo era introducido en su entrada.

El mayor disfrutaba de los sonidos –casi ronroneos– que producía la apetecible boca del chico debajo de él. Sentía el lubricante de Félix cada vez más caliente y su apretada entrada comenzaba a dilatarse con cada empuje que sus dedos daban.

—¡Alfa~! —Félix soltó un suspiro y escuchar al pecoso gritar así repercutió en la –ya formada– erección del rubio con mejillas coloreadas de rojo.

HyunJin detuvo las embestidas hacia el omega y este se quejó en voz baja hasta que sintió el miembro pulsante de su hombre rozando su cavidad.

—Prometo que seré suave, hermoso. —HyunJin besó la frente contraria antes de apoyar su mano derecha en el abdomen de Félix y comenzar a entrar en él.

—¡Mgh~! ¡A-Ah! —La grave voz de Félix se hizo presente y HyunJin no hizo otra cosa que enterrarse por completo en la caliente entrada del otro.

Salió por completo del cuerpo curvilíneo que lo resguardaba y Félix respiró pesadamente. Se adentró nuevamente en la cueva caliente de su omega, pero con más fuerza que la vez anterior y solo esperó el asentimiento del peligris para comenzar a moverse.

—¡Sí~! ¡Dios así, Hyung. Sí~! —Jadeó Félix y el rubio siguió el ritmo rápido como queriendo romper al menor.

Tomó las piernas de Félix y las enroscó en su cintura, haciendo que más estocadas llegaran cada vez más profundo. Félix enterró sus uñas en las manos de HyunJin que sostenían su cintura mientras dejaban marca y ayudaban al alfa a darle hasta el fondo al otro.

HyunJin se detuvo y salió de Félix para levantarlo y llevarlo hasta la puerta. Lo recargó y sostuvo su trasero en sus manos, dando un rudo golpe hasta que la piel en el área se tornó rojiza.

—Uh... ¡Ah~! —HyunJin lo penetró de una y sin avisar, tomando así por sorpresa al pequeño pecoso.

HyunJin golpeaba y amasaba el firme trasero del acuerpado chico sometido frente a él. Félix lubricaba más, lo que facilitaba el movimiento del alfa en su pequeña entrada. El alfa llevó su pulgar a la entrada de Félix y masajeó el contorno del agujero rosado que recibía gustoso el pene de su alfa.

—N-No... Puedo, Hyung ¡Uh~! —HyunJin llevó sus brazos hasta los hombros de Félix y las penetraciones se volvieron más fuertes y profundas —Me~ —HyunJin lamió su columna haciendo que su piel comenzara a erizarse —Me... Voy a correr, Jinnie~ —Gimió y HyunJin aumentó el ritmo de las estocadas.

Seis embestidas más y Félix se corrió manchando la puerta de la habitación de su Hyung.

—Ji-Jinnie, no anudes —Habló Félix sintiendo el pene de HyunJin engrosarse —. Alfita, suéltame. No queremos accidentes justo ahora.

Félix logró retirar de su cintura la mano del alfa e hizo que su pene saliera de su usada entrada.

Se arrodilló e introdujo el miembro de su alfa en su boca, saboreando el sabor de su propio lubricante mezclado con el primero del contrario.

El alfa automáticamente tomó el cabello de Félix y comenzó de nuevo el vaivén de su cadera. Penetrando la boca de Félix siendo su pene masajeado por los esponjosos labios que pertenecían al peligris.

HyunJin bajó la mirada y se encontró con la imagen más erótica que jamás había visto: Félix desnudo con los ojos cerrados y pequeñas lágrimas saliendo de ellos, con gotas de sudor en la frente y todo su pecho. Con su pene profanando la boca y esos acorazonados y suaves labios amoldándose a su miembro.

Bastaron tres estocadas más para que HyunJin se corriera también. Anudando por error la boca del pequeño chico que ahora lucía asustado.

—Be-Bebé —Dijo HyunJin al notar el enojo y desesperación del omega —Tranquilo, solo debemos esperar a que baje la hinchazón y-

—¡Jin~! —Se escuchó un portazo y Félix golpeó los muslos del rubio —¡Sal ya! ¡Mamá y papá llegaron de visita y quieren verte~! —El hermano mayor de HyunJin avisó y el alfa solo se ganó un ceño fruncido por parte de Félix.

El rostro de HyunJin perdió aún más el color y el de Félix se tornó rojo de nuevo. HyunJin no sabía si era por furia o vergüenza.

—¡En una hora vendrán, más te vale que estés presentable! —Gritó el alfa pelirrojo desde el otro lado de la puerta de HyunJin —¡Y no le hablaré bien de ti a mamá, Félix! —Dijo y Félix solo quiso regresar el tiempo a cuando HyunJin le pidió que detuviera esos provocativos movimientos de cadera sobre su parte.

에이브릴🌹