eighteen
Empezaron temprano el día. Aunque era Navidad, había tareas que hacer. Cuando el sol consiguió abrirse paso entre las ramas desnudas de los árboles, JunMyeon ya tenía el pavo en el horno y el pan cocido, y jeongyeon estaba vigilando el pudín de ciruelas para asegurarse de que se hacía sin problemas.
JunMyeon le permitió ponerse su segundo vestido más bonito, rosa con un peto blanco. En cuanto estuvo vestida, jeongyeon se sentó en la banqueta mientras JunMyeon desprendía con cuidado todas las tiras de tela del pelo de la niña. Y, aunque algunos de los rizos le habían enredado el pelo, jeongyeon no protestó.
—Voy a estar tan bonita como mi muñeca o como tú ¿verdad JunMyeon? —dijo jeongyeon en tono soñador, acariciando su más reciente posesión.
SeHun no había querido que jeongyeon albergara falsas esperanzas ante el cambio que pregonaba JunMyeon, pero no expresó su opinión. Si aquel intento fracasaba, siempre podía seguir llevando tocas y no habría pasado nada. Consiguió mantenerse ocupado hasta que JunMyeon lo llamó con voz jubilosa.
—SeHun ven a ver a tu preciosa hija. —grito JunMyeon sonriendo mientras acomodaba los mechones de jeongyeon
SeHun contrajo la mandíbula. Aquel estúpido no tenía por qué exagerar tanto. Pensó molesto, su niña no era tonta, sabía que no era tan hermosa como su madre y el comentario de JunMyeon podría solo lastimarla más. Se volvió lentamente y se quedó boquiabierto.
—Caramba, desde luego, eres la niña más bonita que ha visto esta casa. —consiguió decir cuando pudo hablar. ¡Y era bonita de verdad!
JunMyeon le había hecho la raya en el medio y había conseguido situar los rizos sobre las orejas. El resto de los mechones le caía sobre el hombro y tenía lazos que hacían juego con él vestido.
SeHun caminó con cautela alrededor de su hija, como si esperara que las orejas aparecieran en cualquier momento. La levantó de la banqueta y la puso de pie en el suelo.
—¿Puede andar y todo eso? ¿Quiero decir, que no se le alisará el pelo de repente? —cuestiono con preocupación SeHun.
—Creo que los rizos le durarán todo el día, y si al final decidimos que nos gustan, se los haremos otra vez esta noche. —respondió JunMyeon con tranquilidad—. Además, tener el cabello suelto la ayudara, los humanos se hacen hermosos peinados al tener el cabello largo.
Jeongyeon bailó por la estancia, y sus rizos se agitaron gozosamente mientras contemplaba su reflejo en la gruesa tetera de plata del armario de la vajilla.
—Espera un momento, tengo algo mejor. —SeHun salió a paso rápido de la habitación y regresó sosteniendo un delicado espejo de mano—. Mírate aquí, cariño.
El rostro de la pequeña se iluminó con una sonrisa de puro deleite.
—¡Lo soy! ¡Soy la niña más bonita de esta casa! —abrazó a su papá. Abrazó a su muñeca y luego se arrojó a los brazos de JunMyeon.
Fue al levantar la vista y mirar a SeHun, cuando JunMyeon se dio cuenta de que había lágrimas en sus ojos. Quería acercarse a SeHun y preguntarle si había errado en su criterio. Lo último que quería era hacerle desgraciado en su primera Navidad sin su esposa.
Antes de que pudiera dar un paso, oyeron el ruido de caballos y unas voces los llamaron desde la pradera. SeHun abrió la puerta justo cuando Park Chanyeol detenía los caballos delante de la casa y ayudaba a Kyungsoo a bajar del trineo.
—¡Feliz Navidad! —Chanyeol estrechó la mano de su amigo y Kyungsoo le dio a JunMyeon un fuerte abrazo—. Vas a tener que ayudarme a descargar toda esta comida. Te juro que mi esposo piensa que ustedes corren peligro de morirse de hambre antes de Año Nuevo.
Tenía los brazos llenos cuando entró en la casa, y casi soltó su carga cuando divisó a la pequeña jeongyeon bailando de puro deleite Los rizos subían y bajaban a ambos lados de su rostro y su sonrisa de gozo era digna de contemplar.
—Hola. —dejó los bultos sobre la mesa de a cocina e hizo ademán de besarle la mano a niña— ¿Quién es esta jovencita tan encantadora? No sabía que tuvieran compañía SeHun. —miro a su alrededor como si buscara a sus padres Y luego se agachó junto a jeongyeon—. Sabes mi amigo SeHun tiene una niña. Se llama jeongyeon, pero es mucho más pequeña que tú ¿La conoces?
—Ay. Tío Chanyeol, soy yo, jeongyeon. —la niña rió—, Solo que JunMyeon me ha hecho bonita y Santa Claus me ha traído esta muñeca. Y ahora han venido tu y el tío Kyungsoo y va a ser la mejor Navidad de toda mi vida.
Llevada por su entusiasmo, la pequeña ni siquiera recordó que aquella sería la primera Navidad sin su madre. Tal vez se daña cuenta más tarde, pero, por el momento, era feliz y no había por qué recordárselo.
Kyungsoo permaneció a un lado contemplando la escena. La barbilla le temblaba de emoción. La luna debía de tener un plan cuando se llevó a Seulgi y les dejó a JunMyeon, porque nunca había visto a jeongyeon tan feliz.
—Pero ¿cómo es que han llegado tan temprano? —preguntó SeHun—. ¡No habrán viajado durante la noche verdad!
—Hicimos un alto en la casa de los Byun ayer por la tarde y reanudamos la marcha antes del amanecer. —calmo Kyungsoo—. Hemos llegado justo a tiempo, ¿no crees JunMyeon?
—Ya lo creo Kyungsoo. —JunMyeon rodeo a Kyungsoo con el brazo.
Juntos, terminaron de preparar la comida. Estaba el pavo, un asado, patatas asadas, cebollas con nata líquida, pastelitos de arroz, tartaletas de menta y, cómo no, el codiciado pudín de ciruelas con salsa al ron.
La habitación era un deleite de aromas y sonidos, y JunMyeon estaba a punto de poner la mesa cuando SeHun lo llevó a un lado.
—Como tenemos compañía y es una fecha tan memorable, creo que deberíamos comer en el salón —le dijo SeHun.
—Pero la mesa... —objetó JunMyeon.
—Montaré una con caballetes.
—La comida se enfriará si tenemos que llevarla por el pasaje.
—Todos los platos irán cubiertos. —SeHun lo tranquilizó—. Yo prepararé el salón. Mientras tanto, creo que Kyungsoo quiere hablar contigo.
JunMyeon miró a su alrededor con frustración. Lo último que deseaba en el mundo era comer en aquella habitación encantada. ¿Y si el órgano empezaba a sonar durante la comida? Todo se echaría a perder. Miró a Kyungsoo, buscando su apoyo. Pero el omega sostenía en las manos una amplia caja.
—Esto es para ti. —le dijo—. Feliz Navidad JunMyeon.
JunMyeon sintió que las rodillas le temblaban al acercarse. Vio que Chanyeol sonreía y que SeHun tenía una sonrisa tonta en la cara mientras esperaba ver la reacción de JunMyeon. Levantó la tapa y lanzó una exclamación de puro gozo.
—¡El vestido! —consiguió decir—. El vestido que iba a ponerme para el baile. —JunMyeon deslizó los dedos por la seda, acariciando los diminutos adornos de flores.
—Ahora es tuyo JunMyeon. —le dijo Kyungsoo—. Ven, déjame que te ayude a ponértelo. SeHun y Chanyeol llevarán la comida a la mesa.
—No, no puedo consentirlo. —protestó JunMyeon. Su alegría de tener el vestido era tan grande como el miedo de mancharlo mientras ultimaba la comida.
—SeHun ya lo ha hecho otras veces JunMyeon. Estoy seguro de que no ha olvidado cómo se hace. Y no me digas que no debes usar un vestido JunMyeon no está mal además estamos solo nosotros. —lo tranquilizó Kyungsoo, mientras arrastraba a JunMyeon con él detrás de la cortina.
Cuando Kyungsoo quedó satisfecho con el aspecto de JunMyeon, los alfas ya habían puesto la mesa con el mantel, las servilletas y la cubertería, habían servido la comida en fuentes cuya existencia desconocía y lo habían colocado casi todo en el aparador del salón.
Hubo exclamaciones de aprobación cuando JunMyeon apareció en el umbral.
—Caramba, JunMyeon. —gorjeó jeongyeon—. Casi estás tan bonito como yo.
Todos rieron, pero la risa de SeHun muñó en su garganta, porque JunMyeon estaba precioso. Era el omega más hermosa que había visto nunca y no se atrevía a decírselo, ni con palabras ni con los ojos, porque si lo intentaba, tal vez no pudiera parar. Después le diría lo mucho que significaba para él, lo mucho que agradecía todo lo que había hecho por jeongyeon y, que el cielo lo ayudara, cuánto lo amaba.
JunMyeon giró lentamente para que todos pudieran admirar su vestido.
—¿No es lo más bonito que han visto nunca? —preguntó JunMyeon.
—Sí, lo eres. —repuso SeHun sin poder contenerse—. Ahora sentémonos a comer antes de que se enfríe.
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cap corto y si gente, esto lo pense para navidad pero pasaron cosas y no pude actualzar rapido , crei que si iba poder y no pude, igual espero que les guste. adjunto la foto de jeongyeon con el cambio que le hizo myonie, obvio en la foto no es de jeongyeon siendo niña pero usen la imaginación.
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