CAPITULO 36: Planes
Estaba comenzando a sudar y no era por el calor que había hace poco, si no por el miedo que comenzaba a invadirme, todo el valor que tenia se había ido muy lejos dejándola sola, no estaba lista para algo como eso, necesitaba más tiempo
—Esmeralda—mis ojos se encuentra con los de Ed que me sonreía— ¿Te ayudo? —siento como toma mi camiseta haciéndome temblar ligeramente, le doy una rápida mirada y me quedo observando aquella marca que la lucia orgulloso de ella, reparo en su mirada que me examinaba, sus dedos rozaban con mi piel dándome una sensación cálida—¿Puedo?
—Si—cierro mis ojos al sentir como me quita lentamente la camisa, me concentro en sus manos que tocan mi piel dejando un rastro de calor en el camino—Ed—aún tenía miedo que solo aumentaba al sentir como quedo expuesta ante él y ante todos
—No sabía que un traje de baño podía verse así—abro los ojos encontrándome con los suyos—Creo que aunque no lo hagas ¿Puedo recompensarte igual? Al menos por el intento—sonrió al escucharlo
—A los perdedores no se le debe dar tal cosa—tomo su mano aferrándome a ella—La ganare si o si, nada de compasión ¿De acuerdo?
—Lo que quieras—lo jalo avanzando hasta el agua, unas personas nos observaban extrañados, eran pocas aun así sentía mis piernas temblar—Eres muy lenta—me sorprendo al sentir como me eleva para correr conmigo dentro del agua, no me da tiempo de gritar cuando nos sumerge bajo del agua
—Ed—lo golpeo una vez que salimos de esta—Pudiste avisarme
—Las cosas salen mejor cuando se hacen sin pensar ¿No crees? —frunzo el ceño al ver su sonrisa, lo decía la persona que le gustaba planear todo
—Idiota—sonrió al sentir que me rodea con sus brazos—Edward
—Siempre estaré para ti aunque no quieras ¿De acuerdo?
—Lo tengo muy claro—me volteo rodeándolo por el cuello—Supongo que gane
—Por supuesto—se acerca a mis labios pero antes de que lo haga lo empujo, lanzándole agua en la cara—Esmeralda
—Eso es por lanzarme sin avisarme tonto—veo su sonrisa
—Con que esas tenemos—asiento y me alejo riendo al ver sus intenciones de devolverme el ataque haciéndome olvidar el miedo que sentía hace solos unos minutos
***
Observo las estrellas mientras me cubría con una manta que Ed me había proporcionado, después de habernos sacado el agua salada en unas duchas que había en la playa, la cual estaba un poco más sola, había varias carpas en el lugar pero habían menos personas
Le había gustado su tarde con Edward, era una pena que tuvieran que quedarse tan poco tiempo, ya mañana en la tarde tendrían que irse, aunque antes de irse Edward le había dicho que caminaremos un poco, parecía que habían unas cuevas cercas por donde entraba agua, que se veía hermoso, según él un buen cierre para nuestro pequeño viaje
Tenía que decirle que lo de mi viaje era una mentira, ya todo estaba claro entre ellos, solo tenían que ver cómo resolver juntos sus problemas pero a ella no se le ocurría ninguna manera de hacerlo pero la encontraría, Edward había confiando en ella para lograrlo, no lo defraudaría
—Esmeralda ¿Por qué no entras a la carpa? —veo que Ed me extiende una taza de que supongo que es de chocolate, la tomo
—Aun no tengo sueño, es como estar en el espacio—lo veo que observa el cielo—Siéntate—me obedece y me recuesto sobre su hombro—No me voy con mis hermanos, te mentí esa vez—escucho que suspira
—Lo sé—me alejo para verlo—lo creí al principio pero tu comportamiento no es el de una chica que renuncio a su pareja ¿Verdad? Te hubieras alejado de mí si de verdad te quisieras ir
—Yo no quería mentirte solo que…
—Soy un tonto lo sé—me observa—Hiciste lo que creías que era lo mejor igual si no lo hubieras hecho me hubiera quedado contigo, no te quiero lejos y si lo haces pienso seguirte
—No digas tonterías, tu a diferencia de mi tienes una buena vida aquí
—Pero no estaría feliz si tú no lo estás, me di cuenta esos días que me evitaste, que puedes superar muchas cosas tu solas incluso que terminemos, solo mira lo que lograste hoy, en tu empleo, realmente eres capaz de mucho
—Tu también pero aun así no quieres hacerlo solo ¿no? lo mismo pienso, estoy bien como estoy ahora, contigo—me vuelvo a recostar sobre su hombro tomando un sorbo de mi chocolate— ¿Estas tomando lo mismo?
—Si—siento como rodea con su brazos—Entonces no te iras, sé que era mentira pero siento que es lo que quieres
— ¿Te gusta lo dulce Edward? —siento que niega, sabía que no era fan del dulce, una vez me lo había dicho—Aun así estas tomando chocolate y comes todos los que te preparo pero no te gusta mucho
—Es porque a ti te gusta, además son deliciosos, como ti te gustan, quiero compartir tus gustos
—Pues a mí no me gusta mucho tu trabajo pero aun así te apoyo, pienso lo mismo de tu madre pero es lo que quieres y te apoyo, las parejas tienen mucho desacuerdos pero la manera esta en como lo resolvemos—lo veo—me gustaría viajar es lo que quiero pero tú quieres trabajar
—Estas renunciando a una cosa que deseas por mí y yo no, es injusto
—No cuando tú me lo recompensas—me ve extrañada—Cumpliendo todo mis caprichos, quizás no pueda viajar a conocer como quiero pero hay muchas otras cosas que quiero y tú eres una de ellas como lo veo es justo ¿no?
—No le veo ningún error a tu lógica, me asegurare de cumplirlas
—Bien—lo abrazo de cuello—ahora quiero mi premio que gane esta tarde
— ¿Ahora? —asiento y observa alrededor, todos estaban en su carpa supongo que durmiendo, no había luz encendida excepto la de nuestra fogata—No creo que sea lo más sensato ahora pueden escucharnos
— ¿No fuiste tú el que dijiste esta tarde que las cosas salen mejor sin pensar?
—Es incomodo hacer algo así en la arena—lo veo extrañada
—Estaba pensando hacerlo en la tienda Ed ¿De verdad crees que me atrevería a hacerlo en la arena donde pueden vernos? —sonrió al ver su rostro rojo
—Contigo nunca se sabe Esmeralda—rio ante sus palabras
—No me molestaría complacerte y hacer lo aquí
— ¿Y arriesgarnos que alguien más vea tu hermoso cuerpo? Solo yo tengo ese derecho—siento como carga provocándome una carcajada
—Pienso lo mismo, ya mostraste más que suficiente—uno nuestros labios dejándome guiar a la pequeña carpa, definitivamente nada podía arruinar ese fin de semana
***
—Ed por Dios solo siéntate—observo a mi novio caminar de un lado otro, mientras yo estaba sentada en una cama, odiaba los hospitales
— ¿Cómo pudiste ser tan imprudente? Te dije que no Esmeralda
—Ya no me regañes, soy yo la que tiene un pie vendado—el parecía más alterado que yo por ese hecho, la verdad si me dolía pero estaba acostumbrada a heridas más graves que esas ¿Quién diría que nuestro viaje terminaría así?
—Que no tuvieras si me hubieras hecho caso sobre que no estuvieras descalzas en una cueva llena de corales peligrosos y te dije que no te acercaras tanto a ese coral, te dije que era peligroso
—Solo quería verlo de cerca, fue un accidente que allá resbalado y cortado media parte de mi pie—habíamos ido a la cueva que me prometió y si una vista excelente, si no fuera tan curiosa el viaje no hubiera terminado de ambos en un hospital porque me acerque a unos corales descalza porque se me hacia difícil caminar, Ed había estado tomando fotos al reflejo del agua, yo aproveche su distracción para acercarme al coral rosa que brillaba con intensidad pero estaba lejos así que me resbale me corte el pie y caí al agua
Al final Edward casi entra en pánico porque vio el agua llena de sangre por mi corte pero solo tenía eso y algunos raspones, Ed se lanzó al agua para rescatarme para luego salir corriendo al primer sitio donde pudieran atenderme, estábamos esperando una radiografía para confirmar que no haya problema con el hueso y también unos exámenes para ver que no allá infección
El doctor dijo que no había nada que preocuparse que tenía que usar ese vendaje hasta que la herida se curara que tomaría varias semanas, lo que yo supuse que para mí sería dos porque tenía una capacidad para curarme increíble, en fin terminaría con una cicatriz en el pie al final y caminar con muleta para no forzar el pie, tuvieron que coserlo para cerrarlo
Pero Edward estaba molesto porque fui imprudente y porque de verdad se asustó mucho, cuando el doctor dijo que estaba bien me conto que me imagino con la cabeza abierta o algo así porque había escuchado muchas cosas de los corales y que por algo las personas no se bañaban en ese lugar porque era peligroso, solo si eras cuidadoso podías ver de cerca pero olvido que yo no lo era
—Claro como si no fuera de importancia que no puedas caminar—sonrió porque se revolvía el cabello parecía estar controlándose, antes no tenía nadie que se preocupara por mí y no me importaba que me pasara pero Edward armaba un escándalo hasta porque me resfrié
—Estoy bien Ed—me observa y le sonrió—lo siento seré más cuidadosa, lo prometo—veo que suspira y se acerca
—Sé que seguro no cumplirás esa promesa, mi vida contigo nunca será aburrida ¿no? —niego y siento que toma mi mano—De verdad me asusté mucho Esmeralda, no puedo estar sin ti
—No iré a ningún lado, intentare ser más cuidadosa—noto que veía mi mano interesado, parecía estar pensando en algo—Ed de verdad estoy bien
— ¿Quieres casarte conmigo? —abro los ojos con sorpresa al ver su mirada fija en mi ¿Estaba bromeando? Rio ante la situación— ¿Es un no?
—Creo que el estrés te volvió loco, fui yo quien me golpe
—Pero yo volví a vivir una experiencia traumática, mi vida parece estar llena de esas—me toma mi mano, siento mi corazón latir con frenesí y mi boca secarse al ver la mirada decidida de Edward—Quiero todo de ti Esmeralda y cumplir todo lo que quieras ¿Quieres casarte conmigo? Hablo enserio, sé que estamos en un hospital y no es la mejor propuesta pero…—siento mis ojos arder, me cubro la boca para ahogar un grito, no podía creerlo
—Sí, no me importa nada más si eres tu—me ve con sorpresa y me lanzo sobre el siento como me toma entre sus brazos evitando que cayera al suelo—No me importa donde estemos solo que seas tú—me alejo para verlo entre lágrimas—Te amo y solo pido que me correspondas
—Lo hago—sin evitarlo uno nuestros labios en un suave beso, no podía creerlo, casarse con Edward, era su sueño hecho realidad—Hablamos de la imprudencia hace un momento y casi te caes Esmeralda
—Pues no le propones a una chica de la nada casarse contigo—siento que me sienta nuevamente en la cama
—Llevo rato pensándolo solo pensaba que necesitábamos más tiempo para convivir pero creo que igual no cambiaremos e terminamos llevándolo—me toma de la mejilla—ya hemos perdido mucho tiempo ¿No? igual siempre terminas convenciéndome para hacer lo que quieres
—Eso no es cierto—me ve—De acuerdo lo es pero yo también pongo de mi lado ¿Podemos dormir en la misma habitación ahora?
—Bien pero intenta ser ordenada Esmeralda—le sonrió
—Lo prometo—lo abrazo feliz—Nos casaremos
***
— ¿Cuándo podría ser la boda? ¿Nuestras mascotas recibieran nuestro apellido?
—No Esmeralda—lo observo que estaba cocinado, habíamos llegado hace rato y el preparaba la cena para cuatro, vendría Emma y Angel—Y esperemos hasta que te gradúes faltan un par de meses para eso
—Tienes razón—suspiro porque quería que fuera pronto— ¿tendremos una luna de miel? Necesitaremos quien cuide de Silver y Duncan
—Sí, pudiéramos ir de viaje o encerrarnos aquí
—De viaje definitivamente ¿Puedo comprarte un anillo? —Me ve extrañado— ¿Qué? —niega levemente—no me diste una
—Eres muy impaciente mujer—noto que se busca algo en el bolsillo y veo como saca una pequeña caja, lo observo con sorpresa ¿De verdad lo estaba planeado? —Era de mi madre, me lo dio porque pensó que algún día me enamoraría y que ese día me agradecería por dármelo y lo hago—veo que se acerca y se inclina— ¿Te casarías conmigo Esmeralda? —Me cubro la boca— ¿Quieres que lo haga de forma diferente? —rio al notar su nerviosismo—No te rías ya es difícil hacerlo
—A mí me encanta—veo que se levanta—y dos veces en un día es suficiente—veo su sonrisa colocándome el anillo y lo observo era una esmeralda pequeña
—Es el anillo perfecto para ti, una gema preciosa para otra ¿no? —sonrió y limpio mis lágrimas que se escapaban—además así nadie te puede mirar
—Te comprare uno—escucho su risa y como vuelve a la cocina—hablo enserio
—Los hombres no usan anillos de compromiso Esmeralda
—Este novio si lo va a usar—se escucha la puerta— ¡Esta abierto! —seguro era Angel y Emma, podía escuchar los ladridos de Duncan
—No, es gastar dinero innecesario—me cruzo de brazos porque quería uno para el
—Es injusto ¿Por qué tengo que esperar meses para que te pongas uno?
—Porque así es la sociedad, no me pondré un anillo
— ¿De qué anillo hablan? —Frunzo el ceño viendo a Edward— ¿Discutiendo?
—Emma ¿Verdad que se puede dar un anillo de compromiso a un hombre? —recordaba que Emma le había propuesto matrimonio a Angel
— ¿Se comprometieron? —sonrió mostrando mi anillo—Meck es preciosa
— ¿Enserio Edward? —noto como Ed ignora la pregunta de Angel para comenzar a preparar los platos para la cena—No pensé que vería ese día, debe estar loco si te comprometes con esta mujer ¿sabes que está loca? Es igual que Emma—escucho como mi amiga golpea su prometido—Cariño solo es una broma
—Claro también te golpe por broma—me observa— ¿Qué le sucedió a tu pie?
—Me caí en unos corales—veo como Ed me coloca mi plato frente a mí—gracias
—Casi se golpea la cabeza—ruedo los ojos y veo a mis amigos sentarse, Ed lo hace a mi lado—Casi me da algo
—Esmeralda deberías estar más atenta, esos lugares son peligrosos—me sonríe—pero como les fue en el viaje
—Cerramos con broche de oro en el hospital por Esmeralda
—Exagera, la verdad ahora recordare esa herida como el día que Ed se asustó tanto por perderme que me propuso matrimonio—sonrió tomando su mano—te comprare un anillo así April lo sabrá
—No lo usare, los hombres no usan anillos
—Angel lo hace y mira lo usa ¿Por qué tú no puedes?
—Angel no entra en el esquema de ser hombre
—Esos es cruel Edward además por algo Emma está embarazada—frunzo el ceño y lo observo, veo a mi amiga ¿Por eso estuvo tan rara antes de irme?
— ¿Qué? ¿Es cierta Emma? ¿Seré tía? —veo a mi amiga que observa a Angel que se encoge de hombros
—Si Meck, en realidad no lo teníamos planeado porque yo aún tengo planes pero Angel y yo llegamos a un acuerdo que lo apoyaríamos en esto
—Yo lo cuidare, no puedo tener hijos así que me encantaría
—No Esmeralda, apenas y puede cuidarte tu sola, mira como está tu pie así que no
—Ed y yo lo podemos cuidar entonces, es muy bueno haciéndolo—veo que niega
—Gracias por el apoyo Esmeralda pero ambos tenemos que hacernos responsables, la boda la cancelaremos hasta nuevo aviso, tenemos mucho que comprar para el nacimiento
—Puedo ayudarlos con la boda ¿Y si se las regalo? O la habitación ¿Cuántos meses tiene? —me emocionaba tener una vida así, me imaginaba a mí y a Ed casados con varios niños pero sabía que aún no era tiempo para eso
—Solo un mes pero no es necesario Meck, gracias por el apoyo
—Angel—veo a Ed que observa a su amigo—Los felicito a ambos pero sabes que ahora las cosas son diferentes, si necesitas ayuda cuentas conmigo
—Lo tengo muy claro amigo, no te preocupes—Por primera vez veía a Angel serio, seguro lo estaba por su experiencia con sus padres, lo más probable es que quisieran hacer las cosas bien
—Entonces la boda de Albert será sola pero ¿Podemos hacerle una fiesta? siempre lo hacen antes de que nazca él bebe
—Ya lo había pensando, primero a que decirles a todos—sonrió al escuchar a mi amiga, era una pena que ella no pudiera estar en esa situación
***
—Así que le harán una fiesta al bebe—asiento observando a Heil caminando hacia atrás mientras me observaba, no perdía la costumbre—Me apunto, me gustan los niños ¿Qué se siente estar en muleta?
—Horrible pero lo bueno es que no tengo que ir a trabajar
—Aun así estas aquí porque querías conversar conmigo—había ido por el al trabajo porque quería su ayuda con algo
—Sí, tengo que llegar antes que Ed a la casa o se vuelve loco—llegamos a la parada de bus—estaba pensando en cómo ayudar a Edward con su madre
—Por lo que me constaste te odia ¿Quieres un segundo round?
—Si es por Edward si—lo observo—mira tu madre es una persona difícil igual que la de Ed aun así me preguntaba como hiciste para que la tuya me aceptara
—Solo logre que tolerara que estuviera contigo, piensa que me haces bien por lo de mi psicólogo ¿No quieres volver a intentarlo con ella?
—No sé si esta lista para eso—asiente ligeramente, lo veía algo distraído, me preguntaba qué le pasaba— ¿Sucede algo?
— ¿Qué tal llevarla a un parque de diversiones? —lo veo extrañada, era un claro desvió del tema pero me sorprendía la idea—Si es policía seguro nunca ha salido en familia, que vayan todos y al final una cena en tu casa todos
—Podría ser por nuestro compromiso—tomo su mano—Puede funcionar, también quería comprarle un anillo a Ed—sonrió y me ve extrañado— ¿me ayudas?
—Estás loca mujer—me sonríe—Por supuesto que si ¿Cuándo?
—Mañana pide libre—asiente, sonrió porque aprovecharía para sacarle lo que intentaba ocultarme
***
Observo una pequeña sortija con un diamante diminuto, no me gustaba mucho además era muy fémina para Edward, si iba a obligar a ponérselo tenía que gustarle para que lo hiciera
—Esmeralda creo que no debes decir que es un anillo de compromiso, piensa que son para mujeres y Edward no es una
—Tienes razón ¿Qué tal si mando a hacer uno personalizado? La piedra podría ser un zafiro, es el color de mi ojos, el me dio una esmeralda es el color de sus ojos así que tiene sentido
— ¿Por qué no buscas uno así? Seguro ahí, además si es muy costoso no lo aceptara—asiento porque tiene razón—señorita ¿Tiene alguna anillo de compromiso con un zafiro? —veo a la mujer asentir para alejarse—Sencillo
—No sé qué haría sin ti Heil—veo que asiente, le sucedía algo si no hubiera hecho algún tipo de comentario— ¿Me dirás que te sucede? ¿Es tu mama? ¿Dog?
—Están bien, desde que le conté todo como me recomendaste nuestra relación ha mejorado bastante ¿Esmeralda que harás cuando te gradúes?
—No lo he pensado mucho pero Emma dice que en su empresa ahí una vacante puede que termine trabajando aunque quisiera publicar un libro pero aún estoy muy insegura al respecto
— ¿Por qué? Eres una excelente escritora
—Porque es un libro sobre mi vida—observo la sorpresa en su rostro—Es un libro como un diario hablando desde mi perspectiva y todo lo que sentía, lo empecé cuando cumplí un año lejos de Brayan pero aun no le doy un final
— ¿Por qué? Si ya tienes tu final feliz ¿no? te vas a casar, la historia termina cuando termina todo eso ¿no? —sonrió porque todos pensaba eso
—No, la verdad es una historia después de que termino todo, Ed una vez me dijo que a veces lo que parece el final no lo es, me dijo que ahí es donde comienza mi historia y tiene razón, no termino cuando ese hombre salió de mi vida comenzaron muchas cosas, yo aún estaba tan perdida, quiero que mi libro inspire y hablar pero también a cómo salir de eso, perder el miedo que tenemos, yo aún tengo unos pero aun uno que no se si logre superar que necesito para seguir adelante
—Tienes razón—observo como la chica vuelve
—Esto son los que tenemos—sonrió observándolos pero mi mira se fija en un pequeño zafiro claro, el anillo era dorado sin decoraciones, sencillo
—Quiero este—veo que asiente y lo toma, le entrego mi tarjeta, esperamos unos minutos por el anillo y salimos de la tienda con la pequeña bolsa—espero que lo acepte, quiero que cuando lo vea se recuerde a mí—observo el mío—como me sucede con el de él
— ¿Puedo saber que eso que no puedes hacer? —me detengo al escucharlo
—Es Brayan—frunce el ceño, bajo la vista—Quiero verlo y demostrarle que perdí el miedo pero temo que al verlo todos esos años de esfuerzo se vayan a la basura
—No lo harán, creo que eres lo suficiente valiente para hacerlo
—Por eso no puedo publicarlo hasta que lo haga, parezco que puedo pero tengo miedo de verlo Heil, no es sencillo dejar las cosas atrás
—Lo entiendo—veo que baja la vista—Sabes hace meses ahí un chico—lo observo—Me escribe todo el tiempo—recordaba vagamente Heil conversando por celular cuando estaba tranquilo, siempre me preguntaba con quién era—Dijo que quería algo conmigo pero no le puedo ofrecer otra cosa que no sea amistad y estuvo bien para el por un tiempo pero hace poco dijo que no podía mas
— ¿Tuviera algo? —Veo que niega— ¿Te gusta?
—Eso creo pero sería como traicionar a Fabián y no quiero
—Hazlo— me observa—No hay nada que pensar, no pierdes nada dándole una oportunidad Heil, Fabián quería que fueras feliz
—Ni siquiera lo conoces Esmeralda para que digas eso
—No lo hago pero si dices que te gusta es por algo ¿no? y tú no dejas a cualquiera entrar a tu vida ¿Sabe lo de Fabián?
—No creo que lo entienda así que no le conté—entendía su miedo, no quería dejarlo ir era parecido a lo que pasaba conmigo
— ¿Crees lo que siente por ti es de verdad?
—Eso parece aun así no se si deba ¿Qué pasa si lo daño? o ¿Le cuento y me odia? Solo estoy lleno de problemas
—Si te quiere lo entenderá, cuéntale y dale la oportunidad Heil, si se aleja él se lo pierde y confirmaras si vale la pena—veo que juega con su manos inquieto—Tienes miedo de que si te acepte ¿verdad?
—Un poco porque sería dejarlo a el atrás, cuando murió por mí y…
—Es lo que Fabián hubiera querido—me observa por unos segundos—Tienes que hacerlo, dejarlo ir
—Lo hare pero hagamos algo, si tu enfrentas a Brayan hare lo mismo con Gabriel, es el nombre del chico—me extiende la mano— ¿Qué dices? Lo haremos el mismo día así será justo—veo con duda su mano, era fácil decirlo pero no hacerlo, no creí estar lista para algo, ni siquiera sabía si algún día lo estaría, no podía había mucho que perder, no lo haria
Continuará...
Hora de Esmeralda de cerrar esa etapa ¿Podrá hacerlo? Nos vamos despidiendo poco a poco de esta hermosa historia, gracias a todos que han llegado hasta aquí desde el gorrión herido, esperó disfruten los capítulos finales, nos leemos
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro