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CAPITULO 29: Incendio

No recordaba a última vez que se sintió así, tan bien con ella misma, se sentía relajada, poder dejar salir todos esos pensamientos que tenía miedo de contarle a alguien, se sentía identificada con Fabián porque ella pudo ser, no aguantaba tanta presión, tanto dolor y era su única manera de escapar de ese dolor que en el camino terminaría con el dolor que tenía Edward, al menos así pensaba en ese entonces, ahora su perspectiva había cambiado mucho

La historia de Heil le dolía mucho aun no entendía como podía sonreír de esa manera cargando con tantas cosas sobre sus hombros, complacía a su madre porque era lo único que le quedaba y no quería perderla aunque al parecer esos había cambiado seguro le ocultaba muchas cosas para no hacerla sufrir no le sorprendería que le hubiera dicho que su amistad conmigo había terminado cuando ya no era así

Ambas vida era una mierda aunque ella estaba superándolo por el rostro de su amigo y el dolor de sus palabras no parecía irle bien con eso, se culpaba de la muerte de su hermano y novio por eso los iba a visitar para pedirle perdón seguramente, tampoco olvidarlos aunque duela pero se odiaba porque él era el que seguía de pie y ambos estaban bajo tierra

Quería ayudar a Heil pero no sabía cómo, esperaba que sus palabras de verdad lo hubieran llegado, lo ayudara a abrir los ojos de lo que pensaba realmente su hermano y novio, estaba segura de que no lo culpaban de lo que paso, las personas cuando amaba lo único que desean es lo mejor para esa personas aunque su felicidad no estuviera a su lado, lo sabía porque así pensaba sobre Ed

— ¿Sabes que nunca entendí? —Veo a Heil que removía su vino sobre su copa, nos habíamos mudado a la sala para ver una película pero ninguno estaba prestando atención—Que Fabián el me decía que debía salir a delante que la vida no era tan mala y que mi hermano no quería eso para mi

— ¿Qué tiene de extraño? Me imagino que fue por tu hermano que lo conociste

—Si te conté que fue en su funeral—su rostro estaba hinchando por tantas lagrimas seguro igual que el mí, ambos parecíamos cansados de hacerlo y a el tampoco le quedaban seguro más de ellas—Recuerdo que yo estaba en el hospital, no tuve muchas heridas porque parece que mi hermano logro esquivar a tiempo pero la peor parte se la llevo el lado del conductor pero aun así estuvo en la morgue por una semana entera, mi madre estaba en shock, desde que me convertí en gay y mi familia lo acepto todos comenzaron a criticarnos por eso pero aun así nos mantuvimos unidos

—Nunca he tenido una familia como tal, mi padre no tenía hermano y mi madre solo una lo cual no tengo buena relación

—Los míos eran unos imbéciles, ni yo entiendo porque mi madre me acepta porque es igual a ellos—tomo otro sorbo de la copa, ya estaba mareándome—En fin Roberick no pudo hacer mucho solo por que todo el procesos se alargó un poco cuando me entere hui del hospital porque quería ver a mi hermano, llegue cuando todos se habían ido y ya lo estaban enterrando, solo estaba una persona

—Es un encuentro muy romantico ¿no? en un cementerio—escucho su leve risa parecía recordarlo—Yo conocí a Ed en el universidad, lo primero que me dijo si es que estaba perdida, yo no lo sabía en ese momento pero el al parecer si

—Lo primero que hizo Fabián fue abrazarme y llorar conmigo, luego se presentó me explico que era una amigo de la universidad de mi hermano y que él me había hablado mucho de mí, su hermanito menor le preocupaba, recuerdo que aún estaba en el colegio y el apenas comenzaba la carrera de medicina

— ¿Por qué elegiste esta carrera? —tenia curiosidad hasta ahora nunca me había mencionado que le gustara leer

—Mi hermano era muy estudioso, le gustaban los libros pero no tanto como para escribirlo en cambio a Fabián si, tenían eso en común pero Fabián estudiaba medicina porque su padre lo quería así, él era doctor su madre enfermera, son una familia muy respetada, el como hijo único tenía que seguir las tradiciones

— ¿No estamos en pleno siglo XXI? —asiente, yo que creía que esas cosas no pasaban aunque estaba la madre de Edward pero eso era diferente, ella no quería que lo hiciera por miedo a que le pase algo

—Sí, es ridículo pero todos en su facultad le tenía respeto por eso, su padre había salido graduado de ahí y él tenía un círculo social con los mejores estudiantes que eran hijos de amigos de su padre, a la primera parecían buenas personas, cuando los conocí me agradaron mucho, Fabián parecía llevarse bien con ellos pero solo tuve una oportunidad de estar con ellos

— ¿Por qué? ¿No eras amigo de el? —veo una mueca en su cara

—Drogadicto, alcohólico, rebelde y gay ¿Qué piensas que dirán las personas de mí?

—Creí que no te importaban esos tipos de cosas, a mí no todos me aman, en la universidad hubo una época que me odiaban porque supuestamente era la preferida de todos los profesores

—A mí no me importa que hablen de mí, es mas siempre era el payasito del salón en la universidad, me llevaba bien con el grupo pero a Fabián le importaba mucho lo que los demás pensaran de el por eso no me trataba dentro de la universidad, solo esa ocasión porque yo me le acerque , era nuevo en la universidad luego me reclamo que no volviera hacerlo porque lo criticaron que había escuchado rumores de mí en los pasillos, todavía no había dejado totalmente el alcohol y las drogas así que el rumor se esparció, era algo normal pero no cuando eres hijo de un famoso doctor ¿O sí? —me recordaba a lo que sucedía en la estación de Ed, quería saber cómo resolver eso sin que salieran lastimados

— ¿Qué sucedió entonces? —esperaba que esa no fuera la razón de su muerte

—Lo hice, ya estaba enamorado, por eso lo nuestro era secreto pero él se sentía tan a gusto conmigo, y yo no tenía problema en la universidad teníamos círculos sociales diferente, comencé a tener amigos, me sentía parte de ellos, me aleje un poco de Fabián porque note que siempre estaba con una chica, me molestaba mucho entonces me volví cercano a un chico en la universidad ni siquiera era de la clase si no la carrera de medicina, no lo sabía me lo presentaron en una fiesta a la que asistí con mi grupo, el tipo me agrado pero no pasó nada con el Fabián una vez fue a mi casa estaba viendo un partido con este amigo pero hicimos una apuesta ridícula—lo veo extrañada—El alcohol te hace comentar estupideces

— ¿Tu nuevo amigo era Gay también? —noto que se queda observando la televisión pero parecía no prestarle atención— ¿Entonces? — ¿Qué estupidez había cometido?

—Mi amigo me había dicho que él le gustaban las mujeres, una en especial, la chica era la misma con quien había visto a Fabián pero el decía que estaba mal porque él no tenía oportunidad cuando Fabián era hijo de aquellos doctores, le conté que tenía un novio que estaba saliendo con una chica por apariencia, nunca releve su nombre, fue cuando propuse olvidarnos de eso y que si ganaba el equipo yo lo ayudaría a obtener a la chica pero que si el equipo perdía el me ayudara a darle celos a mi novio con una foto, tenía y las de perder porque el equipo iba ganado pero ¿Quién diría que el último momento perderían?

—No me digas que le fuiste infiel y el los descubrió

—No lo bese ni nada solo me quería tomar una foto conmigo sin camisa y sobre sus piernas el plan era cubrir su cara pero Fabián llego en ese momento y me reclamo, se puso celoso obviamente mi amigo conecto los cables, se fue haciéndonos creer que solo pensaba que Fabián estaba ahí preocupado por el hermanito de su amigo pero al día siguen en la universidad se rumoraba que teníamos algo, recuerdo lo preocupado que estaba  pero como no había pruebas de lo contrario, el empezó a salir con esa chica para despistar rumores

— ¿Enserio? Es lo triste cuando ponemos la felicidad de otros antes que la nuestra, seguro lo estaba pasando difícil en su casa

—Pues sí, se alejó de mí, su padre estaba molesto conmigo hasta recuerdo que despidieron a mi madre del hospital donde trabajaba y yo estaba presentado una demanda por difamación porque supuestamente yo era el que había ocasionado todo eso, no me importaba lo que dijeran de mi igual no tenían pruebas de nada de eso porque nunca llegaron a saber quién lo hizo yo la sabía muy bien, claro que enfrente al imbécil porque su culpa todo acabo así, lo golpe y fue Fabián que se metió en medio de ambos y me calmo cuando estuvimos solos

—No pareces que seas una persona violeta—Heil no parcia esa persona que estaba describiendo ¿Edward sabía todo eso y por eso quiso que me alejara?

—En realidad no, nunca me metí en peleas yo cambie muchas cosas por Fabián pero el no pudo hacerlo por mí pero ese día lo enfrente porque era un cobarde—noto como su voz tiembla—aun estamos en la universidad y él se puso a llorar porque yo tenía razón fue cuando lo abrase y después de tanto lo bese, lástima que no fuimos los únicos que estábamos ahí, no nos dimos cuenta pero los gritos habían hecho que más de una persona se acercaran, lo descubrieron todo, yo en el fondo de alivio porque por fin lo sabía y pensé que no importaba pero Fabián sí que le importaba

— ¿Te echo la culpa? —veo que asiente, noto como sus lágrimas volvían a salir—Heil de verdad lamento que el pensara de esa manera

—Yo también, nos alejamos y su familia me decía que fui yo quien lo sedujo muchas cosas mas pero Fabián no decía nada, comenzaron a burlarse de el sobre su orientación que se las daba de niño serio y esas cosas, sus compañeros lo abandonaron, yo no me podía acercar por su padres que dijeron que si no decía que lo seduje las cosas terminarían mal para mi

— ¿Fabián sabia de eso? —niega y veo con interés su copa vacía

—Salíamos en secreto siempre intetaba decírselo pero no podía, una vez que nos pusimos de acuerdo para vernos—noto que sonríe—en ese paseo conocimos a Dog aunque él pesaba que era un nombre ridículo pero se quedó con el perro

— ¿Era de Fabián? —el asiente—No te gustan muchos los animales ¿Verdad?

—Sueltan mucho pelo pero a Dog si lo quiero y los caballos, mi hermano decía que quería comprarse uno algún día pero nunca pudo, no sé qué le veia de fascinante

—Entonces ese día te subiste a Silver porque recordaste a tu hermano—se encoge de hombres y rio por el motivo

—Me dijo que eran fascinante solo tuve curiosidad—niego levemente—Dog era de los dos así que yo ayudaba a cuidarlo, Fabián parecía que estaba mejor con mi compañía, un día le dije lo que su padre me hacía y lo que me propuso se molestó mucho cuando le dije que aceptaría porque la situación no estaba bien, discutimos ese día porque el decía que no necesitaba mi ayuda que el podía resolverlo pero sabía que estaba avergonzado de lo nuestro, se lo dije estaba cansado de esa situación y que no podía más, sé que aparento ser fuerte pero la verdad

—Es que eres un dulce conejo por dentro

— ¿Enserio tienes que compararme con esas cosas peludas? Además esos ojos son endemoniados ¿Los haz visto? —rio ante su reacción

—Sabes que es cierto, en eso nos parecemos un poco finjo ser fuerte pero en realidad en cualquier momento puedo romperme, soy una persona muy inestable

—No tienes que decírmelo porque eso lo es desde que te conozco—rio y sirvo nuestras últimas dos copas porque la botella había muerto

—Entiendo porque reacciono así, su familia era del problema si no habías hecho nada, por eso me molestaba tanto con Edward el sacrificaba tantas cosas cuando no era su culpa, aun pienso que es demasiado para él, no solo yo cargo con mi pasado sé que Ed lo tiene en mente también, mis pesadillas, los miedos

—Pero te apoya, es lo que hacen las parejas

—Es injusto cuando solo una persona lo hace porque no soy una persona que pueda apoyar a otra cuando no puedo ayúdarme a mí misma, ni siquiera soy capaz de vender esa estúpida casa

— ¿Por qué no? se supone que ahí viviste todas tus pesadillas

—Si—aprieto mis manos, recordando todo lo que había vivido ahí—No me atrevo ni a ir a verla, fue ahí donde viví con mis padres, todo eso está ahí, sus cosas

— ¿No es tan sencillo como mandar a sacar todas esas cosas de ahí?

—Pues no lo es, siento que si lo hago nunca  voy a poder enfrentar lo que está ahí adentro quiero hacerlo por una última vez pero soy una cobarde

—No lo eres—veo la sonrisa de Heil—Pasaste mucho ahí adentro, ir significa abrir viejas heridas que no sabes si han cerrado por completo te aterra saber que no ha cambiado nada y sigues siendo la misma chiquilla miedosa—siento mis ojos picar antes sus palabras

—Si igual que ver a mi hermano, aun temo pero sé que es necesario verlo y pienso que el primer paso es esa casa

—Lo entiendo cuando quieras vamos, cuentas conmigo—niego— ¿Por qué?

—Es algo que hare sola igual que tú al leer la carta de Fabian—noto que se tensa otra vez— ¿Por qué te comportas como si no te importara nada?

—El mundo está lleno de idiotas y no voy a permitir que nadie me vea derrotado

— ¿Por qué odias a los de la clase? Hasta donde me cuentas ellos no hicieron nada, ni siquiera mintieron sobre el rumor que tú supuestamente esparciste

—No—deja la copa vacía—Todos creyeron que lo mate porque era el causante de mis problemas—noto que vuelve a llorar—después de nuestras discusión rompió contacto conmigo, me alejo hasta su balcón estaba cerrado así que no podía entrar tampoco lo veía en la universidad, así que entre a la casa, me se muchos trucos así que fue sencillo—noto que aprieta los puños—cuando entre a su habitación tenía un cuchillo en su mano y dos cartas en la otra, lo entendí cuando vi sus lágrimas, él estaba sufriendo decía que no podía mas y que todo se solucionaría si él no estaba, que yo estaría mejor sin el—noto que se limpia sus lágrimas, Heil se veía vulnerable, me dolía verlo así

—Heil está bien, si quieres no me lo cuentes, no es necesario…

—Le dije que si yo no era suficiente y me dijo que si pero que él no era suficiente para mí que me merecía algo mejor que un cobarde como el, esas misma palabras yo se lo había dicho a él Esmeralda—lo abrazo dejando que se desahogara en mi hombro—Lo intente de verdad pero se rebano el cuello y murió frente a mis ojos, todos pensaron que yo lo hice porque sus padres entraron y me vieron cubierto de sangre—no me imaginaba lo horrible que se sintió, si cuando a Ed le disparan creí que me había arrancado una parte de mí que si el moría yo me iba con él, no podía imaginar algo así

—Entonces te culparon de todo pero no habían pruebas suficientes ¿No?

—Si—ahora entendía porque Edward estaba tan preocupado pero algo me decía que él no creí completamente esa versión solo que sus celoso no lo dejaban pensar con claridad, solo tenía que conocer un poco más a Heil—Fabián me enseño muchas cosas hasta mi gusto por los libros es por el igual que los CD, era tan anticuado pero tenía razón que era mejor así

—Sabes si algo aprendí que es mejor quedarse con los momentos felices y no con los malos, siempre intenta arruinarnos la vida pero si la vez de otra manera aprendes a aprovechar los pequeños detalles, me gusta hacer cosas simples aunque muchos lo consideran aburrido pero es porque nunca lo hice y las personas no saben la suerte que tienen por eso

—Tienes razón, en las cosas sencillas es donde están la verdadera belleza, me costó mucho seguir adelante aun le guardo rencor a esas personas

—Pues yo también los odiaría pero no es bueno Ed dice que el solo pierdes el tiempo y tus energías que en algún momento a todos nos llega su castigo a quienes los merecen por lo menos

—Para ser una chica no Emo eres muy buena dando consejos—rio porque tenía rato sin decirme así—me adoras ¿Verdad?

—Ya quisieras—me alejo de el—Sirve mucho dejarlo salir ¿no?

—Si—noto que sonríe— ¿tengo que ser sincero con mi madre?

—Deberías intentarlo hacerlo con Edward y apoyarlo como debo, sé que es fuerte pero hasta superman tiene a Batman—ambos reímos por la comparación

—Bien, eso hare ¿Sabes? Pensé que estarías más loca

—Opino lo mismo—ambos vemos que la película estaba terminado—Esa película era muy mala ¿Verdad? —el me ve

—Definitivamente—reímos ante la estupidez de ambos, me sentía tan bien en ese momento, era como tener un peso menos sobre mis hombros, alguien que me entendiera como Heil lo hacía, le gustaba sentirse así

***

Escucho una melodía que inhumada mis oídos, mierda me estaba provocando un dolor de cabeza horrible ¿Por qué diablos esa música no se callaba?  escucho que lo hace  después de un fuerte ruido, abre los ojos para ver que había sido Heil que había lanzado el celular lejos, sonrió para volver a cerrar los ojos y dormir tranquila

Abro los ojos de golpe al escuchar otro fuerte ruido pero no era un celular, era alguien golpeado algo, mi cabeza me estaba matando ¿Porque diablos molestaban tanto? Ni siquiera tenían vecinos que molestaran hasta Silver era más tranquilo, me levanto para darme cuenta que era la puerta de la casa, me encamino aun desorientada para abrirla y veo que la mirada de preocupación de Edward aparece ante mí que enseguida me toma de los hombros

—Esmeralda estas bien ¿Por qué esa cara? ¿Te golpearon? —aun sin entender la situación y porque estaba tan preocupado—Emma me llamo a primera hora que no habías llegado a la oficina y no llegaste a dormir con ella

— ¿La oficina? —abro los ojos con sorpresa—Dios ¿Qué horas es? —tomo su muñeca para ver la hora y llevaba una hora de retraso—Tengo que irme—entro a la casa para dirigirme a mi habitación, entrar al baño y darme una ducha, escucho unas voces afuera y frunzo el ceño la recordar a Heil—Diablos Heil—termino de ducharme para salir de mi habitación comenzar a buscar ropa pero Edward entra

— ¿Me puedes explicar que haces con él? —consigo la ropa ignorando a Edward, ya le explicaría, era tarde—Esmeralda ¿Estas con él?

—Solo estábamos bebiendo—entro al baño aun avergonzada por la última vez que nos vimos, ya el efecto del sueño había pasado necesitaba una pastilla urgente

—Te dije que pienso de que bebas además durmieron juntos ¿no? —Abro la puerta al terminar de vestirme y comienzo a arreglarme—No me ignores

—Te escucho—le sonrió al ver que me ofrece una pastilla con un vaso de agua—Ed ¿Crees que si me hubiera estado acostando con él te hubiera dejado entrar? —bebo lo que me ofrece y puedo ver a Heil en la puerta sonriendo—Además sabes lo que pienso del sexo, me repugna al menos que seas tú—noto su rostro rojo—Pero necesito que te lleves bien con el Heil me ayudado mucho

—Sí, no es una buena persona Esmeralda por Dios tienes que alejarte de el

— ¿Sabes que aún sigo aquí? —noto que Edward le lanza una mirada furiosa, yo tomo mi bolso y salgo de la habitación siendo seguida por ambos

—No me importa en lo más mínimo, sabes que hiciste

—Ya me lo conto y si lo hubieras investigado bien supieras porque no debes preocuparte, esto tenemos que arreglarlo—señalo a ambos—Heil antes de irte por favor recoge todo y Ed ayúdalo por favor sin arrestarlo

—Esmeralda—sonrió y lo beso para salir rumbo a mi moto para poder llegar a mi trabajo y esperar que Emma no estuviera molesta

***

Estuve parte de la mañana recibiendo llamadas de Edward y un mensaje de Heil que me decía que debíamos tener otra cena igual pero que invitáramos a Ed para que fuera más divertido, también menciono que hecho lo que le pedí igual que Edward pero que lo había amenazado con meterlo preso si no se alejaba de mi

Por eso no había contestado las llamas de Edward y tampoco había vuelto a la casa, mis hermanos llegarían al día siguiente y no sabía si estaba lista para verlos llegar con la noticia de su partida definitivamente así que solo me puse a pasear un buen rato hasta que termine frente a la mansión donde solía vivir

La conversación que tuve con Heil viene a mí y tenía razón, todos estábamos perdidos de una forma u otra pocos éramos lo que enfrentamos los problemas, unos se llamaban cobardes pero yo no quería ser partes de ellos, con ayuda de sus amigos había logrado recorrer la mitad del camino ahora ella quería recorrer la otra sola

No es que pensara en alejarse de ellos pero todos formaban su camino, ella no tenía seguro el suyo solo que Edward tenía que estar con ella pero ambos tenían que arreglar sus vidas para poder ayudar a Edward arreglar su vida porque sabía que el fondo tenía miedo a fracasar porque se trataba de su familia, primero ella tenía que ordenar la suya, dar esos paso que tenía tanto miedo dar

—No por Ed si no por mí—entro a la mansión aún estaban las llaves escondida en una planta como Carlos lo había dicho una vez—Sin miedos, eres una mujer diferente—respiro para abrir la mansión y miles de recuerdos me invaden la mente al entrar, se podía observar a ella misma más joven entrando a esa casa con miedo a ser descubierta pero también cuando corría de pequeña jugando con Henry o leía con su padre

Comienzo a recorrerla, no había nada ahí que quiera conservar, las cosas que su padre le dejo las tenía pero los recuerdos estaban ahí, las discusiones que tenían sus padres, los golpes de Brayan, sus noches ebrio hasta podía sentir su olor impregnado en mi cuerpo

Las lágrimas comienza a recorrer mis mejillas al tener esos recuerdos y mi cuerpo comienza a temblar cuando entro a la habitación que solía ser de mi madre como tantas veces ese hombre había abusado de mí, como me retorcía y me echaba a llorar como las lágrimas atravesó de los años se habían secado hasta la primera vez que intento suicidarse porque estaba cansada

Me siento en el suelo recostándome de la cama y puedo ver a Brayan entrar por esa puerta, cuando lloraba por la pérdida de mi madre y él era mi único apoyo en ese momento, se había acercado a mí, tomando mi mejilla, aun recordaba sus palabras, las tenía grabada en su mente como fuego

—Princesa—sentía su mano sobre mi mejilla—Tienes que ser fuerte ¿Sabes que puedes confiar en mi bebe? —Me veía asintiendo limpiando mis lágrimas—Yo voy a cuidar de ti muy bien

—Pero quiero a mi mami devuelta, me duele mucho ¿Por qué me abandono?

—Porque ya no podía mas, confiaba en que yo cuidaría de ti, ahora ¿Confías en mí? —claro que lo hacía si era lo único que tenía y la trataba como si fuera la única niña en la tierra en ese momento— ¿Me quieres? —no sabía que esas palabras tenían trasfondo en ese momento ni que sus brazos en vez abrazarme me estaban acariciando, estaba tan sumergida en mi oscuridad que no me di cuenta de lo que sucedía si no hasta que sentí sus manos bajar hasta mi vientre

— ¿Brayan que haces? Quiero estar sola, no quiero que me toques

—Si lo quieres, desde que vivo aquí me haz provocado princesa ahora que tu madre no está y tu estúpido padre podemos dejar florecer esto

—Brayan me estas asustando, yo quiero a Henry—tomo mi cuello al recordar sus manos sobre el cómo me había tomado y lanzado en la cara en ese momento ya el miedo estaba apoderado de mi—Brayan por favor

— ¿Por favor? Ahí Esmeralda ni siquiera sabes que esto recién empieza—me cubro los oídos al escuchar mis propios gritos, mis forcejeo para que se detuviera, el sabor de la sangre en mi boca y luego el fuerte dolor en mi entrepierna, así estuvo durante un tiempo que no recordaba, su aliento, sus labios, su olor, el sabor de mis lágrimas y su sonrisa sádica en mis oídos

—Mía, ahora ¿Quién te salvara? Estas marcada de por vida y si te atreves a decir algo recuerda que tu hermanito está en la otra habitación, no queremos que también te quedes sin hermano ¿Verdad? —en ese momento no había dejado de llorar y cuando estuve sola,  me quede a observar la mancha de sangre sobre mis sabanas rosas y como su olor estaba impregnado en mi cuerpo

Abro los ojos a borrar esos recuerdos de mi mente, me levanto limpiado mis lágrimas para verme en el espejo, podía ver a una mujer segura en él, como había podido despertar el deseo en ella y las ganas de vivir, como unas esmeraldas la había hecho sentir deseada y querida, ese hombre no pudo con ella, ya no estaba para dañarlo y si lo estaba, ya no era una niña indefensa que suplicaba porque la dejara, que lloraba caca noche por sus padres y por el dolor que tenía, que no dormía porque esos momentos se repetían en su cabeza, no bastaba con que sucediera de día por las noches en su sueños se le metía hasta en la piel

—Pero Ed—acaricio mis brazos pudiendo sentir sus caricias recorrerme, su voz ronca en mi oído y su delicioso aroma profanar mi cuerpo entero, como su olor se había grabado en mi piel, sus besos me recorrían—Ed—cierro los ojos recordando como se había hecho suya esa noche, lo quería ver—Saldremos de esta—abro los ojos y salgo de la habitación para dirigirme a mi moto, busco algo con que vaciar el tanque de gasolina para volver a la casa y recorrerla por última vez pero en esta ocasión llenándola de aquel liquido negro

En esa mansión estaba su pasado y Edward era su futuro, no había nada dentro de ella que valiera la pena, sus padres siempre estarían con ella no en una mansión vacía que hace rato había dejado de ser su hogar, donde aquel hombre solo la había atado a ella sin poder salir en años, estaba cansada de llorar y sufrir, esa niña llena de miedos quedo atrás

—Adiós Brayan—saco un encendedor que había conseguido en la cocina para lanzarlo dentro del charco de gasolina que llevaba al interior de la casa, me alejo para sentarme en el pasto y ver como mi pasado se iba quemando poco a poco frente a mis ojos, solo podía pensar en las miles de cosas que pasaron en esa mansión y como las cadenas que me ataban a ella eran por fin liberadas de mis hombros para poder salir libre como siempre había querido

Continuará...

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