No me cansaba a veces de verla, sabía que Esmeralda era muy inestable, tanto como lo era su horario del trabajo, siempre variaba y cada día le mostraba una faceta diferente, mentiría si digiera que no había ninguna faceta que no le gustaba porque lo había, como cuando se despreciaba a sí misma, le costaba mucho sacarla de esa faceta o cuando era terca

Era una de las peores porque no entraba en razón, como esa mañana que decidió otra vez ir a la estación sin previo aviso cuando ya le había mencionado que no lo hiciera aun recordaba cuando la vi entrar a la sala de interrogatorio y lo molesto que se había sentido porque de nuevo lo desobedecía, por su culpa había recibido un buen regaño por su jefa que lo había terminado amenazando con quitar los casos importantes si las cosas seguían así

Ella conocía muy bien la historia de Esmeralda, es un caso estrella en la estación por lo complicado que había sido y como me moví por tres estados buscándola y gracias a mi punto de vista y lo bien que conocía a esa mujer termine dando con ella

Solo yo y Esmeralda sabíamos lo difícil que había sido los últimos años para nosotros, ambos teníamos nuestros problemas, yo con mi trabajo y ella con todo su pasado, sé que no había sido el hombre más compresible de la vida y se culpaba mentalmente por alejarla inconscientemente pero ¿Qué podía hacer? El amor no solucionaba las cosas por arte de magia

Se había esforzado mucho en tener ese acercamiento que tenían ahora porque apenas se sentía cómoda con el tomando su mano o abrazándola pero nada más, no quería ir mas allá por miedo a como reaccionara y termino concentrándose mas en su trabajo que en Esmeralda en sí, resultado que se alejó de ella

Esmeralda no estaba exactamente feliz por su repentino distanciamiento por eso sus ataques de ira y sus rabietas que hacía más de lo normal pero le era imposible sacar tiempo y paciencia para ella, sonaba un poco cruel porque siempre que se ponga el esfuerzo sabía que podía lograrlo pero no sabía si Esmeralda era a él lo que necesitaba en ese momento, siendo su vida tan inestable y al mismo tiempo tan peligrosa pero ella no parecía darse cuenta de eso, solo le exigía muchas cosas más que el no podía ofrecer

¿Por qué no lo había dejado por lo sano? La amaba, su distancia no había Sido suficiente para olvidarse de ella, aparte de sus sentimientos sabía que Esmeralda dependía más de él que cualquier otra persona, no tenía a nadie más y parecía aferrase a él, no le molestaba pero tampoco su vida ayudaba pero tenía tanto miedo de no poder con eso

Aunque era egoísta que no iba a dejarla, ella tampoco quería dejarlo por eso le había ofrecido ser oficialmente algo, a él se le daba muy bien las responsabilidades y lo de cumplir roles por eso había querido que formaran algo aunque no sabía que iba a salir de ello pero ¿Qué más podía hacer? No iba a dejarla y si lo hacía, no iba a ver como se derrumbaba después de todo lo que le había costado que se mantuviera a flote

Era difícil, tenía que soportar muchas cosas, pensar cada movimiento que estaba con ella o pensar muy bien cada cita porque tenían muchos limites, no acercarse más del tiempo requerido y ya su mente estaba cansada de tanto pensar en su trabajo, se suponía que en una cita las personas se relajaban y disfrutaba, la única que terminaba disfrutando era ella porque él estaba preocupado hasta por lo que diría porque ahora le molestaban ciertos temas

Como su trabajo, Dios se molestaba si terminaba conversando sobre él porque decía que no le gustaban las historias tristes y le recordaba su vida así que no era un buen tema, él no le gustaba mucho hablar de su familia, era otro problema porque ella quería dárselas de psicóloga cuando ni se acercaba, otro tema intocable era sus sesiones o lo que escribía, se molestaba y no de me hablaba, lo único que hacíamos era hablar de algún libro o discutiendo porque teníamos opiniones diferentes, también sobre películas que siempre terminábamos concordando en una

Lo tema solo era partes del problema que el más grande era el acercamiento, si cuando recién me permitió entrar a su vida me dejo estar sentado junto a ella hasta que empezó a incomodarse y sudar frio, luego de eso me costó horrores acércame, la técnica que use al principio no funciono porque parecía más consciente de su cuerpo y los movimientos, vivía en constante miedo, ahora era otro tema pero igual no le gustaba ni siquiera que mis labios toquen su piel o mis manos toquen sus brazos, mis ojos ni siquiera tenía permitido observarla mucho porque se ponía a defensiva y terminaba siendo agresiva

Esas cosas eran muy difíciles de soportar y  sí se le suma el trabajo, mis problemas con mi madre ahora también hermana iba a explotar, mi único apoyo entre ese tormento era April, se había comportado muy bien, era muy diferente a mi relación con Esmeralda, era mucho más sencillo hablar y siempre estaba dispuesta a colaborarme en el trabajo y hasta distraerme de mi mente, me hacia reír o siempre me llevaba a algún sitio cuando estábamos en la patrulla por algún caso, era la única manera que tenía para relajarme

Sabía que le había gustado a April pero ahora ella tenía algo con el chico del departamento de inteligencia que en una ocasión nos había ayudado, se llevaban muy bien, sé que a Esmeralda no le agradaba nada que April hubiera merodeándome pero no podía controlar mi vida y más cuando ella nunca había hecho nada, de hecho había tomado su distancia desde que Brayan termino en aquel hospital mental

Igual ¿Quién más podía hablar? Angel estaba muy ocupado por muchas cosas, Albert ni se diga, Clara igual y mi relación con Inés no era tan cercana últimamente, con Henry ni loco porque el tema principal seria su mejor amiga, podría incluir a mi hermano en la ecuación pero su tiempo libre ahora que mi sobrino estaba más grande lo usaba con una conquista que tenía parecía que le quería dar una nueva oportunidad a la vida

Quizás mi tía pero esa mujer era tan inestable, ahora estaba de viaje quien sabe dónde junto a mi hermana que tenía universidad ahora, si crecían muy rápido y por ello teníamos muchos problemas porque parecía entender muchas cosas relacionado a mí lo que ignoraba cuando era más joven

En fin los últimos años mi vida era un desastre por lo menos laboralmente estaba bien pero del resto no podía resolver lo demás problemas cuando antes no estaba tranquilo hasta resolver los míos y los de los demás pero desde que Esmeralda había aparecido en mi vida esta se había vuelto un desastre

Aun así no podía dejar intentarlo con ella porque sabía que me necesitaba y que si la dejaba de lado me arrepentiría aunque sacarla de mi vida terminara con muchos de mis problemas y muchas de mis frustraciones, era egoísta de mi parte porque si lo hacía solo terminaría armando un caos

Siempre terminaba pensando en los pro y los contras de tomar una decisión así pero me inclinaba muchos por lo que solucionaría pero no podía hacerlo porque la quería aunque mi mente fuera un desastre tenia eso en claro, amaba Esmeralda tanto que no sabía que podía hacer sin ella en su vida aunque su relación no fuera la mejor del mundo

Si no era perfecto como ese día ¿Cómo había olvidado su cumpleaños? O ¿La película? ¿Llamarla? Sabía que Esmeralda le prestaba atención a esas cosas aunque digiera que no pero se había concentrado tanto en su caso de ese mes que había olvidado de todo hasta ordenar su casa nueva, si no podía vivir con su hermano para siempre

La vecina de April se había mudado y era una casa pequeña, como para dos personas así que la había comprado aunque a Esmeralda no le encanto que su vecina fuera cierta chica le había ayudado a decorar aunque nunca había ido a visitarlo como tal porque eso era otra cosa que no le gustaba estar a sola completamente con el porque se ponía nerviosa o estaba en pánico, ver película en la casa que vivía con sus hermanos hasta tarde era muy diferente a hacerlo en la suya que solo estaban ellos dos y su perro nuevo

Resultaba que Dan, el perro que compartía con April había tenido una aventura donde termino con hermosos regalos, me quede con uno de ellos cual le había puesto Doncan, era un gran perro guardián, siempre salía con April, Dan y Doncan a trotar todas las mañanas para termina desayunando ambos juntos ya que vivíamos solos, nos hacíamos compañía mutuamente, esa parte me gustaba porque April había aprendido a cocinar muchos otros platos y yo la había ayudado en nuestro tiempo de descanso porque así no siempre cocinaba yo para ambos igual al final disfrutábamos viendo una seria en la televisión mientras comíamos, era lo único bueno en los últimos años, mudarme

Hasta que lo hice pude darme cuenta de las ventajas de vivir solo y de al mismo tiempo compartir eso con alguien, se había vuelto muy cercano a April, tenía muchas cosas en comunes y se llevaban de maravilla como amigos, era una amistad que disfrutaba como solía hacerlo con Angel cuando no tenían tantos problemas como los de ahora, por con ella podía relajarse a diferencia de Esmeralda

— ¿Algo bueno que ver? —veo a Angel que se sienta a mi lado del sofá, mientras frente a nosotros algo lejos estaban las chicas, era el cumpleaños de Esmeralda, después de su día juntos le había insistido que fuera a la fiesta que Emma había organizado en la casa de Carlos— ¿En qué pensabas?

—En nada pero al mismo tiempo en todo—me sonríe para ofrecerme un vaso de jugo, lo tomo pero no lo bebo

—Amigo pareces el más tenso de todos, necesitábamos esto ¿no? —noto como bebe de su vaso pero a diferencia de mi Angel estaba bebiendo alcohol, veo de reojo a Esmeralda asegurándome de que en sus manos pudiera verse el mismo líquido que yo tenía y no de el de Angel, por obvias razones no debía beber—Relájate ¿Por qué no bebes una copa?

—Porque no me gusta beber y lo sabes, estoy bien—dejo el vaso sobre la mesa, no tenía sed, sabía que estaba siendo un poco amargado pero ¿Qué podía hacer? Los problemas terminaban llegando a su mente

—No lo pareces—me toma del hombro—Se nota que las cosas no van bien en tu vida, estabas muy molesto esta mañana y encima olvidaste hasta su cumpleaños, sabes que Esmeralda es una persona…

—Lo tengo claro, la conocí antes que ustedes, fue de los primeros en acercársele ¿Lo recuerdas? —Suspiro bajando la vista—Pero también tengo problemas como ella, sé que tengo que solucionar pero parece que no ahí minuto que pueda descansar—me recuesto del sofá, me sentía agotado en todos los sentidos, tenía trabajo acumulado por el cierre del caso de esa mañana y encima tuvo que estar caminado de aquí allá con Esmeralda

— ¿Por qué no aprovechas estos días para descansar? Dejar de pensar ¿Por qué no vas a la playa? Te gusta

—No puedo, le prometí a Esmeralda que estaría con ella por mi falta de atención el último mes y no sería buena idea llevarla conmigo, muchas cosas podrían salir mal de ese viaje

—Tienes razón pero también puedes intentar avanzar con ella, planifica cosas como lo hacías en la universidad—cierro los ojos, algo cansado, disfrutar unos días con Esmeralda me parecía buena idea a pesar de sus complejos

—Mi cabeza no da para más pero lo intentare ¿Qué tal Emma? ¿Algún avance?

—Vamos poco a poco, sé que llevamos 6 años de relación y es el momento para el siguiente paso pero el trabajo de ambos es difícil, me preocupa por cada vez tenemos menos tiempo juntos, quería proponerle que se viniera vivir conmigo porque siento que lo del matrimonio seria mucho ¿Qué dices?

—Si se lo sugieres como una prueba para el matrimonio si con vivir un año juntos creo que sería bien—esperaba que un día sus problemas de relaciones fueran tan simples como los de Angel

—También lo pensé, Emma siempre me comprendio muy bien y se…—no sigo escuchado la voz de Angel por lo que sentía que fueron segundos pero cuando vuelvo a abrir mis ojos noto que no está a mi lado y mi jugo había desaparecido donde lo había dejado además tenía una cobija sobre mi

Escucho unos murmullos a lo lejos y no había nadie cerca ¿Cuánto había dormido? Aún estaba oscuro así que seguro fueron unos minutos pero las luces estaban apagadas, me levanto para buscar donde provenía el murmullo pero era más persona cantando, llego a la cocina y puedo ver a Esmeralda iluminada para las luces de las velas rodeada de todos nuestras amistades cantando, no puedo evitar observarla que parece notar por su mirada se encuentra con la mía, le sonrió, ella hace lo mismo para apagar las velas

Las luces se encienden y se escucha nuevamente a todos felicitándolas para luego comenzar a hablar sobre varios temas mientras ayudaban a repartir la torta, me acerco al grupo para poder intentar incluirme, me había dormido y por lo que noto ya algunos se iban

—El bello durmiente despertó—Sonrió para sentir como Clara toma mi brazo jalándome hacia donde todos estaban reunidos comiendo pastel, podía olerse el alcohol en el ambiente—Mírelo aquí—estaba ebria, conocía su voz cuando lo estaba y parecía que todos ahí lo estaban excepto Albert y Esmeralda que fueron los únicos que noto tranquilos

—Yo le dije a Esmeralda que te despertara como a la bella durmiente pero se negó—siento que Angel me toma de los brazos—Ya sabemos pillín—mi mirada se dirige a Esmeralda esperando que me digiera de que hablaba Angel pero solo evitaba mi mirada tomado algo de jugo

—Habla de que ya le dieron nombre a su relación—Albert había notado mi confusión—Ya venía siendo hora de que sucediera

—Sí, porque yo misma te golpearía porque Meck se iba a volver loca y el último mes aún más—Sabia que ese mes había sido difícil quizás más para ella que para mí—Llevan tres años desde que comenzaron otra vez ¿Era tan difícil?

—Es que mi querida amiga es muy complicada, el pobre de Ed hace mucho hasta yo he tenido que soportar sus ataques de locura desde pequeños

—Cariño ¿Por qué no mejor nos vamos? —Inés aunque estuviera algo bebida nunca se le quitaba lo responsable ¿Así seria yo ebrio?

—Si deberíamos estar marchándonos—suspiro porque sería uno de los conductores de la noche junto a Albert

—Iré por mi chaqueta, la deje en el sofá—cuando me iba a marchar siento que me toman del brazo, no era Angel ni Clara— ¿Qué sucede? —veo a Esmeralda que se guindaba de mi brazo sonriendo

—No te iras ¿Te puedes quedar? —frunzo el ceño porque era la primera vez que me lo pedía directamente, solía dormir en el sofá cuando se me hacía tarde por una película—Quiero que lo hagas

—Esmeralda—me libero de su agarre para tomar su mano— ¿Vez a los muchachos? No voy a dejarlos ir solo—sus ojos parecía diferentes

—Oh no amigo, no te preocupes, disfruta la noche que aun eres joven y así se te quita esa tensión de una vez—frunzo el ceño al ver como me guiña el ojo ¿Qué tan perdido estaba para insinuar algo así?

—Quédate—veo a Albert—En mi auto entraran todos, no hay problema

— ¿Seguro? Además no creo que sea buena idea—veo extrañado a Albert que me señala a Esmeralda con la mirada, no logro entender hasta que la veo, aun sonreí y me observa ¿Qué le pasaba? —Esmeralda ¿Te sientes mal? —Me acerco al notar su rostro rojo y noto su olor— ¿Bebiste? —Estaba ebria por eso su mirada y su repentina actitud—Sabes que no puedes beber

—No fue su culpa Edward, te la dejo a cargo porque se suponía que Emma no se quería a su cuido porque Carlos no está en la casa—Esmeralda le había mencionado que su hermano y Carlos no estaría porque le querían dar espacio a sus amigos pero todos había terminado ebrios—Emma no está en posición de cuidarla—la veo que parecía que se dormiría en el hombro de Angel quien me evito la mirada cuando lo vi frunzo el ceño ¿Por qué sentía esa punzada?

—Angel dime que no es tu culpa que este así

—Quizás le eche algo al jugo—me cubro la cara frustrado—Ambos no beben y están muy tensos, solo quería que se relajaran un poco

—No se solucionan los problemas así idiota, sabes que no puede beber, solo mírala—ahora Esmeralda se encontraba jugando con sus manos y las mías—Si sobria no se cuida sola ¿Qué pasara si lo hace ebria?

—No seas amargado Edward, disfruta la vida—me iba a acercar a él para que reaccionara pero Albert me detienen

—Luego lo regañas, solo encárgate de cuidarla, yo lo hare con los demás—veo a Albert, no sabía si era buena idea

—Albert mi relación con ella es complicada, no creo que pueda cuidarla, no parece que vaya a poder ni siquiera meterse en la cama sola

—Esta relajada por el alcohol, oblígala que se duche y se le pasara, suerte…Vamos—observo a todos salir dejando todo hecho un caos ¿Qué iba a hacer con esa mujer?

—Estamos solos ¿No es genial? —Veo que se aleja para girar pero se tambalea, logro llegar a tiempo para que no se cayera—Siempre estás ahí—me sonríe, se veía muy inocente en ese momento, parecía mas relaja sin complejos algunos

—No por eso tienes que poner tu vida en riesgo—siento que me abraza sorprendiéndome, Esmeralda ebria era un amor

—Si así vuelves a mí lo haría cuantas veces sea posible—me ve a los ojos, era extraño que estuviera tan relajada por la cercanía y el hecho de que fuéramos los únicos en la casa—Ed ¿Sabes que solo tu mirada haces que mi mundo completo se ilumine? —noto como acerca más a mi rostro

—Siento lo mismo Esmeralda, discúlpame por lo de hoy—ya que ella estaba siendo sincera también lo era—Mi cabeza ha estado en el trabajo

—No puedo perdonarte porque nunca estaré lo suficiente molesta contigo—sus ojos se veían hermoso y su olor me estaba volviendo loco, olía delicioso como a rosas, podía sentir su aliento cálido mezclarse con el mío hasta el suave rose de sus labios cerca de los míos, espera eso no estaba bien

—Esmeralda—la alejo porque sabía que no estaba bien, no podía perder la cabeza— ¿Por qué no vas a ducharte? Así podemos irnos a dormir ¿Qué opinas? —parecía desorientada durante unos segundos pero me ve nuevamente y me sonríe acercándose a mi otra vez

— ¿Vienes conmigo? Podemos bañarnos juntos—Bien, esa mujer no estaba en sus sentidos ¿Podía bañarse sola? La veía estable al menos en su cuerpo

—No porque…—veo el lugar que era un desorden—ordenare, además ya me duche ¿Por qué no te adelantas? Mientras yo ordeno y me esperas para dormir

—Pero quiero que me acompañes—se me acerca tomando mi brazo, intento no ver porque su cuerpo estaba pegado a mi brazo, era extraño sentir a Esmeralda tan cerca y ese había sido mi deseo los últimos años, más de una vez esa mujer había despertado muchas cosas en él, hasta en sus sueños terminaba colándose, era un hombre después de todo—Ed vamos ¿Si?

—No—sentía extrañamente la garganta seca y me libero de ella para tomar un vaso de jugo rápido hasta que no sentí el extraño sabor en mi boca no lo note—Que idiota, bueno una copa no hace mal—veo a Esmeralda que parecía ahora triste—Ve a ducharte ¿Si?

—Bien pero solo promete que iras a dormir conmigo ¿Vale? —parecía una niña aunque la mayor parte del tiempo lo era igual seguro terminaría durmiéndose por su estado después de su ducha

—Lo prometo ahora ve—me sonríe para luego salir, suspiro porque comenzaba a sentirme nervioso por la situación y arrepentirme por no acompañarla, alejo esos pensamientos para concentrarme en limpiar el lugar pero no podía dejar de imaginar a Esmeralda en la ducha ¿A qué venia eso? —Bendito Angel y Albert—esperaba que a Esmeralda no le pasara nada en el baño quizás era peligroso en su estado ¿Sería buena idea investigar?

Intento concentrase en limpiar pero cuando no hubo más que limpiar decidió dirigirse a la habitación de la chica, toco un par de veces pero no respondió algo preocupado entra para verla sentada en la cama llorando ¿Ahora que había pasado? me acerco algo preocupado por su novia

—Ed ¿Soy bonita? —Me sorprende su repentina pregunta— ¿Me quieres?

—Creí que íbamos a dormir—veo como bajo la vista aun sin detener sus lágrimas ¿Había sido porque la había rechazado en la cocina? —Eres hermosa y te adoro—toma asiento a su lado para tomarla de la barbilla y que me viera—No sé qué haría sin ti

— ¿Estas mintiendo? —Niego para limpiar sus lágrimas—Yo también te adoro Ed por eso quiero darte todo de mi porque te lo mereces, no quiero que me abandones nunca ¿De acuerdo?

—Lo prometo, ni loco lo haría porque haría cualquier cosa por ti—sus lágrimas se había detenido ahora sus ojos volvía a tener otra mirada, me observaba con devoción, amaba esa mujer ¿Qué importaba sus complejos? La quería y nadie cambiaria eso, todo problema tenia solución y aunque sabía que Esmeralda iba paso a paso estaba dispuesto a intentarlo

— ¿Enserio? —Asiento y veo como me sonríe—Entonces no me alejes porque me duele cuando lo haces, no sabes lo que te necesito—me abraza del cuello, podía sentir nuestros alientos mezclándose y mis emociones a flor de piel no ayudaban mucho, Esmeralda se veía hermosa, había elegido solo un camisón para vestirse

—Y yo a ti mujer—siento como sus labios se une a la los míos dejándome sentir esas reconfortarles sensaciones recorrer mi cuerpo, sus cálidos labios contra los míos, había olvidado lo bien que sentía besar a esa mujer, no iba a negarme, le gustaba cada una de las sensaciones que Esmeralda despertaba en mi

Sin evitarlo la tomo de la cintura y de la nuca para tenerla más cerca y profundizar mas aquel beso, no quería dejar de probar esos labios que por años se había negado a probar por miedo, dejar de sentir todos esas sensaciones que Esmeralda le provocaba, su cuerpo respondía muy bien ante ella por solo un beso pero no pudo evitar soltar un leve gruñido al sentir las manos de Esmeralda sobre mi espalda su mano fría al juntarse con la mía caliente se sentía bien aunque no debía… ¿Qué estaba haciendo?

—Esmeralda—la alejo para ver como respiraba con algo de dificultad y luego me ve a los ojos sonriendo—No debiste—tomo sus manos para alejarlas de mi cuerpo, ya estaba lo suficiente alterado, esperaba que no notara su erección, estaba sensible por los años que no había tenido nada en su vida sexual pero no iba aprovecharse de ella, nunca lo haría estado en ese estado

—Ed—sujeta mis manos para volver acercarse pero me alejo hasta que vuelva a atraparme con sus encantos—Dijiste que haría lo que fueras por mi

—También sé que mañana me odiaras por esto, sabes que no podemos

—No te odiaría nunca, quiero otro beso Edward, soy tu novia ¿Por qué me lo niegas? —me levanto de la cama al ver que se acerca

—Es por tu bien—era más por la salud mental de ambos, yo no podía con eso— ¿Por qué no duermes? Estarás cansada seguro igual que yo

—No lo estoy y tu dormiste toda la fiesta—se levanta— ¿Por qué no quieres? ¿No te gusto? Creí que era lo suficiente atractiva, Emma dijo que lo era y me he dedicado los últimos años en cuidarme para compensarte mi falta de contacto pero parece que no lo hago bien

—Dios Esmeralda— ¿Por eso era que su manera de vestir había cambiado un poco? Ya no se vestía tan deprimente y su maquillaje también había cambiado pero se veía muy diferente hasta usaba falda en unas ocasiones, se veía aún más hermosa en vestidos—No sabes lo loco que me tienes—me acerco para tomar su mano—Pero vamos paso a paso, estoy agotado aun

— ¿Seguro que no es otra cosa? Entiendo si yo no soy suficiente

—Jamás seria eso—besos sus manos para sonríele—Eres maravillosa pero por ahora ¿Qué te parece dormir juntos? —ve nuestras manos, parecía pensarlo

—Pero no te iras a ningún lado ¿Verdad?

—Lo prometo—la veo asentir y sonrió, era lo menos que podía ofrecerle—Vamos recuéstate—apago las luces y me acuesto junto a ella para sentir como me rodea con los brazos, no sabía si mañana estaría igual de cómoda que ahora

—Me gusta esta vista—noto que veía el techo el cual tenía varias estrellas pegadas a este, se veía hermosos—Aunque supongo que todo es mejor cuando tienes una grata compañía

—Quizás—le sonrió para besar su frente—Por ahora descansa Esmeralda—bajo la vista al no tener respuesta para verla dormida—Eres increíble—la rodeo con mis brazos para sentirla cerca, solo quería sentirla un poco más ya después se iría al sofá para que no amaneciera alterada mientras quería disfrutar de esa paz que sentía en ese momento en los brazos de la chica