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CAPITULO 16: Reconciliación


Aun podía sentir mis lágrimas resbalarse por mis mejillas a pesar de mi esfuerzo por detenerlas, no podía creer todo lo que había pasado, era claro lo que pasaba entre Edward y esa mujer, no entendía porque el aun iba detrás de ella como si le importaba en verdad lo que sentía

Sabía que nunca iba a ser suficiente para Edward, su cuerpo estaba marcado para el resto de su vida, nunca sería la mujer que el quería que fuera, era una cobarde, no había hecho otra cosas que no fuera temblar como una tonta, dejarse paralizar por el miedo y por los recuerdos que le provocaba ese hombre, su pasado era parte de ella, nunca iba a poder deshacerse de el siempre estaría atado a el

—Esmeralda dime que hago ¿De verdad no quieres verlo? —Edward nos había seguido hasta al hotel y Heil lo había dejado estar en la estancia de la habitación

—Quiero que se vaya Heil, déjame estar sola por favor—noto que me observa, me cubro con la sabana para no dejarme ver, no quería que lo hiciera, no lo quería estar cerca de Edward ni de nadie más, solo quería seguir revolcándose en su miseria, sabía que las intenciones de Heil eran buenas pero una parte de ella temía por su presencia, le aterraba que se aprovechara de ella en ese estado

—Sé que no lo quieres, en el fondo gritas por alguien que esté ahí para ti porque no quieres estar sola—siento como me toca la cabeza pero me alejo, no quería que me tocara, solo incrementaba los recuerdos en mí, esas sensaciones, las noches sola en mi habitación—Cuando murió Fabián me sentí igual, había perdido a la persona más importante en mi vida y pensaba que no debió haber sido el si no yo, solo quería irme con él, un mundo sin él me aterraba y sé que no se compara con lo que te paso pero si mi madre no hubiera estado ahí y Dog para consolarme quizás no estuviera aquí, sé que nacemos solo pero no es necesario que vivamos solo Esmeralda

—Sigo sin querer verlo—Edward ya no era sincero como antes, no conocia a ese hombre a pesar de lo que le había dicho quería confiar en él pero también había querido creer en su primo pero las cosas no cambian por solo creer en ellas y no sabía si las cosas con Edward mejorarían algún día pero lo de ellos no parecía tener un retorno aunque lo deseara—Nunca tuve a nadie y por mucho que grite nadie me escucho Heil hasta que deje de hacerlo por años nadie acudió a mí y me rendí, no soy digna de nada, nunca voy a poder vivir tranquila, solo soy una cobarde, lo que hice fue arruinar tu viaje—ella sola podía revolcarse en su miedo pero no podía arrastrar a Heil con eso a pesar del miedo que tenía, era consiente que existían personas que no se lo merecían, solo estaban en el lugar menos indicado y les toca sufrir por cosas que ni siquiera eran su culpa, como ella o sus hermanos que no se merecían lo que les había pasado aunque ella quizás si lo merecía al final de cuentas

—Es mentira, aún no termina y he tenido de todo en este viaje además de que te conozco mi vida ha sido mucho más interesante si me lo preguntas, son pocas las mujer que salen adelante y no dejan que su miedos la impidan avanzar, fuiste muy valiente hoy, no sé qué hubiera sido sin tu ayuda Esmeralda—probablemente estaría en su casa con su perro y no consolando un intento de ser humano

—Si no hubiera venido quizás no hubiera pasado eso

—Si eso fuera así nunca hubiera ganado este viaje, fuiste tú la de la idea ¿Lo olvidaste? —tenía un punto pero si no fuera por Heil ella jamás se hubiera atrevido a venir a esa ciudad y tampoco hubiera enfrentado a ese hombre como lo hizo, no sabía ni siquiera donde había salido el valor pero ahora no quedaba nada de eso, aunque era un avance, me asomo para verlo sonreír quería escuchar lo que tenía por decir—Yo aún no soy capaz de enfrentar mis miedos ¿Por qué crees que no quiero que los demás sepan la clase de persona que soy realmente? Solo me escondo detrás de este disfraz de hombre confiable pero soy más cobarde de lo que crees, tengo miedo de muchas cosas

—Yo no lo veo así, aun no te has dando cuenta de lo inspirador que puedes ser—era un tonto, porque a ella la había motivado, a pesar de que lo odio desde que lo vio sentarse a su lado pero fue el primer amigo que dejo que se acercara, le doy confianza solo con su chistes malos y su sonrisa idiota

—Y tú tampoco lo haces—me sonríe—Aun no supero la muerte de Fabián sueño con él todas las noches y repito su muerte una y otra vez, me ha tocado vivir con eso pero tu estas dispuesta a dejarlo—ambos estábamos igual de rotos, todo eso era una estupidez, tampoco era una competencia pero ambos, aunque algo era seguro ambos se habían inspirado mutuamente, no sabía que ella podía hacer eso, inspirar a otro, era uno de sus objetivos cuando dejo que Albert hiciera su tesis sobre ella pero si vieran el desastres que termino siendo todo eso seguro que no inspiraría a nadie

—Creo que ambos tenemos muchos problemas

—Si claro, solo mírame estoy vestido de princesa—ambos reímos ¿Cómo lo hacía? En eso se parecía mucho a Edward— ¿Estarás bien? —asiento, ya estaba más tranquila aunque no quería que se quedara se conocía muy bien, confiaba en Heil pero tomaría su tiempo acostumbrase—Bien ¿Puedo dejar a Edward allá afuera? Porque no hago ejercicio y ¿Has visto su músculos? Me partiría en dos pero puedo hacer un esfuerzo por ti, si te molesta que este ahí afuera igual creo que se quedaría en la entrada del hotel si fuera necesario—Edward era un caso muy diferente a Heil, ya no me molestaba su presencia hace mucho, podía soportar que estuviera durmiendo con ella y no se inmutaría, era porque a pesar de todo eso confiaba en Edward aun así había discutido y terminado con el sobre eso precisamente pero existían mucho tipos de confianza ¿no? y Edward había roto una de ellas, no sabía si podría salvar algo de ahí

—No tienes que morir por mi culpa, déjalo—me sonríe—Que descanses

—Con nuestro día de hoy creo poder hacerlo—le sonrió para tranquilizarlo porque en fondo no me sentía nada bien pero lo hice porque sabía que no iba a estar tranquilo hasta verme tranquila, su vida siempre era una mentira, no dejo de sonreír hasta que lo veo salir, me recuesto en la cama pensando lo que había pasado ese día, he intento dormir esperando poder sacar de mi cuerpo y mente esos recuerdos concentrarme en lo bueno del día como Albert me había enseñado pero no sabía si funcionaria

***
Puedo sentir un fuerte ardor en mi mejilla derecha, un golpe había provocado que cayera al suelo, cierro mis ojos para olvidarme del dolor en cambio escucho algo romperse sobre mi cabeza y un líquido humedecer mi cabello, reconocía el olor a vino, me había estampado la copa de vino sobre la cabeza

Siento un frio recorrer todo mi cuerpo repentinamente, sentía un leve dolor en mi pecho aparte del dolor físico que tenía ¿Desde cuándo tenía ese dolor? No podía moverse

— ¿Cómo te atreves a intentar engañarme?—sentía un fuerte dolor en mi sexo— Eres mía—intento alejarme inútilmente podía sentir como me tocaba y mis lágrimas solo caen por mis mejillas, no podía estar pasando otra vez, nunca seria libre siempre iba a haber algo que me lo impidiera

—Detente por favor, me duele—intento forcejear pero es imposible, me lo merecía

—Esmeralda—me toma de los hombros moviéndome—Despierta—abro los ojos de golpe a reconocer esa voz, mi mirada se encuentra con la de Edward que me observa con preocupación—Estas bien, no te preocupes, no voy a dejar que nadie te haga daño—siento como me abraza, intento dejar que su olor me envuelva y su calor, Edward nunca me haría un daño tan horrible como ese

— ¿Hasta cuando seré esclava de ese demonio Ed? —siento como acaricia la espalda comenzando a susurrarme cosas al oído, dejo que sus palabras me calmen, su voz hasta su aliento sobre mi oreja—Te quedaste y no te fuiste con ella—me alejo para verlo a los ojos— ¿Por qué?

—No iba permitir que fuera ese hombre que lo hiciera por mi eres mi novia

—Hasta donde se hace unas horas terminamos, dijiste que cuando quisiera podía sacarte de mi vida aunque pareces hacer todo lo posible para retenerme—Edward tenía un poder sobre mí que me hacía creer que era capaz de todo, que podía existir un mundo donde todo entre nosotros estaba bien pero sabía que no era así a pesar de eso dejaba que su voz me tranquilizara y que su olor me hiciera olvidar el resto del mundo

—Sé que no es lo que quieres—me toma de la mejilla, a pesar de mi molestia me dejo llevar por su calor y su caricia, haciéndome olvidar mi pesadilla de hace unos minutos—Te amo Esmeralda tanto como tú a mí y no dejare que dejes de hacerlo, ni siquiera te dejaría por un hombre que te saque tantas sonrisas como yo nunca lo hice pero si quieres que me vista de princesa como lo hizo él lo hare—rio al imaginarlo, había olvidado eso pero Edward parecía estar muy interesando en lo que yo hacía con Heil a pesar de que no pasaba nada fuera de lo normal, al menos no hacía nada que no hiciera con Angel

—Fue una apuesta que perdió pero ¿De verdad lo harías?

—Y mucho más con tal de ganarle—bajo la vista avergonzada, estaba cansada de discutir con Edward y nuestra confianza, solo quería dejarse llevar por el pero tenía que darse cuenta que las cosas no eran tan fácil como creía pero le gustaba esa faceta de el a pesar de todo

—No es una competencia, no tienes por qué estar celoso—la palabra habían salido de mi boca por inercia, sabía que Edward nunca lo admitiría en voz alta pero era claro que solo estaba celoso de Heil porque me la pasaba más tiempo con el que con su policía, lo entendía porque lo mismo sentía yo con April

—Es normal que lo esté si estas con el todo el tiempo—lo veo con sorpresa ¿Lo había admitido? — ¿Por qué me miras así? — no podía creerlo ¿Edward Suarez admite tener celos? Tenía que estar soñando aun pero uno de esos sueños buenos que tenía con Edward ahora faltaba que la besara y terminara siendo un sueño erótico como le había ocurrido en algunas ocasiones ¿Por qué no era capaz de hacer esas cosas en la vida real pero en sueños si? Era injusto

— ¿Dijiste que estabas celoso de Heil? —veo con voltea la mirada, Dios se veía perfecto de esa manera, poca eran las veces que podía verlo avergonzado o tímido, no quería perderse ningún detalle de su rostro

—Si estoy celoso de el ¿Contenta? —sonrió abrazándolo del cuello, lo había dicho el mismo, de verdad la había hecho, eso hablaba mucho de el—No es algo que estés feliz, puede que quizás termine gustándote— ¿Cómo no estar feliz? Si estaba celosos y que lo admitiera era un claro ejemplo de lo que sentía por ella, no celaba a esa tonta de April si no a ella, Esmeralda Díaz

—Lo estoy porque dices que los celos solo muestran las inseguridades de las personas, según tu algo ridículo que no te pasaba a ti pero mírate, yo admito abiertamente que estoy celosa de April pero tú eres diferente

—Tú me pones inseguro desde que te conozco—me toma del rostro, cierro los ojos sintiendo su calor, ese hombre la iba a volver más loca de lo que estaba, no podían dejarlo ir Edward era egoístamente de ella y nadie más—Prometo confiar en ti si tú también lo haces conmigo

—Antes de eso—me alejo de él recomponiéndome un poco de la situación, recordando lo sucedido y lo que había visto, me había mentido y ahora no me podía decir que estaba paranoica porque lo había visto muy claro pero como decía el mismo, todo tenía una explicación—¿Qué hacían en una cita cuando estaban trabajando? —Me ve—Los vi en la fuente

—Tu amiguito también lo hizo y me pregunto lo mismo—sonrió al recordar que me alejo del lugar solo para evitar un mal trago, Heil era un amor y aun así defendía a Edward, algo le decía que no era simplemente porque estaba bueno y ya—Estábamos en cubierto, April se emocionó por los tontos bailes y estábamos ahí, aun investigo el caso pero parece que tenemos que regresar porque la testigo no está aquí y sus padres están de regreso a la ciudad, tenemos que ir a hablar con ellos—no sabía en qué caso estaba metido, no me lo había mencionado

—No me han contado de que se trata ¿Es algo muy grave? —Veo que me observa por unos segundos, parecía que no quería decírmelo— ¿Ed? —tenia curiosidad ahora, sabía que algunas cosas eran confidencial pero siempre terminaba ayudándolo de una forma u otra pero al menos que el caso fuera algo que pusiera el riesgo su vida terminaba diciéndomelo

—Es un caso de violación—bajo la vista pero siento que toma mi mano y lo veo, sabia lo sensible que era con ese tema, esas palabras era suficiente para que me recordaran todo lo que me había sucedido—Quiero ayudarla de verdad Esmeralda, sé que nos ha alejado mucho pero…

—Hazlo, se el infierno que ha pasado, ayúdala—tomo su otra mano para verlo, sabía que ella no era la única en el mundo que había sufrió eso ni la primera y mucho menos la última, tanto como Edward, Angel y Albert querían poner su granito de arena, ella también pero era una cobarde como siempre, quería que sus libros inspiraran pero ni siquiera era capaz de salir el hoyo donde estaba metida—dime ¿No hay más de lo que deba saber? —lo veo que baja la vista algo inquieto, prefería no seguir con el tema, si el no quería decirme los detalles era por algo pero esa mirada la conocía muy bien— ¿Si lo ahí? —hago que me ve a los ojos—Edward dime—conocía bien a Edward había aprendido los mismo trucos que el para leer a las personas gracias a mi tiempo con Albert y el que lleváramos años conociéndolo no lo ayudaba

—Antes de que los siguiera al hotel paso algo—recordaba que Heil me había dicho un rato después de que habíamos llegado que Edward había llegado y exigía verme, no los había seguido al momento, no se preguntaba como sabia el hotel donde se hospedaba porque Angel podía ser muy malicioso —Sabes que te amo pero hay veces que ciertas cosas se salen de mi control

— ¿Tiene que ver con April? —veo que asiente, siento mi sangre arder al imaginármela acercarse a mi policía al momento de nuestra discusión, solo se aprovechaba de la situación, siendo Edward tan inteligente ¿Cómo no lo había visto venir antes?

—Me quede a esperar la patrulla con ella pensaba buscarte mañana pero si estaba alterado por lo que me dijiste, no he sido sincero en muchas cosas Esmeralda—veo que intenta tomarme de las manos pero las aparto, estaba molesta con él, algo había pasado ¿Me había traicionado y por eso estaba ahí? ¿Se sentía culpable? —Deberíamos hablar mañana, estarás más tranquila

—No te has caracterizado por ser cobarde Edward ¿Qué hizo? —veo que duda unos segundos pero se entrelaza las manos sin verme a los ojos

—El día que me fui antes que comenzaras la universidad Salí de viaje con ella, mi hermana y sobrino a la playa, todo lo hice porque mi hermano me iba a dar este caso—aprieto las manos, no le gustaba para nada por donde estaba dirigiéndose la conversación —no te lleve por tu condición con las personas—veo que respira nervioso—He tenido muchos problemas con Isabela por ti y mi madre, no te lo conté porque has tenido suficiente

—Creí que Isabela me adoraba ahora entendiendo porque no la he visto en la universidad ¿Me está evitando? —sabía que Isabela estudiaba en la misma universidad que yo igual que el sobrino de Edward pero no me había topado con ninguno igual no es como si los fuera buscado pero recordaba a Isabela una niña tranquila, después de mi crisis me había desconectado de muchas cosas y no sabía que eso pudo tener daños colaterales en otras personas como lo que había sucedido con Edward, lo agobiado que estaba por ella

—Podría ser, ese día de la playa discutimos, le saque muchas cosas que quizás no sabía tu tampoco, no sabes lo difícil que ha sido pero April fue a consolarme, quiso besarme pero la aparte en ese instante porque no quería hacerte eso—respiro al escucharlo, lo había apartado pero algo le decía que había mas—Pero hoy cuando se fueron, me dijo muchas cosas, de que estabas de luna de miel mientras trabajan con ese hombre y…solo me moleste más pensé que quizás debía dejar esto por lo sano, que ella tenía razón y me beso—me ve, siento como mis lágrimas se acumulan en mis ojos, al imaginarme a Edward con esa mujer—La separe al instante porque me di cuenta que era estúpido que por ella no sentía nada y que pasara lo que pasara no dejaría que ese hombre te arrebatara de mi lado—veo como cae sus lágrimas, sin evitarlo dejo caer las mías—Lo siento de verdad, antes no puse distancia pero en cuanto regrese la mandare a otro escuadrón—me toma de las manos—Esmeralda dime algo, sé que me he comportado como un idiota pero prometo cambiarlo a partir de ahora

Quizás había sido culpa de ambos, ella solía exagerar con algunas cosas y nadie era perfecto pero le dolía, Edward debió haberlo venido venir, él lo tenía que haber sabido, el solo primer intento debió alejarla o hacer algo al respecto pero él lo quería ¿Verdad? Él se lo estaba buscando porque tuvo que notar todas las señales

—Eres una de las personas más inteligentes que conozco y debiste notarlo, con solo el primer acercamiento debiste saberlo, lo querías Edward

—No—me toma del rostro aun sosteniendo una de mis manos, me dolía porque aunque él lo negara, prácticamente lo quería—El caso era muy importante y tome mi distancia, se supone que somos profesionales y me ha ayudado mucho en el caso—me limpia las lágrimas—Sé que no es una excusa para mi comportamiento pero no soy perfecto Esmeralda, no solo tu saliste herida hace unos años, desde que salve a tu hermano de ese sitio mi vida ha ido en pique, desde que te lo conté todo, tu secuestro, mi madre, mi hermana, mi hermano hasta mi sobrino, no soy de piedra Esmeralda

—Entonces por eso la quieres a ella, sé que no soy la que necesitas, tú lo sabes pero aun así estas aquí otra vez, no somos lo que necesitamos, sé que solo me apoye en ti pero no puedes apoyarte en mí y aun no estoy lista para eso, soy un puto desastre Edward y nunca voy a estar completamente bien

—Yo tampoco lo voy a estar pero te aseguro que no quiero a April, si no a ti, siempre he intentado mantener mi vida perfecta pero necesito un poco de desastre en ella, a pesar de que todo está fuera de mi control me gusta que seas tú—Lo amaba sabía que a veces no era suficiente pero quería intentarlo

—Ed—cierro mis manos alrededor de las de él, dolía, cuando yo pensaba que Edward nunca me rompería el corazón de esa manera pero eso era lo que ella quería, alejarme de mi policía, sabía que el tenia parte de la culpa pero no le daría el gusto—Te amo y mucho pero eso no significa que vaya a dejar que jueguen conmigo y sé que tú no lo ha hecho pero si no la alejas juro que no volverás a saber de mí, porque una vez que lo haces es tu culpa pero ya la segunda vez sería mi culpa por perdonarte la primera vez

—Lo sé—me besa las manos—gracias por esta oportunidad, no te arrepentirás—asiento y siento como limpia mis lágrimas, Edward se lo merecía había hecho mucho por mi desde que lo conozco comparado con lo que le he hecho quizás no es mucho pero era un error que no podía perdonarse fácilmente

—Solo dame un poco de tiempo ¿De acuerdo? —Asiente y siento como me abraza— ¿Quieres dormir conmigo? —me ve, sabía que no iba a poder dormir y con Ed cerca quizás ayudara, saber que va a estar ahí para mí como hace tiempo no lo está me daba el valor que necesitaba, las heridas podía cerrarse solo bastaba un poco de tiempo para que esos sucediera

—Creí que no te gustaba—sin el ahí quizás no iba a volver a dormir

—Eres tu—me recuesto y siento como él hace lo mismo rodeándome con los brazos—Este tiempo no está funcionado como parece—No habíamos cumplido nada de ese tonto tiempo que el mismo había pedido, no podía estar lejos el uno del otro, ya habían tenido suficiente, ambos había pasado por mucho

—Olvídate de eso, fue una tontería, ahora solo quiero estar contigo—sonrió al sentir su rostro en mi cuello más su respiración, le provocaba muchas cosas ¿Quién diría que su día iba a terminar así? Su vida daba muchas vueltas definitivamente—Sé que vamos a poder con esto y más, descansa

—Lo mismo digo—me doy la vuelta para recostarme sobre su pecho y cerrar mis ojos para intentar volver a dormir

***
—Comienzo a extrañar el vestido—Heil me ve con mala gana, estábamos haciendo una fila para conseguir la firma de uno de los autores

—Cállate que los pies me están matando, por mí me hubiera quedado en el hotel

—Pero qué clase de ánimo es ese, se supone que yo soy la que debí amanecer de malas pero aun así mírame, estoy hasta haciendo una fila lleno de adolecentes hormonales—si la mayoría de algunos autores era escritores jóvenes parece que era lo que más llamaba la atención

—Claro porque el sexo es lo que piensa las personas hoy en día, siento que un libro es malo solo porque no tiene una sola escena de sexo, créeme las historias de hoy en día no valen la pena

—Eso me recuerda mucho a uno que leí con Ed a principios de año y luego nos enteramos de la película que parece que fue un encanto para mí

—Sé de qué me hablas salió en el verano, no vuelvo a dejar que me recomienden libros mis amigas, no saben de cultura y ya que hablamos de Ed

—No comiences Heil por favor—me cruzo de brazos por lo menos su ánimo estaba mejor—Sabes lo que me recuerda que en tres días será noche buena y mis amigos organizan una fiesta entre nosotros, habrá hasta intercambio de regalos ¿Te apuntas?

—La verdad no soy amante de esas fiestas y no es como que conozca a tu grupo, me sentiré incomodo

—Invita a alguien además ya conoces a la mayoría, te van a agradar sobre todo a Albert pero estará casado dentro de poco, es una sorpresa no lo comentes, también esta Clara seguro se llevaran muy bien

—Sabes no pareces el tipo de chica que le guste esos eventos y ¿Por qué piensas que no tengo planes? Soy un hombre muy ocupado

—No me digas—llegamos finalmente a la autora, era la secretaria de mi libro favorito de romance pero era algo—No sabe lo que me gusta el libro, besos con sabor a café es de los mejores libros que ahí, es una pena que no allá podido venir

—Esta trabajando en mucho cosas ¿A qué nombre lo coloco?

—Esmeralda Díaz—veo que me observa—Si esa Esmeralda Díaz

—Escuche mucho de tu caso, es una pena lo que te paso pero veo que pudiste salir adelante a pesar de todo—sonrió al ver la firma, decían “La vida solo es cuesta arriba pero la vista es hermosa cuando llegas al final” —Comprendo porque te gusta, mi jefa era lo que quería, que le llegara a las personas

—Yo espero lograr lo mismo con mis libros—me sonríe me salgo de la fila esperando por Heil, observo el libro, lo había descubierto hace un par de años, el libro se trataba de una mujer que era violentada de todas las formas posibles por su novio y todo porque no tenía nada más hasta que conoce a un hombre que le ofrece un empleo y ella comienza a valerse por sí misma, me gustaría ser asi como esa chica de mis historias, donde las mujeres toman su lugar y sales adelante a pesar de todo pero no había logrado mucho

—No soy muy fan de la autora pero puedo venderlo por varios billetes—ruedo los ojos al escucharlo— ¿De verdad el libro es tan bueno?

—Hiciste que lo firmara y no lo conoces—veo que se encoge de hombros—lee y veras que yo también leo cosas que valen la pena

—Nunca dije lo contrario después de todo hicimos esa grandiosa historia que ganara el puesto número uno hoy ¿no? mira ya van anunciar los ganadores—nos acercamos un poco a la tarima—Iré—lo observo confundida—No me gusta mucho pero iré si me prometes contarme porque te emocionada tanto porque no pareces el tipo de persona que ame esas fechas además estas emocionada por el asunto

—No es una historia muy larga en realidad aunque opino que no pasan las mejores cosas en esas fechas pero me gusta

—Vamos a anunciar el ganador a la mejor historia para dar por finalizado por el día de hoy, mañana podrán asistir a la obra que se realizara por el segundo premio que será otorgando a…Más que un cuadro escrito y editado por Esmeralda Díaz y Heilerd Verhelst—veo a Heil sorprendida—Suban por favor

—No puedo creerlo, es mejor que nada—me extienda la mano, yo sonrió tomándosela para subir la escaleras a la pequeña tarima donde nos aplauden, siento mis nervios a flor de piel pero logro calmarme para recibir el pequeño premio y nos dan lo que es como un libreto pequeño de la obra, si tenía el suficiente publico podría ser presentada en varios teatros del país

—Es un gran talento lo que tenemos aquí, felicitaciones muchachos

—Quiero agradecerle a mi mama, a mi perro, al señor que nos vendió los ingredientes para esa torta que de alguna manera nos ayudó para que Esmeralda se inspirara porque…—le arrebato el micrófono

—Es un honor ganar este premio, no se pierdan nuestra obra mañana, gracias por sus votos—bajamos del escenario y veo a Heil molesta— ¿En serio?

—Me emocione, no te enojes hace un momento estas feliz—veo su sonrisa—Ahora que lo pienso me evitaste el tema, ayer estabas que no querías ver a nadie y juro que te deje durmiendo ¿Qué paso?

—Eres como una vieja chismosa Heil, no pasó nada de lo que estas imaginado

— ¿Pero que me estoy imaginado? —yo niego al verlo, su mal humor había desaparecido, podíamos jugar ese juego los dos

—Te lo diré si me dices porque tu mal humor de esta mañana porque hasta donde se te había dejado un poco preocupado pero cansado

—Sabes jugar niña y muy bien—se cruza de brazos—es justo pero quiero los detalles y yo te daré los míos ¿Trato? —me extiende la mano

—Por supuesto señor Verhelst—rueda los ojos porque no era fan de su apellido—es muy original si me lo preguntas

—Pues no te lo pregunte así que no me digas así ahora cuenta

— ¿Esmeralda Díaz y Heilerd Verhelst? —Ambos asentimos—Los necesitan para que arreglen todo para la obra y veo lo que tenemos hasta ahora—sonrió viendo a Heil

—Tendremos que esperar Heilerd—Frunze el ceño pero me sigue, también tenía curiosidad pero estaba emocionada por esa obra esperaba que Edward pudiera ir porque por fin las cosas parecían tomar un buen rumbo y esperaba que se mantuvieran así

Continuará...

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