CAPITULO 14: Preocupación
—Oh Esmeralda tengo noticias buenas y otras fantásticas—niego levemente a escucharlo—Muestra más entusiasmo así nadie terminara contando nada
—No sé ni de que se trata al menos que me digas que mi escritor favorito saco una nueva película no me emocionare—veo como me sienta en el puesto frente mío, estábamos en el salón esperando por el profesor que aún no llegaba
—No es tan bueno, lo mismo pensaría—rio al ver como su humor había cambiado repentinamente—Pero igual es buena—sonríe, Heil tenía más facetas que ella—Habrá una feria de libros este fin de semana—lo veo interesada—Hace años que no vienen a la ciudad y la mejor parte pero en esta tienes que ayudarme
—Heil la ferias de libros no son la gran cosa solo cuando viene algún autor y hoy en día es fácil conseguir los libros por internet—veo que niega tomándose la cabeza como si estuviera decepcionado
—No sé cómo eres mi amiga—suspiro dejando lo que estaba escribiendo para verlo—Los libros en físico son mil veces mejor que los libros electrónicos, por nada en el mundo cambiaria algo así, es muy diferente y si eres lectora lo sabes
—Lo sé pero todo libro que quiero solo lo pido por internet y me lo traen, puedo regalarte uno si quieres, no tengo problema—veo que frunce el ceño— ¿Qué?
—Sigue siendo diferente, nada es mejor que ir a una feria y ver todo tipo de libros ahí fue donde conocí a mi autor favorito Gabriel García Márquez, no hay nada mejor que él, antes había escuchado mucho de el pero nunca me atrevía a leerlo hasta que vi en oferta su preciada obra y lo compre, fue el mejor dinero gastado que he tenido en mi vida
—Sí que amas los libros—sonrió al recordar a la que fui con Edward, hace mucho tiempo que paso aquello, fue como nuestro primer acercamiento—Te acompaño quizás allá algo que me interese
—Esa sigue sin ser la actitud pero igual te diré la siguiente gran noticia ¿Estas lista? Sujétate bien porque puedes irte de espaldas con esto
—Ya solo dile de una buena vez Heil, el profesor está a punto de entrar—se escucha la puerta y maldigo mentalmente porque era el profesor, Heil se coloca en su asiento—Dejémoslo para después
—Abran el libro en la página 12—noto que Heil sonríe y me hace seña para que colocara el libro frente a mi mesa así el profesor no vería que conversábamos
—Hay un corcuso en la feria, pueden inscribir cualquier obra que quieras—eso no pasaba mucho aunque con internet cualquier se podía volver famoso con un libro que solo se tratara de sexo, al menos eso era lo que había notado de los escritores que eran famosos solo por eso
— ¿Quieres participar? ¿Tienes una obra con que hacerlo? —veo que niega— ¿Y cuánto es tiempo se da para que la hagas?
—Ese es el reto, es para la fecha de noche buena, una semana antes
—Estás loco para eso falta dos semanas—esa era nuestra última semana de clases en la universidad, de hecho solo les faltaba cerrar notas con ese profesor que había faltado las últimas semanas de clase
—Es un relato corto pero tiene que impresionar y el premio te va a interesar, no es algo que puedas conseguir chasqueando los dedos
—Dilo de una buena vez Heil—toma su barbilla como si se decidiera entre decirme o no, ya me estaba dando curiosidad y solo por la manera que le daba vueltas al asunto, aunque no me interesaba directamente—Heil
—Vale el premio es viaje a la capital donde van estar las mejores escritoras y podrás conocerlas a todas
— ¿Hablas enserio? —me levanto sorprendida porque era algo que si me encantaría hacer ¿Y si estaba la autora de Yo antes de ti? Moría por conocerla y ni hablar de la Piratas que seguro Edward moriría por un autógrafo
—No sabía que le emocionara tanto la lectura señorita Díaz—veo la sonrisa vurlona de Heil y yo le sonrió al profesor, había olvidado la clase
—Sí, es que de verdad me encanta su clase
—No me diga, si le interesa tanto a parte de la presentación que tienen el jueves me trae un ensayo de 20 hojas sobre lo que vimos en el corte ¿Le parece?
—Por supuesto me fascina—genial más tarea que entregar por culpa de Heil
—Me alegra escucharla, es todo clase nos vemos—suspiro y tomo mis cosas para salir del salón junto a Heil que una vez fuera comienza a reír
—Se te está volviendo costumbre meterme en problemas con los profesores
—Fuiste tú la que se levantó y grito de repente, ya no te reconozco Esmeralda
—Eres un idiota—me sonríe— ¿Sabes quienes van a ir a la feria?
—No es una feria más bien es como una conferencia que solo irán ciertas personas, es un concurso que se hará en todo el país y los escritores se tomaran el tiempo para hablar con sus fanes pero solo si ganas el concurso, es un viaje con todo pagado, es para motivar a los escritores jóvenes
—Pero solo son dos semanas hasta los profesionales tardan un año en terminar un libro complejo, creo que mínimo necesito unos meses para hacer un relato corto además solo es un premio ¿no? no podemos ganar los dos
—Es pareja apenas me entere y vine a decirte pero podemos hacer algo, además ganar ese premio sería fantástico, solo es cuestión de pedir permiso en el trabajo y ponernos a escribir algo bueno, no me gusta presumir pero soy muy bueno escribiendo
—Estas presumiendo ahora mismo Heil—sonrió al ver que se pone frente a mí para caminar de espalda y verme a los ojos—Lo sé, si participamos serán muchas horas de sueño que perder pero el premio valdrá la pena además ¿Te imaginas tener una copia de nuestros libros firmados por el propio autor?
— ¿Sabes que el tuyo ya murió hace varios años? —veo que se encoge de hombros, ya estábamos de camino al trabajo
—Lo sé pero no es el único que me gusta como escribe además ¿Qué podemos perder? —nadie había leído mis historias antes, no sabía si era lo suficiente buena para ganar algo así
— ¿Qué tal si no soy tan buena como creo que soy? Nadie nunca ha leído una historia mía y lo hecho antes pero solo para las clases, nada interesante
— ¿Estas de broma? Solo con verte me gustaría comprarte un libro además confía en que yo te corregiré los errores, puedo ser muy perspicaz ¿Qué dices? —mentiría si digiera que no le emocionara pero a verdad era que si quería hacerlo pero tenía miedo, no sabía si podía ser rechazada o si por alguna razón no la aceptaran por todos los problemas que podía causarles al enterarse quien era, no era la primera vez que le pasaba, si no fuera por el contrato de confidencialidad que había firmado la universidad con Brayan seguro no la hubieran aceptado otra vez
—De acuerdo lo hare—veo la enorme sonrisa de Heil, si fallaba no tenía nada que perder era mejor intentarlo que no hacer y quedarse sabiendo que fue una cobarde por ni siquiera intentarlo
—Esa es mi chica—siento como me abraza de los hombros—este fin de semana comenzaremos, mientras vayamos pensando en una idea para el tema principal—asiento, ya no me molestaba el contacto con Heil, se sentía augusta con él a pasar de toda la desconfianza que le había tenido al principio
***
Veo mi cuaderno de ideas y apenas en la semana había tenido solo tres que no me convencían en lo absoluto y el tiempo corría pero mi cerebro no tenía ninguna idea, de hecho en la historia que estaba trabajando no había avanzando nada y todo porque había tenido muchos problemas como para escribir, tenía eso llamado bloqueo del escritor a muchos le pasaba y a ella era la primera vez que le sucedía
Había confiando en que Heil tendría una buena idea para el fin de semana pero en cuanto le entrego su cuaderno solo descubrió que había escrito la palabra patata en el cuaderno ¿Qué significa igual? El había sugerido comenzar con ese concurso pero parecía no tomárselo enserio
Lo observo y estaba jugando con una pelota, que la lanzaba al techo para atraparla, estábamos en la sala de mi casa, yo tenía mi laptop en mis piernas porque tenía la mínima esperanza de que comenzáramos por algo pero yo estaba seca y Heil no parecía importarle
—Esta mañana nos escribí en el concurso puse ese título como obra pero le agregué algo como título en proceso ¿Qué opinas? —Frunzo el ceño— ¿Estas molesta?
—Por supuesto que lo estoy, pensaran que solo es un chiste de nuestra parte ¿Crees que nos tomaran enserio con ese título? No sé qué pasó por tu mente cuando lo escribiste ¿Qué podemos hacer con semejante título?
—No subestimes a las patatas, pueden a tener un sabor de los dioses
—Sabes que renuncio, ni siquiera lo voy a intentar, me rindo—cierro mi computadora para levantarme del sofá, era una tontería que pudiera lograr algo como eso, no podía hacerlo sola
—No te molestes Esmeralda—me dirijo a la cocina—Soy más de leer que de escribir, yo quería juzgar tu obra y hacer los cambios, nunca he sido bueno para escribir, mi imaginación no da para tanto pensé que tendrías algo
—Por si no te has dado cuenta mi vida es un desastre y mi cabeza no tiene espacio para escribir, hace meses que no he logrado hacer nada
—Oye se supone que escribir es la manera de los escritores tienen para escapar de la realidad igual los lectores la diferencia es que ustedes creen y hacen lo que quiera en sus historias, emocionado por cada parte—niego para comenzar a preparar café—Vamos Esmeralda, sé que se te ocurrirá algo—lo veo— ¿No hay una manera de que vuelva tu inspiración? Siempre hay algo que tienen para inspirarse—ve la cafetera que comenzaba a trabajar y Edward viene a mi mente, siempre me ha motivado en todos los sentidos pero en ese momento solo podía pensar en los problemas—Puedo disfrazarme de Edward ¿Quieres?
—Sería muy raro que lo hicieras—lo veo— ¿Quieres cocinar un pastel? —me ve extrañada, me gustaba porque le recordaba el cocinar con su policía y también a sus amigas de las veces que venían a aprender a hacer dulces con ella
—Bueno me gusta lo dulce ¿Por dónde empezamos? —sonrió, por algo se empezaba ¿no?
***
—Sabes sería una pena comérselo—ambos observamos nuestra obra de arte, había sido un pastel de chocolate—Pero me lo voy a comer porque es la primera vez que logro hacer algo con mis manos
—No me digas que nunca haz cocinado
—Si lo hacía pero hace mucho no aunque repostería nada de eso, se lo dejo a mi madre igual lo de cocinar—lo veo— ¿Comemos?
—Hare más café ya que tú eres una adicto a el—me sonríe y me muevo hacia la cafetera— ¿Por qué cocinaste conmigo si no te gusta?
—No es que no me guste si no que me trae muchos recuerdos—lo veo de reojo que observa tristemente el pastel—Fabián y yo siempre cocinamos juntos fue el que enseño a hacerlo antes de el solo comía comida congelada y mi madre por su trabajo casi nunca estaba en casa sino hasta hace poco que se retiro
—Fabián parece un buen tipo ¿De que trabajaba tu madre?
—Era enfermera, hace poco por fin le dieron su retiro, está más tranquila en la casa cuidando de Dog—niego levemente y noto como el café estaba listo, tomo las tazas—Te ayudo—sirvo las dos tazas de café mientras Heil pica dos trozos de nuestro pastel para colocarlos en un plato, salimos de la cocina para ir a la estancia—Sabes el otro día pensé en lo que me dijiste
—Puedes ser más específico ¿no? —me sonríe para sentarnos en el sofá que estábamos antes
—Unas palabras no te definen y sabes lo que pienso de todo lo que hablan las personas, me gusta juzgar las personas a mi manera—lo veo extrañada porque no entendía lo que quería decir—Sé que escuche de otros tu historia pero la verdad es que me gustaría hacerlo de tus labios porque es la real, dicen cosas diferentes a lo que pienso porque siento que te voy conociendo poco a poco
—Gracias por pensar de esa manera Heil, el mundo parece que no cambia
—En realidad el mundo puede ser un lugar mejor si pusiéramos empeño pero el ser humano es imperfecto y destructivos por naturaleza
—Ed dice que la perfección es un mito y creo que tiene razón pero sabes se pueden conseguir personas que valen la pena luchar aunque sean imperfectos
—Antes era adicto—lo veo con sorpresa—Fue Fabián quien me ayudo a salir y es por el que aún no he vuelto recaer, sé que estaría decepcionado si lo hago—baja la vista parecía avergonzado—Siento que es injusto que yo conozca parte de ti y comiences a confiar y yo apenas hablo de mí solo que en el pasado las personas me juzgaron muy mal—me ve—Los de nuestra clase son unos de ellos—se le notaba que le dolía
—Y no es necesario si no quieres—le sonrió—Tengo una idea para la historia
— ¿Enserio? ¿Qué te ayudo? ¿Mi deprimente título, la historia o el pastel?
—Tu—me sonríe—Es mejor que empecemos o se me ira la inspiración
—Es mejor aprovecharla entonces—rio al verlo tomar su computadora para abrirla, esperaba que fuera una gran idea
***
Veo inquieta Angel y Emma que estaban frente a mí y Heil terminando de leer la historia que nos había tomado toda una semana terminarla, según el criterio de Heil había quedado fantástica pero como estaba tan emocionado por ser basada en el al menos parte además de que había aportado ideas, su opinión había quedado descartada
Entonces pensé en mis grandes amigos para su opiniones, Angel era muy sincero igual que Emma, ambos ni por asomo me habían mentido, siempre eran sinceros aunque la verdad doliera, pensé en Ed pero las cosas aún seguían tensas entre nosotros y no me había escrito desde que se había ido, esperaba que donde estuviera pensara en lo que quería en su vida porque ella comenzaba a tenerlo claro
—Sabes que ya lo sabemos, no hacemos un buen equipo, vamos a rendirnos Esmeralda, tu dedícate a criar vacas y yo perros porque será para lo que sirvamos—niego levemente—viviremos en una granja fracasados para toda nuestra vida, compraremos una cabra que llamaremos Cat
—Dios ¿Dónde te sale tanta imaginación para pensar esas cosas? Y ¿Por qué una vaca? No me gustan
—Pero si el chocolate y criando gatos no te imagino, son para las solteronas es mejor en una granja para que mis perros lo cuiden y poder ver a Edward vestido de granjero ¿Sabes que no usan casi camisa? —me cubro el rostro entre mis manos avergonzada por qué si me lo imagine—Si te lo imaginaste
—Cállate Heil, eres un pervertido de primera, deja de bucearte tanto a mi novio
—Es que es irresistible no hacerlo—suspiro y noto como Emma y Angel nos observaban extrañados, había olvidado que Heil no le gustaba que los demás supieran que le gustaban los hombres—No es lo que creen
—De hecho es lo que creen y si no es por Esmeralda también diría cosas por estilo por Angel—ve a Emma—Tienes un novio divino
—Pero bien apartado—rio al ver como Angel se acerca más a Emma—Un momento entonces Ed—veo como mi amigo sonríe—Tenemos que aprovecharnos de esto definitiva ¿Cómo no lo has pensado Esmeralda?
—Angel no ¿Por qué no volvemos a la historia?
—Lo olvidaba—la toma al ver que me la entregan—Es un asco
— ¿Enserio? De verdad creí que estaba buena
—Es una broma Meck, es una grandiosa historia muy realista, una chica que quiere cambiar y mostrarle al mundo lo que pinta, mostrarle como es ese chico que quiere además el final quedo genial
— ¿De verdad lo crees? Tenía mis dudas
—Es fantástica, seguro y ganan el concurso, te mereces un respiro, no solo Edward tiene derecho a salir a pasear
—Sí, ya que aclaramos eso ¿Qué hay de jugar con la paciencia de Ed?
—No se supone que eres su mejor amigo—me levanto—Vamos que quiero practicar con mi moto
—Oh Vamos Esmeralda será genial—siento como me sigue y yo niego, no podría jugar así con Edward además no caería en algo tan bajo
***
En mi vida existían muchas cosas que odiaba en realidad odiaba casi todo en general, sacando de eso el dulce que lo amaba ¿Quién no podría hacerlo? Pero había algo que odiaba más que todo lo demás y desde que había empezado la universidad por primera vez se dio cuenta de eso que esperar
Heil era un hombre que se tomaba todo el tiempo el mundo haciendo cualquier cosa y algo que yo no tenía a él le sobraba que era la paciencia, tenía cero de eso, desde que lo conocía le gustaba tomarse su tiempo para las cosas, por algo era que ahora era mi amigo porque estando en su lugar me hubiera mandado a comer espárragos hace tiempo
El libro que tenía leyendo ya me había cansado, Heil había elegido varios para mí en la feria de libros que por cierto si habíamos inscrito el relato y estábamos esperando por respuestas seria en esta semana que nos notificaran pero no había señas de nada seguro habíamos perdidos y no sabíamos
A pesar de todo si se había divertido con Heil en la feria, parecía niño pequeño en dulcería, compro varias libros y me obligo a mí a comprar varios, elegí unos para Ed por si quería leer algo aunque nuestra relación se definiría a su regreso y no voy a negar que a pesar de todo estaba nerviosa porque aunque no le había dicho cuando volvería sabía que no se iba a perder las fiestas
Intentaba mantenerse distraída, como odiando los libros que Heil había elegido porque varios no le habían gustado o trabajando, se había forzado también a rodearse de personas y ya no le daba tanto pánico pero si quedarse sola con una persona que no conociera, le había sucedido un par de veces en el trabajo pero había logrado mantener la calma y pensar de manera coherente justo como Albert le había enseñado, estaba orgulloso de su avance igual que ella, hasta no le molestaba estar cerca de Heil, esos meses juntos había logrado ganársela aunque admitía que tenía miedo de ser decepcionada pero era parte de la vida
Le había contado esa semana a Albert de eso, lo preocupada que estaba sobre su relación con Heil, se llevaban muy bien y compartían mucho porque tenían cosas en común pero tenía miedo e haber confiado en él y que la terminara hiriendo como Brayan lo había hecho, también estaba Edward no sabía que podía pasar con él, estaba tan agradecida con él y desde que era libre no conocía otro amor como el que Edward le daba, no quería perderlo pero tampoco atarlo y muchos ella retarse de lo que le dijo porque sabía que ella tenía razón
Pero sabía que iba a dolor, no quería seguir sufriendo, sabía que si Ed decidía seguir sin ella tenía que respetarlo pero también sabía que se sentiría como si le arrancaran otra parte de ella, el solo recordar cómo se sintió cuando le dispararon de verdad sentido que lo perdió o cuando tuvo que dejarlo así, el odiándola aunque sabía que todo eso lo hizo por su bien en ese momento pero le había dolido, el solo pensar que no lo volvería a ver lo aterraba
Aun recordaba cómo se sintió cuando lo volvió a ver, sentía esa misma sensación recorrer todo mi cuerpo, estremecerme con solo su mirada y su tacto solo logro encender algo en mí, aun Edward movía cosas en mí que pensaba que estaban perdidas hace mucho que nunca pensé que podía reconciliarme con mi cuerpo pero el solo ver el deseo que despierto en Ed, me siento bien, deseada, amada y feliz, solo en el quería ver ese tipo de mirada sobre mi
No sabía que pasaría si Edward la dejaba y no volvería a hablarle pero sabía que dolería, que lo que sentía por él no iba a cambiar de la noche a la mañana así, los recuerdos que tenían juntos no los pensaba olvidar, hasta la preocupación de aquella vez que la dejo con Oliver cuando se fue detrás de Brayan hasta la primera sensación que tuvo cuando sus manos se tocaron, a pesar de todo conservaría cada recuerdo porque Edward le había enseñado muchas cosas y que su relación al final no funcionara no lo odiaría por eso cuando había hecho tanto por ella
—Prefería que siguiera arriesgándose conmigo—me sorprendo al sentir como me rodean de los hombros—Heil deja de hacer eso
—Es divertido molestarte—se para frente a mí y me extiende la mano, la tomo para levantarme donde estaba sentada—Ahora me odias pero sé que me abrazaras de regreso en este momento
—No me digas, vamos que está haciendo frio
—Siempre te digo que traigas un abrigo pero no escuchas—observo como se quita la chaqueta colocándola sobre mis hombros y me sonríe— ¿Mejor?
—No creas que no olvidare que estuve una hora esperando a que salieras
—Siempre es bueno intentarlo—comienzo a caminar y sonrió al ver que se pone frente a mí para verme— ¿No quieres saber el motivo porque me vas a abrazar? —su sonrisa era contagiosa, casi extrañaba verlo en la universidad—Con las vacaciones y tú solo en el trabajo apenas me divierto pero esto te va a encantar
—Deberías buscar más amigos Heil, yo tuve un excelente fin de semana—me detengo—y ya que estoy de buen humor ¿Quieres que te lleve?
— ¿Y perderme la ida en el bus? No gracias
—Entonces supongo que no te gustan las motos—me desvió al estacionamiento de la tienda y lo dejo atrás, rio al escucharlo correr tras de mi
— ¿La trajiste? Dios quiero conducirla, ese día no me dejaste
—Y tampoco pasara hoy ¿Quieres que te lleve o no?
—Por supuesto—sonrió acercándome a la moto y tomo dos cascos para ponerme uno y lanzarle el otro a Heil—Pensé que te daba miedo
—Angel me dio la confianza que necesitaba además así chocamos los dos—desde que había obtenido la licencia había practicado con ayuda de Angel que después de nuestros trabajos se quedaba conmigo practicando un rato todos los días hasta que terminamos apostando odiaba que funcionara pero lo hizo
La apuesta era que no iba poder en dos semanas dominarla que si el ganaba iba tener la moto hasta que lograr hacerlo y si yo ganaba dejaría la insistencia de poner celoso a Edward porque se había empeño en jugarle una broma a Ed con Heil, estaba en desacuerdo pero Angel estuvo asistiendo desde que se enteró de lo de Heil pero si había ganado la batalla así que se tuvo que tragar sus palabras
—Tienes muy buenos amigos Esmeralda—me subo para encenderla
—Ya lo creo pero a veces son un dolor de cabeza ¿Sabes que justo ayer Henry me invito a almorzar? —veo como se sube a la moto
— ¿Qué hay de extraño en eso? Solo es un almuerzo
—Por supuesto un almuerzo pero tuvimos que estar cerca de la morgue el laboratorio queda justo al lado y no tenía descansado así que estaba esperando unos resultados, ambos comiendo en la sala de espera mientras pasaban un muerto, sé que mi trauma con los hospitales está casi superado por Henry porque insiste en llevarme allí pero creo que solo gana que los odiemos
— ¿Tienes traumas con los hospitales?
—Tengo muchos de ellos, aun te falta por conocerme
—Pues te quiere ayudar de alguna forma u otra
—Lo sé pero su método es raro pero así es Henry pero créeme que no comí y el como si nada—enciendo la moto—esta tan acostumbrado a esas cosas
—La costumbre puede ser algo muy malo depende de cómo lo mires
—Lo sé, había mucho de eso en mi vida, espera conocer mi versión
—Pues tendremos una semana entera solo para hablar—iba a quitar el seguro pero al escucharlo lo veo y sonreía—Me han dicho que el clima de la capital es estupendo comparado con el de aquí
— ¿Enserio? —veo que asiente, me abalanzo para abrazarlo porque estaba deseando de verdad ir a ese viaje no podía creer que mi historia hubiera ganado algo tan grandioso como ese viaje, deseaba que el día llegara pronto
Continuará...
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