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CAPITULO 1: Mi nueva vida

ACLARACIÓN: ANTES DE COMENZAR LA LECTURA LES INFORMO QUE QUE ESTA ES LA TERCERA PARTE DE LA SAGA DEL GORRION ES NECESARIO LEER LA OTRAS DOS PARTES PARA PODER LEER ESTA SIENDO LA PRIMERA PARTE EL GORRIÓN HERIDO PERO SI YA HAS LEIDO LAS ANTERIORES HISTORIAS LOS DEJO CONTINUAR CON SU LECTURA, SIN MAS QUE DECIR ESPERO DISFRUTEN DE LA LECTURA

CAPITULO 1: Mi nueva vida

Hacia un día esplendido, el sol brillaba en lo más alto del cielo y la brisa soplaba de tal manera que me llenaba cada centímetro de mi piel, estaba soleando pero apenas se sentía el calor a pesar de que era verano, solía hacer más calor esos días pero no en ese especifico, le gustaba los días así, eran tan buenos que provocaba salir con esa persona especial pero ¿Qué pasa cuando esa persona es un bruto? Nosotros mismos teníamos que hacerlos reaccionar

Sabía que la vida no era un cuento de hada, de hecho hace años un bastardo me enseño que la vida no es un hermoso mundo como las historias que aparecen en Disney, si ese canal solo te vende cuentos falsos, en realidad la vida ni siquiera vale la pena vivir porque los finales felices como aparecen en la televisión no existen

Quizás por eso uno de mis libros favoritos es Yo antes de ti, la protagonista al final no se queda con el protagonista, es un bueno final porque ella termina liberándose de sus ataduras pero nuestro adorado protagonista muere, aunque sabía que mi vida era un desastres y pensaba que no tenía arreglo

Estaba lista para dejarme consumir por la soledad y no seguir luchando pero ahí es donde apareció unos ojos verdes que me vuelven loca y hace que muestre partes de mí que no pensé que tenía pero como dije antes era un bruto ¿Cómo es que cambio mi vida tanto? No tengo idea, pues ya pasaba un mes que no veía a mi persona especial

Pero ese día en específico estando tan cerca de comenzar la universidad, mi último año que ya lo había pospuesto lo suficiente pero quería disfrutar de esas ultimas semanas antes de no tener tanto tiempo como deseaba y ese día estaba para ser disfrutado aunque antes veía todos los días iguales pero desde hace un tiempo mis días eran muy diferentes y no solamente por él, sino a todas esas personas que me apoyaron y no me dejaron caer

Pero en ese momento quería disfrutar de mis últimos días libre con él, no con más nadie, por eso me encontraba caminado hacia la estación de policía donde él se encontraba, molesta porque no atendía mis llamadas y no aparecía por ningún lado pero fue ingenuo de su parte creer que de verdad se liberaría de mi tan fácilmente

—Edward—entro al lugar y ve a todos observarme, unos me sonríe porque no era la primera vez que interrumpía en la estación en busca de Edward, en realidad más de la mitad del lugar me conocía— ¿Dónde está? —veo al que era uno de sus compañeros, ya nadie se molestaban en detenerme porque sabían quién era y mi caso había sido muy famoso porque fue ese lugar que se encargó de el

—Buenos días Esmeralda ¿De mal humor otra vez?

—Buenos días Sánchez y lo estaré si no sé dónde está Ed

—Está en la sala de interrogatorio pero no…—sin prestarle más atención me dirijo al lugar sabiendo donde queda, ya me había recorrido el lugar muchas veces, escucho las quejas de algunos policías pero no le prestes atención, abro la puerta para observar la sala de operación donde grababan todo y se observaba el interrogatorio a través de un vidrio

— ¿Qué haces aquí? —al entrar la primera en hablarme es April, si nuestra relación aun no es perfecta y más cuando sé que le gusta Edward aunque el insiste que ya no es así porque sale con un policía del departamento de inteligencia, yo digo que igual le gusta

—Creo que es obvio—ignoro a los demás que me observan sonrientes, que estuviera ahí era completamente normal, me dirijo a la otra puerta donde me permitía entrar donde estaba Edward que interrogaba a un tipo junto a lo que note que era Angel, seguro el fiscal encargado del caso—Edward ¿Se puede saber porque no contestas mi llamadas? No es difícil escribir un mensaje ¿Verdad?

—Esmeralda—parecía sorprendido ¿De verdad no se lo espera? Ya debería estar acostumbrado, siempre lo hacía cada vez que me ignoraba, sabia lo explosiva e impaciente que solía hacer—Estamos en medio de un interrogatorio, no deberías estar aquí ¿Sabes lo peligroso que es?

—Los peligros nunca me han impedido hacer nada además ¿Por qué es más importante que yo? Hace más de un mes que no tenemos una cita y me ignoras por esto—señalo al testigo que parecía confundido por la situación, Angel bueno parecía disfrutar la escena

—Es un caso que llevo siguiendo un mes, debes dejar de ser caprichosa, los días solo tiene ciertas horas—parecía molesto pero si él lo estaba yo mas ¿Cómo era posible que en más de un mes no habíamos salido? Y solo me respondía los mensajes con palabras cortas

—La cual no usas ninguna en mí, ni siquiera para escribir un mensaje decente ¿Qué clase de chica crees que soy? —veo como se quita los lentes que llevaba en esa ocasión, restregándose los ojos frustrado, no me importaba—Exijo una cita ahora mismo, vamos, hoy sale esa película que queríamos ver ¿Cómo pudiste olvidarlo? —habíamos leído el libro juntos y me había gustado un poco cuando supe la película enseguida quise verla con Edward

—No podemos, ni siquiera me gusto el libro ¿Podemos hablar después? Este tipo esta colmando mi paciencia porque no confiesa—noto como el tipo sonríe

— ¿Qué? Estas perdiendo tus trucos de analista—lo veo fruncir el ceño al volver colocarse sus lentes, Dios los ojos le brillaban con intensidad ¿Ya había mencionado que me gustaba cuando solía estar molesto? No era una faceta que sacaba seguido, de hecho yo era la única que la sacaba porque Edward siempre fingía estar tranquilo pero por dentro era un revoltijo de emociones aunque eso no me impedido conocerlo tan bien como lo hacía porque yo era igual y Edward me leía como la palma de su mano—No me iré si no sales conmigo

— ¿Hablas enserio? Sabes que no me gusta que vengas, solo armas un escándalo—sonrió al saber cómo lo hacía sentir mal

—Ahora te avergüenzas de mi ¿No? ¿Es por mí? —toda la ciudad sabia mi historia, había aparecido en todos lados y también la mayoría de la estación sabia mi condición, nadie me tocaba ni se acercaba tanto por precaución, además Edward que ya estaba en un rango de teniente había advertido a todos en la estación

—Sabes que no es así, nunca lo haría pero tu simplemente me sacas de mis casillas ¿No puedes ser más paciente?

—Sabes que no tengo esa virtud—veo al tipo— ¿Es el que te tiene tan ocupado?

—Ya te lo dije, así que sal y luego hablamos, necesito la confesión para el juicio

—Bien ¿Solo eso? —me ve extraño pero asiente, yo sonrió y me acerco a Angel que ahora parecía sorprendido—Resumen del caso Angel

—Es información confidencial, no puede…

—Es un simple caso sobre violencia domestica pero la victima tiene miedo de aceptar todo esto pero niega que las marcas de su cuerpo son heridas pero una cámara la grabo saliendo de su casa muy bien y entrando igual pero al dia siguiente el vecino llama a la ambulación, heridas de tercer grado y no había pruebas de que ninguna persona entrara a la casa a pesar de que alegan de que es un asalto, ambos se apegan a eso

—Gracias—noto como Edward le frunce el ceño y yo veo al hombre—Creo que deberías tener muy claro que estas hasta el cuello en el asunto, las personas como tu ni siquiera en la cárcel se arrepienten de esto y alguien que ama a la mujer pero si lo hiciera quizás no se encontrara en el hospital entre la vida y la muerte—noto como se remueve incomodo—sé que solo es tu manera de sacar toda tu ira pero eres tan triste que lo haces en una persona más débil que tú, te apuesto que tu padre nunca le hubiera hecho a lo que le haces a tu esposa

—Mi padre está bajo tres metros bajo tierra y murió sin pagar nada de lo que hizo

—No hubo justicia para lo que te hizo y por eso querías matarlo tú mismo con tus propias manos pero resulta de que antes que lo hiciera la vida se te adelanto ahora sola gastas tu frustración en una débil mujer convirtiendo en una persona igual o peor que tu padre, alguien que tenías miedo de convertirte

—Yo quería matarlo pero el muy desgraciado se murió antes y Beatriz es tan estúpida como solía ser mi madre, por ser débil se merece todo esto, por no tener el valor para detenerme, las personas débil solo me repugna, le iba a ser un gran favor a desaparecerla de este mundo, no se necesitan personas más débil y tristes como ella en la vida

—Qué pena porque no hay un ser más triste y débil que uno que se mete con el más débil y no la ayuda, te pudrirás en prisión es una pena que tu termines pagando la misma condena que debió tener tu padre—veo que voltea la cara, sabía que ya no había vuelta atrás—¿Nos vamos? —veo a Edward que parecía sorprendido, yo lo tomo de la mano para jalarlo fuera la habitación

— ¿Pueden salir un momento? —me detiene antes de que lo llevara fuera del lugar y todos nos observaban algo sorprendidos por lo que habían presenciado ¿Qué? No era tan difícil, había pasado mucho tiempo con Albert y como aun no me sentía con el valor de contar todo lo que paso siempre terminamos hablando de psicología que siempre me había llamado la atención, no sé si se considera terapia lo que estábamos haciendo

—La jefa te está esperando, cuando le informaron llego aquí y observo el interrogatorio—veo a Ed asentir y seguidamente April sale del lugar junto a los demás, Angel se había quedado hablando con el sospechoso

—Esmeralda ¿Hasta cuándo tendré que repetirte que no puedes hacer esto?

— ¿Te molestas porque hice tu trabajo? Déjame decirte que los años te han quitado tu toque, quizás deberías intentar estudiar, en la universidad ahí…

—No volveré a estudiar—me cruzo e brazos molesta, Ed hace dos años se graduó en derecho penal, si desde que había terminado todo habían pasado en dos años, yo era la única que me había quedado atrás, porque tuve un año entero sin hablar y llego a un punto donde aleje a Edward, el otro año me costó darme cuenta que las personas que me rodeaban y lo mucho que les preocupada que Brayan ya no podía hacerme daño, ese año es que pude permitirme tocar a Edward sé que tomar su mano no era un gran avance cuando ya habíamos hecho mucho más pero para mí lo era

En tercer año pude permitirme tener citas y salir de la casa, aun le tenía miedo a las personas pero tanto que me daba pavor salir al mundo exterior pero ahora me había acostumbrado a caminar por las calles pero no con muchas personas a mi alrededor y decide que estaba lista para terminar mi carrera pero aún estaba insegura para enfrentarlo sola

Albert me había aconsejado que lo intentara, en realidad fue el quien me metió esa idea en la cabeza, decía que era bueno para abrirme e intentara hacer nuevas amistades, ahora que lo pensaba las terapias si habían funcionado bien, siempre me mandaba a hacer pequeños trabajos, como escribir, lo cual hacia mucho, el leer o ver películas que me relajaran hasta me había ayudado con mis pesadillas

No dormía bien si no era con calmantes y ni siquiera surtían el efecto que quería porque terminaba teniendo pesadillas pero Albert un día me empezó a hablar de unas músicas, las ponías en nuestros encuentros, me gustaban unas más que otras a pesar de que nunca fui fan de la música pero me encontré a mí misma hablando sobre ella

Luego me dijo que le preguntaras a todas mis amistades el tipo de música y si tenían unos gustos raros pero cada vez que escuchaba una me recordaba a cada uno de ellos, por ejemplo el pop fijo me venía a la mente Emma y Inés, Clara era rock, a Angel le gustaba todo tipo de música pero más las que tenía mensajes ocultos y Albert era de músicas lentas, Edward no solía escuchar música pero si unas que le gustaba porque hermana las escuchaba seguido y su tía, era también variado

Cuando Albert me pregunto sobre la música le conté lo que converse con todos y me dijo que consiguiera la música de todos para escucharla porque a partir de ese día dormiría con esas canciones así terminaría pensando en los recuerdos de ellos antes de dormir y no pensar en otra cosa ¿Funciono? Albert era un buen psicólogo porque lo hizo muy bien, adiós problemas para dormir aunque me dijo que tarde o temprano tenía que dejarlo pero todo a mi propio ritmo

Aun tenia mis problemas y siempre terminaba pensado en cosas que no eran pero iba a mi propio paso, habían sido años difíciles que me había costado superar, más de una vez entre en crisis, en un hospital bajo medicación porque mi cordura terminaba abandonandome y cometía estupideces, terminaba en shock, seguía estando igual de torcida como un comienzo y esperaba que Edward pudiera seguir soportando cada una de mis facetas y también problemas

Ese era mi miedo, que el se diera por vencido porque sabía que Albert le había dicho que él era como un pilar para mí y cualquier cosa que hiciera me afectaba directamente aunque evitaba a toda costa en interferir en su vida pero era muy difícil cuando tenías una vida como la mía y esos miedos que me consumía cuando Edward no estaba conmigo

Tenía muchas dudas sobre lo nuestro, ni siquiera le habíamos dado nombre a nuestra relación, salíamos seguido, el me visitaba y leímos juntos, veíamos películas pero nada más, tenía miedo de besarlo, miedo de que me tocara más allá de que no era solo contacto que no tuviera otros motivos, aún era presa de mis miedos a pesar de que un nuevo mundo se abría ante mi

Pero Edward no sabía nada de mis miedos, evitaba que no lo notara y él estaba siempre tan ocupado que no pensaba lo suficiente en mi o al menos eso creía, por eso siempre que iba a verlo era por miedo a que se cansara de mí, no podía ofrecer nada más que una sincera sonrisa y sabía que eso no era suficiente, teniendo a cierta policía rodándolo todo los días, sin ningún prejuicio, no le culparía a Edward si llegaba a meterse con ella por ¿Qué le ofrecía ella? Solo problemas y muchos límites, aunque Edward ya lo había visto venir desde mucho antes aun así me había aceptado, debería intentar meterme eso en la cabeza

—Nunca está de más probar—suelto su mano algo insegura ahora ¿Seria por eso que lo sentía cada vez más lejos? Las cosas no eran como antes ¿Si estaba conmigo por lastima? No podía seguir con esto pero aun así fingía para que no me derrumbara, él siempre pensaba en los demás—Si no quieres venir de acuerdo—lo veo a los ojos—Si no quieres intentarlo como yo, no hay problema, soy más fuerte de lo que aparento y no hablo exactamente de la película o la universidad—ato mi cabello que estaba más largo de lo habitual pero con el mismo color rojo, tenia algo de calor, era miedo pero tenía que calmarme aunque sintiera que el lugar se ponía más pequeño siempre me pasaba
— ¿Ahora de que hablas? No es muy difícil entender que existen reglas Esmeralda, tienes que irte, hablemos después ¿De acuerdo? Yo te llamo—No se atrevía a hacerlo ¿Tenía que ser yo? Odiaba lo insegura que era pero si Edward en verdad no me quería mas, no iba a obligarlo a nada

—Conozco lo suficiente para saber qué es lo que sucede—saco mi celular para comenzar a buscar entre las canciones algo que me hiciera calmarme pero algo inquieta, intento distraerme con el celular—Han pasado dos años desde que dijiste que querías estar en mi vida y tú mismo dices que las personas cambian, yo también lo hago—selecciono una música Ha ash, Esta mujer, si me quedaba muy bien en ese momento, quizás me haría llorar pero no en ese momento—Es lo que quiero, ya no tienes que sentirte comprometido conmigo o seguir escribiendo, muchos menos comprometido con nada de lo que haga, te dejo trabajar—le doy la espalda para colocarme mis audífono, concentrándome en la letra, esperaba que Edward fuera ese tipo de chico pero los amores iban y venían ¿no?

—Esmeralda—siento que toma mi mano, yo la veo sintiendo mi mano sudar levemente así que la suelto antes que notara mi estado—Hablare con la jefa espérame afuera ¿Puedes? Sé que tenemos que hablar, no tienes porque…

—No es un drama—lo veo a los ojos ahora molesta porque no era ningún tipo de manipulación ¿Qué le pasaba últimamente? No era el mismo chico que había conocido en la universidad aunque aún me gustaba como el primer día—Solo soy sincera de una buenas vez por toda, no sigamos obligando esto, te libero, sé que no puedes y yo tampoco, es todo—intento otra vez salir pero me toma de la mano otra vez pero siento como la cierra sobre la mía

—Quiero ver la película contigo, más te vale no ir sin mí, solo dame 10 minutos, la jefa tarda un rato regañándome ¿Vale? —mis ojos se encuentra con los de él, podía ver una mirada de súplica en ellos ¿Era lo que quería? Si me lo pedía era capaz esta vez de esperar por todo un día pero no quería parecer tonta

—Solo 5 ni uno más ni uno menos—siento como sus labios besan mi mano sintiendo una leve corriente recorrer mi cuerpo—Edward—provocaba cosas en mí que quería pero sabía que no iba a poder hacerlo en ese momento

—Lo siento es que tus ojos me encantan, espérame afuera, ya regreso—asiento y lo veo salir, sonrió porque las cosas entre nosotros eran como una montaña rusa

—Buena manipulación—me sorprendo a ver a Angel a mi lado y frunzo el ceño—Feliz cumpleaños por cierto

—Gracias y no era una manipulación y por cierto Emma que no olvides su cita como Edward lo hizo, recuerda que esta noche irán a celebrarlo ¿De acuerdo? No muchas personas saben como soy, nos vemos—salgo del lugar para dirigirme a la salida sin esperar respuesta de Angel, Emma sabia controlarlo muy bien

—Por tu sonrisa veo que saliste venciendo de nuevo ¿no? —veo a Sánchez, era su apellido, siempre que iba él estaba en la entrada, habíamos cruzado una que otra palabra pero entre todos era con el conversaba mas

—Si—sonrió y ese día llevaba un bolso, era comida que había preparado, Albert me había dicho que tener pasatiempos era bueno, entonces me vi a mi una vez cocinado porque Edward trabajaba mucho y quería que él no hiciera nada cuando llegara de su trabajo y yo llevarle su comida—Ten, gracias por dejarme pasar—saco un caja pequeña de galletas, ese día las había preparado para el cine aunque Edward no era fanático del dulce pero yo sí y como era mi cumpleaños podía cumplir mis caprichos

—No es nada ¿Quieres café? Porque me imagino que vas a esperar un poco

—Café suena bien—lo veo sonreírme e ir por el café cuando regresa comenzamos a comer nuestras galletas y conversar sobre los extraños días de la comisaria porque el que yo entrara como dueña del lugar era lo más normal que podía pasar a diferencia de otras cosas que sucedían, me entretuve un rato conversando con Sánchez hasta que note la hora, ya era mediodía—Supongo que no tenemos diez minutos hablando ¿Verdad?

—Una hora para ser exactos ¿Almuerzas? Traigo mucha comida, puedo compartir

—No gracias pero creo que me voy, parece que no gane como creí, gracias por la charla y el café—salgo pensando en que si debía buscar un taxi o llamar Carlos pero la segunda opción era más rentable que la primera por Carlos era el que me había llevado, él dijo que me iba a contratar un chofer o que me enseñaría a manejar pero no estaba lista para tener a alguien nuevo en mi vida, el manejar me daba un poco de miedo y los taxis ni se diga, es lo mismo que tener un chofer nuevo, alguien tenía que llevarme, caminar también porque el bus no era un opción, solo pensarlo le daba pánico—¿Carlos? —pensándolo un poco más comienza a caminar porque no quería molestar a Carlos y encima no es que tuviera algo que hacer hasta la noche, algo debía hacer en su cumpleaños

Le decepciono que a Edward se le olvidara, teniendo una memoria tan envidiable pero todos éramos seres humanos ¿no? igual su cumpleaños no era una de sus fechas favoritas pero Albert le dijo que debía cambiar eso, que no debía tomarlo como recuerdo de una vida que tuvo si no otro año de la nueva vida que está formando, era lo que trataba de hacer pero siempre terminaba teniendo recuerdos de su pasado aunque según Albert tarde o temprano debía aceptarlo porque era algo que era parte de mi

En fin Emma la había obligado a celebrarlo aunque sinceramente le gustaba más pasarlo sola y sería perfecto que se centrara en leer o con su hermano, el cual iba avanzando rápido con Albert como su nuevo psicólogo gracias a su nuevo título que le había costado estudiar tres años para trabajar con niños

Sus amigos si lo habían apoyado igual que Edward aunque las cosas no estaban bien entre ellos, ahora que lo pensaba ¿Si habían terminado? no sabía que exactamente pero seguro era de intentarlo, no había aparecido como prometió y ella había sido clara con dejar las cosas así y ya, no podía hacer mas

—Esmeralda—me detengo para verlo, parecía agitado y respiraba con dificultad, había estado corriendo—Lamento la tardanza de verdad, por un segundo pensé que no iba a conseguirte—veo a que intenta calmar su respiración para luego mostrarme su celular y tomar mi mano—La función comienza en media hora, tenemos tiempo de llegar si nos damos prisa—me jala con el aun si dándome tiempo de reaccionar, en su celular estaban la confirmación de la comprar de las dos entradas para la película que quería ver, me deje llevar porque el solo pensar en la situación que nos encontrábamos me daba dolor de cabeza

***
—Te dije que no valía la pena ni el dinero, creo que lo mejor fue cuando termino—rio al escuchar el punto de vista de Ed—El libro estuvo mejor y eso que tampoco me gustó tanto—tenía razón, lo había terminado solo porque lo empezamos juntos

—Los libros siempre son mejores que las películas—pensaba lo mismo de la película, tanto problema para estar con Edward ahí y la película no había sido lo esperado pero se alegraba de estar con el ahí porque así podía criticarla juntos

— ¿Ya almorzaste? Aun no lo hago—entrelaza mi mano con la suya atrayéndome más cerca de el para sonreírme—Te llevare a comer algo que te encantara como pago de las galletas que hiciste, estaban deliciosas por cierto

—Más te vale, porque no hago todo de gratis

—Lo sé—caminamos tomados de la mano— ¿Qué hay de los demás? Siempre te han salido muy bien los postres pero no la comida en si ¿Has aprendido algo?

—No realmente, siempre me quedaba pasado de cocinar o simple, salado hasta agrio, soy un desastre aunque sigo la receta

—No siempre solo receta—entramos a una cafetería, la recordaba estaba cerca de aquella parada donde una vez me ocultaba para no ir a la universidad—Ahí un plato del que me encanta seguro lo hará para ti, es el que mejor me sale ¿Qué vas a comer? Iré a pedirlo

—Tanto dulce me quito el apetito un poco así que…—por su cara esperaba que comiera algo, no le gustaba que me saltara comidas— ¿Panqueques?

—Deberías dejar de comer tanto dulce, te traeré un sándwich más saludable—suspiro porque tenía razón y lo veo irse ¿Las cosas estaban bien? Aunque ni siquiera hablamos, no resolvimos nada ¿debería solo ignorar el tema? Aunque él dijo que quería hablar conmigo pero no lo ha hecho

—Las cosas son tan complicadas—me recuesto sobre la mesa hasta que escucho un ruido levanto la vista para ver a Edward con ambos platos

—Compórtate—me enderezo para ver colocar mi sándwich igual que el pero sonrió al notar que también había traído los panqueques pero no muchos y tenía escrito con chocolate, feliz cumpleaños—Lo siento, sé que lo olvide pero lo recompensare hoy, sé que por eso estas molestas pero…

—No estoy molesta por eso Edward si esperaba que lo recordaras pero haz tenido mucho en tu cabeza, de verdad no me importa igual no tienes dicha obligación, no somos pareja, ni nada, solo salimos a citas nada mas—comienzo a comer porque por ahora estaba conforme con lo que teníamos aunque si me molestaba que no tuviera el tiempo para mí pero disfrutaba cada minuto con el—me gusta pasar tiempo contigo y es lo que necesito ahora, siempre lo he tenido todo no quiero cosas extravagantes porque no valen tanto como una simple sorpresa como esta

—Hace unos horas me estabas insultando—me toma de la mano para sonreírme—Ya no me sorprende y sé que estas siendo sincera en este momento, soy todo tuyo por lo que resta del día—sonrió al pensar  en algo—Conozco esa mirada Esmeralda ¿Qué estás pensando?

—Sé que cada vez que terminas un caso largo te dan unos días ¿no?

—Pues si aunque la jefa no está del todo feliz conmigo por una persona

—Lo siento pero aun así te dará los días ¿Verdad? —Asiente— ¿Por qué no te quedas conmigo? Hablo de pasar esos días conmigo, comenzare la universidad y tu bueno siempre este ocupado con algo diferente, no pido mucho

—Lo sé—aprieta mi manos—Lo hare, no me importa pasar unos días contigo—sonrió al escucharlo, me sonríe observándome a los ojos, yo no podía evitar verlo fascinada por él, tenga o no problemas sabía que no iban a ser obstáculos para estar con Edward, lo amaba demasiado para ser verdad—Así puedo enseñarte a cocinar lo que te estaba comentado, dicen que aprendiendo las cosas en pareja, todos es más sencillo, además si esta relación funciona quisiera que aprendieras muchas cosas más juntos—tomo mi sándwich para darle una mordida pero comienzo analizar las palabras de Edward, lo vuelvo a ver y me observaba como esperando algo ¿era lo que creía?

—Hablas como si fueras a tener algo, si fuéramos…—siento que aleja su mano, parecía ahora inseguro

— ¿Te molesto mi comentario? No sé si sea el momento para darle nombre pero…

— ¿Es lo que quieres? —tomo su mano, sonriendo porque hace rato esperaba poder reclamar a Edward como mío y nadie más— ¿Quieres ser mi novio? —lo escucho reír ¿Había dicho algo gracioso?

—Siempre terminamos haciendo las cosas al revés—siento como se me acerca podía oler su aroma—Por supuesto que quiero—sonrió porque después de años queriendo eso con Ed, por fin se le cumplió

Notas de la autora:

Bienvenidos a la secuela oficial del gorrión herido, no puede leer esta historia sin haber leído los otros libros

Voy a estar subiendo un capitulo a la semana, está historia a diferencia de otras no la tengo concluida Pero espero que no sea tan extensa como las anteriores

Gracias por seguir acompañandome en esta historia y espero que disfruten de la lectura

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