Su torso y brazo dolía. 

Frunció el ceño por el peso que sentía y abrió los ojos lentamente. Una melena rojiza fue lo primero que vio.

Su corazón latía de forma violenta mientras que sus mejillas se tornaron rojas  al recordar lo que había pasado. Se habían besado, acariciado, tocado... Y... ¡casi tuvieron sexo!

Estaba sumamente avergonzado.

Nunca había estado con otro varón que no fuese Hiroshi.

Y, no era por comparar pero Akashi era muy bueno con la mano... y la boca. 
Durante años no se habían sentido  sexy, y Akashi lo había hecho sentirse así. Le había dicho tantas palabras que lo hacían excitarse y sentirse amado.

—koouuu...

El pelirrojo se removió y lo miró. Los ojos de Akashi estaban medió cerrados debido a que acaba de despertar —Buen día— susurró, antes de besar al castaño.

Cuando el pelirrojo dejó de besarlo se cubrió el rostro.

—¿Avergonzado?

La risa del pelirrojo hizo que su vientre de contrajera.

—No tienes que estarlo, Kōki. Es algo normal.

—Yo...

—Será mejor levantarnos.

Kōki se descubrió el rostro. Y, ese fue su error. Akashi Seijūrō estaba completamente desnudo.

—Mandaré a alguien a limpiar. Es un desastre— dijo, mientras recogía la ropa —Creo que este baño si sirve.

Su cara ruborizada competía con el cabello del menor. Akashi estaba desnudo y, sin preocuparse de eso, se paseaba libremente por la habitación.

—¿Kōki? ¿No vas a ducharte?

— S-Sí...

Descubrió su cuerpo y se avergonzó. Tenía muchas marcar de besos, en el cuerpo, y también estaba "bañado" de semen.
Con la sábana se cubrió; se levantó, tomo la ropa que el pelirrojo le ofrecía y corrió al baño.

Seijūrō no apartó la mirada de esos perfectos glúteos... Kōki no se había percató de que se cubrió el frente, más no su retaguardia.

—————

Tomados de la mano, se dirigieron a la casa principal. Por la hora, todos deberían estar aún en la cama...

—Hasta que aparecen— kazunari estaba sentado en uno de los camastros.

—...— ambos se sonrojaron por la mirada pícara del pelinegro.

—Kō-chan. Shin-chan te espera para revisar la férula.

—¿Dónde?

—En la enfermería.

—Gracias— soltó la mano blanquecina y se dirigió a la enfermería.

—Será mejor que te cambies— vieron marcharse al castaño —¿Se divirtieron?

—Tú...

—No tienes que agradecer. Quiero detalles.

—...— dió la vuelta y se dirigió a su habitación.

—Hey. ¡Mis detalles! Quiero detalles.

Una sonrisa malvada se enmarco en sus labios. Tomaría venganza y nada mejor que dejar en abstinencia al pelinegro por mucho tiempo. Pero, y ?Kise?...

Kōki se cambió la ropa  por un pantalón chandal y una gran camisa, y se dirigió a la enfermería.

—Furihata-san. Quitese la playera.

—...

—¿Furihata?

—V-Voy.

Sí que sabe marcar su territorio.

Pensó, un avergonzado Midorima Shintarō, al ver las marcas de besos y mordidas . Pues era más que obvio que algo había sucedido entre estos dos. Se aclaró la garganta y comenzó a revisar las costillas del castaño.

Gimió adolorido.

—Le dije que no hiciera movimientos bruscos.

—Lo siento...

El pelo verde continúo con a la revisión por varios minutos más.

—Tome ese medicamento cada seis horas.

—Gracias.

—Furihata-san.

—¿Sí?— se estaba terminado de colocar la camisa.

—¿N-Necesita anticonceptivos...?

¿Midorima creía que él y Akashi tuvieron... Sexo? —N-No.

—¿Seguro?

—S-Sí— soltó una risa nerviosa y salió huyendo. Estaba muy avergonzado. Tanto que no podía ver por donde iba y termino en los brazos del pelirrojo

—¿Estas bien?

—S-Sí— mintió, claro que no estaba bien. Estaba avergonzado.

¿Cómo vería a la cara a sus amigos?

Ignoren el título.
No se me ocurrió uno xD

P.D: Lemmon en los próximos capítulos. Siento haberles roto el corazón T-T