Momento
Se removió y un gruñido de dolor escapó de sus labios. Abrió los ojos y notó que estaba oscuro, algunas luces apenas y se colaban a través de la ventana.
Observó a su alrededor y encontró un reloj 5:28 AM...
Intentó sentarse pero no pudo.
Habían terminado así su última ronda sobre el sillón, y ahora él estaba acostado siendo presionado por el peso de su novio.
Miró con detenimiento al pelirrojo. Tenía los labios hinchados y algunos rasguños en el torso así cómo marcas de besos. Su cabello revuelto y algunos mechones caían sobre su frente.
Cerró los ojos y soltó un suspiro. Quería ir al sanitario.
—Seijūrō-san— le habló una y otra vez hasta que lo despertó.
—¿Qué pasa? — preguntó mientras bostezaba.
—Necesito ir al baño— murmuró avergonzado.
—Espera— se levantó y sentó en el bordo.
Se sentó e intentó levantarse pero sus piernas le fallaron y termino arrodillado.
—¿Estás bien?— le ayudó a levantarse.
—Duele.
—Lo siento. Fui muy imprudente— ayudó a Kōki a ponerse de pie y lo llevó al baño.
—Sal...
—Vamos. Ya nos conocemos muy bien. No tienes que avergonzarte.
—N-No.
—Hazlo. Cerraré los ojos.
————————
Estaba avergonzado. Una cosa era tener relaciones sexuales y otra...
—Toma.
—G-Gracias— murmuró tomando la ropa y desvió la mirada. Seijūrō andaba desnudo.
—¿Dónde quedó mi bóxer?— no lo encontraba.
—Está detrás de la lámpara— dijo al ver la sombra negra reflejada en la pared.
—Gracias. Apresúrate a vestir. Tenemos que salir de aquí antes de que nos encuentren los de la limpieza.
¿Encontrarlos?
Miró el escritorio y el sillón donde estaba sentado, ambos eran un desastre. Semen por todos lados
—Pe...
—Es normal. Además, deberías ver las cosas que encuentro entre semana en esta oficina.
—...— no dijo nada, mejor se apresuró a vestirse.
10 minutos después, y de que Seijūrō guardara el vibrador en la bolsa de su pantalón, abandonaron la oficina y de dirigieron al departamento del castaño.
Una vez que entraron corrió al baño y se ducho, necesitaba limpiarse a fondo.
Se sentó en el bordo de la cama. Aquella mirada de Kōki Furihata, cuando le sugirió ducharse con él, fue una clara advertencia de que no se acercara al baño.
Estaba mirando la habitación cuando algo llamó su atención, en buró de la izquierda estaba un regalo... ¿Sería suyo?
———
Se terminó de ajustar el bóxer a su trasero y salió de la habitación... Sonrió al verlo sentado junto al buró mirando el regalo rojo.
—Es suyo.
—¿Eh?
—Es su regalo de cumpleaños.
—Pero... Anoche.
Se sonrojó y desvió la mirada —Quería que fuese especial...
—Cada día contigo es especial— aseguró mientras se levantaba y acercaba al castaño y lo besaba.
—Abra su regalo...
Asintió y tomó el regalo. Rompió la envoltura... Era su libro favorito.
—Grac...— no termino de agradecer pues mirando el libro se percató de algo... No podía ser verdad. Rápidamente abrió el libro y fue a la página de la editorial: primera edición... —Es...
—Sí.
—Gracias— le envolvió en un gran abrazo y lo agarro a besos.
Kōki sonrió y respondió al beso.
—Lo he estado buscando desde hace años ¿Dónde lo encontraste?
—Es secreto.
—Pero y...
—Será mejor que tome una ducha.
Feliz, le robó un beso más al castaño y se dirigió al baño.
Kōki sonrió al verle entrar al baño. Se terminó de secar el cabello. Jaló las sábanas y se acomodó entre ellas. Tenía mucho sueño...
———
Salió después de acomodarse el diminutos bóxer que su novio le había dejado en el baño. No le quedaba de otra más que usarlos. El suyo junto con el pantalón era un desastre, estaban manchados de semen... Ahora tendría que llamar a su chófer para que le trajera ropa.
Busco al castaño y lo encontró dormido. Miró el despertador, 6:10 AM. Lo mejor era dormir.
Se colocó en la cama y acostó al lado de su novio, quien al sentirlo se pegó a él y lo abrazó.
—Seii...
—Te amo, Kōki—susurró mientras le depositaba un beso en la frente.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro