Un joven de cabello alborotado miraba sorprendido a una bella jovencita pelinegra de vestimenta sencilla que estaba mirándolo fijamente a algunos metros de él.

Creo que nos vamos adelantando, dijo Ten.

Si, dijo Yamcha mientras Piccolo y Krilín asentían.

Piensa bien lo que harás insecto, no te vayas arrepentir después, dijo Vegueta dándole una palmada en la espalda antes de dirigirse al lugar donde estaban sus amigos.

Yo no me arrepentiré, dijo Gokú en voz baja mientras la pelinegra se acercaba a él.

¡Hola mi amor¡ ¿Por qué no me dijiste que habías llegado?, dijo Milk con dulzura acercándose al joven de cabello alborotado para darle un dulce beso en los labios que este correspondió a pesar de que quería evitarlo.

Te extrañe, mucho, dijo Milk al romper el beso mientras lo abrazaba.

Milk, no me hagas esto, dijo Gokú con seriedad.

¿Hacer qué?, dijo Milk.

Decirme que me amas, dijo Gokú con molestia.

Pero es cierto, ¡te amo¡ ¡te amo como nunca pensé que se podría amar en la vida¡ dijo Milk con dulzura mientras acariciaba con una de sus manos la mejilla del joven de cabello alborotado.

No Milk, deja de hacer eso, dijo Gokú con molestia tomando la mano de la pelinegra con fuerza.

Me estas lastimando, dijo Milk con nostalgia.

¡Disculpa¡ pero no vuelvas a hacer eso, ya no, dijo Gokú.

Pero ¿Por qué?, soy tu novia, solo te demuestro que te quiero, ¿o es que te da vergüenza que alguien nos vea así en la calle?, porque de ser así no vuelvo a mostrarme afectuosa contigo en lugares públicos, dijo Milk con dulzura haciendo que el corazón del joven de cabello alborotado sintiera nostalgia.

Milk, quiero ser sincero contigo, está relación ya no da para más, ya me canse de estar contigo, ya me canse de dulzura, de tu inocencia, ya me canse de ti, dijo Gokú con firmeza.

¿Qué?, dijo Milk con lágrimas en los ojos.

Milk, terminamos, nuestra relación ya no da para más, dijo Gokú con frialdad.

Eso no es cierto, dijo Milk.

¿Qué?, dijo Gokú.

Tú me amas como yo te amo, yo lo siento, lo siento, dijo Milk colocando sus manos a la altura de su corazón.

Milk, tu belleza me deslumbro pero no eres el tipo de chica que yo ando buscando, dijo Gokú con calma.

¿El tipo de chica que andas buscando?, dijo Milk intrigada.

Si, contigo todo es tan dulce que me empalaga, dijo Gokú con frialdad.

¿Qué?, dijo Milk aguantando las ganas de llorar.

Yo busco una chica con la que me pueda divertir, no aburrir, una chica con la que vaya a pubs, que viaje conmigo, que sea apasionada, una chica que se quede en mi departamento conmigo sin algún temor a prejuicios o a su padre, una chica que le guste el amor libre como yo y esa no eres tú. No quiero que andes perdiendo el tiempo conmigo con la esperanza de que yo en algún momento me comprometa contigo y nos casemos, a mi ese tipo de amor no me llama la atención, yo vivo el amor de manera libre, dijo Gokú.

¿Dime que debo cambiar para que no termines conmigo?, dijo Milk tomando las manos del joven de cabello alborotado.

Tú no tienes que cambiar nada Milk, eres perfecta pero no para mí, perdóname pero lo nuestro termino, dijo Gokú echando a correr hacia su auto mientras aguantaba las ganas de llorar dejando desconsolada a la pelinegra.

¡Gokú¡ dijo Milk mientras gruesas lagrimas salían de sus ojos al tiempo que un recuerdo vino a su mente.

-.Recuerdo.-

Recuerda: No permitas que te aleje de él, Dieciocho y yo creemos que tú eres quien lo puede curar sus heridas, decía Bulma a través de la línea telefónica.

-.Fin del recuerdo: Tiempo actual.-

No, no permitiré que me alejes de ti, yo te amo y si tengo que cambiar algo de mí para demostrártelo, lo hare, pensó la pelinegra mientras echo a correr tras el joven de cabello alborotado.

Gokú estaba a punto de subir a su auto cuando sintió unas delicadas manos rodear su cuerpo.

Yo cambiare por ti, solo no me dejes, seré la chica que quieres, pero no me dejes, dijo Milk con dulzura mientras de sus bellos ojos salían lagrimas que humedecían el traje del joven de cabello alborotado.

Milk, no te rebajes más, no quiero nada contigo, yo solo busco una relación pasajera con las chicas con las que estoy, por eso no podemos seguir, tú no eres como las chicas a las que estoy acostumbrado tratar, tú eres distinta, dijo Gokú sin voltear a verla mientras de sus ojos salían gruesas lágrimas de dolor.

Tú dijiste que era especial para ti, dijo Milk.

Así es, eres especial por lo mismo no podemos seguir, solo te haré más daño, es mejor cortar esto ya antes de que te lastime más, dijo Gokú sacando con delicadeza las manos de la pelinegra de su cuerpo mientras abría la puerta de su auto y subía a este.

Gokú, no me dejes, dijo Milk.

Milk eres joven, muy bella, tienes a muchos chicos en la universidad a quienes les gustas uno de ellos es Broly, yo ya te enseñe algunas cosas del amor, las demás aprendas apréndelas con él o con quien tu desees, te deseo la mejor de las suertes muñeca bella, dijo Gokú con voz entrecortada al tiempo que encendió su auto y continuo su camino dejando a una desconsolada pelinegra que caía de rodillas al piso sollozando.

Milk, dijo una voz con nostalgia mientras se acercaba a abrazarla.

¡Bulma¡ dijo la pelinegra.

No puedo creer lo que Gokusito hizo, sí que es tonto, mira que tratarte de esa forma, dijo Bulma abrazando a la pelinegra que rompió en llanto en sus brazos.

Mientras tanto:

Gokú manejaba como loco por la autopista mientras su vista se nublaba por las lágrimas que amenazaban con salir de sus ojos mientras pensaba: Te amo, te amo mi muñequita bella pero tengo miedo de que me dejes también por ello soy yo quien termina primero las relaciones así creía que el sufrimiento era menor pero veo que me equivoque tal vez antes no me importaba ser yo quien termine con las chicas pues no sentía nada más que cariño o deseo por alguna de ellas pero contigo las cosas fueron distintas desde que te vi, me enamore a primera vista de ti aunque me negué a creerlo fue así, me enamore a primera vista de ti y ahora puedo decir que estoy perdidamente enamorado de ti tanto que siento que mi corazón se partirá en pedazos si llego a verte con otro.

Gokú iba tan distraído pensando en el fin de su relación con la pelinegra que ni cuenta se dio del cambio de luces y continuo su camino por la autopista siendo impactado por un bus que venía en dirección contraria a él haciendo que su auto de vueltas de campana mientras el perdía el conocimiento.

Cafetería:

Una pelinegra se encontraba bebiendo una taza de café al tiempo que sentía un profundo dolor en su corazón.

¿Ya más tranquila?, dijo Bulma.

Siento una terrible opresión en mi pecho, dijo Milk.

Es normal, estas triste pequeña, dijo Bulma.

Sí, estoy muy triste, dijo Milk al tiempo que una rubia llegaba a la mesa donde estaban el par de jóvenes.

Chicas, ya llegue, dijo la rubia sentándose a la mesa.

Carretera:

Ambulancias y reporteros se encontraban en el lugar del accidente, equipos de paramédicos sacaban a los heridos del bus y del auto que habían sufrido el impacto mientras los reporteros cubrían la noticia.

¿No es Son?, dijo uno de los reporteros al ver pasar a un apuesto jovencito de cabello alborotado ensangrentado sobre una camilla.

¿Son?, dijeron los demás reporteros.

Sí, debe ser el ese es su última adquisición vehicular, yo le hice un reportaje acerca de los autos que le gusta coleccionar, dijo otro de los reporteros alarmado mientras iba junto a sus demás colegas a la ambulancia a donde subían el cuerpo del jovencito.

¿Cuál es su estado?, dijo uno de los periodistas a uno de los médicos.

Su pronóstico es reservado, el recibió la peor parte al ir en un vehículo menor, dijo el médico.

Tenemos noticia de último minuto, decía un reportero mientras se enlazaba con el medio de comunicación para el cual trabajaba.

Cafetería:
No lo comprendo, no debió tratarte así, Gokusito sí que es tonto, dijo Dieciocho.

Está muy dolido por la traición Dieciocho, tu sabes ello, por eso actúa así, dijo Bulma.

¿Quién lo traiciono?, que tipo de heridas guarda su corazón que no permite que el amor vuelva a entrar a el, dijo Milk con nostalgia.

Creo que debemos decírselo Bulma, dijo Dieciocho.

Si creo que si, dijo Bulma.

Lo que pasa es que......., decía la rubia viéndose interrumpida por una terrible noticia que se anunciaba en una gigantesca pantalla de televisión que había en la cafetería.

¡Gokú¡ dijo Milk poniéndose de pie mientras trataba de sujetarse de la mesa donde se encontraba para no caer al piso de la impresión.

Debe ser una broma de mal gusto, dijo Bulma mirando aterrada la pantalla de televisión.

No, no lo es, ese es su auto, dijo Dieciocho.

Tengo, que ir con él, dijo Milk con voz entrecortada.

Si, vamos, dijeron las jovencitas poniéndose de pie al tiempo que una de ellas dejaba unos billetes sobre la mesa.

Vamos en tu auto porque no traje el mío, dijo la rubia.

Vamos no te preocupes por ello amiga, dijo la peli azul mientras caminaba abrazando a una desconsolada pelinegra.

Gokú, espero y no hayas sufrido mucho daño, pensaba la pelinegra.

Hospital:

La familia Son, los amigos y el manager del joven de cabello alborotado se encontraban tratando de obtener noticias acerca del estado del jovencito mientras en las afueras del mismo decenas de periodistas se reunían para obtener alguna noticia.

Dicen que su estado es grave, decía uno de los periodistas.

Yo escuche que podría quedar paralitico pues sufrió daño en su columna.

Yo escuche que podría quedar ciego pues sufrió daño en la vista, dijo una reportera.

Ya dejen de decir tonterías aún no hay nada confirmado, dijo otro de los reporteros al tiempo que de un auto bajaban tres hermosas chicas y entraban presurosas al lugar.

¿Dónde se encuentra el joven Son?, preguntaba desesperada la pelinegra.

Lo están operando señorita, dijo una de las enfermeras.

¿Operando?, dijo Milk sollozando.

Si el impacto fue muy duro y el pobre se llevó la peor parte, dijo la enfermera con nostalgia.

¿Cuál es su estado?, dijo Bulma.

Eso no se lo podemos decir a cualquiera, dijo la enfermera.

Ella es su prometida, dijo la rubia mientras abrazaba a la desconsolada pelinegra.

Bueno, siendo así solo puedo decirle que es de pronóstico reservado ha sufrido daño en la mayoría de órganos, si gustan pueden ir a esa sala allí están sus familiares y amigos, dijo la enfermera señalando un ambiente.

¡Gracias¡ dijo la rubia.

¿Prometida?, dijo Bulma con una ligera sonrisa.

Es lo único que se me ocurrió para obtener alguna información además tal vez dentro de poco ello se haga realidad, porque yo estoy segura que Gokusito saldrá de esta él es muy fuerte y luchador, dijo la rubia.

Eso sí, ten fe Milk, Gokú se salvara y entonces podrás darle todo ese amor que el necesita y que solo tú puedes darle, dijo la peli azul.

Las tres jovencitas fueron hacia el lugar donde estaban los padres del joven de cabello alborotado.

Señora Son, ¿Cómo esta Gokú?, dijo la peli azul con nostalgia.

Muy mal hija, muy mal, dijo Gine con voz quebrada.

Está mal, dijo Milk empezando a sollozar mientras los padres del joven de cabello alborotado la miraron.

Ella es Milk Ox, la última conquista de Gokusito, dijo Dieciocho con nostalgia.

¿Tú eres la chica del crucero, la niña por la cual mi hijo decidió continuar la carrera?, dijo Gine mirando a la pelinegra.

Si es ella, dijo Bulma.

Eres muy linda, mi hijo aunque no lo quiera reconocer sé que se volvió a sentir amor gracia a ti, dijo Gine tomando las manos de la pelinegra.

Si es cierto, dijo Bardock.

¿Cómo ocurrió el accidente?, dijo Milk con nostalgia.

Dicen que mi hijo manejaba a excesiva velocidad, que ni noto el cambio de luces del semáforo y se encontró con el bus, dijo Bardock con nostalgia.

Eso es muy raro, mi hijo siempre ha sido muy cuidadoso cuando maneja, los médicos dicen que a lo mejor tuvo algún problema y por ello estuvo distraído, dijo Gine

Fue mi culpa, no debí ir a buscarlo, dijo Milk cayendo de rodillas al piso mientras sollozaba de manera desconsolada.

¿Qué dices niña?, dijo Bardock.

Gokú termino hoy con Milk, parece que no quería enamorase más de ella y la corto, dijo la rubia.

Si eso es cierto pero Milk no es culpable del accidente, dijo Bulma.

Así es Bulma, esta niña no es culpable de nada, son cosas que pasan además tu no hiciste nada para que te sientas culpable, dijo Gine acercándose a la pelinegra para abrazarla.

Yo amo a su hijo señora lo amo pero él no quiere que este cerca de él, no quiere, decía Milk mientras sollozaba en brazos de la madre del joven de cabello alborotado que la miraba con nostalgia.

Nota:

Disculpen la demora en actualizar el día de hoy, pero he tenido un día muy complicado, algunos saben que no cuento con computador propio y pues yo tengo que esperar a que me presten el equipo para poder escribir y publicar además como también alguna vez les dije yo en estos momentos estoy cuidando a un familiar que está muy delicado de salud a la vez que lo apoyo atendiendo en su negocio, por ello no actualizare siempre en el mismo horario, espero comprendan ello, sin más que decirles les dejo un capítulo más de esta bella historia de amor.

Con mucho cariño.

PrincesaLirio.