Ì̸̼͎̩̻͚͌̆͑̇͘͠͝͠m̷͕̰̣̻̮͔͒͋͛͝͝ͅa̷̝̘̗͓̙͇͈̪̮̾̓̚͝͝g̶͓̰͚̰͔̔̍̍̊̈̈̔̀̆͘ë̷͈́͗r̵̮̤͛́̈͛͌̉̉y̵̛̼͔̘̼͉̌̈́̓̇̎̕͝

•𝓐𝓽𝓪𝓻𝓭𝓮𝓬𝓮𝓻•

La explosión calló todo alrededor.
Atinó cerca de las montañas rojizas, el cielo verde adornaba el atardecer de la batalla, por lo menos las nubes de humo intoxicante aun no bajaban a nuestros pies.

Te notaba muy preocupado, sentía que revisabas mi pierna si aun podría resistir, tu siempre y la Eternidad en tus ojos. siempre has sido el mejor amigo eterno que he tenido. Y el único para presenciarlo.

Y también para admirar la vida a mi lado, viendo ciegamente este atardecer junto a mis últimos respiros, el final de  "estos días". Gracias por hacerme sentir importante, y compartir de tus respiros infinitos conmigo..

aunque no pueda verte aun te escucho...

El Max Wheel que conozco ya me había contado el comienzo de todo, que también estaba confundido de toda esta aventura, de que había sucedido, ¿por que llegamos aquí?, ¿por que estamos aquí?....aun viendo lo invisible

"¿El primer día?", decía mi mejor amigo Max Wheel, mientras sentía que sanaba mi herida. " ¿seguro que quieres escucharlo otra vez?"

Sin poder hablar solo asentí mientras escuchaba su voz, y sin poder hablar. Y sin saber que estaba asintiendo.

"Estas seguro...es solo mi historia"- volvió a preguntar

Solo seguí asintiendo, ya que su historia era la razón del porque llegué hasta aquí...

Su Primer día....

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•𝒜𝓂𝒶𝓃𝑒𝒸𝑒𝓇•

Era de Mañana en ciudad Luminous. Nada como la región Kalos. Llena de color y vida por doquier. Gran ciudad, grandes construcciones, habitantes. Y yo. Tan solo era un chico entusiasta
caminando por la calles llenas de hileras vestidas de camuflaje verde, ocultándose entre sus lagrimas, su dolor, marchando al más allá. Todos ocultaban sufrimiento en esta hermosa ciudad. Por eso dicen que Siempre hay Flores marchitas Detrás de las risas y de los triunfos.

Detras de todo, hasta Detrás de los importantes investigadores pokemon, la ICP (Investigatorio de Criaturas Pokemon). Inspirativos y realmente fundamentales para no solo el avance de la sociedad, si no, su salvación. Y aveces su destierro. Nadie lo ha de saber. Recuerdo que cuando era pequeño, todos los niños de mi edad querían ser entrenadores pokemon, derrotar a todos los que se encontrasen en su camino, ganar ligas y Tener un equipo pokemon tan fuerte que nadie los parase jamás.

Pero mi sueño, mi sueño, siempre fue observar a los Pokemon tal cual como lo hacían ellos, los biólogos en la ICP, y quizás descubrir una especie nueva o un avance innovador para la ciencia. Talvez, solo Talvez ayude a ganar la guerra. Si,  era de esperarse que el mundo sufriera de una  guerra mundial entre los Celsius y los Fahrenheit, los dos bandos que gobernan el mundo. los humanos no solemos darnos cuenta de nuestro alrededor. Y se nos considera una de las especies más erróneas, o eso decía mi padre todo el tiempo.

El también era parte de el ICP, era uno de los grandes científicos, era un biólogo forense. analizaba el ADN de las especies Pokemon.  Era más que un padre cualquiera, siempre me aconsejaba, hasta se sentía orgulloso de que fuera tan joven y empezara las investigaciones. Mucho antes que el lo hizo.

Tal vez por eso llevo parte de su nombre. "Max Wheel", también un biólogo como el, aun que prefería no enfocarme en su proyecto de vida...aveces solía atemorizarme un poco La idea de trabajar enfrentado a la muerte y evitarla por completo. Suerte que abandonó el proyecto hace años, La inmortalidad era in alcanzable

El decía que podría evitar la guerra ya que morir era imposible y la gente pararía de usar las armas como una respuesta, hasta era más extraño que la teoría de Albert Einstein sobre la cuarta guerra mundial. ""No sé con qué armas se peleará la tercera guerra mundial, pero la cuarta será con palos y piedras", y eso decía en la segunda guerra.

"Es imposible", murmuré en tono callado mientras caminaba entre la multitud de carteles rotos y de cartón.

yo aun no creo que podamos algún día soltar las armas. buscaremos acabar con algo más preciado que la vida. Y Si somos inmortales De seguro discutiríamos por quedarnos sin espacio, y sin espacio me refiero hasta el espacio exterior. Decía dentro de mi cabeza. Cuando no haya espacio para más humanos en este planeta, buscaremos más, siempre más, hasta que al fin estemos satisfechos...¿cuando un humano esta satisfecho?, no sabría decirlo.

Pasos, daba pasos, ya iban 30 minutos caminando desde el apartamento. Las calles estaban bloqueadas por las marchas y las protestas de corrupción. Pero los investigadores necesitaban trabajar para terminar con lo que alguna vez comenzamos, el conflicto por evolucionar y ser mejor que cada uno de nosotros, nuetro estudio humano nos ha llevado a entender la verdad de nuestra especie, nuestro ego y comparación. Solo eso nos salvaría de la perdida de esta guerra...

Pronto Llegaría a aquel lugar. Ya estaba unas cuadras cerca, cada vez más ilusionado, veía la ciencia del universo frente a mis ojos.

Lo sentía, todo estaba en mis manos, en mi cuerpo, ahora, mientras veía la estatua de Isaac Newton un poco antes de la entrada. Y observar los proyectos de biomecánica en el extenso jardín del investigatorio.  Al cruzar las puertas automáticas, no encontré más que un cielo en persona. El lugar era tan grande que parecía un centro comercial de ciencias, tantas personas involucradas en el camino al conocimiento humano y de nuestro alrededor. Sentía que por primera vez había arribado en mi destino.

Una señora de alrededor la edad de mi padre se me acercó con una sonrisa algo sorpresiva. Pero con una postura directa y firme.

" ¡joven Wheel!", dijo mientras se acercaba con una sonrisa formal.

La veía , de pelo de color miel y ojos azules. Se aproximó a mi con unos papeles y una tabla de datos en sus brazos.

"Soy la doctora Lura, seguro no te acuerdas de mi, eras tan pequeño", dijo mientras se acomodaba sus lentes y miraba una tabla de datos, "veamos...el hijo de el doctor Celebi.."

Volteé confundido, quizas se había equivocado de persona

" disculpe Doctora, creo que esta equivocada de papá, mi padre se llama John Max Wheel"- dije algo  nervioso, ya que todos se veían muy enfocados en su trabajo. yo distinto y mucho más joven.

La Doctora Lura se notaba algo ocupada con el papeleo, así que busco una inmediata excusa- "¡Sui!, tengo que atender una reunión, ven y dale un recorrido al joven"- habló en voz alta llamando un hombre de pelo azul oscuro liso y largo . Con una amplia bata blanca muy limpia.

"Esta bien Doc, puede confiar en mi, cuidaré al muchacho" dijo mientras le cumplia su palabra

Y así me dejo a su cuidado sin el saber de que se trataba y para que me guiaría

" hola joven turista, vamos a darte un recorrido"- dijo con confianza, pensando que yo era un turista por lo joven que me veía. "¿De que escuela eres?, ¿y tu maestro?"

" yo no soy un turista, ni estudiante, vengo por un trabajo", dije la verdad, mientras Sui se tomó muy enserio cada palabra que mencioné.

"Yo por ti me hubiera quedado unos años más en el colegio. ¿Cual es tu edad?", ¿18?- respondió siendo obvio, ya que pensó que era imposible que tuviera menos

"16"- dije siendo más exacto.

Por un momento Sui tenía una mirada fría, perdida entre la nada, pensando en el numero que dije como si fuera algo primordial para trabajar. Comenzó a guiarme y mostrarme todas las áreas de trabajo para cada especialista, ya le había contado entonces que era un biólogo y esto lo puso aun más extraño que antes.

"Ten cuidado, aquí no hay más niños genios, así que solo te rodearán adultos con más coeficiente que tu" dijo mientras creía que  yo me enfocaba en ser más perfecto que los demás.

Por eso no me gustaba convivir con algunos genios de la escuela, solo se enfocaban en hacer todo perfecto y ser mejores que los demás. Tener todo organizado y por un simple error en sus apuntes. arrancar hojas del cuaderno hasta la muerte.

No somos perfectos.

Pronto llegamos a una sala bastante curiosa. Tenía una enorme Jaula de vidrio con un hermoso habitat para Pokemon, en ella había un slaking que había interrumpido su siesta en una montaña de rocas para observarme. Una mujer y un hombre se me acercaron sin saber nada. Creían que era otro turista al igual que Sui al principio. Ella tenía el pelo morado y corto. Mientras  el hombre un pelo azul claro y picudo. Todos no eran tan adultos como pensaba que serían. Tenían alrededor de 25 a 30 años.

Aun no era muy alto para superar la altura de los dos hombres y ni a la mujer, cual también era alta. Así Sui aprovecho y me puso una mano en el hombro. Como si fuera un primo o hermano pequeño.

" ¿es otro primo tuyo?" Dijo la chica

"No illumi, el es el nuevo biólogo".

Dijo algo serio mientras los dos quedaban completamente sorprendidos, pensando que era una broma. Su expresión seria y fría la mayoría de tiempo me hacía pensar que se dedicaba mucho a su trabajo. Talvez la doctora Lura tiene tanta confianza en el.

"Pero es demasiado joven", dijo el otro investigador dejando su estudio en la computadora.

" Chien, aveces la vida es inesperable" le respondió Sui

"¡Ay que tierno!, es un biólogo chiquito" corrío hacia mi Illumi

No me gustaba que me trataran como a un niño. Sui me puso la mano en la cabeza y me despeinó el pelo. Mientras  la Illumi me estiraba y apretaba los cachetes a contra de mi voluntad. Al menos Chien no estaba en ese mismo juego.
.

"Déjen..."  dije mientras Illumi me apretaba los cachetes aun más fuerte y no se entendía nada de lo que decía. "¡Dejenme!"

Los dos se retiraron de mi, quedando al frente totalmente callados

"Aun que sea mucho más Joven, no significa que me puedan tratar como a un niño"

Hablaban entre ellos, susurraban ni idea de lo que no quería que escuchase. Pero igualmente me seguían incluyendo como uno d elos suyos.

"¿Cual es tu nombre?" Preguntó Chien.

"Me llamo Max Wheel" Respondí.

Estaban tan sorprendidos que se quedaron mudos, no podían creer  a quien estaban viendo de frente.

"¡Eres el hijo de el Doctor Celebi!", dijo Illumi otra vez nombrando ese nombre.

" no, mi padre es John Max Wheel"...

Después de decir eso, los 3 de rieron a carcajadas, y aun seguía sin entender el por que. Mientras seguían susurrándose y riendo con ganas.

"Aquí todos tienen apodos que se quedan para siempre"- dijo Sui peinando un poco su pelo perfecto- " ninguno se llama por su nombre Jamás, el apodo de tu padre es Celebi"

"Oigan, pongámosle su sobrenombre, que Slaking lo elija aprovechando que ahora que esta aquí" dijo Illumi entusiasta.

Slaking se paró, algo poco frecuente de ese Pokemon ya que siempre se la pasa durmiendo o descansando en el suelo. Se acercó al muro de vidrío mientras Chien le mostraba una tablet con la pokedex.

Slaking comenzó a apuntar a las letras del teclado para buscar un pokemon.

A-R-B-O-L-I-V-A

"¿Desde que letra empieza el apodo?" Preguntó Sui viéndolo quieto y sin ganas de responder - "¡dime!"- insistío

Slaking señaló la O

" ¿en que letra termina?" Volvió a preguntar

Slaking señaló la A justo al final.
Los tres me miraron, y yo aun me quedé sin entender que hacían para elegir mi apodo.

"Slaking eligió, te vas a llamar Doctor Oliva" dijo Chien aguantando la risa.

¡Noo!, me decía en mi cabeza...¡no! Oliva Wheel, no dejaba de salir en mi cabeza la imagen de mi con una oliva en la cabeza. "El genio de las olivas" Ya no podían llamarme de otra forma, sería una oliva hasta el final de mis días.

"Por favor cámbienme el nombre" rogué, enfocándome en sus nombres con más sentido que el mio.

Sui, Illumin, Chien

"Losiento, El nombre lo escoge Slaking, no nosotros" dijo Sui, "ush a mi tampoco me cae bien"

Miré con rabia a Slaking pero en el fondo sabía que solo era un Pokemon atrapado en una jaula obligado a obedecer. Que Igualmente en el mundo no existía la libertad, ni para nosotros los humanos, cuando mi expresión cambio, Slaking reaccionó, pero solo volviendo a su lugar donde antes estaba acostado.

"Bueno, Oliva tenemos que irnos, acomoda tus cosas, mañana empiezas"- dijo Sui marchandose junto a los otros 2  acompañantes

Todos regresaron a sus trabajos, y me dejaron adaptarme al lugar. Deje mi mochila con mis cosas a un lado mientras lentamente Abrí las ventanas viendo el caos en las marchas...el sufrimiento se reflejaba en mis ojos. De esos Pokemon que antes acompañaban la ciudad, ahora huyendo de ella, las calles llenas de felicidad, ahora se sentían muertas.

Aun recuerdo cuando yo, mi padre y mi madre íbamos a al parque.

De lo más profundo saqué una foto de nosotros, cuando éramos 3...,

-"Sabíamos a donde ir.."- dije mientras sacaba una brújula...."padre...."- la ultima saqué una foto de el junto a mi, ambos con batas largas de laboratorio.

"Espero que sepa a donde voy..." agarré la brújula con fuerza "...mamá"

Miré hacía atrás veía como Slaking estaba parado otra vez, me miraba como si sintiera lo mismo que yo. Le respondí su mirada, me paré y solo me quedé observando sus ojos. Apareció en el vidrio empañado, dibujado con su dedo una "N",  mis ojos se sentaron en el Norte de la brújula.Avancé hacia el Norte, como si de verdad supiera a donde ir. Solo terminé en frente de el, poniendo mis manos en el vidrio y el las suyas y yuxtaponerlas con las mías.

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•𝓐𝓷𝓸𝓬𝓱𝓮𝓬𝓮𝓻•

Esa foto de Max Wheel y John Max Wheel

padre e hijo tomados de los hombros uno contra uno. un presente predestinado. 
resaltaban los hilos de colores en los ojos de cristal dorado
del Zorroark...Su dueño solo pensó en abrazarlo, pero no tenía fuerza para hacer un mínimo movimiento, a su cuerpo se negaba a sus sentimientos, ambos solo tenían una mirada envuelta en un manto callado,  como estar detrás de un muro invisible. cubría cada emoción.

John Max Wheel y Olivan en una lucha de pokemon a humano, especie a especie por la supervivencia de uno solo. No era una batalla cualquiera. ¿Quien hablara primero de sus sentimientos era el ganador de esta guerra?, o quien callaría para siempre.. no era fácil, ya que ninguno expresaba los sentimientos del otro por, y no pensaban en como se sentirían si no les dijeran la verdad.

Era la primera vez que John pensaba en el despues, mucho más que en el ahora. Los dos hacían lo mismo, ignorando el presente, queriendose quedar con el pasado que conocen.

¿Evitar el futuro será imposible?...."será" demuestra que es imposible hacerlo.

Olivan puso su pata enfrente del doctor, como si tocara la pared invisible. El doctor también lo hizo. Hasta que algo encendió su habla.

" mi hijo...Max..no sabe de esto"...dijo entrecortadamente, preocupado de que jamás volvería a ver a su hijo,

El corazón del zorroark aceleró al mencionar ese nombre,  no sabía que decirle a su dueño. Algo tan misterioso lo hacía callar, una razón que aun le costaba decirle, había un ardor, era como tirar sus palabras al fuego y el iba junto a ellas.

"Max ya lo sabe, Arthur lo sabe....Thiana.." los últimos dos nombres parecieron que vinieron desde el alma" lo saben"...Tiró unas pocas palabras....

...calló al resto..

"Te contaré mi Primer día..."

V̸̤͕͈̤̪͙̱̓̎͜͝.̵̧͙͔̗̿̐͘̕N̵̨̬͙̟̙̹͎̠̋́̂͊̌̉̚͝͝.̸̡̣͓̭͍͖̞͚̲̽̂̒̈́̃̕ͅĄ̴͔̜̥͔̈́̂~