Dejamos otro extra por acá, por qué soltar la historia y dejarla ir? Jamás.

Otra jornada de trabajo agotadora.
Draco llegaba a la mansión, ya tres semanas habían pasado desde que Hannah había vuelto con ellos.
Intentaba seguir el consejo de sus amigos pero le costaba mucho actuar normalmente con ella.
Sobretodo por qué ella sentía la incomodidad que el emanaba cuando se encontraban en la misma habitación.
Fue Daisy quien lo recibió esa noche. Tomo su abrigo y su maletín, junto con el guardapolvo de medimago y se retiró con un chasquido de dedos, dejando solo al rubio.
Entro con un suspiro cansado al salón de té dónde su madre se encontraba.
-bienvenido hijo- Narcissa quien se encontraba en los sillones se levantó para recibirlo - pareces estresado-
-fue un día largo- murmuró pesadamente, su vista recorrió el lugar
-si buscas a Scorpius se fue a dormir a casa de los Potter, te lo dijo está mañana-
-si lo sé, lo recuerdo- respondió rapidamente- ¿Donde esta Hannah?-
-¿Hannah?- pregunto ella sin intender- oh, ella creo que salió por la mañana luego de que te fueras-
-¿Que?- pregunto el sin poder creerselo-¿Y no volvió? ¿A dónde fue?-
La ansiedad comenzó a nacer en el.
-no lo sé, solo me dijo que saldria- respondió su madre-no te preocupes, ella volverá, ya tiene una varita nueva y necesitaba salir un poco de está casa-
El rubio asintió no muy convencido.
Cenaron juntos esa noche, solos los dos. Mientras Daisy servía la mesa su madre le preguntaba cómo fue su día.
No podía dejar de pensar en donde se encontraba la ahora rubia.
Una ansiedad inconciente crecía dentro de el. Intentaba no exteriorizarla para no preocupar a su madre, pero su pie no paraba de golpear el piso bajo la mesa.
¿Por qué le preocupaba? La joven ya era una mujer, podía hacer lo que se le dé la gana. ¿Donde estaría? No es que tuviera algo en el mundo después de tantos años muerta.
La cena culminó, eran las once de la noche cuando Narcissa decidió retirarse a su habitación.
-¿No subes hijo? - Pregunto ella antes de subir las escaleras hacia las habitaciones.
-no, yo... Tengo unos papeles que ver antes de dormir- Narcissa sonrió tiernamente
-ella volverá hijo- le respondió acariciando su rostro. Luego se retiró a su habitación seguida por Daisy quien era como su sombra.
El rubio se dirigió al salón donde estaba Narcissa cuando llego, se sentó allí mirando a la nada esperando que la puerta de la entrada de abriera
Una hora y media paso para que Hannah cruzará la puerta vestida con unos pantalones de vestir y un saco color gris sobre ella. Traía expresión indescifrable.
-¿Donde estabas?- la increpó a penas ella descubrió su presencia- ¿Sabes que hora es?- pregunto levantándose del sillon, acercándose rápidamente a ella
Ella solo enarco una ceja ante tal atrevimiento.
-¿Disculpa? ¿Que es este interrogatorio?- pregunto ofendida
Su ceño se fruncía levemente mientras se cruzaba de brazos.
- desapareciste durante todo el día, ¿Donde estuviste?- Draco se encontraba furioso
- ¿Que te importa dónde estuve?- le respondió ella- después de todo cuando estoy solo te limitas a evitarme-
Y la bomba había sido soltada.
-eso no es cierto- respondió el pero sin  mucho convencimiento
-lo es, pero no tienes el coraje para admitirlo- se quitó el saco de su traje de vestir quedando solo con una camisa blanca- me voy a dormir, estoy cansada y no tengo tiempo para este tipo de discusión-
Camino dejándolo solo en el salón, subiendo las escaleras hacia el piso de las habitaciones.
-me aterra que vuelvas a desaparecer- dijo el rubio frustrado, haciendo que Hannah detuviera su paso en las escaleras, tamborileando sus dedos en  la baranda- es diferente cuando se que estás aquí con mí madre-
Hannah se sintió incómoda, sentía que estaba haciendo estragos en el hogar de los Malfoy.
-estoy muerta para la sociedad mágica, fui a aclarar todo en el ministerio- respondió con expresión más serena- tendrán que hacer un juicio por los crimenes de mí pasado, pero me devolvieron mis propiedades y mí herencia, podré volver a mí mansión-
El corazón de Draco se aceleró furiosamente.
-¿Te irás?- pregunto incapaz de pensarlo
-creo que será lo mejor - respondió pacíficamente
Draco solo pudo asentir dando por terminada la conversación. Y Hannah se despidió subiendo a su habitación.
¿Realmente quería que se fuera? No sé sentía cómodo a su alrededor. Su relación era distante y parecían solo conocidos.
Tal vez era lo mejor, hasta que ambos supieran como desenvolverse alrededor del otro.
Tal vez después de todo no estaban destinados a estar juntos.