9. Abeja.
Anteriormente..
Comentó que en el tema de las relaciones amorosas ya se daba por vencido, más que nada por el hecho de que.. viendo los hechos como son, quizás aún era muy pronto para empezar otra relación.
O bueno, ese fue su pensar por un buen rato, por 5 años más o menos, en la época del quinto año donde dejó ser un.. mujeriego, conoció a una mujer muy.. interesante, esto no solo diciéndolo por su buena apariencia física, si no porque a pesar de que contrastaban. Llegaron a complementarse muy bien durante ese tiempo, lo cual.. teniendo en cuenta su pasado, no esperaba que eso fuera posible.. ya que según él.. algo cómo eso ya no podía darse con una persona qué había hecho lo que él hizo, y sin embargo, ahí estaba con ella.
Ella podía ser sarcástica.. algo bromista, y a veces algo rara de vez en vez, pero todo eso no lograba opacar lo bueno que veía y lo que.. honestamente, le hubiera gustado aún tener cerca suyo.
Hace 1 año
Eso estuvo bien.. pensaba que en algún momento de su vida su amiguito simplemente ya no cooperaría con él cuando lo necesitara, pero.. las ventajas de la vida son curiosas.. y a veces se daban donde uno menos lo esperaba. Regresando a lo que acababa de pasar, es que estaba acostado en la cama junto a esa hermosa mujer de cabello blanco durmiendo en su pecho.. y si, no tienen que decírselo incluso él se sorprende de ver a otra persona que tenga la misma condición en el cabello.
Dándole un beso en la frente, escuchando que esta despertaba poco a poco, viendo cómo abría sus ojos.. siendo indistinguible aquel color amarillo qué veía, esto si que no era algo muy común de ver, y esto lo dice enserio.
También viendo cómo le sonreía apenas lo distinguía después de despertar, notando aquellos colmillos que posiblemente le dejarían una marca si llegaran a morderlo.
- Estuviste increíble.. pero bueno, eres padre de 6 hijas así que supongo que no podía esperar menos de ti, vaya que si me hiciste el detalle de llenarme, afortunadamente estábamos usando protección, ya que la maternidad no es algo que me interese... {aún}—Se sentaba en la cama, estirándose un poco, a lo que luego procedía a ponerse encima de su contrario, por lo que sus pechos tocaban el pecho de Lincoln, cosa que veía que le parecía bien ya que le sonreía de forma leve y de paso sentía cómo manoseaba su trasero.
- Creo que esa es una de las cosas que no puedo imaginar, sabes, verte cómo madre es algo que.. tendría curiosidad por ver, y a la vez no quiero ya que atesoro los momentos que disfrutamos estando a solas tú y yo, una disculpa si soné muy empalagoso—Al decir eso último veía como su contraria le pellizcaba la nariz para después soltarlo, empezando a reírse los dos durante unos segundos para después verse detenidamente y comenzar a besarse, no teniendo intención de separarse inmediatamente.
Continuaron aquel beso por lo segundos que siguieron, llegando el momento donde los dos agregaban su lengua para así entrelazarlas entre sí, compartiendo algo de saliva los dos, Lincoln sujetaba el trasero de su contraria en el beso, de verdad que lo disfrutaba, y mucho. Terminaron separándose dentro unos segundos, viéndose como quedaba un pequeño hilo de saliva entre la boca de ambos, volviéndose a sonreírse entre sí para después darse un corto y rápido beso, quedándose recostados, los dos eran muy holgazanes.
Aunque.. a veces sentía que Lupa lo era más, pero tampoco es como si eso fuera algo de lo que se quejara, al menos si llegaba a ser algo activa y no era tan sedentaria, a la vez disfrutando de su vibra y compañía relajante.
Estaba pasando un buen momento en su vida, y nada podría arruinarlo, definitivamente nada.
Actualidad, casa de Lincoln
Ya teniendo algo de tiempo queriendo hacer esto.. es que finalmente se dió la ocasión de que se vieran una vez más, esto haciéndolo ya que su contraria no lo llamaba a su teléfono personal, sabiendo que lo hacía para molestarlo, lo que extrañaba un poco. Diría que lo que quiere evitar el día de hoy es que más de sus hijas sepan el hecho de que tuvo pareja en algún momento del año pasado, que.. no se avergüenza de haber salido con ella, el detalle es que.. bueno, temía de cual podría ser la reacción de sus hijas al enterarse.
Algunas entienden pero otras.. pareciera que simplemente no quieren oír al respecto, y siendo ese el caso, es que decidía tomar esa ruta de dejar qué las demás no sepan, era.. mejor por ahora, eventualmente se los explicaría.
Pero bueno.. ya se estaba distrayendo demasiado de lo que debía de hacer.
- ¿Cómo has estado?, he intentado mantener el contacto pero el trabajo lo ha hecho un poco difícil, además de que mis hijas me han visitado de forma constante durante unas semanas, y.. tú muy bien sabes que no puedo negarme a pasar un rato con ellas—Ya sea salirse,ir al cine o quedarse en casa a charlar, el tiempo qué pasa con sus hijas es algo que nunca podría reemplazar, y.. no quería hacerlo tampoco, ya que disfrutaba de pasar la tarde con ellas, aún si luego se sentía agobiado.
- Si lo he notado.. y bueno, lo de siempre, intento mantener un buen ritmo en mis actividades y mi trabajo, aguantar a la molestia de mi madre, y creo que eso sería todo, sabes que molestarte solía ser uno de mis pasatiempos.. pero ya no lo hago..—Se le quedaba viendo para después sonreírle, haciéndolo de una forma un tanto burlona, para después disculparse por estar llamando a su casa en lugar de llamarlo directamente a su teléfono, pensaba que sería divertido.
Solían estar muy bien juntos.. y de un momento a otro él pidió que se tomaran un tiempo, lo cual.. entendió, pero al mismo tiempo le sorprendió ya que parecían estar llevándose muy bien.
- Iré directo al grano, pese a cómo eres, tú terquedad y cómo solías molestarme en ocasiones, yo.. te tuve en una alta estima, es solo.. que bueno, después de lo que hice en el pasado, quise tener un tiempo para pensar.. si podía permitirme ser feliz contigo..—Esa era la razón por la que había decidido darse un tiempo, dudaba de si merecía tener algo como la felicidad, teniendo en mente las cosas que hizo, pero.. bueno, en lo qué pasó del año estuvo pensando mucho, y ya sabía qué hacer.
- Si que eres un idiota, conejito, tú mismo me dijiste todo lo que hiciste hace años.. y pese a eso, aún quise acompañarte, porque me agradaba pasar el rato contigo.. y más cuando teníamos.. ya sabes, a lo que voy es que.. el cambio en ti es real, solo que no quieres verlo.—Sostenía una de sus manos, también le gustaba estar junto a él ya que lograba sacar ese lado de ella que solo pocos, y realmente pocos han logrado ver, seguiría siendo como es, pero al estar con Lincoln podía ablandarse un poco.
- Hehe.. aún no te he perdonado cuando hiciste sentir incómoda a mi hija en esa ocasión, ¿Realmente tenías que decir todo eso?, sabias de antemano que era mi hija y aún así decidiste hacer que todo fuera raro.. ¿De verdad que no has cambiado eh?—Se reía un poco, viendo cómo su contraria le respondía sacando la lengua, a lo que se volvía a reír, quizás no siempre entendía su forma de ser.. pero algo que si admitiría, es que la ha extrañado, y mucho, sabía que era mejor hablarlo.
Continuó hablando con Lupa.. diciéndole que, si bien le gustaba que ya pudo aclarar las cosas con ella, el detalle estaba en que vieran qué tipo de relación tendrían a partir de ahora, ciertamente no podían volver a salir así como así, por lo que.. de momento seguirían comunicándose. Ya sea por teléfono o por mensaje de texto, antes de decidir si volvían a tener una relación o no, charlarían un poco, estaba a discusión de si llegaría a haber alguna salida en algún momento, y de ser así le gustaría que todo se mantuviera casual, ya que.. aún no eran una pareja.
Y este tipo de trato que tendrían entre sí sería para ver si terminaban por gozar de gran manera la compañía del otro, no la escuchó negarse en ningún momento, por lo que entendía qué le gustaba la idea.
Lupa tampoco esperaba que volvieran a salir de un momento para otro, pero al menos le alegraba que aclararan las cosas.
- Por cierto, y hablando de tus hijas, ¿La pelirroja que nos está espiando por una de las ventanas es una de ellas?—Dijo mientras señalaba una de las ventanas, también volteando a ver junto a Lincoln la ventana.
- No puede ser.. Laika, tengo que irme un momento, ¿Puedes quedarte un momento aquí?, iré a hablar con ella.. y si tardo te mandaré un mensaje, no me gustaría hacerte esperar..—Dijo con una leve sonrisa, viendo a su contraria suspirar, lo bueno es que entendía su situación con sus hijas, agradeciendo al de arriba no tener hijos varones.
¿Porqué?, pues.. solo digamos que si así le va con sus hijas, no quería imaginarse cómo sería su situación si tuviera algún hijo, seguramente la incomodidad sería mucha, su suerte hace que piense en los peores escenarios, ya es algo que tiene muy interiorizado.
Algo que trataría de corregir, o al menos hacer el intento.
Parque de RW
No se lo esperaba para nada.. es decir, sabe y tiene en mente lo atractivo que es su padre, pero.. aún si suena un poco infantil, nunca pensó que vería a su padre con otra mujer.. por Dios.. si que se estaba escuchando como una niña pequeña.. una muy fuerte por cierto. La sola idea de ver a su padre relacionándose con una mujer.. la hacía sentir muy extraña.. no pudiendo describir precisamente cuál era la sensación que tenía, pero podía sentirlo dentro de su pecho, era como si.. doliera, aún si no era un dolor muy fuerte, era molesto.
Golpeaba un poste de luz que estaba cerca de la banca donde estaba sentada, dejando una marca en este, era probable que no estuviera hecho de un buen metal, o que ella era fuera muy fuerte, eso era lo de menos ahora.
- No hace falta que intentes caminar lento.. pude oírte cuando estabas 5 metros lejos..
- De verdad que tus sentidos sólo mejoran.. bueno, hija, quería hablarte sobre lo que viste en mi casa, primero, no le diré a tú madre que me estabas espiando—Al decir esto veía a su hija sonrojarse un poco— y segundo, la mujer que viste a mi lado es.. una amiga—Explicándole además de que no estaba saliendo con ella, a lo que el semblante de su hija cambió cuando dijo eso, aún así viendo cómo tenía los brazos cruzados, a veces se veía algo linda cuando se enojaba.
- De acuerdo.. bueno, puede que haya estado un poco mal al estarte espiando.. pero Justo quería pasar la tarde contigo.. y los vi juntos, nunca había visto a otra persona con el cabello blanco..—Veía a su padre reír nerviosamente, ya sabía porqué su padre tenía el cabello así, pensaba que era algo poco común, pero.. tal parece que no era así, respirando tranquilamente para calmarse.
- Y bueno.. es una amiga que he conocido desde hace un tiempo.. es probable que la vea más a menudo, ya que ha pasado rato y debemos terminar de ponernos al corriente..
- дерьмо.
¿Eso había sido ruso?
No sabía que su hija lo hablaba.. de verdad que se aprende algo nuevo cada día.
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Buenas tardes/noches/días compañeros. El día de hoy les traigo este capítulo, donde vemos un tema interesante, además de una aparición inesperada por parte de una de las hijas de Lincoln, que.. se puede ver que lo quiere, como todas las demás.
El tema de Lupa ya se había comentado, así que me pareció óptimo que hubiera una resolución.
Parece que a Laika no le terminó de agradar Lupa, ¿Será igual con las demás?
Cómo siempre, no pido mucho, espero les haya gustado el capítulo, voten si es así, además de decirles que no se olviden de dejar sus comentarios, que siempre son buenos.
Se despide su inventor favorito.
Hasta la próxima compañeros.
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