Capítulo XVIII
El incidente que tanto temía Jungkook, ocurrió unas tres semanas después de que llegara a la mansión.
En ese momento, Namjoon comenzaba a frustrarse porque el celo de Jungkook no había comenzado todavía a pesar de ser el famoso Omega Gamma que había encontrado después de mucho tiempo, aunque ahora estaba en condiciones de manejar su estado, era como si el cuerpo del Omega permaneciera dormido tal cual como los capullos de las rosas en el invierno. Igual que si hubiese perdido su señal de floración.
—Por favor, no actúe impulsivamente señor.
Jin lo controló para evitar que regresaran a Jungkook al cirujano.
Y como si el universo conspirara en su contra, en el peor de los momentos, una persona que no debería estar allí comenzó a caminar por el pasillo de la mansión en su dirección.
Taehyung se había perdido por algunos días, Jungkook pensó que seguramente había ido a ver cómo estaban sus hijos con la nueva niñera, se preguntaba a diario si todo estaba en orden con los pequeñitos, ¿Comían adecuadamente? Deseaba tener una conversación normal con el Alfa sobre ellos, pero ni siquiera podía hacerlo. En realidad, verlo de lejos era lo único permitido ahora.
Taehyung estaba hablando de algo que no entendía mientras Namjoon caminaba frente a él. Parecía ser un informe apresurado.
Sus oídos intentaban inconscientemente captar mejor su voz y su cuerpo se movía inconscientemente hacía él...
—Escuché que esta información sobre el Omega Gamma no está comprobada. Posiblemente fue una falsa alarma.
—¿Una falsa alarma?
—Sí, al parecer Jeon es solo un Omega ordinario. Parece que dieron información falsa a cambio de dinero.
Taehyung volteó a verlo e instantáneamente sintió como si su corazón comenzara a rebotar en su pecho, con solo una mirada del Alfa perdió la calma y el sonido de sus latidos rebotaba furiosamente en sus oídos, no podía evitar estar emocionado de estar frente a alguien a quien había añorado volver a ver durante todo ese tiempo, en su interior gradualmente crecía una furiosa tormenta de flores. Su aroma comenzó a intensificarse, era como si de los poros de su piel brotara la primavera.
—Hmm...
Este sentimiento era igual al del día en que lo encontró por primera vez en el centro comercial, su temperatura corporal aumentó, el cuerpo le dolía y su ano comenzó a lubricarse en señal de que quería a ese alfa, Taehyung quien fue el primero en notar el cambio en Jungkook, apretó el supresor que tenía escondido en la chaqueta.
—¡Señor Namjoon!
Cuando levantó la cara hacia la voz de Jin, descubrió que su hermano estaba a punto de correr hacia el Omega, tenía los ojos brillantes y la respiración agitada. Su hermano estaba completamente influenciado por las feromonas que expulsaba Jungkook y si obedecía sus instintos, no tendría más remedio que lanzarse sobre Jungkook como un depredador en busca de su presa.
—No, alto.
—¡Quítate!
—¡No, no me quitaré!
Jin se interpuso entre los dos Alfas, estaba tratando desesperadamente de detenerlos, aunque evidentemente no tenía la fuerza bruta para hacerlo, tomó la jeringa de manos de Taehyung y utilizó el medicamento para apuñalarle el muslo a Namjoon e inyectarle el medicamento.
—... TÚ, ¿ME DICES QUÉ HACER Y QUÉ NO? —rugió con su voz de mando Alfa, Taehyung por supuesto ni se inmutó —Eres un alto ejecutivo del ejército, si actúas como una bestia, tu apellido y reputación se dañarán, por favor, no puedes atacar así a las personas.
—Te equivocas, si puedo. Puedo hacer lo que se me dé la gana. ¡Estoy a cargo de administrar a este Omega!
—No, no es correcto. Se racional, no puedes violarlo.
Sin saberlo, al hablar estaba empeorando la situación del Omega que solo quería a su Alfa. El cuerpo de Jungkook comenzó a prepararse para aceptar el nudo de su Alfa y terminó por sentirse un poco asqueado ante la manera en que su ropa interior estaba mojándose.
—Hmm... Ah... Ayúdame. Ayúdame Taehyung.
Se hundió en el suelo, no podía soportar el intenso calor por su propia cuenta, necesitaba el frío de las baldosas del piso, tenían que ponerle el inhibidor lo antes posible antes de que se convirtiera en un desastre y se enteraran todos los Alfas que se encontrarán cerca. Taehyung se acercó para responder a su voz, lo tocó y le dijo que respirara hondo. Sin embargo, hubo una mano que lo detuvo.
—¿Qué vas a hacer?
—... LE VOY A PONER UN SUPRESOR ANTES DE QUE VUELVA LOCOS A TODOS NUESTROS ALFAS —Le respondió completamente alterado.
Namjoon recuperó la compostura después de que por fin surgiera el efecto del inhibidor que le puso Jin.
—Ya veo ¿Es lo que utilizaste con él mientras estaba en tu casa? ¿O lo dejaste entrar en celo para ver cómo te sentías después? A ver, muéstrame como lo manejabas.
—No, pero si no lo hago ahora, esta persona seguirá sufriendo.
—No me des instrucciones. Yo decidiré. —Namjoon fue hasta el otro extremo de la habitación.
—Seokjin. ¿Este es el celo completo del Omega Gamma?
—Existe una pequeña posibilidad de que lo sea, debería llevarlo al médico del ejército antes de tomar una decisión así que, yo también digo que necesita del inhibidor para...
—¡No me des una opinión que no pedí! —Cuando golpeó la mejilla de Jin con la palma completa de su mano para hacerlo callar, se rio.
Jungkook estaba sufriendo una tortura insoportable dentro de él. No importaba quién fuera la otra persona ahora, si no hacían algo para ayudarlo, estaría feliz de abrir sus piernas y rogar por sexo.
—Ah... Ah, Tae...
—Shhh.
No quería que su hermano lo escuchara, pero Jungkook ya no estaba presente, lo supo cuando se acercó a él y puedo ver el cambio en el tono de sus ojos, indicando la presencia de su lobo, era un hecho que la bestia dentro de él se estaba haciendo cada vez más presente. Miró a Jungkook una última vez...
—¿Qué estás haciendo, Taehyung? Regresa a tu trabajo ya. ¡Vamos!
El Alfa inclinó la cabeza de manera respetuosa y se puso de pie. Miró a Jungkook una vez más, por un periodo de tiempo tan corto que ni siquiera se podía decir que sus ojos se hubiesen encontrado, se sentía desesperado e impotente por no poder saber si Namjoon iba a violarlo de verdad, tan pronto como saliera por la puerta, pero no podía hacer nada...
—Ah...
Como si la maldición se hubiera levantado, los síntomas en el cuerpo de Jungkook se desvanecieron por completo cuando Taehyung se alejó un par de pasos, de inmediato el Omega pudo sentir que se su cuerpo se estaba enfriando de nuevo, el calor se evaporó porque su pareja ya no estaba allí.
—Es peligroso que lo dejemos aquí, ponlo bajo mi control. Llévalo a la habitación de inmediato y que nadie entre.
Por fortuna Namjoon aún no se había percatado del estado de Jungkook o de que ya no parecía estar entrando en celo, pero Jin si pareció haberse dado cuenta.
Tan pronto como salieron de la habitación, preguntó:
—Ya no te sientes en celo ¿Verdad?
—No creo que haya llegado mi celo.
—¿Qué quieres decir?
—He tenido la misma sensación antes, me pasó cuando vi a Taehyung por primera vez en la tienda del señor Choi y cuando me abrazó en el centro de la ciudad... Que estuviera junto a mi debió haber sido el desencadenante esta vez.
—Pero un Alfa Gamma no puede controlar el celo de un Omega Gamma...
—Lo sé... Un Omega Gamma está lleno de cosas que no entiendo.
Jin escuchó atentamente la historia de Jungkook sin ninguna expresión en su rostro, pero cuando la claridad del entendimiento de lo que había sucedido le llegó, su rostro se tiño de preocupación, en realidad Jungkook nunca estuvo por entrar en celo, lo que pasó fue que su lobo se hizo presente para llamar la atención de su destinado.
—No te pongas así. —le dijo Jungkook al ver su expresión.
—Estoy preocupado por ti. Necesito sacarte de aquí antes de que esto empeore.
Pero en ese momento, la puerta de la habitación se abrió de repente y Namjoon se acercó con un gran impulso.
—¿Qué quieres decir Seokjin? ¿Vas a traicionarme?
Agarró el cuello de Jin y lo presionó contra la pared, aunque algo en su interior se removió y lo hizo detenerse por un momento al ver como el Omega parecía estar sufriendo, el enojo seguía completamente vivo en sus ojos.
—¿Te estás burlando de mí? —le preguntó a Jungkook y la mano que sostenía el cuello de Jin ahora se estiró en su dirección.
—¡...!
Su garganta se apretó tanto que no pudo evitar soltar un gemido de dolor, era como si los dedos de Namjoon lo aplastaran.
—Señor, espere señor.
Jin estaba tratando desesperadamente de detenerlo, pero Namjoon no parecía poder controlar su ira.
—¿Mi hermano controla tu celo?
—"¡...!"
Namjoon se rio cuando se dio cuenta de que efectivamente Jungkook había reaccionado a Taehyung.
—Con que así es la cosa ¿Eh?
Pero él no sabía que en realidad Taehyung no podía controlar a Jungkook y si el Omega reaccionaba a él era porque eran destinados. Él solo conocía la habilidad de un Alfa Gamma para estimular a un Omega así que esa fue la conclusión a la que llegó, lo que estimulo aún más el complejo que tenía por su medio hermano, se estaba volviendo loco, se sentía cada vez más inferior que Taehyung.
—¡Siempre hay que estar agradecido con los putos Alfa Gamma! —habló con ironía.
—Yo no quería que fuera así.
—Sí, sí. Ya lo sé, después de todo los Omega no son más que herramientas para darnos descendencia...
El hombre salió de la habitación sin dejar de murmurar lo mucho que odiaba a Taehyung.
—Jungkook-ssi.
Jin se veía muy preocupado, pero ahora no podía darse el lujo de ser considerado con los demás, le pidió que saliera, diciéndole que necesitaba estar un momento a solas, y se dedicó a contemplar la habitación para comprobar la situación en la que se encontraba. Lo había estado usando como su recámara durante el tiempo que llevaba allí, pero este espacio seguía siendo completamente desconocido para él, se sentía sofocado en realidad.
Se acercó a la ventana y miró hacia afuera, pero no podía abrirla para respirar un poco del aire exterior. Había gente que iba y venía de vez en cuando, pero el mundo de aquí no era amable con él, era como un pájaro en una jaula, no tenía libertad y todas sus acciones eran monitoreadas.
—Um...
Las esquinas internas de sus ojos se humedecieron y su nariz se congestiono. Había aceptado entregarse al ejército para salvar a Taehyung y terminar con todo este asunto, pero quería regresar a casa, extrañaba cuando preparaba medicamentos con el señor Choi, extrañaba jugar al ajedrez con él, acariciar al gato y que Yoongi se burlara de él.
Deseaba recuperar esos días y, sin embargo, también tenía algo más importante que quería volver a tener cerca. Los niños pequeños que lo llamaban "mamá", odió ese nombre al inicio, pero ahora estaba bien, podían llamarle mamá si eso era lo que querían, anhelaba volver a la casa de Taehyung, quería ver los ojos que el señor Choi describió como "abismo de oscuridad", a ese hombre con una luz suave en el interior.
Debido a la capacidad de un Alfa Gamma, siempre se sintió como si la gente que lo rodeaba lo hubiera lastimado así que no quería dejarlo solo, se estaba enamorando de él, y la prueba de esto era los artículos del hombre que había ido recolectando todos los días desde que llegó a su casa. Pensaba que era un estúpido porque no podía detener el acto de anidar, pero ahora se sentía fuerte como para aceptar que lo hacía pensando en los dos y en su futuro como pareja.
—Te necesito... —le susurro al viento con el anhelo en su corazón de que de alguna manera el Alfa pudiera escucharlo.
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