Una semana después, Jungkook dejó a los niños con el señor Choi y salió de la casa con dirección a las instalaciones militares en donde lo habían citado con anterioridad.

Hacía buen clima, de repente se preguntó si esta vida sin Taehyung se convertiría en algo habitual para él y sus hijos, todo el tiempo había personas en uniforme militar que le recordaban a su esposo ¿Por qué no era Taehyung el joven soldado que estaba sosteniendo el volante? ¿Por qué no era el hombre que estaba sosteniendo la puerta? ¿Por qué no venía a su lado solo un momento y le decía que lo estaba haciendo bien?

—¿Te estás mareando?

—No, estoy bien.

Aparentemente no lucía nada bien, aunque no podía decirse que esto se debiera a una fatiga física sino... Más bien a un cansancio mental.

Había estado pensando sin parar en cómo cumplir con la responsabilidad de cuidar de sus hijos y cómo parecer fuerte para que ellos también se sintieran así. Pero tal vez estaba más cansado de lo que imaginó porque, cuando se dio cuenta, ya estaba dentro de unas instalaciones militares que no había visto nunca, tenía frente a sus ojos un instituto de investigación en el que no había estado jamás, allí sería inspeccionado por al menos una semana completa, le pareció que había sido apenas ayer cuando Taehyung le trajo un repelente para Alfa para que se sintiera más protegido estando sin él, lo más probable era que haya sido desarrollado en este lugar.

—Taehyung seguramente pasó aquí mucho tiempo para intentar hacerme sentir seguro.

—¿Perdón?

—¿Qué? No, lo siento. Estaba pensando en voz alta.

Pero Taehyung ya no estaba aquí, y él se sentía terriblemente solo.

Era cierto que su esposo había estado aquí hace medio año así que imaginó que, si retrocedía en el tiempo y aterrizaba justo en este lugar, entonces lo encontraría de nuevo. Era un pensamiento sin sentido, por supuesto, pero la idea de retroceder en el tiempo para volver a verlo, lo consolaba tanto que simplemente se dejó llevar.

—Por favor, por aquí. —Lo guiaron al interior del edificio.

La apariencia del lugar en realidad no era tan diferente a la de cualquier hospital, sin embargo, a diferencia de los hospitales ordinarios, casi no había pacientes y la sala de espera estaba completamente sumergida en un profundo silencio, cruzaron el pasillo y tomaron el ascensor hasta el último piso, luego caminaron derecho, dieron vuelta y se dejó guiar hasta el lugar que sería su nueva habitación por este tiempo.

—Por favor, espere un momento. —El joven soldado que lo llevó hasta allí finalmente salió del cuarto.

—De acuerdo...

Había un patio muy amplio fuera de la ventana. En un hospital normal, podría ver pacientes internados y enfermeras caminando por aquí y por allá todo el tiempo, pero esto de ahora era extrañamente tranquilo, el jardín estaba lleno de rosas de colores y bonitas plantas verdes, pero, igual le pareció solitario que no hubiera algún espectador para apreciar tan bonito paisaje.

Jungkook miró vagamente un rato más por la ventana, en realidad no estaba prestando atención, lo único que le venía a la mente era la imagen de Taehyung y su propia voz diciendo "Por favor, mantente vivo." Casi no había posibilidades de que estuviera vivo y, sin embargo, todavía se sentía completamente incapaz de perder la esperanza de verlo regresar, aunque conservar la ilusión le hacía sentir dolor ante la incertidumbre.

Jungkook golpeó la ventana con la frente. —¿Dónde estás, mi amor...?

Pero no fueron solo las palabras las que se derramaron de sus labios, sino también las lágrimas comenzaron a brotar de sus ojos, se limpió la mejilla con el dorso de la mano y suspiró profundamente. Si no tenía alguna evidencia de la muerte de su esposo frente a sus ojos, entonces definitivamente no iba a poder rendirse y no iba a tener un descanso en su corazón.

Si al menos encontrara su cadáver...

Pero en ese momento, su corazón rebotó en su pecho, la piel se le puso de gallina y abrazó su cuerpo sin querer, pensó que aquello que sentía se debía a el miedo de imaginarlo muerto, pero luego cayó en cuenta de que esto en realidad era el celo.

Tan pronto como pudo darle un nombre a lo que estaba experimentando, notó que la temperatura de su cuerpo había comenzado a elevarse rápidamente, que le temblaban las piernas y que no podía dejar de jadear como un demente. Buscó la causa de esto mientras se daba la vuelta por todo el lugar. De ninguna manera esto podía estarle pasando sin la presencia de un Alfa Gamma, pero entonces ¿Hay alguien de "AAsA" aquí? ¿¡Otro Alfa Gamma llegó hasta aquí!? El cadáver de Sung Woon aún no había sido encontrado ¿Y si era él?

—Hah...

Se puso de pie y se dirigió de inmediato a la puerta, no había nadie en el pasillo y tampoco nadie junto a él, notó de inmediato que este "celo" era completamente diferente a cuando lo obligaron a tenerlo en la ciudad, lo que sintió en ese momento fue malo, desagradable y asqueroso. Sin embargo, ahora era claramente muy diferente, casi brotaba de forma natural de cada rincón de su cuerpo y aunque era una sensación muy fuerte, no estaba sintiendo algo extraño o experimentando náuseas. Más bien, la sensación pareció encajar perfectamente en su cuerpo hasta hacerlo respirar cómodamente y pensar que quería dejarse llevar por el calor...

—Taehyung...

Las palabras salieron inconscientemente de la boca de Jungkook. ¡Estas eran las feromonas de Taehyung! ¡Estaba completamente seguro de que era él!

—Taehyung.

Quizá las pertenencias de su esposo, que llegaron hace más de medio año, estaban estimulando esta reacción sin que se diera cuenta o tal vez hasta era un estado mental alimentado por su desesperación. Sin embargo, algo que no podía explicar con palabras normales hizo que se convenciera de que él estaba aquí.

—Taehyung.

¿Estaba equivocado?

¿La desesperación ya lo había vuelto loco? Su corazón estaba roto y él enloquecido por la tristeza.

Pero mientras se preguntaba todo esto, casi inconscientemente, fue guiado por una fuerte atracción e impulsado a mover las piernas sin darse cuenta de que lo había hecho para empezar.

—Jungkookie... —Escuchó la voz de Taehyung.

—Jungkookie.

—Tae... ¡Tae! ¿Dónde estás...? ¿¡Dónde...!? —Cuando ya no pudo caminar más, se arrodilló en el suelo y se llevó una mano al pecho para intentar contener todo el nerviosismo que había comenzado a cerrar su garganta impidiéndole el paso del aire, fue entonces que un uniforme militar inundó su vista, las puntas de unas botas se detuvieron frente a él. Tenía que levantar la cara, pero era difícil cuando sus mejillas estaban temblando tanto.

—¿De verdad entraste en celo en un lugar como este?

Era Taehyung ¡Definitivamente era él! Tenía la mirada borrosa y además le pareció completamente imposible que estuviera frente a él después de todo lo que había pasado, pero la reacción violenta causada por sus feromonas solo podía ser debido a él. Fue... Exactamente lo mismo que cuando estuvo en celo por primera vez, exactamente igual que cuando lo conoció.

—... VEN, CARIÑO. —Extendió la mano y tocó el uniforme militar.

—Estás... Estás vivo. Ah, ah... De verdad estás vivo.

—Sí...

Definitivamente era la voz de Taehyung, olía a él y también era la temperatura corporal que había sentido tantas veces en casa.

—Taehyung.

—Por favor, dame solo dos horas con él. Ya hice todo hasta aquí... Necesito estar con mi esposo en su celo.

Escuchó que el tono de su voz era como si estuviera contactando a alguien. ¿Dijo que solo necesitaba dos horas? ¿¡Habló con un hombre que no conocía sobre lo mucho que quería tener sexo con él!?

Fue irresistiblemente vergonzoso, sin embargo, el hecho de que no hubiera utilizado el supresor en esta situación era evidencia de que Taehyung también tenía los mismos sentimientos que él y las mismas ganas. Y Jungkook necesitaba probar tanto que estuviera realmente allí que se estaba volviendo loco.

—¿Por qué...?

No había nadie en la habitación a donde lo empujó. Solo... Algo así como un estante de medicamentos a lo largo de la pared y tres asientos alineados uno frente al otro, cada una con su computadora personal en frente, tenía un montón de preguntas al respecto, pero, ignorando la voz en su cabeza, se apresuró a quitarle el uniforme militar para que comenzara a hacerle el amor y el hombre también empezó a tomarlo entre sus manos para llevarlo justo a donde tanto quería.

—Por favor... Ah, por favor dime que eres tú.

—Mi amor... Quería verte...

—¿En serio...? ¿En serio querías verme...?

—Sí, sí quería. Esto... Es máximo secreto. Era por el bien de la misión así que, así que por eso... Yo no podía...

—Ah...

Obviamente estaba enojado de que no le hubiera dicho ni una sola vez, ni por equivocación, que estaba vivo y que definitivamente volvería a estar con él. Deseaba matarlo...

Pero supuso que era algo que podía hacer más tarde.

—Taehyung... —Ahora solo quería llenar el vacío que le habían dejado las horas de su larga ausencia.