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Capítulo LVI

Seis meses habían pasado ya desde ese acontecimiento y aún no tenía noticias del paradero de Taehyung.

Fue gracias a los niños que pudo aceptar la realidad y... Sonreír justo como lo había hecho siempre, podía decirse incluso que la existencia de esos niños, a quienes quería proteger, fortaleció su espíritu, sin embargo, en él seguía la flama de la esperanza encendida, sabía que Taehyung regresaría, no le pregunten cómo, simplemente él lo sabía, se lo gritaba cada célula de su cuerpo.

—Parece que la búsqueda de la instalación secreta casi ha terminado.

El señor Choi pareció no tener mucho que decir al respecto, la verdad era que esta situación parecía tornarse cada vez más y más terrible.

—Pero... No hemos encontrado su cadáver así que...

—Entiendo.

—Sí.

Jungkook era muy, muy fuerte, tenía que serlo por sus 7 hijos, se encontraron muchos cadáveres no identificados cuando ocurrieron los bombardeos en toda la instalación y aunque estaban cotejando el ADN de cada uno de ellos, era un proceso tardado y aún no iban ni por la mitad y por supuesto ninguno coincidía con el ADN de su querido esposo.

Cuando se entregaba algún resultado, siempre estaba allí para rezar para que no hubiera ninguna coincidencia con su ADN y la falta de resultados le producía una mezcla de sentimientos encontrados en su interior, por un lado se sentía feliz de que Taehyung no fuera alguno de esos cadáveres; eso significaba que había una alta probabilidad de que siguiera con vida, pero por otro lado sentía un enorme desasosiego; si tan solo hubiera un cadáver, al menos podría hacerle un funeral, llorar su perdida y vivir su duelo, cada día sin noticias era una tortura y el no saber nada de su paradero estaba matándolo lentamente.

Era frustrante y aterrador, especialmente cuando los niños comenzaban a dormir y lo dejaban solo, sentía unas ganas impresionantes de gritar. No sabía si estaba asustado o triste, día tras día las emociones estaban arremolinándose y alborotándose en su pecho, matándolo en vida, aunque él seguía cuidando a sus pequeñitos con una sonrisa. ¿Cuántas veces pensó que ya había llegado al límite? Pero seguía estando de pie, se aferraba a la idea de que seguía vivo como a un clavo ardiente y la ilusión de poder volver a verlo en el futuro era lo único que le ayudaba para levantarse cada mañana.

—¿No conoces la información privilegiada que tienen de "AAsA"? ¿No hablaron de eso en el ejército?

—Sí, pero todo lo que tiene que ver con eso sigue siendo manejado como información clasificada, ya sabes para evitar la presencia de algún otro infiltrado.

—Entiendo...

Gracias a este incidente, una gran cantidad de Omegas fueron resguardados y protegidos. Pero el caso en el que Sung Woon reemplazó a un oficial de una organización externa, fue tan escandaloso que se consideró en los medios como una "noticia de impacto". Después de eso, Jungkook y sus hijos fueron puesto nuevamente bajo el control de los militares en el programa de protección a testigos en el cual sus identidades fueron cambiadas y por supuesto fue cambiado de residencia a un hogar seguro del gobierno en donde los militares mantenían una estricta vigilancia.

No sé sorprendió en lo absoluto en realidad, sabía que ahora que su esposo ya no estaba allí a su lado había quedado completamente desprotegido. Tal vez solo lo tendrían por algunos meses más, como para no sentirse mal con ellos mismos, y luego lo mandarían a una institución en otro país o algo así.

—Todavía hay muchos problemas que deben resolverse.

—Me gustaría tanto poder estar en un mundo donde un Omega pueda vivir cómodamente. Me gustaría sacar a mis niños al mundo exterior para que puedan vivir como cualquier otra persona.

Siempre estaba latente en él la preocupación por el momento en que a sus pequeños Omegas les llegara el período de celo, seguramente sufrirían mucho, tendrían mucho dolor y un montón de preguntas y miedos. Sin embargo, quería encender en ellos el fuego de la esperanza de un futuro mejor, quería volverlos tan fuertes como para que no se dejaran vencer por nadie, no quería que tuvieran que pasar por lo que él paso por el simple hecho de haber nacido siendo un Omega.

—Estoy aquí contigo, no estás solo. Si tienes un problema, por favor no dudes en decírmelo.

—Lo sé, señor Choi, por eso me pone muy feliz que venga.

—Estaré siempre, eres como un hijo para mí, lo sabes.

Tenía programado someterse a varias inspecciones más antes de que los cambiaran a otra casa. También iban a hacerle ensayos clínicos, pruebas, entrevistas, y después de eso, la próxima semana, tenía que dejar a sus bebés con una niñera para pasar la noche en un hospital militar.

El señor Choi venía a verlo por las tardes y cuidaba a los niños mientras él seguía buscando noticias de su esposo y lo hacía con la completa esperanza de que sería momentáneo y que, cuando los niños crecieran, les daría un mundo en el que sería un poco más fácil vivir. Eso era algo que se habían prometido Taehyung y él en su noche de bodas, aunque se les fuera la vida en ello, iban a darles a sus hijos una vida segura y feliz.

—Si puedes vivir cómodamente, aunque sea un poco, haz lo posible.

Mientras pensaba en esas palabras del señor Choi y en su cara de preocupación, notó que Yuna, Mina y Min estaban asomándose detrás de la puerta.

—Hola, pequeños.

—Hola, mami.

El señor Choi entrecerró los ojos ante las tres personitas que estaban saludando, les sonrió cariñosamente eran prácticamente sus nietos y se habían ganado un enorme lugar en su corazón.

—Hola niños.

Mina notó las rosas que tenía Jungkook entre las manos, así que corrió en su dirección.

—¡Es un regalo de papá! Es como un ramo de novia.

Min y Yuna sonrieron diciendo que el ramo de rosas olía muy, muy rico.

—¡Cuando regrese mi papá, hagamos un picnic en el jardín!

Cuando regrese...

Las expectativas de los niños lo ponían aún más nervioso.

Cuando Taehyung regresara...

Le dolía muchísimo el corazón cuando se daba cuenta de que tal vez el deseo de sus niños nunca se haría realidad. ¿Será que algún día llegaría el momento en que ese dolor desapareciera y volviera a ver esa hermosa sonrisa cuadrada del amor de su vida?

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