13
(continuación del cap anterior, por ende, el mismo día)
Louis nunca dudo de su casta, era un alfa y estaba bien con eso, pero justo ahora mismo, deseaba ser un pequeño Omega para pegarse al cuerpo de Harry, mirar mal a todos y marcarlo con su aroma.
Voy a enloquecer- pensó.
Se encontraban en el centro comercial ya que Louis necesitaba más ropa, y otra más formal para ir a dar sus declaraciones y el día que sea el juicio.
El alfa con rizos ese día tenía una camiseta negra que se le pega especialmente en sus musculosos brazos.
Louis estaba encantado con esto, no lo diría pero soñaba con algún dia poder verlos y tocarlos a más detalle.
Pero claro que no era el único que opinaba esto.
Todo Omega por el que el alfa pasaba por al lado, era un Omega que soltaba feromonas y una mirada coqueta al ojiverde.
-¿Y qué opinas de esta, Lou?- preguntó el Omega.
Louis lo miró y asintió. Era una camisa blanca.
-¿Estás bien?- preguntó Harry agachándose hasta su oreja.
-Si, lo siento. Esa está bien, Erik. Creo que ya es ropa suficiente, puedo ir a probarme.
-Oh, si ¿Me esperan que quiero buscar una remera?
Louis asintió y acompañó a Harry.
-Estás tenso.- afirmó el alfa más alto.
-No, estoy bien. De verdad que estoy...- pasó otro Omega, uno rubio casi dorado, con ojos celestes y un físico precioso. -Bien.
Harry llegó a el perchero que quería de ropa, así que se puso a escarbar. El ojiazul a su lado también miraba para ayudarlo a elegir una, aunque en realidad no esté prestando atención y este sumido en sus pensamientos autodestructivos.
Harry encontró una estampa que pudo satisfacerlo y volvieron al carrito.
Los papás de Harry estaban teniendo otra pequeña discusión.
-...No, Alfa. El doctor te dijo que debías comer más sano.
-Omega, solo por hoy. -Pidio abrazando a su pareja por la cintura.
-¿De que hablan?
-Tu padre quiere ir a pedir hamburguesas.
-Y eso haremos. -Afirmó un Des muy decidido. Y hundido en el cuello de Erik.
-¿Ustedes quieren?
-Por mi está genial ¿Lou?
Louis miraba a su alrededor, muchos y muchas Omegas mirando a Harry, todos muy lindos, con pieles perfectas, hasta vió a un Omega con un top muy corto y pudo ver una cintura hermosa y perfecta.
Y una espalda sin cicatrices.
-¿Louis? ¿Todo bien?
El nombrado alzó su vista y vio ese verde que tanto le gustaba. Ese mismo verde lo estaba tomando por los hombros.
-Yo..., Si, lo siento ¿Que pasó?
-Estabamos hablado sobre la cena. De ir por hamburguesas.
-Louis, si no te sientes bien iremos a casa. -Dijo Des, ya separado de su Omega.
-Oh, no, no. Vayamos por hamburguesas. -intentó hacer su mejor sonrisa.
Harry fue el único que no la devolvió, solo miro al alfa más bajo enfrente suyo con el ceño fruncido.
Louis se estaba por probar la ropa. Algo en él no quería quitarse la ropa frente a ese espejo. Tenía mucha ropa, dos trajes, remeras deportivas, pantalones también deportivos, pantalones de jean, entre otras prendas.
De un momento para el otro, Harry entró al probador, que no era tan pequeño, pero tampoco tan grande.
-Están todos los probadores ocupados.- mintió.
-Bueno, está bien.- Respondió indiferente.
-¿Louis que ocurre? Estás así hace una hora. Dime, mi cielo, ¿Que pasa?
Ahí estaba ese Harry tan cariñoso, tan tierno y suave cuando estaba triste. Y estaba para él, no para esos Omegas lindos.
-¿Es por algo que pasó hoy? ¿Te ocurrió algo aquí?- Harry se acercó más.
-No, es que... Hay..., Otros... Olvidalo, es algo sin sentido, qué...-
Harry lo atrajo a sus brazos. Abrazándolo por la cintura, un poco agachado, y Louis apoyando sus manos en el pecho.
Ambos estaban mirándose profundamente, con un brillo del que no eran consientes.
-Un Omega me pidió mi número. - soltó Harry de repente.
Louis apartó las manos del pecho del alfa más alto e hizo el amague de separarse.
-Asi que es eso.- dió por hecho el rizado cuando vió la reacción del más bajo.
-Si, lo siento, no debería. No estoy enojado, es que..., Es que.
-¿Te estás comparando con esos Omegas?
Louis bajó la mirada, apenado.
-Si.
Harry en un movimiento rápido despegó un un brazo de la cintura del más bajo y la llevó hasta su mentón, alzandolo un poco, como para que volvieran a conectar miradas.
-Escuchame, Lou, esos Omegas no me importan no un poco. Al lado tuyo, a mis ojos, no tienes comparación. Eres la persona más fuerte y hermosa que conocí en toda mi vida. Eres la única persona por la que mi alfa se remueve, y eso es todo lo que quiero, contigo y con nadie más yo me siento en paz. -Louis soltó algunas lágrimas. -Te quiero en un futuro, a mi lado, y no es nadie más, porque eres tú, en Miles de formas, no otra persona, no esos Omegas.
El ojiverde terminó de romper el espacio entre ellos para unir ambas bocas. El beso, el cual Louis no tardó en responder pasando sus brazos atrás de la nuca del más alto, demostró más de lo que las palabras podrían expresar, demostró el cariño entre uno y otro.
Louis sin querer marcó a Harry con su olor por las emociones tan fuertes.
El beso duró poco, pero lo suficiente como para permitirle al alfa más bajo sentirse bien.
Pegaron sus frentes sin abrir los ojos. Con los corazones latiendo descontroladamente, y respiraciones rápidas.
-Styles me entero que le diste tu número a ese Omega...- pronunció Louis aún pegados.
Harry rió bajo.
-Le di el tuyo.
☃️☃️☃️
Louis se había comprado casi toda la ropa que había seleccionado, ya que según Harry, todo le quedaba de maravilla.
El papá del Alfa alto pagó todo, y Louis muy apenado le agradeció repetidas veces.
Sabía que la familia de Harry era una familia de dinero, con las dos casas que tenían y las dos camionetas de última generación, era un poco obvio. Pero de todas formas se avergonzó, se sentía algo tonto, tenía dieciocho años y no podía comprar su propia ropa.
Se subieron al auto, mientras que la pareja hablaba de como administrarían el día siguiente, cuando Louis tendría que ir a declarar en la causa de su padre.
Louis estuvo callado todo el viaje hasta la casa de los Styles, y ahora de el Tomlinson.
El Alfa de rizos notó esto, el castaño casi en todos los viajes se acurrucaba en uno de sus costados y buscaba el aroma tan adictivo de durazno y licor.
Especialmente ahora que estaban a puerta del invierno y hacia frío y el alfa por instinto buscaba calor.
A Harry se le ocurrió un pequeño plan para que louis debe de sentir cualquier desconfianza, ya sea por un Omega o por su mismo físico. Sabía se que seguro lo tendría que volver a hacer pero ya estaba feliz.
El viaje se hizo algo largo, pero finalmente llegaron.
Louis intentó agarrar las bolsas, pero el ojiverde fue más rápido.
-Harry, yo puedo llevarlas, tengo brazos.
-El doctor dijo que hagas el menor esfuerzo posible, aún no te quitan los puntos de las costillas.
El alfa bajó del auto y entró rápido a su casa, detrás de su mamá.
El ojiazul volteó los ojos y bajó del auto para bajar.
-¡Gemma, en veinte minutos saldremos por hamburguesas!- avisó de un grito el Omega.
Louis subió las escaleras para ponerse ropa más de su nueva ropa abrigada.
Cuando subió sintió el aroma de durazno y licor tan conocido y vio las bolsas en la cama.
El alfa castaño, algo extrañado, cerró la puerta detrás de él, e instantáneamente la puerta del baño privado se abrió y dejó ver a Harry sin remera.
Louis sin pensarlo bajó la mirada a los pectorales y se su rostro se pintó de rojo.
-Oh, lo siento no...- bajó la mirada al piso y fue hasta su cama para buscar la ropa abrigada.
Harry lo siguió y pegó su pecho a la espalda del contrario. Lo envolvió en sus brazos y susurró a su oído:
-No quiero que creas que voy a preferir a alguien más, que voy a mirar a alguien más, que voy a pensar en alguien que no seas tu.
Louis se dió vuelta y miró a Harry a los ojos. Un verde bosque y un azul cielo cielo se juntaron, y fueron creados para complementarse. Y eso quería que el un alfa alto pueda ver un alfa bajito.
El castaño hizo puntitas de pie y de apoco juntó sus bocas otrs vez. Se besaron de forma lenta, con movimientos pausados.
El rizado abrazo más fuerte la cintura del castaño, pegándose más.
-Harry, tenemos menos de veinte minutos.- avisó el Alfa castaño despegadose apenas centímetros.
-No necesito mucho tiempo, hoy no.
Harry los volvió a juntar, está vez llevando la mano hasta el cierre de la campera que tenía Louis, sin mover la mano, esperando que este el de una respuesta afirmativa.
Cómo respuesta, el ojiazul tomó la mano de el Alfa y bajo la cabecilla del cierre.
Harry la terminó de bajar y la deslizó de apoco por los hombros y brazos de Louis.
Tomó la remera que le quedaba y el que la tenía puesta asintió cuando el ojiverde dudó.
Despegaron sus bocas y Harry quitó también la remera.
Dejando ver un pecho con moretones, marcas de cinturón que aún no cicatrizaban, otras que se estaban cicatrizadas pero se distinguen en la piel por ser de un tono más claro que el instintivo acaramelado.
Vio los puntos que tenía, admiró cada una de las cicatrices. Louis, quien entendió un poco el pedido de el Alfa, se dió vuelta.
Harry pudo ver moretones más grandes que todavía se veían algo amarillentos, más cicatrices, muchas más, más grandes, incluso vio una lastimadura que se veía como se hubieran cosido y llevó al menos cinco puntos.
Harry se puso de rodillas enfrente de Louis.
Empezó a acariciar las marcas que se podía ver en su cadera, acercó su boca, y las besó. Hizo lo mismo con las que se encontraban más arriba.
Las miró de cerca, las acarició y besó.
No había lujuria, no había nada en el ambiente que podria demostrar exitación. Era Harry, tratando de demostrarle a Louis que estaba ahí para mostrarle que estaba más que dispuesto a sanar esas heridas que no había podido, para apoyarlo.
Cuando terminó con la espalda, volteó al Alfa, quien se sentía pequeño. Cuando lo dió vuelta vio un montón de lágrimas en sus ojos, algunas llegando hasta el cuello, otras callendo muy rápido como para recorrer las mejillas que tenían un camino de tantas veces que las mismas caían.
El Alfa con rizos tomo puso las manos en las mejillas de Louis y con los pulgares limpio lo que pudo, para dejar un corto beso en los labios y bajar a las cicatrices de el pecho.
Llegó a un moretón grande en uno de los costados, del lado contrario en el que estaban los puntos, y repartió pequeños besos con algunas caricias.
Bajó un poco más y siguió con los actos que había tenido antes, besando y acariciando cada parte que tenía alguna marca, por las que sabía que Louis más se acomplejaba, por las que más se comparó con el resto. No quería que el Alfa vea algo de malo en él, quería que vea que él lo iba a querer con o sin marcas, lo iba a amar con o sin cicatrices.
Cuando terminó se paró del todo y abrazo a Louis.
Estuvieron así algunos segundos, quizás minutos, en los que Louis se terminó de descargar y lloró de forma fuerte en el pecho de Harry, descargó todo lo que no había llorado por años, con sollozos fuertes y profundos que de escuchar uno te rompía el corazón.
Louis fue el primero en romper el abrazo, pero Harry el primero en hablar.
-No quiero a nadie más. No me importa que alguien más me mire si no son tu ojos los que lo hacen. Si quieres y puedes, marcarme con tu olor cuando estemos en público, y hasta aquí en casa, estoy bien con eso. Porque ni tus cicatrices me van a distanciar de ti. -Agarro la mano del castaño y la llevó hasta el centro de su pecho. -Porque te siento justo aquí, porque siento que eres ese alguien que iba a pasar mi eternidad buscando, porque mi Alfa te pide, te cuida, al igual que yo.
Louis soltó algunas lágrimas más y se lanzó a los labios de Harry.
Lo besó un poco, y ahí entendió que con ese Alfa no tenía que temer. Tenía inseguridades y muchas veces, casi siempre, comentarios auto destructivos. Pero ahí, en ese momento, se sintió otra vez amado, por ese Alfa que no hacia más que mostrarse de una forma única.
-Gracias, Alfa.- dijo contra su boca. -Gracias por todo, por ser de esta forma hno juzgarme. Te quiero, Alfa.
Harry se separó un segundo, mirando a los ojos de ese Alfa.
-¿Alfa?- Preguntó con una sonrisa.
El castaño abrió en grande sus ojos cuando se dió cuenta de lo que dijo.
-No, está bien. Me gusta. Empieza a decirlo más, Alfa. - volvió a juntar las bocas con sonrisas en las mismas.
Compartieron otra abrazo y se vistieron para salir de la habitación de las manos.
Des estaba yendo a avisarles para salir por lo que vió sus manos juntas.
La subir la mirada a ambos Alfas, les sonrió y dijo
-¡Si, están listos, amor!
Los dos alfas compartieron una sonrisa y bajaron las escaleras.
Eran jóvenes y recién empezaban, pero esto este era el principio de una historia que terminaría con un final, por fin, feliz.
---☃️☃️☃️---
HOLAAA.
dije que iba a subir dos días seguidos y se me pasó... Disculpan
⚠️LEER ANTES DE PASAR DE CAP⚠️
decidí que al final habrá un Alfa embarazado, voy a hacer como si fuera algo super difícil y etc, obvio más drama.
Y no pasará muy pronto, Louis aún necesita arreglar muchos problemas y temas personales para estar mentalmente estable para crías a un hijo o hija, además de los estudios de ambos, voy a hacer las cosas bien.
Voten, comenten y recomienden, especialmente recomienden que no falta tanto para que esta fic llegué a los 3k.
Nos leemos pronto <3
All the love. M.
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