Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Un humano salvaje cap 6 (Está vez una confesión salvaje)

An se marchó corriendo dejando a un Ryuuji completamente impactado por todo, más por el hecho de que Hitomi una de sus mejores amigas escucho las fuertes declaraciones de la neandertal.

-Hitomi... Tu- antes de que el pudiera decir algo ella lo interrumpió.

-¡Ryu-kun tienes que correr! ¡Ve tras ella!- exclamó.

-Pero lo ¿Acaso no escuchaste...-

-¡Tiene que ir! ¡Solo corre! ¡Debes alcanzarla!- ella comenzó a empujar a Ryuuji por el pasillo mientras pensaba con el cabello sobre el rostro.

-Asi es, si el no va tras ella... Esa sonrisa, la sonrisa de An-chan desaparecerá, las de ambos... El amor por el que Ryu-kun se ha estado esforzando se desmoronará, eso será después, hablar sobre nosotros puede ser después-

-Hitomi...- con su fuerza el humano se plantó firme.

-Ryu-kun, tienes que ir... Si no...- la castaña ya sin fuerza bajo la cabeza.

-Puedo correr por mí mismo- al levantar la cabeza vio una gran y resplandeciente sonrisa que seguido de esto el humano se echó a correr a una gran velocidad.

Y así fue, giro por el final del pasillo a la derecha dirigiéndose a la sala de maestros ya que gracias a su olfato lograba percibir por dónde ella paso.
Finalmente logro divisarla a lo lejos al notar esto ella intento correr lo más rápido que pudo.

-¡Sigue intentándolo! ¡Pero soy más rápido que tú!-

La pelirroja sin pensarlo comenzó a tirar muebles y ciertos objetos al suelo para intentar obstaculizar al muchacho pero eso fue imposible a pesar de sus fuertes heridas el seguía teniendo su gran destreza esquivando todos ellos y finalmente estando a punto de alcanzarla. Ella rápidamente giro a la derecha hacia las escaleras que daban a la primer planta de la academia, exitosamente saltó la primer tanda de escaleras cosa que Ryuuji logro también, An en un intento desesperado por confundirlo freno antes de bajar la segunda tanda de escaleras erróneamente enredando su pies torpemente perdió el equilibro y estaba a punto de caer y fue así.

Pero pasó, Rousuke Kitahara una vez más recibió una gran serie de golpes cayendo por las escaleras amortiguando por completo la caída de la muchacha, y para su mala suerte cayó justo a los pies de Rimu sensei, al igual que los de Terano y por último el peor de todos Guwano sensei.

An abrió levemente los ojos notando que el humano la estaba rodeando con sus brazos ella se levantó repentinamente poniéndose de rodillas Ryuuji había quedado desplomado.

Ella estaba sin palabras a simple vista el no se veía golpeado, pero sabía que bajo sus ropas debía tener golpes en los golpes, aunque a Ryuuji no parecía importarle, ya que se quedó viendo con una mueca y de cabeza a los tres profesores sobre todo a Guwano.

-Esto es todo me voy de vacaciones...- el enfermero prehistórico dio media vuelta y se marchó.

-¿Chale ahora sí cagué verdad?- pensó el humano, mientras que Rimu sensei corría a ver cómo estaba.

-Kitahara-kun... Esto ya es el colmo- una voz resonó por los pasillos, el muchacho comenzó a sudar, Rimu y los demás estudiantes estaban aterrados viendo a un enfurecido Terano sensei.

Pero fue desprevenido y lo tomo por sorpresa, de la nada An, ella se había puesto delante del enorme dinosaurio mostrando su lanza importandole poco que sea profesor.
Rimu se puso nerviosa ante la situación sin saber cómo responder a eso, pero de la nada An fue tomada de la mano, ella sorprendida sin saber que sucedía alzó la cabeza viendo que Ryuuji se la llevaba lejos de la escena.

-¡Oi! ¡Vuelvan aquí ahora mismo!- exclamó él sensei corriendo por los pasillos provocando que todo se mueva cual terremoto.

Ella en ningún momento quitó sus ojos de Ryuuji, algo la había hipnotizado una vez más, algo que ella creyó haber extinguido.

En cuestión de minutos los dos acabaron ocultándose en la habitación de Ryuuji, al entrar An sin decir nada se sentó en la cama del humano y el cayó rendido tras cerrar la puerta.

Ella estaba en silencio se mordía el labio inferior con angustia, y de pronto en el silencio de la habitación se empezó a oír una risa que ella obviamente distinguió al instante.

-Jajaja, ¡En serio eso fue realmente divertido, la cara del sensei era en verdad aterradora sentí que iba morir! ¡Estuvo realmente cerca!- exclamó casi sin aire de tanto reír.

An frunció los labios tras ver su expresión, seguido de esto se puso de pie de forma agresiva y gritó.

-¡¿Que rayos pasa contigo?! ¡¿Cuánto más?!-

-¿Cuánto más que?- indagó con serenidad.

-¡¿Cuántas cosas tengo que hacer para que me odies?! ¡En serio! ¡Te he causado tantos problemas! ¡Maldita sea estás herido por mí culpa! ¡¿Por qué aún sigues siendo tan amable conmigo?!- la voz, no solo eso, parecía que todo en ella se había quebrado.

Pero la respuesta fue simple y clara sin ningún rodeó el humano con costumbres salvajes ladeó su cabeza y se encogió de hombros, mostrando una mirada llena de dulzura dijo.

-Eso es porque... Te amo An-

Esas palabras esas tres simples palabras fueron suficientes para provocar que An caiga de rodillas totalmente rendida, bajo la cabeza sin saber que decir.

-No mientas...-

Ryuuji se aproximó hasta ella para oír mejor lo que decía.

-No miento... Oculte muchas cosas desde el inicio, arrastrando una mentira tras otra, pero con la única persona que he sido honesto es contigo An-

El no podía verla pero sus azules ojos estaban inundados en lágrimas.

-¡Es mentira! ¡Escuché la conversación con tu hermano! ¡Amas a...-

-¿Pero la escuchaste de principio a fin?- interrumpió mostrando una sería expresión.

-Soy a lo que ustedes los humanos llaman una segunda opción...-

-An si vuelves a decir eso te arrojaré por la ventana-

-¡¿Eh?!- soltó aterrada levantando la cabeza, llevándose la sorpresa de que Ryuuji estaba realmente cerca de ella.

-Nii-san dijo eso porque quería probarme, yo como te dije hace un tiempo, el día de tu confesión lo dije fuerte y claro, soy alguien realmente inestable, mís emociones explotan como un animal salvaje... Tu para mí jamás has sido una segunda opción, eres... Desde que te conocí alguien que me aceptó ciegamente, a pesar de ser un humano distinto, te enojabas y me gritabas se que apenas me soportabas, pero el día que te ví en el bosque frente a la fogata me di cuenta que eras como yo... Me invadió la curiosidad, tan intensamente- todo aquello lo dijo mientras posaba su mano sobre la de ella, recordando una escena de el cuidando de An mientras dormía sola en su saco de dormir hecho de pieles, sin que ella se de cuenta.

Seguidamente la ayudó a pararse.

-Sentí que no estaba solo... Me salvaste de mis tontas dudas de humano inexperto jeje... Pero cuando nos distanciamos y luego te volví a ver, quería abrazarte pero no podía, parecías que el solo hecho de verme te dolía y eso me destrozó, comencé a dudar si estaba bien amarte, y pasó... Puse una y mil razones para que no estuviéramos juntos, solo quería huir-

-Pero Ryuuji-ku...- el la interrumpió alzando la voz.

-¡Pero estoy harto! ¡Estoy harto de todas esas razones!- Ryuuji la tomo del brazo y la acercó a el, finalmente acarició su mejilla.

-Te amo An...-

Ella no dijo nada al parecer las palabras se habían desaparecido de su boca.

-A partir de ahora quiero ser honesto, de principio a fin... Te amo An-

-Ya, ya lo dijiste demasiadas veces- resaltó algo roja.

-Es por eso que...-

Ryuuji retrocedió unos pasos e inesperadamente el comenzó a quitarse la camiseta.

-¡Espera hey! ¿Que haces? ¡Ryuuji-kun! ¡Es demasiado pronto para eso, no estoy lista, además ni siquiera he dicho nad...-

An se quedó en silencio a pesar de haberlo visto así con anterioridad, nunca se adentro a ver con más detalle el cuerpo de Ryuuji solo se centro en su fornido cuerpo, pero aquellas marcas que definían lo que era, fueron ignoradas por ella y esta vez les prestó su total atención.

-An... Yo hay cosas que nunca te dije, y son la razón por la que... Siempre ponía excusas cuando se trataba de amar a alguien y esa es...-

Fue de un momento a otro las horas pasaron y pasaron, solo se veía a Ryuuji nuevamente sentado se había vuelto a colocar su camiseta y parecía estar hablando con An, era fácil de entender de que el contó todo lo que le ha pasado.

-Luego de eso simplemente vine a Seton intentando tener una mejor educación, y bueno... Al final sucedieron cosas realmente inesperadas- expresó entre risas.

Aquella mirada fue lo primero que vió el muchacho dando un salto al ver qué poco a poco los ojos de An se llenaban de lágrimas.

-¡Wah! ¡Oye! ¡¿Por que lloras ahora?!-

Los sollozos de An apenas lograban escucharse.

-¡Porque cada vez que cuento esto todos lloran! ¡La historia de amor Terano sensei es mas triste! Creo...- pensó realmente nervioso.

-N-No lo sabía... Yo en verdad...- ella estaba a punto de disculparse pero Ryuuji alzó la voz y la tomo de los hombros.

-¡No, no digas lo que todos dicen!... Yo nunca te lo dije porque me importas más que a nada en este mundo, no quería verte así como ahora, no quería herirte con mis palabras, no hay nada que lamentar, y te pido perdón, por todo...- parecía que estaba a punto, su voz parecía estar punto de quebrarse.

-Yo... ¡Yo también te amo!-

Ambos parecían unos bebés llorones, An solo soltó un sonido y se arrojó a los brazos de Ryuuji solamente escuchándose a ambos caer al suelo.

Hitomi lo dijo, ya nada de eso importaba no importa cuántas veces lo cuente, recuerde o lamente, antes pensé que ese dolor me seguiría por siempre, pero ellos aparecieron y ella apareció y pensaba "¿Realmente está bien? ¿Está bien que te olvidé? Nee-chan, ¿Finalmente puedo hacer esto solo?...

Si, está bien...

Tras eso se vió a Ryuuji soltar la mano de quién una vez fue como su madre y toma la mano de An estos dos se fueron caminando hacía sus amigos del club.

No te olvidaré, ni a ti, ni a Pantia... Pero es hora de dejar todo eso atrás...

Finalmente lo que se vió en aquella noche fue la bella imagen de Ryuuji y An muy cerca.

Demasiado...

Luego de lo sucedido unos días pasaron sin que Ryuuji viera a sus compañeros del club.
El se recuperó de sus heridas y finalmente regresó al club, tenía su mano en la puerta, pensando en como ver a la cara Hitomi en el momento que vaya a saludarla. Soltó un suspiro y cuando estaba a punto de abrir.

-Oh, Ryu ¿Que cuentas?-

El muchacho dio un salto que casi se clava al techo.

-¡Ji-Ji-Jin, me asustaste!-

-Lo siento, hey veo que ya te recuperaste- comentó contento.

-Ah si, bueno las heridas fueron graves pero definitivamente estoy mejor-

Seguido de ese comentario por parte de Ryuuji, Jin abrió la puerta del club cambiando a su humor irritante anti animales, en cambio el humano salvaje entro muerto de los nervios pero por suerte ciertas personas rompieron el hielo que se estaba por formar.

-¡Ryuuji!/¡Senpai!- exclamaron todas al mismo tiempo, esas eran Ranka, Yukari, Mei, Chii, Kurumi y la lenta Miyubi.

-¡Que bueno que estás bien!- aclamó la koala aferrada a su brazo como si fuera una rama de un árbol.

-¡Te extrañe tanto te lameré todo el día!- Ranka estaba trepada sobre el lamiendo su mejilla.

Mei abrazada a su pierna resfregaba su mejilla en la rodilla de este diciendo.

-¡Pensé que ibas a morir!-

-¡Wuaaa! ¡Senpai, mí senpai!- Chii era una cascada de lágrimas hasta el punto de empapar la camisa de este, debido a que lo abrazó enterrando su cara en el pecho de el.

-Tonto, idiota... Nyo me asustes así...- murmuró Kurumi con los ojos llenos de lagrimas rehusada a abrazarlo frente a todas.

Y por último Miyubi solo le sonreía aliviada simplemente parada frente a el, que al ver esto extendió su mano y acarició cariñosamente el rostro de la perezosa, quien pareció disfrutar cada segundo.

-Lamento haberlas preocupado ¡Bueno, a todos!- dijo centrando su vista en Jin y Hitomi.

De pronto todo sintieron una presión en el ambiente, un aura oscura aparecía detrás de Ryuuji, todos dirigieron su visión hasta la puerta.

-Oh, An... Está bien, tranquila- aclaró el humano al ver qué parecía estar conteniendo sus celos de ver a todas abrazando a su macho.

-¡An-chan! ¿Viniste a visitarnos?-

-Este...-

Ella de pronto se puso algo roja al ver qué el muchacho se acercaba a ella con Ranka en su espalda y posaba su mano sobre la cabeza de la neandertal.

-De hecho no se ha despegado de mí desde ya hace unos días- habló dando a entender que ella ni siquiera había vuelto a su escuela.

-Espera An-chan ¿Has faltado a clases? ¡No lo más importante! ¡¿Los dos están juntos de nuevo?!- exclamó las castaña emocionada, recibiendo la confirmación de Ryuuji con solo asentir y An ya había puesto roja hasta las manos.

Todas gritaron emocionadas.

-¡Que bueno An-chan! ¡Realmente estaba preocupada!-

Hitomi saltó a abrazar a la pelirroja, está misma volteó ver a Ryuuji con inseguridad, pero este solo le regaló una sonrisa y finalmente An rodeo a Hitomi con sus brazos y enterró su cara en el hombro de ella con mucho cariño, pensando en como pudo casi odiar a su amiga humana.

Y así las horas pasaron todos conversaron y rieron, Kurumi se había quedado dormida en el regazo de Ryuuji y también tras haberse despedido de An, ya que tenía que regresar, su profesora llamó a la academia Seton por haberse atrasado con las clases.

Y finalmente entre tanto rodeo, Hitomi y Ryuuji se quedaron ordenando y limpiando. El humano estaba guardando algunas especies mientras tanto se le notaba nervioso, el quería hablar con Hitomi sobre lo sucedido.

-¡Hitomi!-

-¿Eh? ¡¿Si?!- ella se volteo casi al instante parecía igual de nerviosa.

El muchacho caminó hasta ella e hizo una reverencia.

-¡Lo siento!-

-¡¿Eh?!-

-¡Por mí culpa casi hago que tu relación con An se haga puré de guayaba!- exclamó sin siquiera poder verla a la cara.

-¡Ryu-kun no hagas eso levanta la cabeza!- contestaba alterada mientras pensaba.

-¿Guayaba?-

El levanto lentamente la cabeza y la observó.

-Si, en un inicio estaba realmente asustada no sabría que pasaría... Pero luego estaba algo confusa-

Ryuuji la miró sorprendido y tal como dijo ella también, confuso.

-Pues, creo que también me sentí... Atraída a ti- expresó algo roja.

-¡¿Eh?!-

El humano estaba sin palabras, rápidamente Hitomi intento calmarlo para poder explicarse bien.

-¡Espera! ¡Lo que trato de decir es!... Que si, en cierto momento, empecé a dudar de como me sentía, nunca había visto otro chico humano a parte de Jin-kun, me tomó por sorpresa, y mis sentimientos fueron un completo desastre, tu eres muy distinto a el, amable, cálido y atractivo- comentó con una tierna sonrisa, Ryuuji se pudo algo rojo mientras se rascaba la cabeza.

-¡Pero también soy aterrador!- exclamó entre risas.

-Si exacto jeje, aún así, tu mismo me hiciste darme cuenta de que cuánto me gusta Jin-kun, a pesar de que te sentías así por mí tu seguiste ayudándome, me regañaste cientos de veces por dudar de mís sentimientos por el... Eso te hace aún mas maravilloso, ¡Pero ya en serio eso lo deje atrás, no quiero que hayan más problemas!-

El muchacho solo le sonrió aliviado.

-En serio yo... En verdad amo a Jin-kun-

-¡¡Por fin lo dijo!!- grito mentalmente Ryuuji viendose al muchacho en modo chibi saltando de alegría en su imaginación.

-¡Repitelo!- dijo determinado.

-¡¿Que?!-

-¡Que lo repitas! ¡¿Sabes cuánto he esperado para oírte decir eso?! ¡Gritalo a los cuatro vientot que escuchen hasta el Amazonas!- exclamó alzando el puño.
Hitomi se puso aún mas roja y ya no le salían las palabras, aún con su tímida voz lo gritó.

-¡Amo Jin-kun!-

Mientras tanto fuera del salón...

-¡Santa mierda!- exclamó mentalmente.

Continuará...

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro