En esta vida, aprendimos que nunca es siempre y que muchas veces un gran todo es un simple nada. Que nadie valora la vida y solo te aman si los amas a ellos; si te caes no te levantan, eso te toca a ti, ser fuerte para volver a ponerte en pie y seguir tu camino. Están las personas cobardes que aman hacer daño y jugar con las personas, que van por ahí destrozando muros de corazones rotos y rompiendo otros. Has convivido con buitres toda tu vida, que revolotean a tu alrededor queriendo sacarte los ojos por dinero; amistades falsas, amores arreglados, una vida ya escrita. Y luego en la última esperanza de este mundo, estamos tú y yo, uno tan diferente del otro que casi esa diferencia nos hace iguales. No pierdo la fe en la humanidad, porque se que te puedo amar ...y te amo, sé que en tu mirada seductora y dulce estaré a salvo de toda maldad ,salvo la de darme sustos cuando estoy desprevenido para alegrarnos el día; tus brazos no contienen veneno, asfixian un poco, pero es sólo un dulce abrazo de despedida.

Mi princesita, nunca nos vamos a separar, aunque estemos a un millon de años luz de distancia.

Te pertenezco.