El estruendo de un vidrio rompiéndose nos hace separarnos, giramos para entrar a la casa e investigar de donde viene el ruido pero Alice nos observa fijamente desde la puerta, su mirada parece perdida, de hecho se ve más blanca de lo habitual, sus ojos cafés parecen sin vida y solo me observa; en ese momento parece odiarme, va hacia mí y quita a Izan de su camino, él incluso cae al suelo.

-Tú debes de alejarte de Izan
-¿Qué? -pregunto sorprendida, si ella siempre me ha pedido que yo debo de estar con él. -No entiendo ¿por qué cambiaste de parecer?
-No te quiero cerca de él... él es mío...
-¿Cómo?

Observo a Izan que está tratando de incorporarse mientras que Adam viene corriendo de adentro de la casa.

-¡Alice! -pero ella parece no reaccionar ante todo lo que Adam le está diciendo.

En estos momentos no entiendo nada de lo que está pasando, Izan va directo a Alice mientras ella está frente a mí como si me estuviera analizando, puedo sentir incluso escalofríos, podría jurar que esta no es Alice mi mejor amiga, sonríe maquiavélicamente.

Las llantas derrapando de un automóvil detrás de nosotros, incluso puedo sentir el olor a caucho quemado, pero no volteo.

-Faren -escucho que grita alguien detrás de mí y reconozco su voz, mi perfecto novio, Alice parece desvanecerse mientras que Adam e Izan corren hacia nosotros, la alcanzo a tomar, pero debo confesar que no soy muy fuerte así que termino cayendo junto a ella que de pronto da una arcada y comienza a vomitar aún inconsciente.

Trato de analizar todo lo que acaba de suceder, pero no sé, no entiendo, no...

-¿Deberíamos de hablar a una ambulancia? -pregunta Adam a Izan.
-No sé.
-¿A qué están jugando ustedes tres? -pregunto un poco nerviosa.
-Ella, ella no era Alice -responde Izan.

Matthew corre hasta nosotros, se lleva sus manos a su cabeza, en la nota le había dicho que tenía que salir porque Alice no estaba bien, y justo, en ese momento, era evidente que... no debo jugar con lo que digo.

-Pide una ambulancia Adam, Faren, ¿Tienes el número de Austin o de Bessie?
-Si... ¿Por?
-Esto se está saliendo de mis manos -responde -necesito hablar con ellos.
-¡Están en mi celular! -saco del bolsillo de mi pantalón el celular y se lo paso; Matthew analiza las manos de Izan, ve el costoso celular "que me ha prestado"; se hinca junto a mí.
-¿Ese es el celular que te prestó? -susurra
-No se lo prestó -responde Adam, es un regalo de él para ella. -la ambulancia viene para acá.
-Me dijiste que te lo había prestado. -dice molesto.
-No sé Matthew si entiendes que Alice no está bien, no me voy a poner a discutir contigo.

Matthew se levanta molesto, me observa, ve toda la situación y luego va directo a Izan, mientras que de pronto solo veo que la cara de Izan voltea hacia un lado y el puño de Matthew solo es sacudido.

-Le pegó -dice Adam sorprendido.
-Carajo.
-No tienes porque estar dándole regalos caros a mi novia, no tienes porque llevarla hasta su casa, no te quiero cerca de ella.
-Genio, no sé si te des cuenta que ahora no estamos para discutir, y yo puedo darle lo que se me antoja, no eres su dueño, no eres el único que puede consentirla.
-¡Sólo quieres acostarte con ella!
-Dime que no acabo de escuchar eso -responde Izan molesto
-¡Solo quieres sexo con ella! -dice ahora más furioso Matthew -yo soy el único hombre en la vida de Fa... -no termina de decir mi nombre cuando Izan está encima de él golpeándolo.

Solo veo el puño del ojiverde golpear la cara de mi novio, Matthew toma a Izan del cuello para poder darle un cabezaso logra hacerlo pero es evidente que Izan tiene mayor práctica en las peleas, es más fuerte y parece saber defenderse

-Faren no es un objeto, Faren es mucho más que eso... - dice mientras sigue golpeándolo
-Izan no... -grito pero él parece no escucharme. -haz algo Adam pido suplicante

Adam va corriendo hacia ellos, mientras logra quitar a Izan que aún sigue aventando golpes al viento; pero es mucho más fuerte que el ojiazul y logra zafarse de su agarre para ir de nuevo a golpear a Matthew, ok, creo que alguien va a terminar con muchos moretones en su rostro, quiero levantarme, pero no puedo.

El sonido de una ambulancia cada vez más fuerte es lo que logra que Izan regrese a sus sentidos, veo que le escupe en la cara a Matthew, toma del suelo mi celular y vuelve a marcar un teléfono, veo a mi novio totalmente molesto, tirado en el piso, Alice sigue recostada en mis manos.

Los paramédicos bajan corriendo, no saben a donde dirigirse si con el chico que está limpiando la sangre de su rostro y está todo malherido o hacia mí.

-¡Por acá! -dice Adam señalándome; ellos me alejan de donde está Alice. Me quedo helada, sin saber qué hacer, que decir que pensar siquiera, Matthew se acerca a mí.
-Aléjate de mí -respondo
-¿Te compraron Faren?
-¿Qué?
-¿Le estás dando la razón a ellos porque te dan regalos caros?
-¿Perdón cómo?
-Que si le...
-Entendí Matthew... creo que se te hace tarde para regresar a tu casa, porque lo que concierne en mí, estoy muy molesta, tú estás muy enojado, y creo que lo que digamos en estos momentos solo va a herir a la otra persona, si aún tienes una pizca de respeto por mí toma tus cosas y vete. -él parece no haber entendido lo que acabo de decir y quiere acercarse nuevamente a mí.
-¿No entendiste lo que te acaba de decir? ¿O prefieres que te lleve hasta tu carro a golpes? Que con mucho gusto lo hago. -dice Izan.
-Vamos a hablar Faren... -Matthew parece amenazarme mientras sube a su auto para arrancar e irse haciendo todo un espectáculo.

En estos momentos me siento, muy confundida, ¡no entiendo muchas cosas! Izan igual quiere acercarse a mí, pero lo alejo de la misma manera.

-¿Por qué Alice dijo que eras suyo?
-No era Alice Faren...
-No soy tonta Izan...
-Faren, te quiero explicar, pero... necesito yo también tener algunas respuestas. ¿Puedes confiar en mí? -niego
-no sé.

Los paramédicos logran regresar a Alice en si, ella solo despierta totalmente confundida, dice entre balbuceos que ni siquiera recuerda que ella haya bajado y nos haya encontrado; le piden a Adam que solo la tenga en observación, que no ha pasado a mayores, así que la suben a su recamara. Izan y yo nos quedamos afuera.

-¿Vienes? -pregunta dándome la mano, pero yo solo lo rodeo para entrar a la casa.
En una noche han pasado muchas cosas, y sigo sin entender que es lo que pasa realmente, comienzo a asustarme, no soy del tipo de chica que crea que estas cosas sucedan, volteo e Izan viene con su cara seria detrás de mí, sumergido en sus pensamientos.

Tengo muchas dudas, por ejemplo, ¿Quién es la chica de la fotografía que él arrugó? Porque hizo que mi cuarto y él suyo quedaran casi destruidos, no soy tonta para entender que eso lo hizo ella... lo sé... ¿Pero quién es? La he visto con él en la universidad, así que... el día que la encuentre definitivamente me va a conocer, quiero saber porque Alice actuó de esa manera... ¿a que jueguito están jugando estos tres? Pero no tengo el valor de enfrentarlo en estos momentos porque sé que mi corazón se va a romper, me dirijo hacia mi recamara, todo parece estar "normal" como lo dejamos por la tarde Matthew y yo...

Matthew... no sé qué voy a hacer con él, en realidad me dolió lo que dijo, lo que insinuo sobre todo, pero molestos solemos ser hirientes, así que esperaré a que esta situación solo se enfríe un poco...

Decido ir al baño para cambiarme de ropa y ponerme algo más cómodo para dormir, pero en el primer paso que doy siento una punzada en mi pie descalzo y prendo la luz, no dejé de esta manera el baño en la tarde, el espejo está roto, todos mis perfumes, y todos mis cosméticos.

Siento que alguien está detrás de mí.

-Demonios, demonios... -dice Izan al notar que tengo un vidrio clavado en mi planta del pie. Pero a mi lo que me tiene sorprendida es lo que está escrito en la pared del baño.

-"Perra aléjate de mi novio" -lo leo en susurros, Izan levanta la cabeza para encontrarse con la frase. -¿Qué significa eso Izan? -digo con voz temblorosa.
-¡Carajo! -dice molesto e incluso parece estar asustado, Izan me toma en brazos.
-¿Qué es eso Izan dime? -quiero bajarme de sus brazos pero me aprieta tan fuerte que no logro soltarme de su agarre.
-Vamos por respuestas, y tú no te saldrás con la tuya Vera... ¡No lo harás!

Este hombre está perdiendo la cordura... Vera es su exnovia muerta...

-Izan... Vera es tu exnovia muerta ¿No?