Habían pasado una semana desde que Sarah volvió a su hogar junto a su esposo.

Las cosas entre ellos no habían mejorado ni tampoco habían empeorado. Ambos sabían el rol que cumplían cada uno allí. Ser la pareja perfecta a la vista de sus seguidores y eso es lo que hicieron. 

Brendon aun no sabia nada del embarazo de Sarah y Zack permanecía distante de ella por querer cumplir con su trabajo. Aunque en el fondo la amaba no podía dejar sospechas sobre Brendon, a quien tenia que cuidar las 24hs.

Mientras tanto, el señor Urie se mantenía en su casa, en un pequeño cuarto para ensayar y componer nueva música. él estaba enfocado en su próximo Álbum a lo que tenia a la expectativa a sus fanáticos. Quería volver a sentir eso de componer con sus viejos compañeros. a lo que llamo a sus viejos amigos para que lo ayuden.

-narra Brendon-

-Llamada por celular-

-Hola, ¿necesito tu ayuda? ¿no hay problema en reunirnos en mi casa esta noche? -hable con un tono serio-

-hola Amigo! claro, no hay problema. Hace mucho que no toco la batería pero cuenta conmigo!

-Gracias Spencer! eres el mejor baterista del mundo para mi y mi mejor amigo! -asentí alegremente-

-no creo, Dan Pawlovich es mejor que yo jeje por algo es mi reemplazo. 

-jajajja que dices, Dan no te llega ni a los talones... Bueno, a las 20hs en mi casa. Te espero. -le digo a Spencer-

-ok, nos vemos!

-Fin de la llamada-

Termino de hablar por celular con Spencer e inmediatamente llamo a la persona que más adoro: Ryan Ross.

-llamada por celular-

-Hola mi ángel, ¿hoy podrás venir a mi casa, te necesito para un proyecto? -le dije a Ryan-

-Si, hoy estoy libre. Pero no creo que a tu esposa se alegre de verme.

-No te preocupes por ella. Cuando este proyecto termine le encantará contar los billetes. -le dije sarcásticamente-

-quisiera creer que si. ¿a que hora entonces? 

-a las 20hs en mi casa. también viene Spencer así nos ayuda. -le conteste-

-ok, espero que no haya problemas. ya sabes que no me gustan las peleas ni discusiones.

-no te preocupes mi putito lindo jeje esa bruja no te dirá nada y si te dice algo yo la pondré en el molde. -le dije riéndome-

-bueno, te amo mi brenny-bear!

-yo también. -le dije en voz baja-

-fin de la llamada-

No pude decirle a mi Ryan que lo amaba en ese momento ya que mi esposa se encontraba a unos metros mio. Pero él sabe lo que yo siento.

Estaba muy emocionado de hacer este nuevo proyecto musical junto a mi mejor amigo y mi amor imposible. Pero algo me tenia en la duda: Sarah.

-Brendon voy a salir de compras, estas ropas me quedan muy ajustadas!. -dice exaltada Sarah-

-ok, anda. pero he notado que estas comiendo bastante esta semana. No quiero una esposa gorda como un elefante. Así que mejor, en la semana iras a una nutricionista y harás una dieta. -le digo seriamente tocando mi barbilla-

-¿ahora te atreves a decirme Gorda? -arremete- entonces, comete tú este helado! -me dice enojada-

 Sarah me revolea una taza grande de helado sobre mi a la que llego a esquivar. Zack se percata de la acción de Sarah y la acompaña para llevarla en auto. ¿a esta perra no se que le pasa? le digo algo y se enoja. Y por cierto su panza a crecido un poco más de lo normal. A veces se la pasa viendo la televisión comiendo comidas chatarras. En unos pocos meses, si sigue así, voy a ser el esposo perfecto de un mamut. ¿Que pensarán mis fans? voy a ser el melareir de todo el mundo.

-Fuck! -gruñí entre dientes- seguro lo hace a propósito para arruinar mi carrera, justo ahora que quiero hacer este nuevo proyecto. -dije en voz baja- 

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-narra Sarah-

Habían pasado unas horas junto a Zack en el shopping. Sé que tendría que estar mi esposo a mi lado pero la compañía de Zack me alegraba. Me sentía nostálgica, tenia ganas de abrazarlo e ir juntos de la mano, sin que nada ni nadie me importe. Pero siempre recuerdo que soy la esposa de ese imbécil y otra no me queda que fingir serlo.

Por razones de seguridad, preferí mantener en secreto mi embarazo a Brendon y lo más importante, a Zack. Ya que él es el padre de este bebé que espero. Pero si le digo la verdad, no sé en qué acabará todo esto ni sé que será de hacer Brendon.

volvíamos en el auto con Zack, charlábamos de cosas sin importancia. Hasta que Zack saca el tema que estábamos evitando desde hace tiempo.

-muy bellas las ropas que te compraste. -me dice mirándome por el retrovisor del auto-

-si, la verdad que si. -le dije haciendo una pequeña sonrisa-

-pero cuenta la persona quien las usa. A ti te queda perfecta! tienes una belleza muy natural, eres hermosa de por si. -me dice alegremente-

-ehm, ehm, gracias Zack. tú también eres bello y no sólo por fuera. Eres una increíble persona. -asentí agachando la cabeza, mi cara estaba totalmente roja de vergüenza-

-ya llegamos a casa. -me dice Zack frenando el auto- 

-Si, gracias por salir conmigo. aunque no fue como lo desee pero la pase genial contigo. -le dije haciendo una sonrisa-

-oye Sarah! -me dice agachando su cabeza, mirando sus pies mientras sus manos aun estaban en el manubrio del auto donde viajábamos- Te amo!

-¿que? -le dije sorprendida- Eso es imposible!

-¿que te ame es imposible? te amo desde que te conocí, aunque no me creas. Y te amaré siempre seas la señoras de Urie o la señora Hall. no importa lo que pase, te protegeré siempre. -me dice seriamente-

-lo siento, pero aunque yo sienta lo mismo estoy atada por siempre. Por eso, lo nuestro es y será imposible.-le conteste bajándome de aquel auto, tal confesión me puso nostálgica a tal punto de querer llorar-

Mientras caminaba hacia mi casa me contenía mentalmente para que Brendon no pensará que Zack me hizo algo malo. Entre a mi casa y abrí la puerta.

-narra Ryan-

Estábamos en el living de la casa de Brendon, tomábamos algo de cerveza mientras él nos explicaba lo de su nuevo proyecto. Quería retomar los viejos momentos en los cuales, para la banda fueron los mejores de nuestras vidas. Íbamos a empezar a componer desde cero ya que nadie fue con algo previsto ni hecho. A la cual, había buena paga. Obvio, no seria gratis participar de esto.

de pronto se abre la puerta y se asoma la cara de Sarah, ella parecía sorprendida y su cara de notaba lo malhumorada que estaba al verme de reojo.

-¿que hace él aquí? -dice Sarah molesta apuntándome con su dedo indice-

-eso a ti no te importa. -le contesta Brendon con un tono serio- así que, si no te molesta. puedes irte al cuarto hasta que terminemos nuestra reunión.

-¿Es broma o qué? no quiero a ese sujeto en mi casa, que se vaya!. -alza la voz Sarah-

-Brendon no podemos hacer este proyecto así. Otro día lo continuamos en mi casa mejor. -se entromete Spencer tomándome del brazo-

-si, mejor nos vamos. -le dije a Brendon en voz baja- lo siento por molestar. -le dije fijando mi mirada en Sarah-

-No! -exclama Brendon- Ustedes no tienen por que irse! son mis amigos y vamos a hacer este proyecto juntos. -dice enojado jalando de mi brazo y el de Spencer-

-no tienes derecho en esta casa, solo porque estemos casados y menos voy a permitir que mi esposo este con su amante bajo mi mismo techo! estoy harta de que me tomes de estúpida Brendon!! -grita Sarah muy furiosa tomando del brazo a Brendon-

-cállate Estúpida, ¿tú que sabes? te piensas que soy el único aquí que le es infiel a su esposa y que hay de ti... por años haz estado engañándome con ese hijo de puta de Jeremy! -alzo la voz Brendon exaltándose-

-ya basta Brendon, nosotros nos vamos! -dice Spencer un poco serio-

 En un momento, entra Zack a la casa y se sorprende de escuchar tantos gritos y noto que que Sarah se descompone. Ella se desmaya y Zack la toma por detrás y la recuesta en el suelo. Brendon parecía nervioso, toma una caja de cigarrillos y sale de la casa, Spencer llamaba a una ambulancia mientras que yo permanecía al lado de Sarah y Zack. Cuando Spencer se me acerca preocupado yo salgo afuera a buscar a Brendon. Se escuchaba la ambulancia llegar desde lejos hacia la casa de los Urie.

-Brendon tu esposa te necesita. ya vino el medico. -le dije seriamente tocándolo por el hombro-

-fuck! nada me sale bien. -dice Brendon gruñendo cayéndole unas lagrimas-

-te entiendo. Pero lo más importante es la salud de Sarah por ahora. -asentí tristemente-

-tú siempre tan atento conmigo. Ojala nunca me faltes Ryan, si no, no sé que haría. -me dijo Brendon con ojos llorosos-

Volvimos adentro. allí se encontraban Spencer y Zack junto a Sarah, que permanecía en un sofá. Estaba sentada mirando sus piernas. su cara lucia un tanto preocupada. Brendon no tubo remedio que conversar con el medico sobre el estado de salud de su esposa.

-Bueno doctor, ¿que tiene mi esposa? -le dice Brendon al medico un poco preocupado-

-Su esposa se encuentra bien por ahora, sólo trátela mejor. una pelea así podía afectar a su embarazo. -dice el medico con un tono serio-

-¿Que? ¿mi esposa esta embarazada? -alza la voz Brendon-

-si, esta de 4 meses. no la haga renegar ya que podría afectarle al embarazo que lleva consigo y tendremos que hacerle un aborto espontaneo si su salud corriera peligro. -dice el medico mirando a Brendon seriamente-

-no puede ser verdad! -asentí sorprendidamente-

Yo no podía creerlo y todos los que estaban alrededor tampoco. Todos quedamos sorprendidos y shockeados. Parecía una película. Sí, una película de muy mal gusto.

Brendon me había jurado que con su esposa no pasaba nada y ahora resulta que tendrán un hijo. Mi sentí feliz por él y muy triste. Lo amo mucho a Brendon y nadie mejor que yo, lo conoce y entiende. Sé que prometí amarlo por siempre pero no puedo amarlo mientras él espera un hijo con su esposa. ya es mucho. 

-continuará-