- Bajaré las maletas, ustedes pueden ir entrando al aeropuerto - Jordan habla mientras que bajamos del auto con Tayler y Amanda.

El día de ayer, Lunes, paso super rápido, pase toda la tarde con mis amigos, y nos dormimos muy tarde... pero esa parte Jordan no la sabe, y es mejor que así siga.

Como decía, hoy martes es momento de que ambos regresen a sus casa, así que estamos en el aeropuerto esperando una llamada para que se vallan. Que mierda.

- No puedo creer que hayan pasado tan rápido estos días. - Amanda confiesa, y parece ser que leyó mi mente.

- Así es... - Nos sentamos en unas sillas, no tan alejados de la entrada para que Jordan pueda vernos. - Estoy muerta de sueño - Cambio de tema.

- Yo también- Los dos hablan a la vez.

Reímos y me recuesto en las piernas de Tayler.

- Eso pasa cuando duermes menos de dos horas - Tayler habla riendo.

- Y agradezco eternamente que exista algo para tapar ojeras - Sonrío inocente. Los tres reímos.

Mientras esperábamos a Jordan tomamos un café, para, como mínimo, no dormirnos mientras esperamos.

Jordan llega unos cuantos minutos después, y con el llega la llamada para subir al avión.

- Ya es hora... - Amanda habla apenada.

La miro triste.

- Si... - Me le tiro en sima para abrazarla. - Nos veremos pronto. Trata de no repetir el año, entonces tus padres dejan que vengas en verano - Ruego, y es que últimamente le importa muy poco el colegio.

- Haré todo lo que este en mis manos - Bromea - Te extrañare amiga, tu también compórtate. Y pasame los números de esos chicos, están para chuparse los dedos. - Se muerde el labio. Tayler ve el gesto que hace y la mira mal.

Río ante las ocurrencias de mi amiga. Siempre fue así, cuando de chicos se trata.

- Ya veré luego. - Me separo por completo de ella y Tayler se acerca.

Me abraza rodeándolo por completo con sus brazos, paso los míos por su cintura abrazándolo fuertemente.

- Cuídate. Y no te tires a ningún chico. - No aconseja, Ordena.

- Prometo que me cuidare, si te sirve. - Me encojo de hombros y me pellizca un brazo. - Auch. - Se lo devuelvo más fuerte.

- Ey, duele - Se queja como un niñito. - Esta bien, esta bien, ya. Te quiero, nos vemos pronto hermosa.

- Si, nos vemos pronto mi rey - Bromeo, ya que mientras esperábamos, al lado nuestro una chica estaba echándole el ojo, así que me asegure de hablar lo suficientemente fuerte.

Tayler me mira mal, muy mal. Cierra un poco los ojos a punto de degollarme.

- Pues si te pone feliz, detrás de ti había un lindo muchacho mirándote. Pero tu tranquila, por señas ya le dije que ni se te acerque - Besa mi mejilla burlon.

- Eres malo. - Me cruzo de brazos. Sonríe y se encoje de hombros.

Los dos toman sus maletas, y saludan a Jordan, Tayler con un apretón de manos y Amanda con un beso en la mejilla.

- Sabes, me caíste mejor de lo que esperaba Jordan. - Asiente extrañada. Jordan libera una gran risotada. - Adiós chicos - Se despide de Jordan y de mi.

Comienzan a caminar para subir al avión. Jordan pasa sus brazos por frente a mi cuello, dejando sus codos en mis hombros, se para detrás de mi medio abrazándome.

- Son buenos chicos - Habla mientras vemos el avión despegar.

Asiento y apoyo mi cabeza en su pecho. Comenzamos a caminar para volver al auto, entramos y me coloco el cinturón. Me mira a través del retrovisor.

- A ver si así aprendes a dormir por la noche - Dice cuando me ve bostezar. Lo miro incrédula. - No soy tonto cariño. - Sonrie superior.

Tiro mi cabeza hacia atrás soltando un bufido, el ríe.

- Tienes suerte de que Caleb esta igual que tu, de lo contrario yo no diría nada, sería el quien te regañara. Sabes como es. - Habla mientras conduce.

Es cierto, Caleb odia cuando Jeison y yo no dormimos "lo necesario", como el lo llama. En especial durante la semana. Hay veces que se pone como loco. Y con respecto a que "esta igual", es porque anoche tuvo una laarga reunión de trabajo, y volvió muy tarde. Cuando lo vi esta mañana parecía un zombie.

Minutos después, mientras charlábamos temas al azar, llegamos a la casa. Bajamos y nos sorprendió el silencio que había. Jordan avisa que Caleb está dormido, y que el estará en la oficina.

Subo a la habitación de Jeison cuando  Jordan me pide avisarle que ya llegamos.

Toco su puerta, y al no escuchar nada, entró y lo veo dormido. Sonrío y corro sin hacer ruido hasta su cama, para tirarme sobre el. Se queja, se queja mucho.

- Quien es, que quiere, porque no me dejan dormir en paz y estas a punto de matarme, muevete- Exagera.

- ¿Me estas llamando gorda? - Apoyo mi cabeza en su hombro, haciendo pequeñas trenzas en su cabello.

- Si - Habla enojado. Tiro el cabello más cercano a su nuca, donde de verdad les duele. - ¡Auch!.

Se da la vuelta, quedando el arriba de mi.

- ¡Oye! Eso es injusto. Quítate. - Hablo e encaprichada.

- No. ¿Se puede saber que necesitas? - Se acomoda un poco más, logrando que no pueda moverme en lo absoluto.

- Yo nada. ¿Porque?

- Para que viniste a molestar a mi habitación niña. - Entrecierra los ojos.

- Ahh, Jordan me pidió que te avise que ya llegamos. - Sonrío inocentemente.

- ¿Solo eso?

- Solo eso - Afírmo. Se quita un poco al ver que en serio pesa. - Tengo sueño. - Hablo cuando se recuesta a mi lado.

- Yo también. - Toma mi cintura acercándome a el. Me recuesto en su hombro acomodándome.

- ¿Que has hecho? Nunca tienes sueño a estas horas de la tarde. - Miro el reloj que marca las cinco en punto.

- Anoche salí - habla adormilado, pero no tanto.

Hago memoria tratando de recordar cuando le dieron permiso.

- No te esfuerces, salí sin permiso - su pecho se mueve cuando ríe al ver mi cara.

- ¿A donde fuiste Jeison? - Pregunto creyendo ya saber la respuesta.

- Había una carrera no muy lejos de aquí. Por cierto, los chicos me dijeron que te salude de su parte.

- ¿Caleb no te quito la motocicleta? - Pregunto extrañada.

- No dije que corrí en la mía. - Se encoje de hombros.

- Tu quieres morir antes de cumplir 20, ¿verdad? - No puedo evitar el tono un poco enojado.

- Tu no me regañes niña. Y si quiero morir es cosa mía.

Me levanto enojada. Odio que hable así. Odio que le importe tan poco su estúpida vida. Odio que crea que es inmortal. Salgo de su habitación enojada y me voy a la mía.

Entro y me siento en la silla del escritorio, tratando de calmarme. Al rededor de 15 minutos después entran a la habitación. Cierran la puerta y Jeison se apoya en ella.

- ¿Alex? - Me mira. Le doy la espalda.

- Lárgate Jeison, solo vete.

- Es que no entiendo porque te molesta tanto, no eres tu la que se pone en peligro, no tienes porque enojarte.

Y eso fue todo. Ahora si estalle.

- Jeison ¿porque no lo entiendes? No puedes ser tan idiota. No puede importarte tan poco tu vida. ¡Piensa en los demás! Piensa en Caleb, en tu padre y tu madre, en tu familia por dios. - me da la espalda y habla antes de que yo continúe.

- Por favor, a mis padres no puede importarle menos mi vida.

- Deja de decir estupideces. Si no le importas a tus padres, le importas a Caleb, y no lo niegues. Tu Muérete si quieres, pero luego el daño no lo sufrirás tu, lo sufrirán quienes te quieren grandicimo tonto. Tus amigos, tu familia. ¿Acaso tienes una idea de cuantas personas mueren por esas cosas? ¿Tienes idea de cuantas personas quisieran vivir un poco más, y tu estas diciendo que no te importaría morir? - Una lágrima se escapa.

- Alex...

- No Jeison. Amanda, la hermana de Amanda murió allí. En esas carreras. Tu no entiendes el sufrimiento que es.

El recuerdo de Lara, la hermana gemela de Amanda, fue muy fuerte, y las lágrimas comenzaron a salir. Ella era amiga de Tayler y de mi también, eramos muy amigos los cuatro. Amanda sufrió mucho, y nosotros también.
Jeison se acercó a mí y me atrapó en sus brazos.

- Shh, tranquila Ali - Habla en mi oído.

Me lleva hasta la cama, y se sienta conmigo al lado.

- Eres un idiota - Hablo aun enojada.

Ríe suavesito, y me abraza otra vez.

- Tranquila pequeña, no llores - frota su mano en mi espalda. - Que te parece si te digo que tendré un poco más de cuidado...

- Me parece que sigues siendo un estúpido.

- Oye, estoy tratando de ayudar. - Habla ofendido

- Pues no lo haces.

- Ya esta bien tu ganas. Tendré más cuidado, lo juro. - Elevo una ceja. - trataré de ir lo menos posible, ¿ahora si?. - Ruedo los ojos y me separo de el para tirarme en mi cama. El se recuesta a mi lado.

Pasa su brazo por debajo de mi cuello para dejarme recostada en su hombro. Y si, el sueño me gano y me quede dormida. Según creo yo, Jeison se quedó junto conmigo.

Buenas noches gentee!!! Como están??

Espero que bien, bueeeno se que dije que iba a sacar un capitulo antes, pero no lo hice, mil disculpas, pero acá esta el capitulo.

Quería agradecerles de todo corazón los 9.26K de lecturas y los más de 600 votos. Estoy suuuper feliz.

Y estuve pensando, y me gustaría que sea una historia interactiva, en la que ustedes pueden elegir que pasará en algunas ocasiones, aun no lo se, pero me gustaría escuchar sus opiniones, saber que opinan, si les gustaría o prefieren que siga así, dejar un comentario no cuesta nada.

Bueno, sin más para decir, besos a todos, y mil gracias por leer.