- No puedo creer que me hayan convencido. Es simplemente ridículo- me quejo mientras paso mis piernas por arriba de la baranda de el balcón de mi habitación.

- Deja de quejarte y salta de una vez por favor - Zack comienza a exasperarse.

- Es que esto es estúpido. ¿Como es que este par de idiotas me convenció de hacer esto? Y aun más importante, tu no me atraparas Zack. Muevete de allí que yo salto. - Rueda los ojos y se mueve de donde esta parado. Miro la caída y no es mucho. Con un poco de fuerza salto y caigo de pie. Las tontas clases de Educación Física en la escuela sirvieron de algo.

- Genial, ahora vamos antes de que nos vean. - Connor me toma la muñeca y corremos hasta el auto de un amigo de los chicos, Luck. 

Nos subimos y respiramos cansados.

- Mierda eso fue horrible. - Me vuelvo a quejar. - Espero que esa fiesta valga la pena - saco un espejo de mi bolso y retoco mi maquillaje.

- Tranquila, si valdrá la pena. - Da dos palmadas en mis hombros Luck.

Emprendemos camino a la tonta fiesta.

Bueno, por si no se dieron cuenta, los chicos si me convencieron de ir a la fiesta. Jordan salió a una reunión, lo convencí de dejarme sola.

Paso exactamente una semana desde el día que Jordan me presento a Caleb, y es un chico muy agradable. Puedo decir que es como un hermano más, ya que así se comporta conmigo.

Siento que Luck para el auto y miro a mi costado, la casa llena de chicos, (unos ya borrachos) aparece en mi vista.

- Muy bien, ¡Que la fiesta comience! - exclama Connor.

Con Zack nos miramos preocupados por lo que nuestro amigo pueda hacer. Niego demostrándole que no podemos hacer mucho al respecto, y bajamos del auto.

Caminamos a la casa y entramos. La música retumba por toda la casa, el olor a alcohol, cigarrillos y sudor inunda mi nariz. Zack me toma de la muñeca y no me suelta, para que no nos separemos.

Caminamos a la barra, donde perdemos de vista a Connor. Mierda.

Zack me invita a bailar y acepto gustosa.

(•••)

Pasan las horas y puedo decir que no tengo idea de que es lo que pasa.

Estaba bailando con Zack, cuando alguien me ofrece un vaso, dicen que es gaseosa sin alcohol, la acepto. Bebo un poco y a los minutos siento como mi cuerpo se relaja totalmente.

Sonrío y noto que todo sucede más lento según yo.

Zack me mira y me quita el vaso, noto en su cara una expresión preocupada cuando me mira otra vez. Yo solo casi caigo cuando me toma por sorpresa un mareo muy fuerte. El me atrapa en sus brazos.

NARRA ZACK

Miro el vaso de Alex y noto en el que el hielo no esta flotando. Pero demasiado tarde, ya veo en ella los efectos de alguna droga. Veo como casi cae al piso, la sostengo en mis brazos y decido sacarla afuera.

La siento en la vereda, mientras tomo mi celular. Ella no deja de decir estupideces. Marco el número de Connor casi diez veces, pero no responde. Comienzo a desesperarme, porque realmente no se que hacer con Alex.

Miro su cartera y decido tomar su celular, y voy directo a sus contactos de emergencia.

Entre ellos parece el de Jordan y Caleb.

Pienso en cual será mejor marcar. Ninguno por supuesto, ambos la mataran. Pero ni modo. Llamo a Caleb, le tengo menos miedo que a Jordan.

En la llamada

- ¿¡Alexandra!? ¿Mierda donde demonios estas? Hace horas que te estoy buscando, y no contestas mis llamadas joder. - Habla rápido.

- ¿Caleb? - Lo llamo lentamente. Esperando que reconozca mi voz.

- ¿Quien...? ¿Zack? ¿Porque tienes el celular de Alexandra? ¿Donde esta? - me bombardea con preguntas.

- Este... mira.. - Respiro profundo. - Te diré todo, pero necesito que vengas a esta dirección ********, estamos una fiesta y Alex bebió una gaseosa, pero no me di cuenta de que tenía alguna clase de droga y ahora parece... parece, no lo se... ¿Muy relajada? y alucina mucho... - Respiro luego de haber hablado tan rápido.

- ¡¿Que hicieron que?! Maldición ya mismo voy hacia allá. No se muevan. - Dijo para luego colgar la llamada.

Suspiro sabiendo que de esta no saldrá viva. Y ni hablar de Connor.

Me siento al lado de Alex, quien ahora está riendo. Mi.er.da.

Pasan casi de 10 minutos y escucho que gritan mi nombre. Miro a mi alrededor y encuentro a Caleb, quien aun no me ve.

Me paro y levantó, casi sin esfuerzo, a Alex. Protesta, bastante, pero de igual modo la llevo donde esta Caleb, toco su hombro sabiendo que si le hablo no me escuchara.

Se gira rápidamente y entre cierra los ojos para ver quien es, cuando me reconoce abre los ojos y mira a Alex, la levanta en sus brazos y me da una mirada ordenando que vaya con el.

Sin rechistar lo sigo. Cuando llega al que supongo es su auto abre la puerta trasera y con una seña me hace entrar. Luego de que yo subo, con delicadeza deja a Alex a mi lado, al instante su cabeza cae en mi hombro, con cuidado la recuesto en mis piernas y juego con su cabello.

Caleb sube de piloto y enciende el auto. Comenzamos a avanzar.

- ¿Que mierda se les metió en la cabeza al escapar para ir a una fiesta? ¿Están locos? ¡Escapar! Joder a ambos les irá muy mal. - Lo miro con los ojos abiertos. - Claro que si Zack, a los dos, obviamente le dije  a tu padre. No pueden andar escapando para ir a una estúpida fiesta. ¿Creen que se mandan solos? - Apreta la mandíbula.

- ¿Porque dijiste que estabas buscando a Alexandra? - Tome valor para preguntar con respecto a la llamada, varios minutos después.

- Porque Jordan me pidió que me quedara con ella está noche, el no llegará, y no quiere dejarla sola en la casa. Ya que supuestamente estaba en su casa, como debería de ser. - Sigue refunfuñando. Dejó caer mi cabeza hacia atrás, aceptando mi destino. - Tu padre envió un chófer para que te recoja, ahora debe estar en casa de Jordan. Estamos a 5 minutos de llegar. - Dice ya más tranquilo. Asiento.

En exactamente 5 minutos, el auto se detiene y Caleb baja de el, diciendo antes que no me baje.

Rodea el auto y abre la puerta de mi lado. Quita a Alex de encima de mi y luego bajo yo. En frente de mi aparece un chófer del cual solo recuerdo su cara. El abre la puerta de una de las camionetas de mi padre y entro en el, pero antes saludo a Caleb con un movimiento de mi mano. Escucho como susurra un "suerte" suave.

Narra Caleb.

Entro a la casa de Jordan con Alex en mis brazos, esta niña sin dudas hará  que nos de un paro cardíaco con sus travesuras.

Sonrió al ver su carita, según me dijo Zack, su bebida tenia alguna droga, así que lo más seguro es que tarde unas cuantas horas en despertar. Pero me temo que no lo suficiente para que Jordan no se de cuenta.

La recuesto en el sofá y le quito sus zapatillas, voy a la cocina en busca de unas botellas de agua y vuelvo a donde la deje.

La vuelvo a levantar para llevarla a su habitación. Allí la recuesto y me coloco a su lado. En cuestión de minutos caigo rendido.

(•••)

Miro la hora en mi celular, son las ocho de la mañana, desactivo la alarma antes de que suene para que Alex no despierte. Cuando recuerdo a Alex miro al lugar donde anoche la recosté.

Escucho pasos en las escaleras, a los segundos la puerta se abre lentamente, dejando ver a Jordan sonriente. Al verlo me tranquilizo un poco. Sonrió en su dirección.

- Buenos días - Se agacha un poco dejando un beso en mis labios. - ¿Que tal estuvo todo? - se sienta a mi lado. Alex sigue dormida dándonos la espalda.

- Bueno... - muerdo mi labio. - No tan bien amor. - Lo miro a los ojos. Solo puedo pensar "pobre Alex".

- ¿Que sucedió? - Su rostro se torna más preocupado.

- Mira, tomate esto con calma amor, y no la quieras matar, solo mira lo tranquila que está durmiendo. - Digo alargando esto un poco más.

- Por favor amor, dime que sucede, me estas preocupando mucho. - Arruga el ceño. El mismo gesto que hace Alex. Son muy parecidos.

- Bien, veras, anoche cuando me pediste que viniera con ella, entre a la casa pero la encontré vacía. Alex no estaba en ella. La busque unas horas, la llamé pero no contestaba. A eso de las dos de la madrugada, me llaman desde su celular, era Zack, dijo que estaban en una fiesta, rápidamente me contó que Alex acepto una gaseosa de algún desconocido, pero no se dieron cuenta de que tenía alguna droga, comenzó a "alucinar" entre otras cosas. Cuando llegue ella estaba entre dormida. Le llamé al padre de Zack, el envío un chófer para que llevara a Zack a su casa. Para cuando estábamos aquí Alex estaba dormida por completo. Así que la recosté, y aún no despierta. - Concluyo todo lo que sucedió anoche. Me mira con la boca abierta. Y poco a poco se pone colorado, y no por vergüenza, sino que por furia. Con una seña le pido que no grite.

- No lo puedo creer. Simplemente no lo puedo creer. Parece ser que le hable a la pared la última vez. Ya le dije que no quiero que salga a fiestas, menos de gente que no conozco. Y aún menos escaparse para salir. Es... es.. agg - Camina por la habitación pasando la mano por su cabello. Me paro y voy hacia el. Lo siento en una silla y lo miro a los ojos.

- Ya tranquilízate Jordan. No sirve de nada que enumeres todo lo que no quieres que ella haga. Ahora mismo está totalmente dormida, no te escucha, mejor cálmate, y concentremosnos en que despierte. Ya luego ves tu que hacer con respecto a su castigo. - Sentencio tratando de calmarlo. Suspira pesadamente y asiente. Se apoya en el respaldar de la silla y mira a la niña que por poco nos mata de un susto. Viéndola así parece un angelito.

- ¿Crees que este bien? - Pregunta aun sin dejar de verla.  Su preocupación se refleja en su voz.

- Eso creo. Zack se dio cuenta rápido de que la bebida tenia algo, así que no creo que haya consumido mucho. Quizás solo despierte con jaqueca o algún mareo dudo que sea algo más que eso. - Me apoyo en el escritorio, al lado de mi chico.

- Bien - Se gira y me mira. - Muchas gracias Caleb... no se que habría sucedido si no hubieras aparecido. - Mira el suelo.

- Mejor no pensemos en eso, después de todo no sucedió nada malo. Alex está aquí, a salvo de cualquier persona con alguna mala intención... y debes tener en cuenta que esto tampoco fue culpa de ella. Es muy poco probable que se hubiera dado cuenta de que tenía algo la bebida. - Le sonrío amable, el asiente y suspira. - Y no tienes porque agradecer, no solo es por ti, esa niña se sabe ganar el corazón de las personas. - Río despacio, el también ríe.

Luego de unos 15 o 20  minutos charlando entre susurros, vemos que Alex comienza a despertar. Me acerco a ella. Con algo de esfuerzo se sienta en la cama. Enfoca sus ojos hasta lograr verme.

- Ey peque - llamo su atención. - ¿Como estas? - Me siento a su lado.

- Bien... creo. Me duele la cabeza - Se toca el respectivo lugar. Le paso una botella de agua. Me mira sin entender.

- Tómala, te hará bien. Y esta no tiene ninguna droga. - La miro levantando una ceja. Ella mira el piso pensando en lo que le dije. Poco a poco su cara delata que va recordando lo sucedido.

- Mierda - Susurra.

- ¿Porque te escapaste Alex? ¿Porque fuiste a esa fiesta?  ¿Que no entiendes cuando Jordan te prohíbe algo? Y aun más importante, ¿Desde cuando andas por hay aceptando cosas de extraños? - La miro serio. Baja la mirada.

- No lo se Caleb, es que Connor me convenció y... - Analiza lo que dijo y tapa su boca con la mano. Abre sus ojos y me mira esperando que no la haya escuchado.

- ¿Que has dicho Alexandra? ¿Connor? ¿El también estaba? - Niega con la cabeza rápidamente. - No me mientas Alexandra. Lo repetiré una vez más, y más te vale no mentir. ¿Connor estaba allí?

- Porque no puedo mantener mi boca cerrada - Pasa su mano por su cabello. Hablando sola.

- Alexandra - Digo con un tono amenazante.

- Bien, bien... si estaba, el fue quien nos convenció de ir... por favor no le digas a Marc, Caleb... Connor estaba muy entusiasmado y... y... no quiero que Marc se enoje con el solo porque yo abrí la boca - Me mira esperanzada.

- No lo puedo... bueno, si lo puedo creer, Connor es más que capas... - Suspiro pesadamente. - Lo siento Alex, pero debo decirle a Marc... tiene que enterarse cariño. - Digo levantándome. Me doy la vuelta y miro a Jordan. - Tengo que hablar con Marc, nos vemos amor - Me acercó a él y dejó un tibio beso en sus labios. El se despide de mi también.

Narra Jordan.

Me despido de Caleb y me acerco a Alex. Me siento a su lado y la estrecho en mis brazos. Estoy enojado, si, pero no quita el hecho de que aún por eso no este preocupado, o asustado. Si no se daban cuenta a tiempo, o Caleb no llegaba, no puedo ni imaginar que podría haberle sucedido a mi niña.

- Lo siento mucho Dan - Su voz se quiebra un poco. Se que ella es consciente de que le pudo suceder si no hubiera estado con Zack en ese momento.

- Lo se cariño, se que lo sientes, pero con eso no arreglaras nada. El daño ya esta echo, tus acciones no las podrás cambiar. - digo separandola poco a poco - Espero que sepas que te espera un buen castigo. - Digo un poco más calmado que antes. Ella asiente. - Bien, pero primero quiero que me digas ¿por qué  fuiste a esa fiesta? Cariño ya hablamos esto, sabes que no estoy de acuerdo con que asistas a fiestas como esas. No quiero que vayas porque yo también tuve tu edad en algún momento, y se que es lo que sucede en ellas. Creo que aún eres muy joven como para estar metida en esas cosas. - Coloco un mechón de cabello detrás de su oreja.

- Si, lo se Jordan. Me deje llevar... no pensé en nada - Baja la mirada a sus manos. Suspiro.

- Alex, cariño, entiendo que tus amigos te convencieran, principalmente Connor, esta no es ni la primera ni la última vez que el se escabullirá para ir a alguna fiesta, lo conozco muy bien, pero si espero que esta sea la última vez que tu lo haces. No quiero tener siempre la misma conversación sobre esto, y menos tener que castigarte siempre por lo mismo. Aún eres muy joven para andar en fiestas como esas. Pero me molesta aún más que te hayas escapado, ni siquiera consideraste preguntarme. - La miro decepcionado. Una lágrima rueda por su mejilla. - Y sabes que es lo que sigue cariño. - Tomo su mano para dejarla boca abajo en mi regazo. - Que esta sea la última vez que hablamos sobre este tema Alexandra, y que sea la última vez que te escapas. - Digo para acabar con esto de una vez.

PLAS PLAS PLAS PLAS PLAS PLAS - No quiero que vuelvas a ponerte en peligro - PLAS PLAS PLAS PLAS PLAS PLAS - Menos aún que vuelvas a jugar con mi confianza. - PLAS PLAS PLAS PLAS PLAS PLAS - No te manejas tu sola Alexandra.
PLAS PLAS PLAS PLAS PLAS PLAS - No quiero tener que repetir otra vez que no tienes edad para salir cuando se te de la gana. - PLAS PLAS PLAS PLAS PLAS PLAS - Y no me vuelvas a desobedecer jovensita. La próxima vez no será tan barato. - PLAS PLAS PLAS PLAS PLAS PLAS.

PLAS PLAS PLAS PLAS PLAS PLAS
PLAS PLAS PLAS PLAS PLAS PLAS.
PLAS PLAS PLAS PLAS PLAS PLAS
PLAS PLAS PLAS PLAS PLAS PLAS

La tomó de un brazos para sentarla en mi regazo, ella se recuesta en mi pecho y solloza.

- Shh... ya mi niña, ya... shh - Froto mi mano en su espalda. Poco a poco se va calmando.

- Perdón Dan - Susurra con la cabeza hundida entre mi cuello y hombro.

- Ya esta todo perdonado chiquilla - Juego con un mechón de su cabello. Ya me es un vicio. - Pero no lo vuelvas a hacer. No me gusta que juegues con mi confianza de esa forma. Yo creí que ti y tu palabra, me dijiste que estarías en casa, no en una fiesta. ¿Y si pasaba algo malo? ¿Y si te hacían algo? No son cosas con las que se pueda jugar Alex. Y no está a discusión - Asiente lentamente, aún caen algunas lágrimas de sus ojos.

- No lo volveré a hacer, lo prometo. - Unos minutos después siento su respiración más lenta. La miro y me doy cuenta de que esta dormida.

Viendo la hora decido dejarla dormir. Son apenas las nueve, y yo también estoy cansado. La vuelvo a recostar en su cama y apago la luz. Salgo de la habitación en silencio para ir a la mía.

Me acuesto suspirando. Pensando en las pocas horas que lleva el día y todo lo que ya a pasado. Lo único que atino a pensar es que esto apenas es el comienzo. No sólo de el día, tambien de nuestras vidas. Ambos nos estamos amoldando al otro, y no ceeo que sea algo fácil. En especial por la edad que tiene, esta en una etapa complicada, ya no es una niñita, pero tampoco un adulto. Algo me dice que aun son problemas leves, y agradezco por eso.

Cierro los ojos y poco a poco caigo rendido ante el sueño.