Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Mucho en tan poco tiempo

Narra Capitán Gato

Admito que el parecido entre el veterinario y Magma me estremece, en especial los recuerdos de esos exámenes, supongo que no recuerdo bien su cara, después de todo, sólo recuerdo el vigor de su espeluznante sonrisa.

—Oye, Cap ¿Cap, estás bien?— Preguntó con algo de curiosidad aquella castaña.

Aún estaba dudoso en acercarme o no a Star, ella notó aquella desconfianza, unió los puntos y decidió hablarme nuevamente.

—Hagamos un trato, si yo voy al doctor, tú irás al veterinario, ¿de acuerdo?—

Dudé en sobremanera, Star podría estar mintiendo y yo terminaría por ser encerrado y torturado otra vez pero, ¿y si dice la verdad? Vamos, Fabrizzio, hazlo, arriésgate por tu mejor amiga.

«Está bien...» Susurré desganado.

¿Cuántos descuidos cometeré en una semana? Ese susurro fue audible para Star, quien se mostró atónita, ahora deberé hacerme el tonto ante esto ¡Qué inteligente eres, Capitán Gato!

Acabas de hablar, Cap, tú acabas de hablar—

Negué con la cabeza desesperadamente, los nervios me carcomían, ella estaba a punto de descubrirme por un simple susurro, esto no podría ser peor.

No...— Negó su afirmación pasada, noté determinación en su voz.

Estoy confundido, demasiado a decir verdad, ladeé mi cabeza en busca de una aclaración, realmente la necesito.

— Tal vez esos golpes me dejaron atontada y ahora escucho voces. Sí, eso debe ser— Una risa nerviosa salió de su boca, dándome un escalofrío en el proceso. — No eres un gato que habla, ¿o sí?—

Negué nuevamente, esta es una oportunidad perfecta para contarle a Star la verdad finalmente, pero el miedo es mi mayor impedimento, siempre lo ha sido. Me arriesgué bastante al contarle sobre esto a Magma, pero no es mi culpa, él tiene cara de ser bastante confiable y me dejé guiar por mis instintos.

Creo que sí debo ir al doctor— Confesó ella, pero su voz se oía débil, más de lo habitual.

Star cerró sus ojos con aparente miedo y sostuvo su cabeza fuertemente con ambas manos, su rostro transmitía un intenso dolor. Me asusté bastante, ella se veía mucho más pálida de lo normal.

La asustada castaña se tocó la cabeza con temor, su mano estaba repleta de sangre luego de aquel tacto. Me abalancé sobre ella rápidamente, sus signos vitales estaban por los suelos y cada vez me desesperaba más y más ¡¿Qué debo hacer?! Star ya soltaba jadeos de dolor y yo simplemente no hallaba una solución.

«¡Lo tengo!» Grité en un susurro al encontrar una posibilidad de ayudarla.

Puede que mi "plan" traiga ciertas consecuencias, pero si no lo hago, Star descubrirá mi secreto o morirá, y me decepciona tener una mentalidad tan retorcida que me haga dudar de cual elegir.

Salí por la puerta del cuarto con prisa, me posicioné en frente de la puerta principal y tomé mi forma humana, procedí a abrir y cerrar dicha puerta sonoramente, subí rápido las escaleras y, aguantando mis nervios, entré a la habitación de Star.

— Star, ¿estás aquí?— Pregunté un poco ansioso.

— ¿Fabrizzio? ¿Qué haces aquí? ¿Cómo entraste?— Interrogó débilmente la castaña.

— No te preocupes por eso ahora— Pedí despreocupado con la intención de no asustarla.

— Aprovechando que entraste a mi casa sin avisar, ¿podrías... buscar a mi gato? Salió de la habitación hace poco y quiero estar con él— Rogó la de ojos carmesí, haciendo así que sonría inconscientemente.

— Bueno, eh... Lo haré, pero... Yo...— Apreté los puños, me cuesta mucho explicar las cosas, especialmente si ella es la receptora. — Vine por tí, y no me iré sin tí, Star— La miré decidido.

Sus ojos rubíes siempre logran hipnotizarme, me acerqué a ella y me agaché para quedar cara a cara.

— ¿Qué quieres decir?— Dudó, con un ligero desconcierte en su voz.

Sin pensarlo mucho, cargué a Star y me levanté, instintivamente ella se sujetó de mí con fuerza, me encontraba rojo cual tomate hasta las orejas pero decidí ignorarlo y llevarme a la chica fuera de la habitación.

— ¿A dónde me llevas?— Cuestionó estando más tranquila de lo que esperé.

— Iremos al hospital, necesitas un doctor— Le respondí con simpleza.

— ¿Para qué? Estoy más que bien— Claramente ella mentía.

— La sangre que gotea por tu cabello me dice lo contrario— Argumenté, a lo que Star chasqueó la lengua, se notaba frustrada.

No hubo charla luego de ese momento, fue un silencio algo incómodo a decir verdad; Star se mostraba inexpresiva como siempre mientras que yo, bueno, sentía que me desmayaría. Cuando soy un gato puedo estar cómodamente con Star, pero cuando soy un humano igual que ella, siento cosas extrañas, mi corazón se acelera, mi cara se pone roja, mis manos sudan, incluso siento mariposas en el estómago ¿Eso es normal?

— Ya llegamos— Señalé para luego bajarla con cuidado.

La recargué en mí ligeramente, rodeándola y sujetando su hombro con delicadeza, ella en cambio se sostuvo de mi brazo, la diferencia de altura era notable, lo cual me parece adorable.

Entramos al hospital y caminamos juntos hasta la recepción, en donde Star fue atendida rápidamente por su aparente estado de emergencia. Me dirigí a la sala de espera y caminé en línea recta sin mirar el recorrido, estoy ansioso por el estado actual de mi mejor amiga. Terminé chocando con alguien, una silueta conocida, y aparentemente estaba más distraido que yo.

— Una disculpa, no me estaba fijando en el camino y... Ah, eres tú, Gato, ¡hola!—

— ¿Magma? ¡Magma! Mi buen amigo, ¿qué haces aquí? Estoy empezando a creer que eres omnipresente— El rubio rió por el comentario, a lo que yo imité su acción.

— Sólo ando aquí porque estoy esperando a mi hermano mayor, lo traje en mi auto, él está en la sala de dermatología, ya sabes, por la enfermedad—

¿Enfermedad? No me habías mencionado algo así— Le aclaré, ladeando la cabeza por la confusión.

— Uh, ¿no te conté? Yo y mis hermanos tenemos una enfermedad de nacimiento, hace que nuestra piel tenga este aspecto y textura rocosos, es una se esas enfermedades raras de Hawaii— Explicó el pelinaranja.

— ¿Hawa qué?—

— Hawaii, mi isla de origen, bueno, en realidad es un estado de — Magma se vio interrumpido por el sonido de una puerta cercana abrirse. — ¿Sabes qué? Ahorrémonos las clases de geografía por ahora, me parece que mi hermano ya salió—

Escuché unos pasos a la cercana lejanía, giré la cabeza y ahí lo vi, era él, el veterinario. Mi corazón se detuvo por un segundo y se me heló la sangre, Padre, quien se encontraba cada vez más cerca de nosotros, me miró con una gran e inquietante sonrisa que nunca podré borrar de mi memoria.

— Oh, hijo mío, qué grata sorpresa verte aquí el día de hoy— Dijo, sin quitar esa sonrisa, me pone los pelos de punta.

Tragué saliva, la serenidad de su voz era abrumadora, tenía que huir de ahí lo antes posible, su mera presencia me pone nervioso y su expresión aparentemente relajada da mala espina.

Bueno, yo debo irme ahora, fue un placer verlos— Me despedí mientras daba pasos hacia atrás lentamente.

Descuida, yo también me veo en la necesidad de retirarme— Comentó el de vestimenta morada, a lo que asentí ligeramente.

— ¿Necesitas que te lleve a la iglesia o puedes ir tú sólo, Angel?—

— Tranquilo, hermano, iré por mi cuenta— Padre dio una pequeña pausa y giró su cabeza para verme directamente a los ojos. — Fabrizzio, no lo olvides, tú y yo tenemos asuntos pendientes—

Tan rápido como vino, se fue.

— Gato, ¿qué fue todo eso? ¿Ustedes ya se conocían?— Interrogaba Magma.

Te lo contaré en otro momento, ¿sí?—

Antes de que el de piel obsidiana pudiera volver a hablar, una enfermera apareció ante nuestros ojos, se acercó a nosotros y preguntó por mí, lo que me pareció extraño ya que había pasado poco tiempo. Nos guió a Magma y a mí hasta el consultorio en donde se encontraba Star, se veía más estable pero notablemente débil.

— ¡¿Star?!— El rubio clamó su nombre, yendo con prisa en dirección a la castaña.

Star no le dirigió la palabra, y Magma me miró con una cara que denota confusión y preocupación, era claro, quería una explicación, sólo que aún no sé cómo dársela, ¡todo es tan complicado!

— Gato, me debes una explicación urgentemente— Exigió como lo predije, teniendo un semblante serio que no había visto antes en él.

— Magma... Ha pasado mucho en tan poco tiempo

1390 palabras

Primero que nada, quiero dar unos mensajes importantes chavos.

ElGranItzca, lo logré qlero, subí capítulo. >:'v

Iba a ser un capítulo largo y especial pero, mis neuronas no daban ni para 2000 palabras, i'm sorry.

Riaawah, aquí tienes tu capítulo, te lo dedico.

Ya no tengo mucho que decir, solo que se vienen cositas con Capitan-escritor y, Makoto, se me fue el internet ayer y por eso no alcancé a subirlo, no haré face reveal we, y pues, listo, es todo bandamax.

Los quiero chavos. 🤌

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro