Perspectiva Dragón blanco.

Hace pasado mucho tiempo que deje mi mundo, la verdad, no tenía planeado venir, pero supongo que es el destino, en el tiempo que he estado aquí, me he dado cuenta que las personas son crueles, pero creo que la palabra crueles no se les aplica, si no sicópatas sin almas, y yo creí que nosotros éramos crueles, malos, me sorprendió encontrar personas así. Cuando llegué, lo primero que hice fue buscar información de dónde estaba sin llamar la atención, no fue fácil, pero, pude conseguirla, lo que me parece interesante es que aquí los humanos son fuertes, aunque solo pocos tienen poderes o armas especiales, hasta ahora no me enfrentado a uno, es una lástima, pero no importa, cuando supe de lo que hacían, decidí asustarlos con mi poder, ahora, anda un rumor de cierto Dragón blanco, la verdad me pareció gracioso, ahora me andan buscando, pero, antes de seguir, vamos recordar como llegué aquí.

Flashbak

Me encontraba con mi equipo, buscando al Gran Rojo, ya llevábamos un rato y no aparecía por ningún lado, era algo raro, pero seguimos buscando, hasta qué después apareció.

Decidimos seguirlo para ver para donde iba, ya que nadie sabía exactamente para donde iba, siempre viajaba por las dimensiones, era difícil saber, pero cuando lo seguimos por el portal que creo, algo ocurrió, un fenómeno, algo estaba distorsionando el portal, no sabíamos que era, pero en eso el campo que creo Arthur, se rompió de un lado, por poco y perdíamos a kuroka, ya que la pude salvar de ser absorbida, pero en cambio me absorbió a mí, todos gritaron mi nombre, pero yo solo les dije.

—¡Sigan con el plan!.

Luego de eso cerré los ojos, cuando los abrí, estaba viendo el cielo azul, me levanté poco a poco, vi mis alrededores y estaba en un bosque, no sabía en donde estaba, así que camine por un rato, para buena suerte mía, había un pueblo, no dude ni un segundo entrar y preguntar en donde estaba. Mientras caminaba observaba que el pueblo era viejo en todo el sentido, para si a ser medieval, las personas que estaban me miraban extraño, supongo que era por mi ropa, pero solos los ignoraba, llegué a lo que parecía ser una tabernero, un lugar donde se podía beber, lo extraño es que solo habían 4 personas, era raro, pero no le tome importancia, me senté y le pregunté al cantinero ¿en donde estaba?, le dije que me perdí y no sabía en donde estaba, el cantinero me dijo en donde estaba. Estaba en un pueblo no muy lejos de la capital imperial, me tomaría un día en llegar caminando, es fue lo que me dijo. Le pregunté ¿por qué no había tantas personas en el pueblo y en la cantina?, el solo me dijo, que es culpa del Gobierno, ya que se an estado llevando a muchas personas de este pueblo, por no tener dinero para pagar sus deudas, me dijo que si siguen así, este pueblo será más un desierto, ya que a los que no pagan les queman sus casas o establecimientos. El cantinero me veía con cara de que yo era un forastero, pues, tenía razón, no soy de aquí, fue lo que pensé.

En ese momento, patearon la puerta, nosotros dirigimos la mirada a quien pateo la puerta, y eran unos soldados, su extraña ropa lo decía, no había que hacer un genio paras saber que eran soldados, en fin, ellos se acercaron donde estaba el cantinero, y dijieron lo siguiente.

Soldado:

—Cantinero, pague lo que debe o lo llevamos con nosotros y le quemamos su taberna —dijo el soldado con una sonrisa.

Los otros soldados estaban en silencio, supongo que el que hablo era el líder.

El cantinero saco una bolsa de monedas, era grande, el soldado se la arrebato y dijo.

—Falta, son dos bolsas, daños la otra —dijo este con furia en sus palabras.

—No, no tengo más, esto fue lo que pude conseguir en tampoco tiempo —dijo cantinero en forma de su aplica.

El soldado lo tomo de la camisa y lo jalo, el soldado solo le dijo.

—Si no tienes más, quemaremos está taberna ahora mismo —dijo este, mientras lo otros soldados asentían y comenzaban a romper las mesas y sillas.

Sinceramente, no me importaba en lo absoluto, pero, no pude ignorar lo que sucedió después.

—¡Papá!, ¿Qué pasa? —Pregunto un niña que parecía estar en sus 8 años.

—Lucía, vete de aquí, no es un buen momento, regresa a tu cuarto y quédate ahí, no salgas por ningún motivo, yo arreglo esto —fue lo que dijo su padre.

El soldado, el que tenía de la camisa del cuello, lo arrojó a donde estaba las botellas de licor, la niña que era obviamente su hija, lo fue a socorrer, los hombres que estaban, ya se habían ido, yo aún estaba sentado en silencio viendo todo, los otros soldados ya habían terminado de destruir todo lo que había en taberna, ya estaban apuntó de quemar todo, el soldado que tenía una cara seria, puso una cara desquiciada, miró al cantinero y su hija.

—¡Oye!, Creo que será mucho mejor que me lleva a tu hija, estoy seguro que nos servirá de algo —fue lo que dijo con su sonrisa de psicópata.

Yo en ese momento, sentí una pequeña molestia, pero seguí observando.

—Ni se te ocurra acercarte a mi hija, no te lo permitiré —fue lo que dijo el padre mientras sacaba una espada, esa espada supongo que la tenía escondida.

El soldado saco su espada y dijo:

—Chicos, encarguense del extraño, yo me encargo del viejo y cuando lo acabe, y ustedes acaben con el extraño quemaremos todo y nos llevaremos a la niña —dijo el soldado mientras me señalaba.

«Supongo que tendré que darles una lesión, bueno de todas formas, no iba a dejar que se llevarán a la niña», ese fue lo que pensé.

Me levanté y sólo mostré una sonrisa, luego voltee a ver al padre de la niña, y le dije lo siguiente.

—Trata de resistir unos minutos, yo me encargo de estos payasos —fue lo que le dije mostrándole una sonrisa.

El padre asintió con la cabeza, yo voltee y comencé a tronar los nudillos de mis manos.

Los soldados eran 4, estaban el líder y los otros 3, que obedecían al líder. Los tres soldados sacaron sus espadas, yo saqué mis manos que las tenía en mis bolsillos, rápidamente fueron contra mi, pero eran lentos, lentos como tortugas, los esquivaba fácilmente. Mientras los esquivaba, estaba pendiente del padre de la niña, estaba peleando contra el soldado, eran buenos, se notaba que tenían experiencia, pero dejé eso de lado y seguí con mi pelea, era aburrido, no tenían ninguna oportunidad contra mí, pero decidí dejar jugar y a uno de ellos me puse detrás de él y le di un golpe en el cuello, dejándolo noqueado, los otros dos se molestaron y me siguieron atacando más y más, estaban molestos, pero yo solo les mostraba mi sonrisa, pero decidí dejar de jugar con eso dos, y tal como al otro, aparecí detrás de ellos y los noquee.

Volteé a ver al padre y vi que el soldado lo había apuñalado, me molesté por eso y fui contra él, y le di un puñetazo en toda la cara, así dejándolo fuera de combate, me acerqué a el padre de la niña y sólo me dijo.

—¡Por favor!, llevate a mi hija, cuidala, por favor, por favor —me suplicaba el padre.

Yo solo lo miré seriamente y le dije.

—¿Por qué debería de hacerlo?, Apenas nos conocemos, no te ayude en nada, si hubiera querido los hubiera derrotado desde un principio, pero no lo hice, y tú me dices que cuide de tu hija, no le veo el sentido —fue lo que le dije.

El solo me sonrió y me dijo.

—Tienes razón, pero, prefiero dejarte a mi hija a ti, que ha esos malditos soldados, se que eres bueno; por favor muchacho, te lo ruego —me dijo el viejo con algunas lágrimas.

Yo solo suspire, lo miré seriamente y le dije.

—Está bien.

El miro a su hija que estaba escondida, ella sale y se lanza abrazarlo, el padre le dice.

—Escucha, debes de irte con este joven, por favor, vete con él —fue lo que le dijo.

—No papito, no, no quiero dejarte —fue lo qué dijo su hija mientras lloraba.

—Escucha, tienes que hacerlo, si no lo haces, esos soldados vendrán y te llevarán a la capital imperial, y no quiero ni imaginar que te harán, ¡¡así que vete con él!! —Gritó el padre, esas palabras tenían tristeza y dolor.

La niña comprendió lo que quería decir su padre y asintió con la cabeza con tristeza, luego se levanto y se puso al lado mío, el padre volvió a mirarme y me dijo.

—Cuidala por favor —fue lo último me dijo el viejo. Luego cerro sus ojos y murió.

Yo cargue a la niña la cual seguía llorando, me disponía a salir y vi a uno de los soldados que se despertó y le prendió fuego a la madera de las mesas y sillas que habían destruido, yo me acerqué y lo patee en la cara, matándolo. Luego salí y saqué mis alas, la personas que estaban se sorprendieron. Ha lo lejos podía escuchar a los otros soldados acercándose, entonces salí volando rápidamente. Me dirigí a una parte del bosque, luego baje, deje a la niña al lado de un árbol, ella al final se quedó dormida, luego me senté al lado de ella y me arrecoste en el árbol y me dormí.

Fin de Flashbak.

Han pasado unos años desde esos sucesos, en ese tiempo atacaba las fortalezas del ejercito, no dejaba nada, siempre que destruía los campamentos del ejercito, llevaba a la niña, la cual entrene. Aquí los humanos son más fuertes de lo que pensé y ella no es la excepción, me sorprendió su progreso, horita mismo, estoy viendo la capital del imperio.

Me sigue sorprendiendo la capital, a pesar de todo, sigue siendo hermosa.

Pero ese infeliz del primer ministro y los otros, destruye su hermosura con la corrupción. La razón de que no destruyó y mato a esos desgraciados, es porque los humanos aquí, crearon una resistencia, mejor conocida, como el ejército revolucionario, gran nombre.

En fin, a veces ayudó a cierto grupo de asesinos, aunque más que todo los molesto un poco, me parece divertido. Pero a la final cumplimos con nuestro objetivo, matar.

La niña que rescate está horita en la capital, aunque no se le puede llamar niña, ya es toda una señorita, tiene 15 años.

En fin, ella dijo que iba a comprar algo para la noche, así que ella fue a comprar algo de pan y carne, y tal vez un buen vino. En fin, está noche he escuchado que hay una familia de psicópatas, me encargaré de ellos, la información que tengo de ellos es:

“Atraen a los campesinos con palabras dulces y los torturan hasta la muerte, los ven como simple ganado, solo porque ellos tienen una posición económica y porque el padre tiene amigos con poder, tratan a las personas así, la madre es una rubia sádica, droga a las personas hasta que mueren y a nota todo lo que hace. El padre tortura de una forma horrible a las personas sin Piedad. La niña, es una psicópata, tiene sus propios gusto para torturar”.

Fin de la información.

Esa es la información que me dieron, si se preguntan como la conseguí, pues les digo que no fue nada fácil, en fin. Esta noche, esa familia se irá al infierno.

Bueno, será mejor que busque a Lucía, me debe estar esperando a las afueras de la capital y no quiero hacerla enojar.