Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

⁰⁰². 𝑺𝒆𝒈𝒖𝒏𝒅𝒐 𝒑𝒖𝒄𝒉𝒆𝒓𝒊𝒕𝒐.

Un bebé risueño y desnudo corría por todo lo amplio del departamento en donde vivía, Jeong WooYoung se había escapado de la hora del baño.

—¡WooYoung vuelve aquí!

Hace aproximadamente veinte minutos atrás YunHo lo había llevado en brazos hasta el baño, iban a salir y necesitaba a un WooYoung limpio y sin rastros de leche con chocolate en su ropita, pero el pequeño Jeong no estaba dispuesto a dejarse limpiar por lo que en la primera oportunidad que tuvo cuando su papá YunHo se aparto sólo unos segundos para doblar su pantalón, el bebé aprovecho la oportunidad y salió del baño huyendo como un gatito del agua. Las tiernas risitas se escuchaban en la habitación principal, WooYoung se quedaba quieto para que YunHo lo viera y cuando se acercaba salía corriendo nuevamente.

Una idea millonaria según YunHo, iluminó su mente, su dulce angelito parecía tener una afición a escuchar la voz de JongHo mientras cantaba por lo que pensó en tenderle una pequeña trampa al bebé, tomó su teléfono móvil de la encimera en la cocina y sin despegar la vista del niño busco entre su galería una nota de voz de JongHo interpretando una melodía para hacer dormir a su pequeño y cuando solo llevaba unos segundos de reproducción.

—¡Mami, Mami, Mami!

WooYoung corrió hasta YunHo estirando sus bracitos para tomar el teléfono entre sus pequeñas y regordetas manos, una vez que lo hubo cargado lo llevó nuevamente al baño y sólo se dejó bañar si la grabación de WooYoung estaba reproduciéndose.

Después del baño surgió una nueva disputa entre ambos Jeong, WooYoung se negaba a usar zapatos.

YunHo tomó el pequeño piecesito vestido con un calcetín entre sus manos para intentar ponerle el diminuto zapato y por supuesto el berrinche lleno de lloriqueos no se hizo esperar, una patada de bebé fue directo a su mejilla y como si WooYoung supiera lo que acababa de hacer detuvo por completo sus falso llanto y se quedó quieto sobre la cama.

—Jeong WooYoung.

Balbuceos y una risita fueron la única respuesta, el pequeño Jeong gateo sobre la cama y se escondió entre las almohadas.

—Ven aquí angelito, tenemos que conversar de hombre a bebé.

—¡Papá!

YunHo se estiro sobre la cama, capturo los diminutos piecitos y arrastró con cuidado a su hijo hasta la orilla de la cama para hacerle cosquillas, las risitas del bebé se prolongaron hasta que sus mejillitas se tornaron de color rosa, por suerte para el pelinegro mayor entre juego y juego, había logrado ponerle el
par de zapatitos.

—Muy bien, hora de ir a comprar comida de bodoques.

(Corregida).

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro