Herida
Hace un año...
—¿Estás... bien?— Reaper miraba al contrario con preocupación sin que éste entendiera el motivo por lo tanto la Muerte, con un gesto de su mano, indico el lugar al cual prestaba atención —Tienes sangre— menciono esta vez.
—Oh, ¿esto? no te preocupes— dijo mientras se limpiaba con una de sus vendas —Suele pasar cuando practico con fuego hehe.
Blard le resto importancia al asunto como siempre pero el de capucha aun no estaba convencido ni satisfecho con esa respuesta, mantenía su mirada seria sobre el de cicatriz haciéndolo sentir incómodo.
—Basta Reaper, no es nada grave como para que te tengas que preocupar— dijo nuevamente evitando molestarse, se sentía juzgado.
Reaper sintió la tensión que comenzaba a formarse en el ambiente por lo que desistió de su actitud, relajando su semblante y soltando un suspiro.
—¿Me explicarías cómo paso?— terminó preguntando amablemente, ocultando su resignación.
—Hay veces en que entretengo a los niños del pueblo haciendo un pequeño espectáculo con mis antorchas— dijo de manera simple sin dejar de caminar, ya estaba anocheciendo y debía ir a controlar las amalgamas.
Reaper lo siguió, el ambiente aun se sentía tenso entre ambos por lo que, sin saber bien como arreglarlo, terminó dando una excusa y abrió un portal para retirarse dejando a Blard con la sensación de no haberlo tratado bien.
A la mañana siguiente y antes de que comenzará su rutina diaria, Blard se encontró con la grata sorpresa de ver a su encapuchado amigo fuera de su carpa, con una pequeña cajita entre sus manos.
—Reaper, pensé que no te vería hasta la noche— dijo acercándose sin prisa.
—Y no me verás— aquellas palabras descolocaron un poco al contrario, haciendo que Reaper riera ante su semblante confuso —Se me ha acumulado el trabajo por lo que no vendré en un tiempo— finalmente dijo.
—Ya veo...
—Así que como no estaré para cuidarte, al menos traje medicina— le extendió la pequeña caja que traía, siempre con cuidado de no rozar sus manos —No quiero verte lastimado mientras no este.
—Pffft ¡Oh no! Ahora no podré llegar sano y salvo a casa si no estas a mi lado— dijo dramáticamente, simplemente para molestar un poco al contrario.
—Pffft no seas payaso, me preocupo por ti— dijo riendo junto a su amigo —Ademas no tengo muchos amigos ya que normalmente, los mato de la risa~
Ambos rieron al unísono, sintiendo que ese pesado sentimiento dejado hace un par de horas atrás desaparecía con esta nueva convivencia.
Tras un par de palabras más y uno que otro chiste se despidieron, cada uno debía volver a las labores propias de su universo pero esta vez, con la incertidumbre del tiempo que pasaría antes de volverse a ver.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro