Desde aquella noche en que conversaron y aclararon sus temores Blard se había vuelto más demostrativo con el contacto, pero siempre con el cuidado de no incomodar demasiado a Reaper pues, aunque este no lo dijera, sabía que siempre tenía en mente de que el brazalete dejara de funcionar o que se soltara. No en vano lo primero que observaba Reaper cuando llegaba a visitarlo era que aquel objeto en su muñeca estuviese ahí.

Los primeros días Blard aprovechaba cualquier instancia para poder tomar las manos de Reaper o de darle pequeños mimos, hasta que se dio cuenta que el más pequeño comenzaba a hacerlos por su cuenta al sentirse más seguro.

Cuando a Reaper se le veía más relajado con el tema, a veces Blard comenzaba a lanzar algunas indirectas intentando avergonzar al de túnica pero para su sorpresa, éste respondía de lo más tranquilo. Incluso habían veces en que Reaper contestaba con insinuaciones más coquetas que las del más alto, logrando que éste terminara con las mejillas teñidas de un color melocotón.

Con el pasar de los días los mimos se habían vuelto comunes entre ambos, especialmente las veces en que se tomaban un pequeño descanso de sus responsabilidades, ya sea en el universo de Blard o en otro al que fuesen a visitar. No solían ir a Reapertale por el simple hecho de que estando en ese lugar a Reaper se le hacía difícil desligarse de sus obligaciones como Dios, siendo ése el principal motivo por el cual el más pequeño huía a otros universos para relajarse.

Pero a pesar de toda la confianza que se tenían y de los buenos momentos que pasaban, Blard no dejaba de preguntarse que relación tenían. Podía notar claramente el interés que demostraba el contrario, pero no quería dar el primer paso por creer que sería una presión extra para algo que quizás, Reaper aún no estaba preparado. Pero ya a estas alturas, a Blard se le hacía difícil guardarse sus sentimientos.

Desde el día en que se dio cuenta de lo que sentía por Reaper, Blard quería expresárselo con todas sus letras, pero como en aquel entonces no había nada que pudiese anular el poder del más bajo, pensaba que sería una broma cruel si se los dijera pero cuando obtuvo el brazalete de Vida, creía que al fin podría ser sincero con sus sentimientos. Lamentablemente, al darse cuenta de todo el estrés que le generaba el tema a Reaper, decidió guardarse su amor un poco más, sólo por su bien.

Pero para Blard ya era el momento indicado; había calmado las inseguridades en el más bajo, había comprobado la correspondencia de sus sentimientos con diferentes acciones y ya no quería callar más este sentimiento que llenaba su pecho. Ahora, lo único que debía hacer era planear el como confesarse.

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Lamento la demora!!!! QwQ 👉👈
No prometo capítulos seguidos, pero sí al menos uno a la semana.

Y gracias por tenerme paciencia QwQ❤️