Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

*Catorce*

—¿Ves que valió la pena el sacrificio? —papá dice y aunque lo ha dicho a modo de pregunta, sé que solo me está molestando por mi reticencia a ir donde su amigo.

—Bueno, la pizza estuvo deliciosa. Punto para ti papá.

—Brooke hace las mejores, nunca deberías olvidarlo.

—Bien, bien —le doy el gusto.

Llegamos a casa y voy a bajarme, peor su teléfono suena y eso me hace sonreír un poco recordando la vieja melodía del teléfono de Luke. Eso me hace recordar que ha dicho Veneno, pero no creo que me acostumbre a llamarle así. la conversación de papá se resume en un ya "salgo para allá" y le miro interrogante.

—Algo de última hora, ¿te molesta quedarte sola unas horas? Va a demorar —explica y por su cara creo que esconde algo.

No, no es que me moleste quedarme sola.

—Ve, estaré bien.

—Entonces entra rápido para que pueda ir y volver.

—Papá, voy a estar bien.

—No me demoro, cielo —dice besando mi frente y luego empujándome para que salga de la camioneta.

Me bajo y le miro como da vuelta al volante mientras se arregla el pelo. Debe ser una chica, pienso con diversión y me apresuro a entrar, luego que se marcha.

—¿Allie? —escucho que me llaman de lado a oscuras de la valla. Espero a que se muestre, aunque sé que es Joshua.

No me detengo y empujo la verja de entrada y la cierro dejándole impidiéndole que entre.

—¿Podemos hablar? —prosigue.

—¿De qué?, ¿tenemos que hablar de algo?

—Sé que crees que terminé con Sophie por ti, pero no es así.

—¿Y por qué pensaría eso?

—No lo sé, tal vez por la forma en que me miraste antes de marcharte del restaurante —aduce y lo siento como una acusación.

Quizás si tiene razón, pero preferiría que no fuera así. Estaría bien que dijera que solo me imagino cosas.

—Solo me sentí mal pensando que quizás Sophie si tuvo una razón para hacerme su pesada broma, además que creí en ti. Habría estado bien que me lo dijeras. Habría evitado ir allí ya que ella seguro cree que soy la culpable de que la mandes al carajo.

—¡Pero no es así! —protesta.

—¿No?

—¡No! —recalca—, no tiene nada que ver contigo, ¿bien?

—Perfecto, no sabes cuánto me alivia eso.

—Creo que el sarcasmo sobra —dice algo quejoso.

—No era sarcasmo. Lo digo en serio, ahora debo entrar —digo muy seria y me doy la vuelta para entrar en casa.

—Allie —me llama y yo suspiro hondo deteniéndome, le miro interrogante, o espero que lo note. No hay muchas luces aquí afuera—, no dejes de ser mi amiga, por favor —añade y eso hace que me acongoje un poco.

Tal vez he sido muy drástica con Josh, cuando se supone que somos buenos amigos.

—¡Vale! —exclamo despidiéndome con mi mano en alto volviendo al camino a casa.

Cuando llego al porche escucho que enciende su camioneta, que seguro la había de tener oculta para que no lo viera. Una vez se aleja y se pierde el ruido del motor entro en casa y cierro. Papá tiene llaves, así que solo voy a la cocina por una botella de agua y luego a mi cuarto.

Dejo mis cosas a un lado, que quito las botas y me tiro en la cama solo con mi teléfono. Busco en mis fotos la que le tomara a Luke y aunque está de espaldas el condenando Veneno, se ve bien. Abro el chat para enviarla a las chicas y escribo.

Es lo único que verán de él, así que no pidan más.

Le doy enviar y dejo el teléfono sobre la mesita de noche, me levanto de la cama y camino hasta el baño para lavarme la cara y ponerme pijama. El teléfono empieza a repiquetear sobre la mesita y eso me hace sonreír imaginando que están diciendo las chicas. Me lavo mis dientes y la cara y salgo de nuevo para tomarlo y ver que maravillas escriben. Empiezo a mirar, ambas dicen tantas cosas que me hacen reír al leerles.

Me tapo la boca leyendo algo sobre ya te encontraste un nuevo crush.

¡Idiotas! Les regaño a ambas internamente, en eso estoy cuando unos golpecitos en la ventana llaman mi atención. Me apresuro hacia allí corriendo la cortina. Me quedo tiesa observando quien está sentado allí. la abro de inmediato.

—¿¡Qué locura es esta!? —exclamo muy sorprendida.

—¿Puedes salir un rato? —pregunta y yo lo miro como si hubiera hecho una mala pregunta.

No espera a que responda, solo le veo cómo se inclina para agarrarse y bajar de allí.

Me asomo para ver que no se ha caído. Me hace señas desde abajo.

—No voy a bajar por aquí.

—¿Entonces si vas a venir?

¡Diantres! No cambia.

Tomo aire y lo boto antes de decidirme hacer lo que él hizo. Busco mis botas, me las pongo de nuevo y guardo mi teléfono en el bolsillo de la chaqueta. Después de ello me armo de valor para salir por la ventana con su guía. No dejo de pensar que es una locura, cuando podría haber salido por la puerta. Finalmente logro bajar y no caerme. El me sostiene para que no lo haga y pase un feo bochorno, pero eso hace que quedemos muy juntos.

Me aparto de inmediato. Él ni se inmuta de mi reacción y empieza a caminar, no me queda más que hacer que no pasó nada y seguirle.

—¿A dónde vas?

—¿No vienes?

—Creo que salir por la ventana confirma eso.

—¿Nunca lo habías hecho?

—¿Por qué iba a hacerlo?, la gente normal sale por la puerta.

—Supongo que la gente normal.

—¿Con eso quieres decir que no somos normales?

—Si decides pensarlo.

—Eres imposible, ¿sabes?

—Lo sé —aduce con voz serena—, mi madre lo dice todo el tiempo —añade y sigue caminando.

A medida que nos acercamos a la valla que colinda con el bosque se hace cada vez más oscuro.

—¿Me dirás a dónde vamos?

Me apuro para alcanzarle.

—Al bosque.

—No crees que está un poco oscuro allí.

—No. Es perfecto —afirma encendiendo la lampara de su teléfono, seguido se trepa en la cerca y salta al otro lado.

Aguarda allí por mí. Eso me hace resoplar fuerte pero no me quedo allí, y hago lo mismo.

—Bien —digo cuando ya estoy frente a él.

Pero se da la vuelta y con su teléfono encendido empieza a caminar hacia el bosque, recordándome que en ese camino fue donde le encontré, y también me hizo enojar. Sin embargo, no me enojé lo suficiente.

—¿Qué hacías aquí en la mañana? —pregunto de forma casual.

—Iba a ver algo, pero creo que es mejor en las noches.

—¿Y qué ibas a ver?

—Sígueme, a esta hora el espectáculo es increíble —anuncia y se encamina por el sendero.

Tomo aire y le sigo, no es muy agradable estar aquí de noche.

—Debo volver pronto.

—No durará mucho, tranquila —contesta y se adelante.

Eso hace que le siga rápido. Me fijo en que estamos más allá del sitio donde le dejé solo en la mañana, justo donde empiezas a escuchar el sonido de la quebrada. Entonces como si fuera un acto de magia u una imagen sacada de un libro de cuentos de hadas hay muchos pequeños puntos de luces y es un espectáculo hermoso digno de contemplar.

Me coloco a su lado con mi vista maravillada. Son luciérnagas, un hermoso campo lleno de luciérnagas, miro de reojo a... Veneno, y él parece igual de extasiado que yo.

***

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro