Capítulo Sexto
Imposible.
Esa era la palabra para describir su situación. Le era imposible cruzar la carretera.
Apenas llegó al Monte de Dios, miles de personas rodearon su auto como zombies hambrientos. Los destellos brillantes que emitían las cámaras le habían dejado cegado por unos segundos, y los gritos provocaron una corta sordera.
Por suerte llegó la policía.
Por desgracia lo corrieron de la escena...
Superado ante la situación, Jeon Taehyung empezó a conducir de vuelta a casa, golpeando el volante ante el sentimiento de impotencia y terror.
Todos decían que habían muerto...
Todos aseguraban que no había esperanza.
Todo su hermoso mundo se vino abajo cuando captó el real significado de eso.
No más SeokJin, ni NamJoon, ni YoonGi, ni Hoseok, ni Jimin.
No más BTS...
Adiós familia.
Las naúseas se hicieron presentes, así que tuvo que detener el auto ante las grandes ganas de devolver toda su comida.
Su cuerpo falló al poner un pie fuera del auto, y cayó secamente contra el pavimento. Sin la fuerza suficiente para levantarse, sólo se quedó ahí, temblando, llorando y lamentándose.
La ira comenzó a devorar sus sentidos, la desesperación a invadir su mente, el miedo a envolver su corazón, y la muerte a empañar su vista.
La ropa comenzó a apretarle, su cuerpo empezaba a quemar. Maldiciones, gritos y jadeos de dolor salieron de sus labios.
Mil palabras, mil disculpas, un millón de groserías llenaron el ambiente...
Pero, por primera vez en muchos años, quizá desde su nacimiento, no rogó.
No le suplicó a la Luna.
Ni siquiera miró la suave presencia de su diosa en el cielo.
No.
Simplemente la insultó.
Por primera vez en su vida maldijo a aquella que había iluminado sus noches, esa que le había dado consuelo.
Aquella Luna hermosa que había permitido a sus amigos morir...
Y sucedió.
Mutó...
¿Cómo? ¿Por qué? Ni el Cisne Negro lo sabría.
Ni siquiera él podía explicarlo.
Pero le dio igual.
Le dio igual y aulló.
Un aullido lleno de dolor, de desesperanza.
Un aullido del animal que tenía dentro, y que por fin se había manifestado.
Jeon Taehyung miró su ropa hecha jirones, sus zapatos rotos. Lleno de admiración y pesar dirigió su mirada a sus extremidades llenas de un hermoso pelaje color noche.
Y lloró.
Lloró por llegar hasta ese límite.
Su lobo, aquel que le había prestado su forma para mutar, también cedió al llanto.
El alfa se sintió tan débil...
No obstante, sabía que debía ser fuerte. Debía encontrar los cuerpos de sus amigos y llevarlos a casa, para poder darles un entierro digno.
Para poder decir adiós...
Aunque eso doliera.
Aunque eso lo hiciera mil pedazos.
Aunque le fuera imposible recuperarse de esa pérdida.
Así, Jeon comenzó a olfatear con pesar el aire, temblando a cada centímetro que sus patas de lobo le permitían avanzar.
Aún hay tiempo, murmuró el lobo en su interior. No dejes que lo toquen o se acabará...
Y no lo mires a los ojos cuando llegue el momento...
Desgraciadamente, antes de poder procesar el consejo del animal en su interior, algo lo golpeó muy fuerte.
Las luces de un auto, y la viscosa sensación de la sangre a su alrededor fue lo último que vio y sintió antes de caer ante la oscuridad.
¿Por qué la diosa Luna no es tan misericordiosa como parece?
...
-entonces... ¿Vives aquí? ¿O sólo estás de paso? Si es así, ¡gracias, diosa! ¡De verdad creímos que la muerte estaba próxima! ¿Sabes qué tan oportuno ha sido tu paseo por el bosque? ¡Nos has salvado!
El chico de plateados cabellos guardó silencio, como en todo el rato que les empezó a guiar a una salida de ese bosque encantado.
Y también encantados tenía a cuatro hombres a su alrededor.
El quinto no.
Extrañamente, el quinto le miraba con desdén.
Y, en serio, el sentimiento fue mutuo inmediatamente.
Por alguna razón, el de antifaz de lobo sentía gran rencor con ese chico de menor estatura, y éste igualmente sentía rechazo ante su salvador.
¿Razón, motivo? No, no los había.
Odio a primera vista.
O tal vez...
-¿tienes comida? ¡Muero de hambre! ¿Cuánto llevamos en este bosque? ¡Namu, dime que la linterna no cayó con el carro, por favor! Odio la oscuridad...
-¡ya, Hobi, estás agobiando a nuestro rescatista!
-oh... Lo lamento... ¿Le molesta que hable mucho?
El joven omega involuntariamente formó un tierno puchero y comenzó a desprender feromonas de tristeza, las cuales se esfumaron y fueron reemplazadas por unas de alegría cuando el enmascarado negó con la cabeza.
-a todo esto, ¿cómo te llamas?
-¿y por qué traes una máscara como un maldito maniático asesino?
-¡Min! ¡No seas grosero! ¡Eres un alfa muy desagradecido!
Ignorando los regaños del líder, YoonGi desvió su desconfiada mirada hacia su guía, y, gracias a ello, fue el único que notó cómo su cuerpo parecía tensarse ante la mención de "alfa".
¿Acaso era un omega? O... ¿Un Delta?
Estaban en serios problemas si era el último caso...
-disculpe, señor... - comenzó tímidamente Jimin, apretando su mano contra el pecho cuando un pinchazo le recorrió -. ¿Podemos descansar? Creo que llevamos horas caminando... Y yo realmente tengo hambre...
El joven se detuvo, y volteó a mirar al grupo.
Una suave sonrisa de labios cerrados abarcó sus labios mientras asentía con la cabeza.
El joven de plateados cabellos los llevó a un árbol, el cual segundos después escaló y bajó todo tipo de frutas. Los cinco miembros del famoso grupo no tardaron en devorarse todo, agradeciendo al extraño su generosidad.
-las fresas no salen de árboles tan grandes... ¿Vives en el bosque?
El de media máscara asintió.
-¿vas a matarnos?
-¡carajo, Min! ¡Deja de ser tan irrespetuoso! - gritó ya molesto Park, lanzándole al aludido una roquita.
-¡muchas gracias por la comida! - dijo Hoseok, corriendo en la dirección del chico con los brazos abiertos.
Nadie esperó que éste pegara un brinco y gruñese como fiera.
—¡No Me Toques!
...
Tres curiosos y preocupados rostros fue lo primero que Jeon vio.
Tal vez se había muerto, porque Tae juró que eran los ángeles más bellos que jamás había visto.
No, un momento...
Ya los había visto...
-¿niños? ¿Q-qué hacen aquí? ¿Dónde está Jungkook? - preguntó con pereza, sentándose en el lugar que se encontraba.
Y se pegó contra la cabeza cuando trató de ponerse de pie.
Fue ahí cuando se dio cuenta que sólo traía una manta encima...
Otras mil maldiciones abandonaron sus labios, pero éstas se vieron interrumpidas por un suave golpe en su nuca.
-nada de groserías, Jeon Taehyung. Hay que darle un buen ejemplo a los niños - regañó suavemente su esposo.
El rubio de inmediato fue tacleado por un fuerte abrazo de parte del pelirrojo.
-te dije que te quedaras en casa...
-lo siento... Cuando vi las noticias... Yo... Sólo quiero encontrar a los hyungs... Sé que deben estar vivos... Mis hyungs tienen que estarlo... N-no pueden dejarme...
Las lágrimas resbalaron por esas hermosas y rojizas mejillas, alarmando a los dos bellos mellizos que se encontraban cerca, y haciéndole fruncir el ceño a la beta recargada cerca de él.
Mientras tanto, un alfa pelirrojo luchaba por no llorar, por no caer en la amargura, ni volverse loco. ¿Cómo decirle a su lindo omega que sus amigos se habían ido para siempre?
-¿te duele? - preguntó una femenina voz.
Kim dejó de observar a su omega, y centró toda su atención en una chica cruzada que brazos que no le devolvía la mirada.
-Jungkook te atropelló. ¿Te duele?
Jeon soltó un jadeo de impresión, y miró con reproche al menor, quien secó sus lágrimas y le sonrió con vergüenza.
-en mi defensa, tú te atravesaste... Hablando de eso... ¿Cómo rayos...?
Taehyung negó con la cabeza, igual de confundido que su pareja.
-necesitamos encontrar a los chicos - susurró Kim, tomando la mano de su alfa -. Deben tener hambre...
El pelirrojo suspiró.
No podía decirle...
No era capaz de aclararle a su bebé que la muerte no era discutible.
Así que sólo calló. Guardó silencio para no herir más a su chico.
-yo iré. Vuelve a casa.
-no. Te acompaño. Enséñame a mutar y te acompañaré...
El mayor negó lentamente con la cabeza, y abrazó al rubio con fuerza.
Si encontraba el cuerpo sin vida de sus hyngs, no quería que él viera esa escena.
-los niños se quedarán solos. No tardo. Trataré de mutar. Será rápido, ¿ok?
A Jungkook no le quedó más remedio que asentir.
Tal vez una hora transcurrió intentando volverse un animal, tal vez fueron sólo cinco minutos... Pero el dolor que Taehyung sufría en cada nuevo intento por mutar le duraría toda la eternidad.
Lágrimas empañaban sus ojos, temblores invadían su cuerpo, el sudor bañaba todo su ser, las heridas que torpemente Jungkook había sanado después de arrollarlo se volvieron a abrir.
Ayúdame, suplicó a la Luna.
Y lo logró.
Con un gruñido cargado de un horrible dolor, su cuerpo accedió al cambio y se llenó de ese bello pelaje negro que antes había admirado.
Dos niños pequeños le miraron maravillados, y uno de ellos acarició con inseguridad el pelaje de aquel magnífico animal.
MingSu, en ese momento y más que nunca, deseó que aquella pareja de idols jamás decidieran regresarlos al orfanato.
Deseó que su mentira durase un poquito más...
-cuídate, Tae... - susurró Kim Jungkook al ver cómo su alfa, con notorios temblores en sus patas, echó a correr para buscar los cuerpos de sus amigos.
Cuídalo..
...
-¿ya estamos cerca? ¡Estoy cansado! ¿Cuándo volveremos a la carretera? ¡Juro que nunca jamás me volveré a quejar de los baches! Señor, ¿podría por favor siquiera explicarnos por qué se puso así hace una hora? ¡Llevo una eternidad preguntando!
-¡Hobi! El chico ha de tener sus razones, déjalo en paz.
Antes de que pudiera Hoseok gruñir ante el cansancio, o preguntar por enésima vez la razón del extraño actuar del peliplata, el ruido de ramas quebrándose alertó a todos, especialmente al de máscara de lobo.
Un imponente animal apareció, y se abalanzó contra cinco de las seis personas perplejas.
El chico que mantenía su rostro cubierto agarró una rama grande, pero cuando estaba por golpear al lobo de pelaje oscuro, se sorprendió al ver que no estaba atacando a esos raros chicos atrapados anteriormente en el árbol, sino que los lamía con alegría, y movía la cola con emoción.
-¡diosa! ¡Tae, ¿Eres tú?! ¡Luna mía, esto es un milagro! ¿Cómo mutaste? Cielos... ¡Enséñame!
-¡salgamos de este bosque! Hoseok me va a volver loco si sigue hablando tanto - gruñó un pelimenta, ganándose un suave golpe de parte del pelinaranja.
-¡Min YoonGi, eres un grosero! No te vuelvo a invitar de mis fresas jamás.
El grupo rió suavemente, perdiéndose de un muchacho de tez canela y cabello naturalmente gris rompiendo la rama que tenía en sus manos con gran incredulidad y furia.
-¿y qué? Me gustan más las mandarinas - rió con ternura Min.
-¡chicos, basta! Salgamos de aquí, o los terminaré matando a todos.
-¡gracias por rescatarnos! ¿Quieres venir con nosotros? ¡Te conseguiremos un lugar para quedarte! - ofreció Hobi al chico ajeno al ambiente familiar, quien miraba curioso al enorme lobo que era acariciado por los cinco cantantes.
El joven negó, y sonrió poquito antes de hacer un gesto con la mano en forma de despedida.
-¡diosa, en serio gracias por salvarnos!
Jung quiso abrazar a su salvador, pero Tae, en un rápido e inconsciente movimiento, se interpuso antes de que lograra su cometido, empujándolo de manera accidental.
Todos se sorprendieron cuando Jeon Taehyung se colocó en de una manera que indicaba que atacaría a quien tratase de acercarse al confundido peligris, y les gruñó ante un segundo intento de Hobi por mostrarle cariño al antes mencionado.
No lo toquen, escucharon todos en sus cabezas, sorprendiéndolos.
Sin preguntar más, los cinco chicos empezaron a subir al lomo del bello animal.
Sólo faltaba Min por subir; sin embargo, un golpe en su hombro lo hizo voltear.
El joven de media máscara de lobo le apuntaba con una mirada furiosa con lo que restaba de una rama.
—si le vuelves a hacer daño, juro por el Monte de Dios que te mataré.
Y desapareció. Lo hizo en un abrir y cerrar de ojos.
Confundido, YoonGi por fin subió al lomo de su amigo, preguntándose por el significado de esas palabras.
...
Voilà! Ahí está el capítulo!!
Realmente me costó mucho escribirlo, así que espero con toda el alma que les guste!
Yah, aquí realmente les di la respuesta a la pregunta del anterior capítulo! Amo los poquitos comentarios que tratan de entender y seguirme el juego, gracias ♡
En fin, creo que ya haré oficial esta segunda temporada!! Estoy empezando a sentirme realmente bien, y espero poder traer semanalmente un nuevo capítulo!!
En fin, cuídense mucho, nos leemos pronto!!! ♡♡♡
♡☆Val☆♡
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