Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

capítulo 17

GWENDOLYN

Escuché golpes desesperados en la puerta. Joder. No podía esperar un poco más. Estoy segura de que es él. Ese niñito rico.

Me acerqué a la puerta, sintiendo una mezcla de curiosidad y desdén. ¿Por qué debería abrirle? La idea de ignorarlo me resultaba tentadora. Después de todo, no era como si tuviera alguna obligación con él. Pero esos golpes resonaban en mi mente, cada vez más insistentes, y algo en su tono me hizo dudar.

Pensar en abrir la puerta y ver su rostro preocupado me provocaba una pequeña sonrisa. Tal vez sería divertido ver cómo se las arreglaba fuera de su burbuja de privilegio.

Siendo sincera, moría por ver eso.

Suspiré y giré la perilla. La puerta se abrió lentamente, revelando a Zion, con su cabello desordenado y una expresión de pánico en sus ojos color miel.

—Gwendolyn —pronunció mi nombre, casi jadeando—. Necesito tu ayuda.

Me resultaba divertido verlo así. Desesperado y claramente huyendo de alguien. Su intromisión con The Black Cat lo ha traído hasta aquí.

—¿Qué te trae por aquí? —pregunté, intentando mantener la frialdad en mi voz—. ¿Te has perdido en tu camino hacia la fiesta?

Zion frunció el ceño, ignorando mi sarcasmo.

—No es eso. Hay... The Black Cat me tenía cautivo. No puedo volver a casa ahora.

Eso lo sé perfectamente, Caballero.

—¿Y por qué debería ayudarte? —Crucé los brazos.

Él respiró hondo, como si estuviera buscando las palabras correctas para convencerme de que lo dejara quedarse aquí.

—Necesito un lugar donde esconderme, aunque sea solo por un tiempo. No sé a quién más acudir.

Miré hacia atrás, considerando las consecuencias de abrir la puerta por completo. No me gustaría que estuviera merodeando por mi casa, cotilleando aquí y allá. Pero al mismo tiempo, la idea de ayudarlo me parecía... divertida.

—Está bien —dije finalmente—. Puedes quedarte aquí un rato. Pero no esperes que te sirva el té.

Zion sonrió levemente, aliviado, y entró rápidamente en mi casa, como si temiera que alguien pudiera verlo. Cerré la puerta detrás de él y nos quedamos en silencio por un momento.

Él se veía agradecido por mi decisión, pero consciente de lo que significaba estar bajo mi techo. Mientras nos sentábamos en silencio, una parte de mí se preguntaba si había hecho lo correcto al abrir esa puerta. Otra parte, más traviesa y curiosa, sabía que esto podría ser solo el comienzo de algo interesante.

Podría jugar con él, al menos un poco. De todos modos no le haría daño a nadie. Y con Archibald en la cárcel no tenía a nadie con quien distraerme. El Caballero no está nada mal en realidad. Es un chico atractivo y sus músculos varoniles se llevan mis miradas a cada rato, en especial porque lleva únicamente una camiseta blanca y sudada que denota esto.

Al parecer antes iba al gimnasio.

No puedo evitar fijarme en sus brazos ejercitados sin ser nada exagerado. Él tiene una chispa que me enciende, pero no puedo dejarme llevar por completo. Él tiene diecinueve años y yo veintiséis. Él es el enemigo.

Me entretuve un rato mirando su cabello castaño claro. No es largo, pero tampoco corto. Él pareció darse cuenta de mi mirada insistente sobre él. Sus ojos buscaron los míos y me pregunté cómo sería besarlo.

Mis pensamientos fueron interrumpidos por la alarma de mi celular. Debo buscar a mi hija al colegio y debía también pensar en cómo decirle que tenemos un invitado.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro