Parte 8
Mi hermano James es un aficionado al patinaje, detrás de ese rostro serio y rudo que tiene, en el fondo sueña con ser un patinador profesional siendo algo del cual nuestro amado padre no está de acuerdo que lo practique un hombre a no ser que sea una mujer, pero ninguna de sus hijas está interesada en eso.
-Hermano -llame a su puerta. -quiero hablar contigo, es importante.
-Pasa -me respondió cortante.
Al entrar lo encontré haciendo estiramiento de piernas.
-Necesito que me ayudes en matemática y también a que golpees a alguien.
-¿Porque golpearía a alguien? -me pregunto tranquilo cambiando de posición abriendo de piernas.
-¿Te acuerdas del tipo que se me confesó?
-¿Y que después fue atropellado? -asentí. -si te molesta dile a nuestros padres.
-No quiero escándalo, solo quiero asustarlo y nada más.
-¿Para después que me denuncie por maltrato? no gracias, yo quiero ser libre.
-Cobarde, te odio -me levanté de la cama golpeando la puerta de un azote.
-YO TAMBIEN TE QUIERO -me gritó riéndose de mi enojo-
No sabía a quién recurrir y no quería meter en problemas a Zoe, apenas había entrado y no sería bonito que se metiera en problemas solo al iniciar.
Me fui a mi cuarto encontrándome a Zoe esperando a que jugara con ella ajedrez, por lo cual acepte. También porque podría contarle mis problemas a Zoe para entrar en confianza.
-No se a quien decirle, pero solo quiero asustarlo no matarlo.
"Tienes a Lisa", lo escribió en un cuaderno anillado.
-Lisa no va a ser nada, es más ella es una lamebotas de nuestros padres, no va a hacer nada de ello.
No tengo un problema con Lisa, pero ella no calla el hocico para nada y le di bastantes oportunidades dándole mi confianza y ella lo botó como si nada al contarle todo a nuestros padres.
Odia esa parte de ella y ya no le volví a decirle nada por estúpida, pero después ella me reclama porque no le dije nada, que somos hermanas y que yo soy la que no calla el hocico, que somos mujeres y bla, bla, bla.
-Un consejo que quiero darte es que no le digas tus secretos a Lisa, ella se lo dirá a medio mundo y no te va a gustar que tus Tíos estén a cada momento pendientes de ti.
Zoe asintió moviendo sus dedos para decirme algo, no le entendí porque no sabía lenguaje de señas.
-Lo siento, no te entiendo.
Zoe me miró suspirando agarrando el cuaderno anillado para escribir: "Dije que deberías hablar con Lisa, la veo muy sola y aislada de la familia y aprende lenguaje de señas, prometí hacer un voto de silencio hasta que tus Tíos lleguen".
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro